[vc_row][vc_column][vc_column_text]El proceso de juvenilización de la sociedad hace que los jóvenes estén en el candelero -al menos en el candelero de la información-, o al revés. ¿Cómo les ven los estudiosos, cómo se ven ellos mismos, cómo los (nos) vemos nosotros…?
- Lo que dicen de ellos
– «Los jóvenes parecen necesitar dosis nunca vistas de jolgorio. El aspecto más llamativo quizá sea el de las noches enteras de continuas libaciones. Se juntan y refuerzan entre sí la noche, el alcohol, el tabaco, la velocidad y en último término las drogas. Los jóvenes se enfrentan así al mundo de los adultos». (Amando de Miguel, sociólogo).
– «La sociedad occidental vive de una enorme contradicción cultural: pide a los jóvenes austeridad, sacrificio y trabajo (o preparación para él estudiando); pero sólo les invita a consumir continuamente y pasárselo bien, porque no hay trabajo ni salidas (Daniel Bell, sociólogo norteamericano).
– «Vuestros padres opinan que los jóvenes sois como ellos son ahora: han renunciado a sus sueños y han sido vencidos» (Antonio Gala).
– «Aún en medio de su innegable pluralidad, los grupos juveniles ofrecen el retrato de nuestra propia sociedad de adultos. Lo cual es socialmente lógico: nadie salta por encima de su sombra» (Javier Martínez Cortés, profesor de sociología).
– «Los voluntarios de ONGs aumentan cada mes y son, en su inmensa mayoría, jóvenes que quieren ser solidarios (Coordinadora Nacional de ONGs).
- Lo que dicen ellos
– «Nos dictan normas, que sin querer hay que cumplir; nos dictan todo, porque hay que saber elegir. Nos llevan raudos hacia una mañana que se nos borra, que se me empaña… Somos la edad del porvenir’ (Javier Ávarez, joven cantautor hasta hace sólo dos años actuaba en los pasillos del metro y en el parque del Retiro).
– «Mamá, ¿qué quieres, una hija o una medalla…? Quiero ser yo misma y ser libre…» (María Pardo, gimnasta de 17 años que renunció a formar parte del equipo olímpico español de Atlanta).
– «No somos guarros ni drogadictos ni nada. Sólo queremos la oportunidad de vivir como cualquier persona, sin renunciar a nuestras ideas. ¿A quién molesta tanto eso?» (Colectivo de jóvenes «okupas» de Madrid, desalojados por la policía el mes de octubre).
– » No tenemos miedo a nada porque no tenemos nada que perder. Somos los hijos del dios de la impaciencia y de la diosa ambición, hermanos de la prisa y en consecuencia a veces primos de la indecisión. ¡Esta es mi generación! (Los Rebeldes, grupo musical).
– » Un escritor dijo que un hombre sólo es un millón de hombres partido un millón. Yo me niego a ser un millón de personas partido un millón, y no aguanto que no me den la oportunidad de ser yo misma». (Una chica de 17 años, estudiante de COU).
PARA HACER
- Estos fragmentos los hemos tomado de JesúsRojano («BS»,febrero 1997). Leer las opiniones de los expertos y compararlas con las de los jóvenes. ¿Hay diferencias?
- ¿Qué opinamos nosotros de cada una de esas opiniones?
- Falta un tercer punto: «Lo que decimos nosotros». Concretar una serie de temas (Jóvenes, futuro, sociedad, religión…) y dar una breve opinión. Comparar y confrontar los resultados hasta llegar a una opinión de grupo y difundirla en algún medio: revista colegial, cartas al director de la prensa local, etc.
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