Dos mundos… todavía

1 julio 2006

El origen
El 24 de marzo se celebra el Día Mundial contra la Tuberculosis, una dolencia cuyo tratamiento se conoce desde hace más de 40 años y que por lo tanto es curable, pero que ocasiona en el mundo dos millones de muertos cada año a la vez que se dan nueve millones de nuevos casos.
Esta imagen de Ajubel ilustraba en el suplemento de Salud de El Mundo (25.3.06) un reportaje titulado La tuberculosis se resiste. Resulta que en España enferman cada año 12.000 personas, una tasa de infección impropia de un país desarrollado. Y resulta que el bacilo de la tuberculosis a la pobreza y a la exclusión social: causa estragos en los núcleos de pobreza de la periferia urbana y sus víctimas son toxicómanos, indigentes y emigrantes.
Al margen de este origen, que también se puede tratar, la imagen puede ayudarnos a tomar conciencia de la realidad en que vivimos, ser sensibles a la situación de los más necesitados y darnos cuenta de que no todos disponen de lo mismo. Además nos ayudará a descubrir nuestras contradicciones y disculpas a la vez que nuestras posibilidades de vivir con sentido.
La imagen

  • Vemos la imagen. ¿Qué nos sugiere? Se puede comenzar con una lectura de todo lo que se ve. (Véase en el recuadro de abajo la descripción comparativa de elementos que aparecen).
  • ¿Qué pasa ahí? ¿Con qué lo relacionamos?
  • ¿Qué sentimientos nos provoca.
  • Son dos pulmones… unidos por el mismo conducto pero totalmente distintos.¿A qué se puede deber?
  • ¿Qué pueden simbolizar? Porque en teoría son de la misma persona…

 Dos mundos

  • De acuerdo. Se trata de dos mundos distintos. ¿Por qué son tan distintos?
  • Pero tienen le mismo conducto de entrada. ¿Qué hace que hayan llegado a estar así?
  • ¿En qué se parece eso a nuestro mundo? Porque nosotros respiramos de esa realidad, ¿O no?
  • ¿Existen esos mundos en realidad? ¿Cómo nos afectan?
  • En cada uno de esos mundos hay personas. ¿Qué diferencia hay entre ellas?
  • Concretarlo mediante una oración: escribir la oración que haría cada una de las personas de los dos mundos.
  • Y escribir los sueños que tienen, centrándose en los animales: los sueños del perro con lazo y los sueños del burro con albarda…
  • Ver en el recuadro de abajo otras diferencias y comparaciones y trabajar con ellas simbólicamente.

Nosotros en esos dos mundos

  • Por cierto, ¿dónde estamos nosotros? ¿Dónde tenemos la suerte o la desgracia de estar?
  • ¿Cómo podemos salir de esos mundos? ¿O no se puede salir? ¿O no hay que salir?
  • ¿Qué podemos hacer para que esos mundos se igualen?
  • Al menos hacemos una oración para tomar conciencia y para tomar partido… [Porque parece que a ese sol (¿Símbolo de Dios?) no le gusta lo que está viendo y lo que tiene que iluminar…]

Herminio Otero

Dos mundos
  •          Sol (aunque triste)
  •          Edificios con publicidad
  •         Grandes casas
  •         Abundante árboles floridos
  •         Césped de hierba
  •         Coche de lujo
  •         Gente ‘placentera’ y hasta perro adornado durmiendo
  •         Instrumentos; libro, palo visera, pipa…
  •         Campo de golf, piscina…
  •         Brisa (oleaje en la piscina)

 

  •          Volutas de humo
  •          Fábricas y chimeneas
  •         Chabolas mínimas
  •         Un solo árbol y seco
  •         Descampado negro
  •         Sombra de burro
  •         Gente (más) gritando o saliendo sin poder salir (solo rostros)
  •         Sin manos siquiera
  •         Ropa tendida
  •         Contaminación (volutas de humo)