El pastor y las estrellas

1 diciembre 2001

Ficha
Título: El pastor y las estrellas. Una filosofía de la vida. Autor: Eduardo Santa. Editorial: Obelisco (111 págs.). Resumen del argumento: narración del viaje que realiza un pastor en búsqueda de un lucero especial que brilla más que los demás.
 
Destinatarios y objetivos educativo-pastorales
Adolescentes y jóvenes que buscan «algo» y están dispuestos a ponerse en camino; adultos que han completado un ciclo de su vida y sienten la necesidad de iniciar una nueva etapa. Los temas que nos permite trabajar: felicidad auténtica y falsas felicidades; paz interior y silencio; búsqueda, camino, desprenderse de…
 
Guión de trabajo

  1. En los dos primeros capítulos, Abenamar nos cuenta dos verdades. ¿Las recuerdas? ¿Para ti también son verdades? ¿Por qué?
  2. «Sigue siempre ese lucero», escucha Abenamar en sueños. Y a partir de ese momento, dejándolo todo, dedica el resto de su vida a la búsqueda del lucero. ¿Es demasiado? ¿Está loco? ¿Qué te sugiere a ti todo esto? ¿Hay algún texto evangélico que te recuerde ese seguir por valles y colinas tras el lucero?
  3. Izcai le dijo a su viejo marido: «ya es muy tarde para creer en los sueños. Ha llegado la hora de vivir siempre despiertos. La senectud es un estado de vigilia». Pero Abenamar le contesta: «Hay dos clases de seres en el mundo, los que sueñan y los que han dejado de soñar. Triste es llegar a la vejez después de haber perdido la ilusión. Mientras vivamos acariciando un sueño podemos sentirnos jóvenes. Porque la juventud está en eso». ¿Estás de acuerdo? ¿No será un simple consuelo de los viejos? Coméntalo con alguna persona anciana que tengas a tu alrededor.
  4. Abenamar, al pie de un viejo olmo (p. 30) hace una reflexión preciosa sobre la soledad. ¿Te sugiere algo?
  5. Relee las palabras que Abenamar les dice a los monjes de la abadía al despedirse (pp. 44-45). ¿Qué te parecen? ¿Añadirías o quitarías algo?[1]
  6. Abenamar vuelve a escuchar la voz de Izcai: «¿Por qué no te conformas con la luz de la luciérnaga?». ¡Menuda tentación! ¿Cuáles han sido tus tentaciones? ¿Se parecen a las de Jesús o a la de Abenamar? ¿Has rebajado tus ideales y sueños con el paso del tiempo? ¿Te has convertido en un hombre o mujer light?
  7. Cuando Abenamar llega a la aldea les dice que va predicando la paz y el amor. «No te preocupes por nosotros, buen hombre; el amor lo hacemos con nuestras hembras y la paz la imponemos con nuestros alfanjes», dijo el guardián con sorna. Está visto que alguna gente no entiende nada o no quiere entender. Demasiadas veces prostituimos las palabras. ¿Por qué no haces una lista con esas palabras y la mandas a los periódicos?
  8. En esa búsqueda del lucero, Abenamar encuentra la fe ciega en el monasterio, el poder en el castillo, la sabiduría en el hombre ciego, pero… ¿y la felicidad? ¿Dónde encontrar la felicidad, que era justamente lo que Abenamar estaba buscando entre los hombres? ¿Qué le contestarías tú, a partir de tu experiencia, a Abenamar?

 

Iosu Osta

[1] Creo que en el libro se da una visión de los frailes,  al menos en parte, bastante estereotipada y ridiculizada. ¿Por qué no te animas a pasar un fin de semana en algún monasterio que tenga hospedería y así podrás juzgar por ti mismo? Si ya lo has hecho o no te fuera posible, te aconsejo que leas un libro viejo pero muy valioso escrito por Ernesto Cardenal, «Vida en el amor»; te ayudará a tener otro punto de vista.
 
[1] Creo que en el libro se da una visión de los frailes,  al menos en parte, bastante estereotipada y ridiculizada. ¿Por qué no te animas a pasar un fin de semana en algún monasterio que tenga hospedería y así podrás juzgar por ti mismo? Si ya lo has hecho o no te fuera posible, te aconsejo que leas un libro viejo pero muy valioso escrito por Ernesto Cardenal, «Vida en el amor»; te ayudará a tener otro punto de vista.

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