Un curso como propuesta pastoral

1 septiembre 2006

La pastoral en la escuela día a día

­ “Maestro, ¿qué debo hacer para heredar vida eterna?”

Le contestó: ¿Qué está escrito en la Ley?, ¿qué es lo que lees?

Lc 10,25-26

 
Xulio Cesar Iglesias es Coordinador de Pastoral del Colegio Salesiano de Ourense
 
SÍNTESIS DEL ARTÍCULO
De una manera muy práctica y concreta, desde la reflexión del propio quehacer de cada día, apuesta este artículo por una acción educativo-pastoral desarrollada en toda la organización escolar. Es todo el colegio a través de todos los momentos, de todas las instalaciones y de todo el personal que en él trabaja y colabora, el que debe estar implicado en el anuncio del Reino de Dios. Subraya especialmente la conexión que ha de existir entre educación y pastoral: la oferta ha de ser siempre educativo-pastoral. Todo cuanto acontece en la escuela puede y debe ser educativo pastoral. Desde esta perspectiva señala algunas propuestas para orientar una pastoral realmente integrada
 
Reflexionar sobre la práctica pastoral escolar no deja de ser complicado, porque la mayoría aún distinguimos entre lo que buenamente hacemos y lo que tendríamos que hacer. Quiere esto decir que existe una profunda divergencia entre la práctica y la teoría, en ocasiones asumida por los propios agentes de pastoral escolar. Vamos a explicitarlo con dos imágenes.
 

  1. La vieja carretera que se renueva.

 
Al hablar de la acción educativo-pastoral en la escuela nos viene a la cabeza las tareas de esos obreros, que trabajan en una carretera “nacional” para mejorarla con unos planos más o menos claros; deberán hacerlo a “parches”, pues no pueden cortar el tráfico. Necesitan mantenerlo y a la vez mejorar la carretera; por eso junto a trozos muy usados aparecen tramos nuevos. Y algunos de ellos sólo valen como “circunvalaciones” que terminarán por no usarse. Cuando la vía se inaugure, no se notará esa vieja carretera, ni esas desviaciones temporales, ni esas zonas nuevas construidas específicamente para ese momento.
Esa puede ser la imagen de una pastoral en acción dentro del ámbito escolar. No podemos, o no queremos, o incluso no nos atrevemos a cortar por un tiempo indefinido la vieja acción pastoral, y seguimos apostando por realizar una pastoral que tal vez no nos convence del todo, que tiene demasiados baches; pero pretender empezar con un trazado pastoral totalmente nuevo crearía un vacío difícil de rellenar y recuperar.
Por eso, seguimos realizando acciones pastorales de mezcla: el bacheado de lo que veníamos haciendo se junta con otras actividades más novedosas, que están en período de prueba, y que, si cuajan, formarán parte de esa carretera ideal que tenemos en mente. Mientras tanto, como procedimiento, vamos compaginando lo de siempre con lo novedoso, y con lo que el estudio del territorio nos va indicando. Es una carretera en continua construcción. Y cuando creemos que podemos poner fecha de inauguración, nuevos vehículos, nuevas velocidades, nuevas costumbres nos obligan a realizar reformas sin poder detener el tráfico. Una amenaza y un reto a la vez, pues no acertamos del todo, ya que no tenemos tiempo para realizar unos planos a largo plazo: el tráfico sigue fluyendo y tenemos que darle paso.
 

  1. Conexión en WIFI

 
En el “Taller de Parábolas Modernas”, de Primero de Bachillerato, (título rimbombante que conlleva la explicación de alguna parábola de Jesús y del significado de Reinado de Dios; se puede presentar algunas de las que Cortés ha publicado y proponer en grupo la redacción de nuevas parábolas modernas y urbanas) un grupo presentó una que decía que el Reinado de los Cielos se asemeja al WIFI[1], pues en cualquier lugar de nuestra vida se puede conectar con el Dios de Jesús.
Soy bastante ignorante en cuestiones de informática, pero, después de dialogarlo con el grupo en cuestión, me convenció; es más, hoy me atrevo a defender que la acción educativo-pastoral tiene que ser Wifi. Me explico: La acción educativo-pastoral debe desarrollarse en toda la organización escolar. Es más el lugar propio de la acción educativa-pastoral no es el templo (acaso éste tenga que ver más con la acción pastoral parroquial), sino el aula. El trabajo central de la acción educativo-pastoral escolar es conseguir que se conecte con el Dios de Jesús en todas sus instalaciones y acciones escolares. Que lleguen las ondas a la portería, a la administración, al laboratorio, a la hora del recreo, ésa es la acción directa y clave de la acción educativo-pastoral. Es decir, asegurar que el anuncio del Reinado de Dios llegue a todas las instalaciones y a todos los momentos de la vida escolar.
 

  1. Una película no tan americana

 
Los guionistas de las series americanas utilizan como método centrar en un protagonista los aciertos de tantos y tantos protagonistas anónimos. En hora y media de película concentran lo positivo, lo arriesgado de casi toda una vida. Imaginemos el horario colegial de un día normal con todos esos subrayados pastorales que hemos vivido en uno o varios colegios, en un curso o en muchos.
08:45 h. Varios profesores pasean por los patios del Centro esperando el sonido del timbre. Charlan con los que van llegando, responden a sus dudas y están, sobre todo están, en los pórticos o a la entrada de las escaleras para que, pudiendo pasar de todo, no pase nada.
09:00 h. Se inician los “Buenos días” para ESO y Bachillerato. Por turnos los da un profesor, un miembro del PAS, un padre-madre o un alumno/a por megafonía. Hoy le toca a un alumno de Bachillerato. Después de sus palabras, una oración, la cita del día y la felicitación a los que están de cumpleaños. ¡Ah, falta el aviso de última hora!
09:05 h. El profe de Sociales no avanza materia; se detiene los cincuenta minutos en comentar y dialogar con sus alumnos y alumnas los datos que se han comentado en los “Buenos días”: el mundo de los refugiados y de los conflictos olvidados en nuestro mundo.
09:10 h. En la sala de profesores, los tres compañeros que imparten Lengua Gallega en el Primer Ciclo de ESO están reunidos para coordinarse en los mínimos de la próxima unidad didáctica y crear material complementario para reforzar a los alumnos con mayores problemas escolares.
09:15 h. La atención en secretaría a los padres y madres de los alumnos es exquisita. Hay tiempo para todos; se les repite una y mil veces la información que precisan, el teléfono cuando suena hace cola y espera su turno, y la sonrisa de la secretaria inunda todo el habitáculo.
09:30 h. La biblioteca está abierta para los alumnos y alumnas de Educación Primaria que van llegando antes de tiempo. Un profesor, que hace este servicio durante media hora todas las mañanas, ha convertido un rincón en tebeoteca con un trozo de moqueta y unos cojines que regaló una compañera.; los diccionarios que más se usan y el trato amable están ya listos en la mesa.
10:00 h. Se inician los “Buenos días” en Educación Infantil. Se juntan por edades en varias clases Con recursos de lo más creativo: marionetas, cuentos, canciones con gestos, los peques van calando en lo esencial.
10:30 h. Dos profesores que tienen esta hora libre dialogan sobre un acontecimiento que enturbia la relación de compañeros. Optan por complicarse la vida y tratar de aclarar malentendidos, asumiendo el riesgo de quedar mal.
10:45 h. Los alumnos de 4º ESO para celebrar el Día Internacional del Medio Ambiente inician un proyecto sobre los espacios naturales de Galicia. Es un proyecto diseñado conjuntamente por el profesorado de Tecnología y Biología.
11:00 h. Los alumnos y alumnas de 6º de Educación Primaria vienen con carteles, fotocopias y no se qué más a la capilla. Como finalización de un bloque temático, celebrarán una eucaristía que llevan preparando durante toda la semana en clase de Religión Católica.
11:15. El patio en el recreo de Infantil se llena de mandilones de colores jugando con las profes.
11:30 h. El alumnado mayor (ESO y Bachillerato) inicia el recreo. En este momento, explota la vida (gritos, carreras, balones…) que tiene el colegio: el “bar-eto” escolar a los topes; las canastas de baloncesto repletas, incluso en el campo de fútbol los incondicionales de 1º y 2º de ESO se divierten acaloradamente; en la zona ajardinada pequeños grupos y parejas dialogan entre sí y entre todos la presencia amable de los educadores queasisten, comparten, charlan sin distancias físicas ni psicológicas.
12:05 h. En el recreo de Educación Primaria una profesora de 5º dialoga con un miembro del equipo de pastoral para comentarle que recogió un sobre de un alumno con 300 € destinado a la última campaña solidaria que organiza el centro. Al ser una cantidad tan grande creyó oportuno hablarlo con su familia. La sorpresa es aún mayor porque se entera de que es fruto de sus ahorros, que sus padres ya conocían el detalle y que ellos mismos lo apoyaron añadiendo 50 €.
12:10 h. En el pasillo del primer piso hay un alumno de 3º de ESO expulsado; está malhumorado y sentado en el suelo. Otro de los componentes del equipo de pastoral, que iba a fotocopiar unos carteles para la campaña del próximo mes, se para y, con mucha paciencia y sin miedo al tiempo, se sienta en el suelo con él para charlar de lo divino, de lo humano, y… de por qué está fuera de clase otra vez.
12:30 h. En el despacho del Jefe de Estudios se escucha la versión del alumno que fue acompañado allí por su profesor. Una vez escuchado el alumno, se le razona que deberá quedarse dos horas más por la tarde a estudiar en el centro.
13:00 h. Aprovechando un problema de matemáticas, el profesor de ESO realiza una pequeña aclaración sobre lo acontecido en clase la semana pasada. En Educación Física la profe de EP está atenta a los gestos de agresividad de un grupillo de alumnos. En los grupos de Lengua Española el profesor, percibe cómo una alumna siempre se queda última; decide hablar con ella y con su tutora para intervenir educativamente. En Química se inicia un debate sobre la energía nuclear; como el ambiente se caldea el profe trata de que se razonen las posturas. En Historia la profesora plantea una crítica radical a cualquier tipo de totalitarismo y lo concretiza en actitudes de ciertos grupos de la ciudad.
13:15. Una profe en el pasillo, delante de la puerta de su clase, cara a cara, mirándole a los ojos, le está indicando a un alumno, sin gritos pero con tono firme, que no puede seguir así con su mal comportamiento ni con su actitud pasiva.
13:30 h. Los alumnos y alumnas de EP, al acabar sus clases, salen del colegio a toda velocidad, como si hubiese un terremoto. Por turnos, cada día, una maestra hace realidad su presencia educadora en el portón.
13:35 h. Los compañeros y compañeras de la sección de EP, que están en la sala de profesores, dialogan sobre la posibilidad de que, en vez de tener la cena final de trimestre en un restaurante de la ciudad, cada uno aporte algo. Así tendremos la cena en el comedor del colegio y lo que ahorremos irá destinado para esa ayuda de emergencia que Cáritas nos plantea.
13:45 h. La portera del colegio está cerrando la puerta. Un alumno de 1º ESO vuelve corriendo a la puerta principal y le dice sofocado que se olvidó un libro en el aula, que si le deja subir a clases. La portera le indica que sí; al salir le recuerda que tiene que organizarse mejor y que para otra vez, a lo mejor, se encuentra con la puerta ya cerrada.
14:00 h. El comedor del colegio atiende al alumnado. Los educadores tratan de que coman de todo, valoren la comida, y haya un hábito de higiene.
15:35 h. El Equipo de Pastoral reflexiona y hace autocrítica de por qué no salieron adelante las convivencias cristianas para 2º de Bachillerato, por qué no conseguimos motivar y apoyar el proyecto solidario en los cursos de los más mayores, por qué varios tutores no asumen las actividades propuestas por pastoral. Aun así seguimos en la actitud de no rendirnos, de sembrar y de buscar nuevas metodologías.
16:30 h. Hoy en el Equipo Directivo el Director Pedagógico dio un amplio informe del porqué ocho alumnos y alumnas de 4º de ESO no continúan en el centro. No hay motivos económicos en ningún caso: traslados, ciclos de grado medio y bachillerato de arte. Además el administrador informa también de que tres alumnos que finalizan este mismo curso han solicitado beca al propio centro.
17:30 h. El aula de apoyo educativo del Centro Juvenil está ya preparada para recibir a los chicos de EP que nos envía el Departamento de Orientación. Los voluntarios y voluntarias, algunos alumnos de bachillerato del cole, les acompañan en su estudio, revisan su agenda escolar, les explican lo que no entienden, promocionan su autoestima, meriendan y juegan con ellos hasta las siete y media.
17:35 h. Al finalizar las clases de la tarde, los profesores de EP, que están en la sala de profesores, leen un manifiesto de Amnistía Internacional sobre la tortura, que llegó vía Internet. La mayoría lo firman.
17:40 h. Las profes acercan a los peques a las escuelas deportivas del centro o son los propios animadores deportivos quienes vienen a buscar a los niños a la puerta del aula. Espontáneamente se les acompaña, se les anima, se les quita el miedo, se les ayuda a crecer…
17:45 h. Al salir las peques y los peques de EI, muchas profesoras charlan con las abuelas y los padres que viene a recogerlos, mientras los niños meriendan en las dependencias del cole. Se habla del hijo o del nieto, pero también se preocupan del ambiente familiar y se les comenta la campaña que estamos trabajando para que ellos la refuercen desde casa.
18:15 h. Han terminado las clases. En el despacho de la Asociación Deportiva, los coordinadores defienden sin fisuras que el próximo curso seguirá habiendo tantos equipos de fútbol-sala, fútbol 7 y baloncesto como chicos y chicas se apunten. Que ya es historia un solo equipo de los mejores del colegio y de la ciudad. Aquí todos los que quieran practicarán un deporte.
18:30 h. En la cafetería de enfrente del colegio, un grupo de profesores comentan y se desahogan con las anécdotas del día… Alguien corrige varias veces los tonos despectivos, negativos y pesimistas sobre la coordinación del centro y sobre esos alumnos y alumnas de los que todos conocemos su nombre (sí, por desgracia solamente su nombre y su comportamiento en el aula).
20:00 h. El equipo de animación del itinerario de Tiempo Libre educativo tiene reunión con el fin de ultimar detalles para la actividad del sábado. En el orden del día, siempre hay un punto acerca del seguimiento de los muchachos. Hoy se habla de algunos que tienen actitudes negativas. Se determina quién hablará con ellos al finalizar la actividad del próximo sábado.
20:15 h. Varios profesores se reúnen para tener esa oración mensual que el Equipo de Pastoral colegial tiene para sí y que está abierta al Profesorado y al PAS. Hoy, además del Equipo de Pastoral, nos acompañan tres profesores.
20:30 h. A esta hora intempestiva, un tutor se reúne con los padres de una alumna. El tono de la reunión fue bastante agresivo y duro. El tutor no perdió la calma, no nombró para nada la hora en que tenía que atenderlos y les dijo que anotaba y que tendría en cuenta sus puntos de vista.
00:00 h. El colegio cierra sus puertas. Han estado abiertas a la comunidad educativa y a los vecinos de la zona desde las 07:45 h.
00:30 h. Al apagar la luz de su habitación, una profe, después de presentarle a Dios una vez más sus alumnos/as más conflictivos y pasotas, le promete que no claudicará en seguir proponiendo el Reinado de Dios entre las aulas, pasillos y libros de su cole.
 

  1. El problema del ‘guión’

 
Los que trabajamos en la escuela tenemos un dilema difícil de solucionar: “el problema del guión”. Nuestra oferta es educativa-pastoral. “Educativa, en cuanto que ayuda a descubrir y madurar las posibilidades de los jóvenes en los aspectos culturales, profesionales y sociales. Pastoral, en cuanto que acompaña a los jóvenes hacia su encuentro con Cristo en la construcción del Reino”[2].
Aquí lo importante es el guión (sí, el “ – ”), como insiste Chema, mi Delegado Inspectorial de Pastoral Juvenil. No nos vale trabajar simplemente la faceta “educativa” ni insistir únicamente en lo “pastoral”. Los dos componentes tienen que estar unidos: educativo-pastoral. Y eso nos obliga a cambiar de esquema. Todo lo que sucede en la escuela puede (y debe ser) educativo-pastoral. No podemos quedarnos simplemente en dar bien nuestras clases con coherencia, con seriedad y profundidad, respetando procesos, alumnado, ni debemos quedarnos simplemente en actividades celebrativas o explícitamente cristianas como convivencias, buenos días, celebraciones… Es mucho más, es la suma de todo esto: crear una sensibilidad por los valores de Jesús a través de un lenguaje y de una organización característica como es la escolar.
Debe entenderse como un estilo que impregna toda la escuela. No tenemos que añadir ni superponer nada. Trabajar para que resuene la “buena nueva” de un Dios que da sentido al ser humano, que acompaña en los procesos de madurez humanos, que apuesta radicalmente por una vida digna y vivida en profundidad. En una palabra, es vivir la escuela como sacramento de Vida.
 

  1. Hacia una pastoral integrada

 
Intentamos formular a continuación algunas propuestas que nos ayuden a caminar en lo anteriormente comentado. Podrían ser muchas y muy diferentes. Pero creemos que partir de un análisis de la realidad que nos ayude a acertar en nuestra tarea educativo-pastoral, asumir que nuestro proyecto educativo-pastoral tenemos que concretarlo en una programación anual, contar con toda la comunidad educativa para llevar a cabo esta misión, conocer bien la organización escolar para no caer en dobles juegos, e indicar posibles acciones que habrá que llevar a cabo. Son propuestas de vital importancia para conseguir una acción educativo-pastoral eficaz y con los “pies en la tierra”.
Seguramente que estamos realizando mucho más de lo que se indica aquí, pero nos interesa concretar pequeños pasos de nuestra intervención educativo-pastoral.
 
5.1. Un buen análisis de la realidad
 
Nuestra tarea educativo-pastoral debe partir de continuos análisis de la realidad, pues los destinatarios y los contextos educativos van cambiando año tras año. El Equipo de Pastoral trabajará por lograr una evaluación de los distintos aspectos colegiales enfocados siempre desde una clave de sensibilidad pastoral. He aquí algunas líneas operativas:
– Hacer un análisis al principio y final de curso con toda la comunidad educativa para ir descubriendo a qué “zonas” del colegio no llega el WIFI; es decir, dónde debemos trabajar más esa sensibilidad educativo-pastoral que defendemos en nuestros proyectos y a la que nos referimos cuando hablamos de misión, de visión y de valores. Todo esto será objeto de reflexión, a lo largo del curso escolar, y se traducirá en alternativas concretas que se presentarán al Equipo Directivo[3].
– Realizar en las primeras clases de Religión Católica una especie de evaluación inicial del alumnado para saber en qué momento del proceso cristiano (o incluso fuera de él) se encuentra para, posteriormente, poder responder a sus expectativas, demandas y situación vital. El Equipo de Pastoral con el profesorado de Enseñanza Religiosa Escolar estudiará en varias sesiones los resultados, base para nuevas propuestas.
– Cuando nuestros alumnos y alumnas dejan el colegio, se les propondrá, a través de un folleto, si estarían dispuestos a “seguir en onda” en el voluntariado de Tiempo Libre, social, misionero, Antiguos Alumnos, grupos de referencia, y seguir un plan de acompañamiento.
 
5.2. Un proyecto que se construye y concretiza

Partiendo del análisis de la realidad y confrontándolo con nuestros criterios teológicos, opciones, metodologías y el carisma educativo…, realizar una Programación Anual con un objetivo general, varios específicos que, a su vez se concreticen, en actividades y líneas de acción que impliquen a toda la Comunidad Educativa. Varias propuestas para comenzar:
– Conseguir que el objetivo general anual sea compartido por toda la Provincia Religiosa. Además de fuerza y unidad carismática, conseguiremos que, a través de diversos caminos que inciden en nuestros destinatarios, esté todos los días presente. Convertir ese objetivo en un lema con gancho, concretizado en una imagen, sintetizado en un breve texto explicativo serán maneras prácticas de darlo a conocer y propuesta de trabajo para todo el curso escolar.
– Conseguir que la concreción de objetivos específicos, actividades y líneas de acción la realice no solamente el Claustro de Profesores sino que también haya representantes del PAS, AMPA y del alumnado. Poseeremos una visión más amplia de la realidad en la que los aciertos y la implicación de todos nos hará protagonistas desde el nacimiento de la programación anual.
– Planificar la formación de la Comunidad Educativa con jornadas o sesiones a lo largo del curso en que se trabajen aspectos claves de nuestro proyecto educativo-pastoral. Para asumir hay que conocer, reflexionar, actualizar… Desde “el principio de la encarnación”[4] hasta “la animación como estilo educativo” pasando por “el sistema preventivo” y un largo etcétera.
– El Equipo Directivo debe diseñar estrategias para que la asunción de la misión, visión y valores aparezcan en las actividades programadas (sobretodo en las programaciones concretas de cada área). Y también estando atentos al denominado “currículo oculto”
– Apostar por itinerarios formativos para toda la Comunidad Educativa basados en la experiencia y en las vivencias: un itinerario celebrativo, asociativo, bíblico, para educar en la justicia y solidaridad, para la convivencia.
 
5.3. Un gran equipo como protagonista
 
Tenemos que asumir que toda la comunidad educativa somos, a la vez, destinatarios y protagonistas de la acción educativo-pastoral. ¡Todos somos pastoralistas! El último responsable es el Equipo Directivo. Pero todos y todas tenemos un papel que asumir en esta tarea. Algunas iniciativas:
– Crear un Equipo de Pastoral en red: que el Consejo de Aula (CONSA) tenga su alumno o alumna vocal de pastoral (o de bienestar, como le denominamos en algún centro); que en la junta de AMPA algún padre o madre se preocupe por la dimensión educativo-pastoral; que en la mesa de Tiempo Libre educativo, que coordina lo extraescolar, haya representantes en esta clave evangelizadora; relación con ONG’s y asociaciones del barrio; relacionarse con los equipos pastorales de colegios afines con una reunión mensual; trabajo común con el Departamento de Orientación; relación con la Diócesis; con entidades educativas complementarias de tiempo libre-deportivas, etc.
– Un diálogo directo y concreto con reuniones programadas entre Dirección Pedagógica y Coordinación de Pastoral. Ellos son los responsables reales de la dimensión educativo-pastoral.
– Al principio del curso escolar, en reuniones programadas, dedicar tiempo a presentar de una manera clara y sencilla nuestra propuesta educativo-pastoral al claustro, familias de nuestros alumnos, alumnado…
– Implicar a toda la comunidad educativa creativamente en la marcha de las campañas educativo-pastorales que trabajamos durante todo el curso: página web, circulares, ambientación de todo el edificio, diálogo personal de familias con tutores/as, reparto de tareas.
– Creación de comisiones de Pastoral en las que se implique todo el profesorado repartiendo las distintas tareas y proyectos del curso escolar (ambientación, Navidad, proyectos solidarios, paz, fiestas colegiales, …).
– Ofertar, desde la libertad, a toda la Comunidad Educativa experiencias de oración, formación, celebración, compromiso, fraternidad.
 
5.4. Una organización bien definida[5]
 
“Las dimensiones organizativas que configuran un centro escolar vienen dadas por el hecho de que, en cualquiera de ellos, existe una estructura organizativa formal (Dimensión Estructural); se desarrollan determinadas relaciones entre los individuos que lo componen (Dimensión Relacional); se mantiene y cultivan ciertos supuestos, valores y creencias organizativas (Dimensión Cultural); se desarrollan determinados procesos y estrategias de actuación a través de las cuales la organización funciona (Dimensión Procesual); y se mantiene ciertas relaciones con el entorno (Dimensión Entorno)”[6].
Es necesario, pues, conocer las características de la organización escolar y sus interrelaciones para poder comprender, interpretar y dar alternativas reales y viables. Más claro: para que funcione realmente nuestra opción educativo-pastoral tenemos que conocer y dominar bien las características y dimensiones de la organización escolar. Habría que analizar desde el Equipo Directivo si nuestro enfoque educativo-pastoral llega realmente:
– a lo formal de la escuela: roles, órganos de animación y gobierno, tareas, estructura física, mecanismos formales de coordinación;
– a lo relacional: estilo de comunicación, participación, conflictos, estilo de liderazgo, el clima del centro;
– a la cultura del centro: los valores, supuestos, creencias, códigos, costumbres, hábitos, formas de pensar y actuar, normalmente no escritos, pero que se han ido construyendo en la vida del centro;
– a los procesos organizativos que se desarrollan en el centro, el cómo y el porqué, sus posibilidades, la importancia que se les da;
– a la interacción con el entorno inmediato (administración, centros de profesores y de recursos, familias,…) y el entorno mediato (fuerzas económicas, políticas, sociales, culturales…).
 
5.5. Con acciones concretas

Pueden ser estas acciones u otras. Lo importante es aterrizar en nuestro Centro Educativo tan semejante a otros y a la vez tan diferente. Cada centro educativo es un mundo con su entorno, historia, destinatarios, etc. pero aun así no podemos dejar de indicar acciones concretas que cada uno podrá priorizar o llevar a la práctica.
– Espacios a disposición: idealmente un Despacho de Pastoral abierto a todos y con acceso fácil al alumnado y cercano físicamente del despacho de Jefatura de Estudios y de la Sala de Profesores; una capilla con alguien que “gestione” la posibilidad de estar abierta en ciertos momentos y ofertar experiencias de encuentro…
– Educadores con tiempo (psicológico y real) para acoger, escuchar, atender, acompañar, rezar, formarse…
– Una oferta explícita diversificada según los distintos destinatarios: desde eucaristías hasta celebraciones de vida, desde convivencias cristianas a jornadas de formación humana, desde momentos de acogida formal e informal hasta celebraciones de despedida, desde “veinticuatros”[7] hasta tutorías individualizadas o grupales.
– Semanas interdisciplinares en las que, de acuerdo con las diversas materias, se acentúa un mismo valor; creación de unidades didácticas en las que, desde las distintas áreas, nos acerquemos a un acontecimiento escolar o social;
– Diseñar estrategias con el Departamento de Orientación para estar atentos, con el fin de acompañarlos, a los “últimos” de nuestro Centro,
– Educar en la búsqueda de sentido.
– Proponer acciones concretas que trabajen las cuatro dimensiones eclesiales de formación, fraternidad, celebración y solidaridad.
 

  1. Pisando tierra


Trabajar en clave educativo-pastoral en un centro escolar es difícil, creemos que muy difícil. Lo importante es no rendirse y, desde ahí, descubrir nuevos horizontes que nos ayuden a caminar en nuestro quehacer diario. Es creer y querer de verdad en unos destinatarios por los que somos capaces de empezar de nuevo todos los días, “hasta setenta veces siete”.

Xulio César Iglesias

estudios@misionjoven.org

 
[1] WIFI: abreviatura de Wíreless Fidelity, también llamada WLAN (wíreless lan, red inalámbrica). En lenguaje entendible: una red inalámbrica que permite acceder a internet en cualquier lugar de una zona determinada (un colegio, por ejemplo) sin cables.
[2] Proyecto Educativo-Pastoral Salesiano 2004-2010. Inspectoría Salesiana “Santiago el Mayor”, León 2005, p. 5.
[3] Aunque no comparto considerar a la escuela como empresa o ‘factoría’. Hoy en día los planes de calidad o los planes estratégicos (mucho mejor estos últimos) nos pueden ayudar en este análisis de la realidad si somos capaces de hacer una lectura (y redacción) con sensibilidad pastoral de los procesos y sus indicadores. Y de plasmarlo en planes de mejora anuales. Y de estar atentos a las encuestas de satisfacción que se realizan a la comunidad educativa.
[4] “Dios no sólo se hace hombre y asume lo humano, sino que nos muestra -en la humanidad y vida de Jesús- cómo es en lo humano y a partir de lo humano dónde resulta posible alcanzar y vivir “en” Dios”: en CARLO NANNI ¿Está la escuela para “hacer pastoral” en Misión Joven 304 (2002) 18.
[5] Este apartado se basa en el libro de MARÍA TERESA GONZÁLEZ, Organización y gestión de centros escolares. Dimensiones y procesos, , Pearson Educación, Madrid 2003.
[6] M. T. GONZÁLEZ, o. c., .26.
[7] En ambientes salesianos el día 24 de cada mes se oferta una celebración mariana, recordando el 24 de mayo, fiesta de María Auxiliadora.