Sólo Dios puede darnos la fe,
pero tú puedes dar tu testimonio.
Sólo Dios puede dar la esperanza,
pero tú puedes dar confianza a tus hermanos.
Sólo Dios puede dar el amor,
pero tú puedes enseñar al otro a amar.
Sólo Dios puede dar la paz,
pero tú puedes sembrar la unión.
Sólo Dios puede dar la fuerza,
pero tú puedes sostener al desanimado.
Sólo Dios es el camino,
pero tú puedes indicárselo a los otros.
Sólo Dios es la luz
pero tú puedes hacerla brillar a los ojos de todos.
Sólo Dios es la vida,
pero tú puedes contagiar a los demás el deseo de vivir.
Sólo Dios puede hacer lo que parece imposible,
pero tú podrás hacer lo posible.
Sólo Dios se basta a sí mismo
pero él prefiere contar contigo.
Oración de una comunidad de Brasil
¡En el bufet del Señor!
[vc_row][vc_column][vc_column_text][pdf-embedder...