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Estructuración
- La persona madura unifica todas las cosas desde dentro.
- Posee un equilibrio que coordina ideas, valores, acciones y emociones, y a la vez domina las tensiones internas.
- Por eso se siente en armonía consigo misma y con el mundo circundante.
Conciencia
- La persona madura acepta el propio yo: es consciente de sus errores y reconoce sus propias debilidades y fallos. Pero no se queda en eso: intenta siempre superarlos eficazmente.
- Acepta también sus valores, puntos fuertes y posibilidades. Los reconoce e intenta cultivarlos y acrecentarlos conscientemente cada día.
Fraternidad
- La persona madura se interesa por sí misma y también por los demás. Como se quiere y acepta a sí misma, así quiere y acepta también a los demás.
- Es capaz de comprometerse con los demás: les ama y participa en sus alegrías y tristezas.
Ética
- La persona madura es objetiva en la apreciación de lo bueno y de lo malo. Por eso
respeta los derechos y deberes propios y ajenos.
- Por ello se siente internamente libre: sabe limitar sus tendencias y hace lo que «debe» y no tanto lo que «se puede».
Realismo
- La persona madura hace presente el futuro por medio de metas, aspiraciones, proyectos, ideales… personales.
- Posee una escala de valores fundamentada en la visión realista de la existencia humana.
Fe
- La persona madura tiene apertura a los valores religiosos en cuanto pretenden dar un sentido global y profundo a la existencia humana.
- Los comprende y los vive con sencillez.
- O, por lo menos, los respeta en los demás.
Tolerancia
- La persona madura tiene clara su identidad: lo que es y lo que quiere ser.
- Es consciente de su forma de pensar, de sentir y de actuar y sabe defenderlo a la vez que es respetuosa con quienes piensan o viven de forma distinta.
HERMINIO OTERO (a partir de Serafín Ruiz)
PARA HACER
- Estos rasgos o indicadores de la personalidad madura ni son todos ni son en ese orden. Ponerlos por orden: ¿Cuál es que yo tengo más desarrollado? ¿Cuál es el que mejorfunciona en mi vida? Hablar después sobre ello.
- Quizás falte algún indicador de la persona madura. ¿Cuál pondría cada uno?
- Los jóvenes tienen que hacerse hasta llegar a una personalidad madura. Revisar las propias actitudes: ¿En qué grado está cada uno?
- Lo importante, además de qué hacer, es cómo hacerlo. Señalar algunas acciones concretas para llevar a cabo cada uno de esos puntos.
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