José Manuel Andueza
Colegio Santísima Trinitat Barcelona
“Profe, no entiendo nada. Esto es un rollo” “¿Y de esto hay que hacer clase?” Estas y otras frases similares eran las habituales entre mis alumnos de la ESO en clase de Religión. Eran… Ahora, la cosa ha cambiado un poco… Comencemos desde el inicio de esta historia, y así descubriremos cómo y por qué ha habido un pequeño cambio.
El porqué de una experiencia…
Había una vez un colegio insertado en un barrio popular de Barcelona, adosado a una parroquia desde la cual había nacido. Las necesidades del entorno, las preocupaciones de sus alumnos distaban mucho de los libros de texto.
“Estos chicos pasan de todo. Han perdido los valores. La religión no les importa…” Estas frases eran habituales entre los compañeros. Continuemos nuestra historia.
Había una vez un profesor de religión descontento de su actuación. Cuando llevaba la guitarra a clase y cantaban canciones, la cosa no iba tan mal, a veces… Pero cuando tocaba seguir el libro…, la desolación, el aburrimiento, la apatía eran compañeros habituales de pupitre. Y además, la imagen que sus alumnos tenía de Jesús, la Iglesia, la religión, cada vez era peor.
…Comienza con unas preguntas…
Llegó el momento de las preguntas. Siempre las preguntas son más importantes que las respuestas. ¿Qué está pasando? ¿Cómo es posible que aquello que motiva mi existencia, que me llena, que me hace feliz, sea visto por mis alumnos como lo más lejano a su felicidad y a su vida? ¿Qué claves nos faltan por descrubir?
Si algo no se podía perder era la fe en los alumnos y alumnas. Buscando, buscando se decidió optar por ser fieles a dos elementos:
Lo que motiva es aquello que afecta, que engarza con las emociones.
Hemos de utilizar su lenguaje, que viene marcado sobre todo por la imagen y la música.
…Y se centra en un plan
A partir de aquí y, tras dos años experimentado con 4º ESO, decidimos dar el salto e introducir el plan en toda la Secundaria Obligatoria. ¿Qué hicimos? Muy sencillo: sacamos los libros de texto y creamos nuestro propio material. Si tenemos claros los objetivos y el marco referencial del que partimos es posible y necesario.
Tomamos el currículo y comenzamos a pensar cómo hablar de esos temas desde otro lenguaje. A cada bloque de contenidos asociamos canciones que pueden resultar atractivas, que ellos pueden encontrar en youtube o escuchar en sus mp3. Asociamos también películas o escenas de películas. Importante: dichas películas en su inmensa mayoría son “comerciales”, de esas que se pueden ver en un multicine o alquilar en un DVD. Si el maestro tiene claro lo que quiere y cómo lo quiere, será capaz de conducir a través de esa imagen o esa letra que toca la fibra del corazón de los alumnos hacia la presentación del Misterio al que llamamos Padre misericordioso y la fe.
Con cada canción, cada escena, hay una ficha de trabajo que los alumnos deben presentar tras el comentario de la película o canción. Importa lo que se dialogue, lo que se descubra, lo que nos aporte.
En cada curso además de este material introducimos algún pequeño texto que posibilite el estudio y la profundización en el tema trabajado, tomado incluso de libros serios de teología pues la dinámica del curso lo está permitiendo.
Cada año revisamos las películas, canciones y textos para amoldarlos mejor a la edad y el curso concreto que nos llega. Hoy cada curso está perfectamente estructurado y ordenado de acuerdo a unos contenidos claros.
Tiempo de revisar
Tras dos años de experiencia con el proyento en toda la Secundaria podemos hacer una valoración de la misma. Así, constatamos con sorpresa y alegría:
- un mejor disposición hacia la asignatura,
- una mayor participación e implicación de los alumnos,
- la facilidad para abordar temas hasta ahora complejos como puede ser el Dios trinitario, el Espíritu Santo, la Historia de la Iglesia…
- incluso alumnos no católicos (ortodoxos, musulmanes…) solicitan estar presentes en clase,
- y, lo más importante, los alumnos se hacen preguntas. Preguntas acerca del sentido, de ellos mismos, de la fe, la cultura, el mundo…
Probablemente esto no funcione siempre. Pero de momento, hemos dado un pequeño salto del que estamos muy orgullosos en el centro. Y no sólo en el centro, pues otros colegios ya nos empiezan a llamar solicitando información e incluso algún curso acerca de cómo trabajar la religión en la ESO.
Había un vez, un pequeño centro que ofrecía su experiencia, dispuesto a compartirla, dialogarla y mejorarla.
José Manuel Andueza Soteras
Colegio Santísima Trinitat Barcelona