José Antonio Marina, «nuestro pensador más inquieto y sin duda el más fecundo», se enfrenta en último ensayo Dictamen sobre Diosal tema eterno de lo religioso, de tanta actualidad ahora por los acontecimientos que estamos viviendo. Y tiene el talento de hacerlo humilde, modesta y sencillamente, al menos en su declaración de principios, que consta de tres preguntas:
- ¿Podemos saber algo seguro sobre la existencia de Dios?
- Si no existiera ese objeto cultural en nuestro entorno, ¿lo inventaríamos ahora? • ¿Es inteligente a estas alturas ser religioso?
Esas tres mismas preguntas y sus respuestas pueden ayudar a muchos pastores a que a su vez ayuden a los jóvenes a situarse de manera lúcida ante el hecho religioso.
- De sus indagaciones, Marina saca una tesis o al menos una propuesta:»Que las religiones se sometan a unos criterios éticos para que puedan seguir siendo aceptadas».
- Él mismo resume así esos criterios:»Si usan o no mecanismos de poder político para imponerse, si admiten discusióno y si apelan al miedo. Son criterios humildes, solo esbozos, pero creo que éste es el camino correcto».
- En su ensayo, Marina defiende y formula las siguientes propuestas:»Las religiones son verdades privadas, como el amor que puedo sentir por alguien». «Todas las religiones actuales han producido su moral», una moral que «debe ser compatible con ciertos principios éticos».»Es posible fundamentar una ética, entendida como moral transcultural, que sirva de marco donde situar la ciudadela religiosa y la ciudadela humana».
- Respecto si es inteligente a estas alturas ser religioso, Marina llega a la siguiente conclusión: «Hay formas inteligentes de serlo y otras menos inteligentes. La religión puede entenderse como un rechazo a admitir la clausura del mundo natural, pragmático, economicista y técnico. La Religión, si se mira bien, es una actitud de rebeldía poética y creadora… Por eso, es inteligente acceder a ella desde la ética, no desde la credulidad».
Este Dictamen sobre Dios puede ayudarnos en nuestro trabajo con los jóvenes a seguir formulando preguntas y buscando repuestas que les ayuden a ellos mismos a situarse de manera lúcida ante el hecho religioso -y ante la vida- de modo que puedan situarse personalmente y dar una respuesta adecuada y actual.
CUADERNO JOVEN