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- Objetivo
– Destacar las actitudes que construyen la paz en la actuación local.
– Promover actitudes de paz tanto personales como colectivas para actuar en la vida ordinaria.
- Sentido y ocasión
– Desarrollamos y ampliamos esta propuesta a partir de una idea aparecida en «Catequética» (enero-marzo, 1988). Cada grupo o equipo educativo sabrá acomodarla a su realidad.
– El lema de Manos Unidas «Cambia tu vida para cambiar el mundo» nos invita a actuar cada uno localmente teniendo en cuenta un pensamiento global. Esta propuesta ayudará a ello.
– El mes de enero puede ser una buena ocasión para desarrollarla con ocasión del «Día Escolar de la Noviolencia y de la Paz». Pero también se puede ampliar al mes siguiente dentro de la «Campaña contra el hambre».
– Ofrecer modelos cercanos, constructores de paz, ayudará a desarrollar esas mismas actitudes en ellos y en los demás.
- Desarrollo
- Idea
– A partir de la idea de los premios Nobel, se propone una especie de «Premios Nobel de la Paz en la clase» (o en el colegio, o en el grupo, o en la parroquia, o en el centro juvenil…).
– Se concede un «Diploma de paz» a los compañeros o profesores que se juzgue merecedores por contagiar actitudes de paz.
– Para ello se seguirá un proceso que implique a cuantas más personas mejor.
- Bases
– Se fijan las bases por las que se va a hacer la elección. Es importante concretarlas bien.
– Para ello, antes de nada, se concretan entre todos cuáles serían las cualidades de «los constructores de paz». Se ha de dialogar entre todos para descubrir estas actitudes.
– Al final se concretan las actitudes y el nombre de los premios. Por ejemplo:
- La paz se construye: Persona activa.
- La paz no admite situaciones injustas: Persona que defiende al débil, al marginado…
- La paz exige esfuerzo y sacrificio: Persona que da su tiempo…
- La paz crea un clima agradable: Persona que irradia sonrisa, alegría y amistad.
- La paz va de la mano de la verdad y el amor: Persona sincera y respetuosa…
- La paz…
– Se hace pública de forma original y oficial la convocatoria del premio.
– Todos pueden aportar nombres merecedores de él. Lo importante es que se hable y se dialogue sobre las actitudes que crean la paz.
– Lo importante es que se hable de ello y que, al menos durante algún tiempo, todos tengan la oportunidad de esforzarse en esas actitudes constructoras de paz.
- Elección
– Un jurado elegido para la ocasión asigna los premios. Es importante, como en los premios Nobel, destacar las cualidades por las que sea asigna el premio.
– También se puede hacer por votación popular o elección popular, sobre todo si los premios se asignan en un grupo o en una clase.
– En todos los casos hay que aportar razones y datos concretos para recalcar las actitudes positivas y constructoras de paz.
- Premio
– Se entregará un diploma elaborado para la ocasión (se puede entregar cualquier otro símbolo).
– El diploma se puede hacer con ordenador, cargando la impresora con papel de color pergamino (no con cartulina). Se vende en pliegos y hará que cortarlo a tamaño din A4. Estos diplomas se pueden encuadrar.
– Los diplomas se entregarán en un acto especial. Puede ser el 30 de enero.
– En este acto, además de la entrega de premios, puede haber un sencíllo recital de canciones, poemas, textos, cuentos o relatos… de paz.
- Variantes
– El premio puede incluir a todos los miembros de la comunidad educativa (padres, por ejemplo) y no sólo a los alumnos y profesores.
– Con el tiempo, el premio puede ampliarse al ámbito de la ciudad. Se convocará para darlo a personajes conocidos o desconocidos pero relevantes en la construcción de la paz ciudadana. La entrega de premios se realizará en un acto colectivo final, de mayor relevancia, en el que participen diversas organizaciones cívicas y en el que pueden acudir las autoridades de diverso signo.
HERMINIO OTERO
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