He aquí un recorrido por la vida de María. Ser elegida por Dios no le condujo a una vida fácil y sin problemas. Al contrario, le supuso pasar por mucho sufrimiento y «mucha cruz». ¡Amigo!, descubre a María como una mujer fuerte que superó las pruebas dolorosas que le llegaron porqué confió a pies juntillas en el Dios que la había escogido.
I Estación: María sentenciada a muerte
A los ojos de Dios, María es la elegida para llevar adelante su plan; sin embargo a los ojos de los hombres la cosas es bien distinta. José se enteraría del embarazo de María, su prometida. La noticia tuvo que suponer para el bueno de José una auténtica catástrofe interior. Todos sabemos que si no reconoce ese hijo como suyo, María hubiera sido juzgada públicamente de adulterio y probablemente hubiera sido condenada a la lapidación.
II Estación: María es cargada con la cruz
La cruz del silencio y de la amargura invade por momentos la vida de María. Ella tiene algo asombroso que comunicar, mas por el momento no puede.
III Estación: MARÍA CAE POR PRIMERA VEZ BAJO EL PESO DE LA CRUZ
Unos años más tarde su Hijo diría: “¿Quién eres tú para juzgar a tu prójimo?”. Mientras tanto María tiene que soportar los cuchicheos hirientes de sus vecinos de Nazaret.
IV Estación: MARÍA SE ENCUENTRA CON SU MADRE
Aunque no viene recogido en las páginas de los evangelios, María contaría con el apoyo y el cariño de su madre Ana. Y es que el encuentro entre dos personas llenas de fe esclarece en gran medida los planes misteriosos que Dios tiene sobre cada uno de sus hijos.
V Estación: ISABEL, SU PRIMA, AYUDA A MARÍA A LLEVAR LA CRUZ
La visita de María a su prima Isabel supone un enorme alivio en la vida de María. Las dos mujeres han sentido las caricias de un Dios colmado de amor. María regresará de nuevo a Nazaret con “las pilas de la fe” recargadas.
VI Estación: JOSÉ, SU PROMETIDO, LIMPIA EL ROSTRO DE MARÍA
Cuando María acude a la carpintería de José a comunicarle todo…, encuentra a su prometido haciendo un pequeño juguete para el niño que esperan… No existen palabras, la mirada tierna y cariñosa de José basta para que María entienda que, a partir de ahora, no estará sola para llevar a cabo el plan que Dios tiene sobre ella.
VII Estación: MARÍA CAE POR SEGUNDA VEZ
Camino de Jerusalén, María siente que ha llegado el momento de dar a luz. Al buscar un lugar apropiado siente de nuevo en sus propias carnes el rechazo y la intolerancia de un mundo que da la espalda al Salvador de los hombres.
VIII Estación: MARÍA CONSUELA A SU ESPOSO JOSÉ
José se avergüenza de no poder ayudar a su esposa en las tareas del parto. María le responde con una tierna sonrisa, haciéndole ver que Dios no les va a dejar solos.
IX Estación: MARÍA CAE POR TERCERA VEZ
¿Hay algo más cruel en este mundo para una madre que ver cómo quieren matar a su hijo…? María, José y el pequeño tienen que huir a otra tierra, convirtiéndose en los primeros emigrantes de la historia.
X Estación: MARÍA ES DESPOJADA DE SUS VESTIDURAS
La vida en Nazaret viendo crecer a Jesús la colma de felicidad, sin embargo un día ve cómo su Hijo se marcha a cumplir su misión. María, que intuía algo, siente por momentos que es despojada de lo que más quiere en esta vida.
XI Estación: MARÍA ES CLAVADA EN LA CRUZ
A María le llegan continuamente rumores sobre la vida de su Hijo. Ella sufre en silencio, pues sabe que su Hijo ama de tal manera a la gente de este mundo que estará dispuesto a dar su vida cuando llegue el momento.
XII Estación: MARÍA MUERE EN LA CRUZ
¿Qué madre puede soportar la muerte de un hijo? Una parte de la vida de María se va en la cruz con Jesús. No obstante ella sabe que debe ayudar a extender la Buena Noticia que su hijo ha traído al mundo.
XIII Estación: MARÍA ES BAJADA DE LA CRUZ
Por unos años María acompaña, enseña y mima a los apóstoles de su hijo. Sin embargo un día María recibe la llamada definitiva de su hijo dejando atrás cualquier atisbo de sufrimiento. Es bajada de la cruz y con ella baja el espíritu de Dios que recarga el corazón y la mente de los apóstoles.
XIV Estación: MARÍA ES COLOCADA EN EL SEPULCRO
El cuerpo de María es colocado en un sepulcro, su corazón en cada una de las personas que la acepten y que la quieran hacer un hueco en sus vidas, como mujer, como madre y como compañera de camino.
XV Estación: MARÍA VIVE PARA SIEMPRE
José María Escudero