LA FUNDACIÓN PROYECTO DON BOSCO

1 marzo 2010

UNA PLATAFORMA DE EVANGELIZACIÓN Y PROMOCIÓN SOCIAL EN LA INSPECTORÍA DE SEVILLA

José Luis Aguirre
 
Quienes somos
La Fundación Proyecto Don Bosco es una organización sin ánimo de lucro de ámbito estatal de la Iglesia Católica, impulsada y promovida por la Congregación Salesiana y los grupos de la Familia Salesiana para canalizar los proyectos de intervención social de la Inspectoría de Sevilla,  en Andalucía, Canarias y Extremadura.
Tiene como principal finalidad, en el marco de la promoción y defensa de los derechos humanos, el desarrollo integral de menores y jóvenes en situación de riesgo o exclusión social, actuando también sobre otros colectivos que inciden en dicho desarrollo.
Fundamenta su estilo de actuación en el Sistema Educativo-Preventivo de San Juan Bosco y genera una cultura de solidaridad en todos los que se relacionan con la entidad.
Diseña y desarrolla proyectos socioeducativos, de atención residencial e inserción sociolaboral, además de programas e iniciativas de sensibilización y promoción del voluntariado social. En la actualidad atiende 81 proyectos con un total de 4.766 beneficiarios, 287 trabajadores y 196 voluntarios.
 
El centro diurno polivalente (Jaén)
Los proyectos son los siguientes:

  • Integra-T: Para menores inmigrantes no acompañados. 3 grupos con un total de 25 alumnos. Consta de un aula de español, además de un taller de interculturalidad y otro de iniciación a la informática. Nuestros alumnos son mayoritariamente de nacionalidad marroquí, actualmente 20, aunque también tenemos algunos subsaharianos (3), y Argelinos (2).
  • Escuela Ocupacional: Son dos talleres ocupacionales, en concreto uno de electricidad y otro de Herrería para un total de 21 alumnos. En estos talleres trabajamos las habilidades necesarias para acceder al mundo del trabajo o a otros cursos de formación profesional más cualificados. En la actualidad cuenta con 19 alumnos de nacionalidad marroquí, 1 senegalés y un paquistaní.
  • Programas de prevención del absentismo: Con dos proyectos y 15 alumnos

–          “Segunda oportunidad” destinado a los alumnos expulsados temporalmente de los institutos.
–          “Conductas disruptivas” destinados a trabajar en los mismos centros de primaria con los alumnos que comienzan a presentar conductas absentistas y disruptivas.

  • Curso de PCPI de fontanero y mantenedor de Equipos e climatización. Este curso lo pedimos al detectar en el barrio numerosos jóvenes que no encajaban en el sistema educativo reglado y que no solían asistir a los institutos, habiendo cumplido ya los 16 años. Actualmente tiene 15 alumnos
  • Módulo de reforma para menores con responsabilidad penal: Acoge actualmente a 21 (de las 30 plazas disponibles) menores que cumplen, en horario diurno, la medida judicial de asistencia a centro de día. También asisten a nuestro módulo menores que cumplen la medida de libertad vigilada o convivencia con equipo educativo con otras entidades.
  • Cursos de FPO de Pintor y de Fontanero. Pendiente de adjudicación

Algunas preguntas y reflexiones previas
El total aproximado de alumnos que participan en el Centro Diurno Polivalente cuando todos sus proyectos están en pleno funcionamiento es de 105. De ellos,

  • Un 43% han sido o son menores problemáticos en sus centros escolares de referencia
  • De ese porcentaje, Un 20% a su vez, son menores que han tenido problemas con la justicia. Ya han cumplido los 16 años por lo que no están escolarizados y el juez de menores les ha impuesto la asistencia a nuestro centro de día.
  • Un 57% son menores que han abandonado su hogar y su país en los bajos de un camión o en una patera, en búsqueda de un futuro mejor para ellos y su familia, con lo que ello supone de desarraigo, y en muchos casos, de exclusión y marginación en el país receptor

Además, si atendemos al tema religioso,

  • Un 57% de los menores de centro son de religión musulmana con diversos grados de vivencia y práctica.
  • Un 36% son menores indiferentes o no creyentes
  • Un 7% son menores que manifiestan creer, pero no practicar, y que su débil fe no influye demasiado en sus vidas.

Ante este panorama cabe hacerse algunas preguntas: ¿Es posible y conveniente evangelizar en este contexto?¿Cómo proponer el Evangelio a chicos y chicas que no han elegido estar con nosotros?  ¿Cómo afrontar la diversidad cultural y religiosa? ¿Cómo podremos continuar con nuestra labor en un mundo cada vez más secularizado? ¿Cómo encontrar a los educadores idóneos?
Ante la primera pregunta, no cabe, desde nuestra identidad y desde nuestro ideario, otra respuesta que la que nos da San Pablo: “Señor, tengo el privilegio de estar con los pobres, Hay de mi si no les hablo de Ti, que eres el Señor de los pobres y oprimidos”. Desde nuestra experiencia también podemos responder que si, que es posible, y que estos jóvenes que dan vida a nuestro centro tienen el derecho de escuchar alguna vez en su vida que Dios los quiere con locura.

“También los hijos de la prostitución son hijos de Dios, y si aquí, en la iglesia, alguno se siente tal, sepa que en esta Navidad Jesucristo ha venido también para él …”
Me dí la vuelta mientras el cura hablaba: la gente estaba escandalizada, pero yo no. ¡Por fin una buena noticia también para mi!  (Pablo,16 años)

 
Probablemente si no se lo decimos nosotros, jamás lo escucharán. Les estamos posibilitando ese derecho, pero no de cualquier modo.
Benedicto XVI, en su discurso dedicado a los participantes en el capítulo General XXVI  de los Salesianos les decía: “La evangelización propone a la educación un modelo de humanidad plenamente lograda, y que la educación cuando llega a tocar el corazón de los jóvenes y desarrolla el sentido religioso de la vida, favorece y acompaña el proceso de evangelización”.
Benedicto XVI, apunta al centro neurálgico de la cuestión. Don Bosco, artesano de la Educación, decía que educar “es cosa del corazón”, y es el corazón el que verdaderamente abre las puertas a la evangelización.
 

“¿Aquí os tienen que pagar más verdad? – Luis, (educador de nuestro centro) le responde: ¿por qué lo dices? – En el instituto nadie me echaba cuenta, pero aquí siento que soy alguien, anda di la verdad ¿os pagan más?
      (Silvia, 16 años, estuvo cumpliendo medida en nuestro centro durante 9 meses) )
Alberto, de 16 años, que tantos dolores de cabeza nos ha dado, al salir de la película de Don Bosco, se me acerca: “Pepelu, quiero confesarme”. Mi respuesta no puede ser otra, lo siento Alberto, te puedo escuchar, darte un buen consejo, pero yo no puedo confesarte. Si quieres hablamos con Juan Carlos, el salesiano de las barbas que conociste el otro día. Su respuesta, con una sonrisa en el rostro: “pues dile a ese cura que se vaya sentando porque hay para largo”. Alberto, que estaba en nuestro centro cumpliendo una de sus tantas medidas judiciales se confesó ese viernes. Ese día no pude dejar de recordar a Miguel Magone, que, precisamente, es el nombre del Piso de convivencia donde Alberto cumple su medida.
 

 
Silvia y Alberto son dos casos que nos muestran cómo la pedagogía del corazón, los abre a lo transcendente. En mis entrevistas con los chavales del centro rara vez renuncio a sacar el tema religioso. Sus vidas están suficientemente castigadas por el dolor, el maltrato y el abandono como para rechazar, de plano, la idea de que hay un Dios, todo bondad, que piensa en ellos con predilección.
 

… si yo quiero creer, ¿pero cómo puede existir Dios y permitir que suceda lo que está sucediendo en mi familia? (“Negri” 17 años)
 

 
Esa propuesta, evidentemente, le ha de venir de alguien significativo para su vida, de un educador que haya encontrado su cuerda sensible, esa  que, decía Don Bosco, hay en el corazón de cada joven, por muy depravado que esté. El Negri,  gitano de 17 años, que no podía encajar la existencia de un Dios con la situación cruda y real de su vida, después de un proceso, no muy largo, pidió hacer la primera comunión.
A la siguiente cuestión, respondemos también con palabras del Capítulo General XXVI, en uno de los apartados referidos a la Urgencia de evangelizar:
“Muchas de nuestras obras funcionan en un contexto multirreligioso, multiétnico y multicultural …”
“Entre éstas destaca de modo particular la confrontación con el Islam, que exige la definición de estrategias adecuadas de diálogo y de anuncio. Donde no es posible el anuncio explícito o inmediato de Jesucristo, nuestra presencia de educadores cristianos constituye un signo profético y deja sembrada una semilla preciosa de evangelización”.
Como indicamos anteriormente, un 57 % de nuestros chavales son de origen musulmán, el resto, o no creen o no practican. Esta circunstancia, lejos de dificultar el tema religioso, se convierte para mí en una fortaleza. Me resulta mucho más sencillo hablar de Dios en este contexto que en otros teóricamente más normalizados. Cuando hablo con uno de los chavales marroquíes que está al borde de la desesperación, le pregunto si está rezando, al responderme afirmativamente le digo que no desespere, que Dios no lo va a dejar tirado, que siga haciendo las cosas correctamente y confiando en su bondad infinita. También le digo que Don Bosco nos echará una mano. El sabe que hablamos del mismo Dios. Él sabe que yo soy cristiano, y que Don Bosco también lo era, pero acabamos la conversación con un abrazo sentido y un sencillo “Shucram”, que significa gracias.

“… desde que estoy con vosotros estoy comprendiendo y apreciando mejor el significado de vuestra religión”(Aziz, monitor de electricidad de la Escuela Ocupacional)
 

Partimos, por lo tanto de lo que nos une. Compartimos lo que ellos son y viven, y ellos también comparten con nosotros lo que somos y vivimos. Celebramos las fiestas musulmanas. También las fiestas cristianas y las salesianas. Tenemos el privilegio de contar con dos educadores de nacionalidad marroquí que se han enamorado, en el tiempo que llevan con nosotros, del carisma salesiano y que nos hacen de puente y de mediadores.
 
Lo más importante es que también ayudan a los menores a crecer en los valores de su propia religión, y también de la nuestra, superando cualquier tipo de desviación. Y es que no puede ser de otra manera. Solo desde el enriquecimiento mutuo podemos crecer como hermanos y como hijos de un mismo y único Dios.
 
Criterios de intervención
 

  • Desde el respeto y la motivación.
  • A través de la Propuesta y el Testimonio.
  • Desde la diversidad de proyectos, destinatarios y puntos de partida.
  • Siempre desde la interreligiosidad.
  • Pero sin renunciar a nuestra identidad y nuestra fe cristiana..

Programación pastoral
Se realiza a partir de tres documentos:

  • Guía de referencia de la Animación Pastoral en la Fundación Proyecto Don Bosco: Es un documento marco de reflexión que nos sirve como referencia para poder elaborar la programación anual. Contiene elementos de fondo: destinatarios, objetivos generales y líneas de acción, criterios de intervención salesiana, momentos de intervención, agentes de la Animación Pastoral.
  • Proceso de programación pastoral: Es un documento consensuado por los equipos educativos, y aprobado por el Consejo de Dirección, que nos marca el proceso a seguir. Contiene indicaciones prácticas: criterios y organización; modelo de programación anual; Itinerario de elaboración.
  • Programación Pastoral para cada curso: Es un documento aprobado anualmente por el Consejo de Dirección que nos sirve como elemento de entrada en las programaciones pastorales de niveles inferiores. Contiene una programación concreta que tiene en cuenta el Aguinaldo del Rector Mayor, el objetivo general de la Inspectoría, algunas propuestas de líneas de acción, y un calendario de elaboración

Cada Territorio se encarga de adaptarla, y es el coordinador territorial con su equipo, el que realiza el siguiente nivel de concreción adaptando a su vez la programación territorial a cada uno de los proyectos. No es lo mismo la programación de pastoral de una casa de acogida, en la que por ejemplo, insistimos en la bendición de la mesa a la hora de comer,  que de un proyecto de empleo, o de un proyecto socioeducativo.
 
El resto es igual que en cualquier obra salesiana, se trabajan

  • los buenos días, que en nuestro centro los da el director una vez a la semana en la asamblea general de menores y el resto de días los dan los mismos educadores.
  • Se trabajan los tiempos litúrgicos, campañas bimestrales de valores.
  • Catequesis adecuada de las expresiones de la religiosidad popular
  • Celebración de las fiestas musulmanas (Final del Ramadán, Fiesta del Cordero, Ashora) y fiestas cristianas y salesianas (castañada del día de los santos, Semana Santa, Navidad, Don Bosco, María Auxiliadora).
  • Campañas de solidaridad. Por ejemplo en las 4 casas de acogida se ha realizado una recogida de fondos para ayudar a los damnificados por el terremoto de Haití.
  • Participación en actividades de la obra salesiana, en concreto en la verbena de María Auxiliadora en la parroquia y en las actividades del centro juvenil.

Algunas sugerencias
Es necesario invertir en la formación de los educadores: Identidad e Interreligiosidad.
No basta la buena voluntad. Son necesarios los recursos y las personas. No tirar la toalla. Estos chicos necesitan más que nadie que alguien les de una buena noticia.