UNA IGLESIA CON LOS JÓVENES

1 noviembre 2011

“No estamos solos en la fe, somos eslabones de la gran cadena de los creyentes.

Ninguno llega a creer si no está sostenido por la fe de los otros y,

por otra parte, con mi fe, contribuyo a confirmar a los demás en la suya”

 (Benedicto XVI)

 
Han transcurrido dos meses del final de la Jornada Mundial de la Juventud. Esta es una distancia prudencial para valorar lo vivido y para dibujar algunas claves de futuro para la pastoral con jóvenes en nuestro país.
Educadores y pastores sabemos por experiencia que todo acontecimiento pastoral, en lo que depende de nosotros, debe situarse en un itinerario por lo menos con tres pasos: “antes, durante y después”. Respecto a la JMJ, estamos en el tercer momento y nos preguntamos: ¿Qué está pidiendo este momento a la pastoral juvenil? ¿Qué podemos hacer hoy por los jóvenes y por la pastoral juvenil?
 
Pastoral juvenil…
La pastoral con jóvenes es, en este momento para la Iglesia española, una gran oportunidad y un gran reto. La coincidencia de algunos factores internos y externos parece estar pidiendo un nuevo impulso en pastoral juvenil.
Misión Joven quiere contribuir a este momento con algunas reflexiones. De manera específica tenemos previsto dedicar dos números monográficos sobre este tema en los próximos meses.
Este número de Noviembre es el primero. Hemos querido reflejar en el título, “una Iglesia con los jóvenes”, el resumen de lo que hemos visto en Madrid durante la JMJ. Nos ha llenado de alegría ver una Iglesia en comunión que con acciones, palabras y gestos transmitía un mensaje a los jóvenes: “La Iglesia os mira con confianza y amor” (Mensaje del Concilio a los jóvenes).
Estamos convencidos que toda siembra necesita un tiempo para la maduración, por eso volveremos sobre este tema en abril de 2012. El título que tenemos previsto para ese número deja ver el reto que tenemos por delante: “PJ después de la JMJ”.
 
…en la Nueva Evangelización
La expresión Nueva Evangelización centra el horizonte que la Iglesia se propone para los próximos años. La pastoral juvenil, como no podía ser de otra manera, se sitúa también en este horizonte.
El documento de trabajo para el próximo Sínodo, Octubre 2012, dice claramente que la JMJ está en el plan de acción de la Iglesia en la Nueva Evangelización, además afirma que estas jornadas quieren ser un apoyo para la pastoral juvenil.
Muchos planes pastorales van poco a poco incorporando con mayor claridad y decisión estas jornadas, como se ha podido comprobar este año en Madrid. Será sabiduría de los educadores y pastores saber situar esta experiencia con toda su potencialidad y hacer la transición entre del encuentro extraordinario a la pastoral ordinaria.
 
… para la transmisión de la fe cristiana
Presionados entre el relativismo y el fundamentalismo, el magisterio del Papa Benedicto está siendo especialmente iluminador para el hombre de hoy, proponiendo la radicalidad de la fe como nuestra opción natural. “Deseo animar a la Iglesia (…) a seguir con fuerza y confianza el camino de la fe, que hace volver a las personas a las raíces, al núcleo esencial de la Buena Noticia de Cristo” (Benedicto XVI).
Las acciones pastorales que realizamos en pastoral juvenil tienen como finalidad posibilitar a los jóvenes el encuentro salvador con Jesucristo. Teniendo clara la finalidad, los contextos y los tiempos de la historia, nos pedirán priorizar convenientemente acciones pastorales. Cada generación vuelve a preguntarse por las acciones e itinerarios que puedan ayudar a los jóvenes a encontrarse con el Señor.
Así los expresa el documento de trabajo para el próximo Sínodo: “A estos desafíos la Iglesia responde no resignándose, no cerrándose en sí misma, sino promoviendo una obra de revitalización de su propio cuerpo, habiendo puesto en el centro la figura de Jesucristo, el encuentro con Él, que da el Espíritu Santo y las energías para un anuncio y una proclamación del Evangelio a través de nuevos caminos, capaces de hablar a las culturas contemporáneas”.
 
Sobre los artículos
Hemos pedido a Javier Igea, responsable del Departamento de Pastoral de Juventud de la CEAS, y a Monseñor José Ignacio Munilla Obispo responsable de dicho departamento una valoración pastoral sobre la reciente Jornada Mundial de la Juventud.
Javier Igea valora la importancia de la JMJ en la pastoral de la Iglesia. Ve en ella un claro kerigma con componentes antropológicos. Además, le parece que la JMJ afianza un paradigma para pastoral juvenil caracterizado por: la centralidad de Jesucristo, la importancia de un sujeto de pastoral convertido y fortalecido, y necesidad de elegir aquello que más ayude al fin para el que hemos sido creados.
Monseñor Munilla ve en la JMJ la labor incansable del Espíritu en la obra de la evangelización, la centralidad de Jesucristo en la propuesta pastoral y la alegría que brota de la fe. Propone que la pastoral juvenil procure una formación profunda en los fundamentos de la fe y desarrolle el acompañamiento espiritual.
El tercer artículo lo firmamos Rosendo Soler y un servidor. Queremos situar  la Jornada Mundial de la Juventud en la Nueva Evangelización, e iluminados por los discursos del Papa Benedicto en dicho acontecimiento eclesial, proponemos una pastoral de comunión más mistagógica, que desarrolla la pedagogía de la fe y está preocupada por fortalecer el sujeto pastoral.
 

KOLDO GUTIÉRREZ

 
 
 

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