{"id":10741,"date":"2002-05-01T22:57:08","date_gmt":"2002-05-01T20:57:08","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/?p=10741"},"modified":"2002-05-01T22:57:08","modified_gmt":"2002-05-01T20:57:08","slug":"esta-la-escuela-para-hacer-pastoral","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/esta-la-escuela-para-hacer-pastoral\/","title":{"rendered":"\u00bfEst\u00e1 la escuela para \u00abhacer pastoral\u00bb?"},"content":{"rendered":"

[vc_row][vc_column][vc_column_text]Carlo Nanni
\n 
\nPie Autor
\nCarlo Nanni <\/strong>es profesor de la Universidad Pontificia Salesiana de Roma.<\/em>
\n 
\nS\u00edntesis del Art\u00edculo
\nLas transformaciones en curso exigen \u00abnuevos modos de escuela\u00bb. En este contexto y de cara no s\u00f3lo al hoy sino tambi\u00e9n al ma\u00f1ana: \u00bfest\u00e1 la escuela para \u00abhacer pastoral\u00bb? El autor responde afirmativamente, pero siempre que se cumplan unas condiciones b\u00e1sicas: antes de nada, hay que superar los modelos inadecuados de relacionar educaci\u00f3n y pastoral, apostando por una \u00abmutua implicaci\u00f3n\u00bb basada sobre el \u00abparadigma encarnaci\u00f3n\u00bb, la actitud prof\u00e9tico-cr\u00edtica, etc.; despu\u00e9s, ser\u00e1 cuesti\u00f3n de que la pastoral atraviese toda la realidad escolar, m\u00e1s que constituir un a\u00f1adido \u2013por relevante que le queramos\u2013.
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    \n
  1. Nuevos modos de escuela<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

     
    \nCon el cambio de siglo, m\u00e1s que en los decenios anteriores, se est\u00e1 haciendo cada vez m\u00e1s evidente la transformaci\u00f3n de la cultura y de la vida \u2013privada y p\u00fablica\u2013 de j\u00f3venes y adultos. Escuela y educaci\u00f3n han estado inmersas por todas partes en un vasto proceso de repensamiento y reforma. Algo semejante ocurre con la pastoral.
    \n 
    \nq Cambio de escenarios<\/strong>
    \n 
    \nEl motivo b\u00e1sico de las transformaciones obedece, por una parte, a que est\u00e1n cambiando notablemente \u00ablos escenarios\u00bb \u2013a todos los niveles\u2013 en los que se desenvuelve tanto la existencia personal como social y el crecimiento de las personas; por otra, nos vemos pr\u00e1cticamente empujados a buscar caminos nuevos y a probar distintos procesos de autorrealizaci\u00f3n. Escenarios y din\u00e1micas vienen ahora marcados por la llamada globalizaci\u00f3n, que se expresa econ\u00f3micamente en la internacionalizaci\u00f3n de las empresas y la mundializaci\u00f3n del mercado, pero que tambi\u00e9n nos conduce a ser y vivir \u00aben directo\u00bb y simult\u00e1neamente aqu\u00ed y all\u00e1, en el propio entorno local y en el \u00e1mbito internacional y mundial.
    \nTodo el conjunto de transformaciones, m\u00e1s concretamente, guarda una estrecha relaci\u00f3n con el fuerte incremento del desarrollo inform\u00e1tico y telem\u00e1tico, con una nueva y aguda consciencia de los derechos humanos \u2013subjetivos, comunitarios y ecol\u00f3gicos\u2013, con el pluralismo y multiculturalismo de los modos de vida y cultura, con la secularizaci\u00f3n difusa y con las nuevas formas de religiosidad (new age, next age,<\/em> sectas, esoterismo) que \u2013frente a las grandes confesiones e instituciones religiosas tradicionales\u2013 subrayan primordialmente las aspiraciones y necesidades subjetivas.
    \n 
    \nq La escuela como sujeto social<\/strong>
    \n 
    \nLa escuela \u2013por su lado y en la triple consideraci\u00f3n como instituci\u00f3n\/agencia de socializaci\u00f3n (\u00abla escuela\u00bb),<\/em> promoci\u00f3n de procesos de aprendizaje (\u00abtener escuela\u00bb)<\/em> y vida escolar (\u00abir a la escuela\u00bb)\u2013<\/em> se estructura cada vez m\u00e1s seg\u00fan el principio de autonom\u00eda administrativa y de gesti\u00f3n, pedag\u00f3gica y did\u00e1ctica, en su no f\u00e1cil relaci\u00f3n con otras fuerzas e instituciones sociales.
    \nComo agente de socializaci\u00f3n, la acci\u00f3n y vida escolares est\u00e1n reguladas seg\u00fan par\u00e1metros obligados por una participaci\u00f3n jur\u00eddicamente regulada, por el conocimiento p\u00fablico de cada una de sus iniciativas y manifestaciones, por la democracia de poderes y decisiones, por la \u00ablaicidad ideol\u00f3gica\u00bb que se inspira en principios constitucionales y en las declaraciones de los derechos humanos y regulada conforme a referencias y visiones del \u00abestado de derecho\u00bb que garantizan la seguridad y libertad sociales, en fin, por instancias de igualdad de oportunidades para cuanto concierne tanto a los servicios como a la protecci\u00f3n y promoci\u00f3n del derecho al estudio, instrucci\u00f3n, formaci\u00f3n y educaci\u00f3n.
    \n 
    \nRespecto al pasado reciente, se afirma con fuerza la necesidad de que la escuela \u2013como agente de socializaci\u00f3n\u2013 no se reduzca a mera instrucci\u00f3n y preparaci\u00f3n t\u00e9cnica o profesional para situarse en el mundo. Se pide tambi\u00e9n a la escuela que oriente y eduque a la persona, que forme ciudadanos saliendo al paso, en particular, de las dificultades que atraviesan las familias y, m\u00e1s en general, de los debates que envuelven una sociedad civil lacerada por esc\u00e1ndalos, mala administraci\u00f3n y gobierno, defensa de intereses particulares; por \u00faltimo, personas y ciudadanos ante la realidad eclesial, reducida a una m\u00e1s de las numerosas instancias sociales y que muchos de sus propios miembros \u2013adem\u00e1s de la opini\u00f3n p\u00fablica\u2013 consideran teniendo como referencia una imagen oficial-estereotipada (Iglesia=jerarqu\u00eda), pr\u00e1cticas religiosas tradicionales o perspectivas de religiosidad circunstancial y ritualista.
    \n 
    \nq Centralidad de los procesos de aprendizaje<\/strong>
    \n 
    \nMirando al \u00abtener escuela\u00bb, la novedad fundamental de la pedagog\u00eda contempor\u00e1nea ata\u00f1e a la prioridad otorgada a los procesos de aprendizaje, cuya referencia marca el car\u00e1cter de las intervenciones did\u00e1cticas y de las estrategias de ense\u00f1anza. Se exige que la escuela sea capaz de ofrecer \u2013libre y creativamente\u2013 una serie de instrumentos cognitivos, de experiencias de aprendizaje, de pr\u00e1cticas sociales educativas, que consientan a los estudiantes crear su propio bagaje de conocimientos y competencias para relacionarse adecuadamente con el mundo y con los otros, para saber dar un sentido a la propia vida y opciones, para afrontar los problemas que surjan a lo largo del tiempo.
    \nYa no se pide a los estudiantes la homologaci\u00f3n con un programa preestablecido de instrucci\u00f3n o socializaci\u00f3n. De una prevalente funci\u00f3n de transmisi\u00f3n del patrimonio social de la cultura o de inserci\u00f3n positiva en el mundo del trabajo social adulto, se pasa a colocar en el centro de la escuela la proyecci\u00f3n y realizaci\u00f3n de intervenciones educativas, es decir, formaci\u00f3n e instrucci\u00f3n dirigidas al desarrollo de la persona humana y conformadas seg\u00fan los diversos contextos, orientadas seg\u00fan las necesidades del mercado de trabajo, las demandas de las familias y las caracter\u00edsticas espec\u00edficas de los sujetos envueltos en los procesos educativos; una formaci\u00f3n e instrucci\u00f3n capaces de garantizar dichos procesos, en coherencia con los fines y objetivos generales del sistema de instrucci\u00f3n y con la exigencia de mejorar la eficacia de la ense\u00f1anza y aprendizaje.
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    \nAnte tal orientaci\u00f3n, corremos el peligro \u2013no s\u00f3lo hipot\u00e9tico\u2013 de caer en una \u00abescuela-mercadillo\u00bb o \u00abescuela-bazar\u00bb, en una competencia de ofertas en torno a las cuales y seg\u00fan cuyos intereses se mover\u00edan los estudiantes y padres \u00abclientes\u00bb. A\u00fan m\u00e1s problem\u00e1tica resulta la cuesti\u00f3n de los \u00absaberes esenciales\u00bb y las competencias finales a los que irrenunciablemente debe conducir la escuela. Resta por ver c\u00f3mo se compone el marco de un sistema social integral de formaci\u00f3n en el que se unen escuelas estatales y no estatales, escuela y trabajo…; c\u00f3mo, en su sentido m\u00e1s amplio, colaboran coherentemente los diversos agentes sociales de educaci\u00f3n en la formaci\u00f3n y desarrollo cultural del pa\u00eds y sus ciudadanos.
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    \nq Escuela, comunidad que aprende<\/strong>
    \n 
    \nSi, por un lado, existe el riesgo de caer en una escuela como simple \u00aborganizaci\u00f3n\u00bb del aprendizaje social o como \u00abempresa\u00bb social de formaci\u00f3n (con el peligro a\u00f1adido de subordinaci\u00f3n al mundo econ\u00f3mico); tambi\u00e9n es cierto, por otro, que se realza \u2013sobre todo y desde muchas partes\u2013 una escuela cual \u00abcomunidad que aprende\u00bb y que hasta lo hace con \u00abformas cooperativas\u00bb (v\u00e9ase el \u00e9nfasis en el \u00abcooperative learning\u00bb). En cualquier caso, el aprendizaje tambi\u00e9n es fruto de relaciones positivas que se entrecruzan en red y con diversos niveles; algo distinto de las tradicionales y duales relaciones interpersonales entre profesor y alumno. En este sentido, la escuela es contemplada como lugar social de formaci\u00f3n y educaci\u00f3n mediante el estudio, la adquisici\u00f3n de conocimientos y el desarrollo de capacidades personales consolidadas en un ambiente de cr\u00edtica, libertad, responsabilidad y solidaridad.
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    \n <\/p>\n

      \n
    1. Pastoral y educaci\u00f3n<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

       
      \nEn toda esa \u00abempresa social\u00bb representada por la escuela, \u00bfqu\u00e9 papel juega la pastoral? La historia contiene una enriquecedora presencia tanto de la Iglesia como de cristianos en el mundo de la educaci\u00f3n y de la escuela. Una gran parte de las escuelas p\u00fablicas hunde sus ra\u00edces hist\u00f3ricas en experiencias vivas, carism\u00e1ticas y humildes de inspiraci\u00f3n cristiana que, en \u00e9poca moderna, pueden ilustrarse con santos educadores y fundadores de congregaciones religiosas especialmente dedicadas a la educaci\u00f3n de los j\u00f3venes \u00abpobres y en peligro\u00bb, como santa \u00c1ngela Merici, san Jos\u00e9 de Calasanz, san Juan Bautista de la Salle, san Juan Bosco y tantos otros u otras.
      \nEl concilio Vaticano II ha vuelto a insistir en el inter\u00e9s eclesial por la educaci\u00f3n con la \u00abGravissimun educationis; posteriormente y en numerosas ocasiones, diversos papas y la Congregaci\u00f3n para la Educaci\u00f3n Cat\u00f3lica han mostrado su inter\u00e9s no s\u00f3lo por la escuela cat\u00f3lica (1977 y 1998) o por la dimensi\u00f3n religiosa de la educaci\u00f3n en dicha escuela (1988), sino tambi\u00e9n por el \u00ablaico como testigo de la fe en la escuela\u00bb (1982).
      \n 
      \nq La escuela cat\u00f3lica<\/strong>
      \n 
      \nParticularmente, en el documento \u00abLa escuela cat\u00f3lica\u00bb \u2013de 1977, retomado en 1998\u2013 aparece descrita la imagen ideal de la escuela cat\u00f3lica, indic\u00e1ndose los elementos cualificativos de su estructura y misi\u00f3n: 1\/ Ser escuela, esto es, lugar de cultura y educaci\u00f3n; 2\/ La referencia expl\u00edcita \u2013buscada y actuada\u2013 a Cristo Maestro, as\u00ed como es propuesto por la Iglesia dentro del amplio pluralismo que caracteriza el mundo de hoy; 3\/ La inserci\u00f3n sustancial en las antiguas<\/em> y siempre nuevas<\/em> palabras de la tradici\u00f3n cristiana \u2013fe, esperanza, caridad, compromiso por la paz y la justicia, \u00e9tica y responsabilidad personal y social… para una fecunda s\u00edntesis de vida, cultura, fe y promoci\u00f3n humana en la perspectiva del Reino\u2013; 4\/ La vocaci\u00f3n popular, enraizada en el amor por los m\u00e1s peque\u00f1os y pobres; 5\/ La apertura cat\u00f3lica a cada persona, cultura y todo tipo de organizaci\u00f3n social interesada por el hombre y el desarrollo humano integral.
      \nLa escuela cat\u00f3lica est\u00e1 llamada a compartir los problemas, tensiones, signos de esperanza y responsabilidad… que alberga la escuela en nuestra sociedad y momento hist\u00f3rico. Pese a dificultades estructurales o econ\u00f3micas y pol\u00edticas o ideol\u00f3gicas, y como se\u00f1al de una consciente y creciente responsabilidad, la escuela cat\u00f3lica debe empe\u00f1arse en recrear y proponer un tipo y modos de escuela, un estilo de vida escolar que puedan resultar ejemplo y se\u00f1al de esperanza para todos.
      \n 
      \nConscientes del enraizamiento en una tradici\u00f3n educativa milenaria que brota del seno materno de la Iglesia de Cristo, sacramento de salvaci\u00f3n para el mundo, y en carismas vocacionales<\/em> espec\u00edficamente educativos, hemos de pensar en propuestas nuevas y buscar una cualidad educativa a la altura de las exigencias formativas actuales. Del mismo modo, la fundamental referencia \u00abvocacional\u00bb \u2013religiosa o laical\u2013 que motiva en \u00faltima instancia la presencia de laicos cristianos en la escuela p\u00fablica como testigos del Evangelio, invita concretamente a las escuelas cat\u00f3licas a indagar formas adecuadas para hacer de ellas un espacio de di\u00e1logo y debate m\u00e1s abiertos que los existentes en otras… por el bien y la vida de todos y para mejorar la escuela de todos.
      \n 
      \nq Relaci\u00f3n problem\u00e1tica entre fe, cultura y educaci\u00f3n<\/strong>
      \n 
      \nIndudablemente en los \u00faltimos a\u00f1os, tanto el problema de la relaci\u00f3n entre Iglesia y educaci\u00f3n como entre pastoral y escuela han adquirido nuevas connotaciones relacionadas con la m\u00e1s amplia problem\u00e1tica del sentido y justificaci\u00f3n de la presencia cristiana en el mundo o, antes de nada, con la cuesti\u00f3n de la autocomprensi\u00f3n de la Iglesia, del c\u00f3mo vive la relaci\u00f3n cultura-fe y fe-historia dentro de los permanentes cambios actuales.
      \nAnte el pluralismo y democratizaci\u00f3n, la complejidad de la nueva imagen de mundo y de hombre, la secularizaci\u00f3n-laicizaci\u00f3n y la nueva racionalidad tecnol\u00f3gico-inform\u00e1tica que han invadido la vida p\u00fablica, parece que adquieren impulso aquellas estrategias pastorales<\/em> que reaccionan \u2013m\u00e1s o menos conscientemente\u2013 contra la perdida de poder y significado social de la Iglesia y que privilegian unos planes consiguientes de reagrupamiento, de reconstrucci\u00f3n catequ\u00e9tica o, al menos, de concentraci\u00f3n en el aspecto sacramental y lit\u00fargico, en la escucha de la palabra de Dios y pr\u00e1ctica de la caridad. Especialmente por parte de la jerarqu\u00eda eclesi\u00e1stica, se enfoca todo sobre cuestiones de identidad, confesionalidad, especificidad cristiana e imagen p\u00fablica de la Iglesia. La b\u00fasqueda de seguridad ideol\u00f3gica y de relevancia social parecen dominar el paisaje de las intervenciones oficiales.
      \n 
      \nq Retorno a modelos problem\u00e1ticos de relaci\u00f3n <\/strong>
      \n 
      \nEsta predominante atenci\u00f3n a la identidad y a la relevancia institucional \u2013una especie de neo-eclesiocentrismo\u2013 puede encontrar su justificaci\u00f3n en el intento de superar una cierta polarizaci\u00f3n y punto muerto al que parec\u00eda haberse llegado tras los a\u00f1os transcurridos al amparo del Concilio: por un lado, la adaptaci\u00f3n excesiva a la sociedad hasta el punto de perder la especificidad cristiana \u2013en una especie de asimilaci\u00f3n pasiva al mundo, a la cultura y acci\u00f3n social\u2013, por otro y como contrapunto, la proclamaci\u00f3n de la separaci\u00f3n-diversidad del mundo y el correspondiente distanciamiento de la sociedad \u2013en una especie de retorno a \u00abreservas eclesiales\u00bb\u2013.
      \nRetornan circularmente, de este modo, modelos de relaci\u00f3n Iglesia-cultura \u2013y de \u00abeducaci\u00f3n a la fe\u00bb\u2013 que parec\u00edan superados por los aires surgidos del Concilio: 1\/ El modelo de la \u00abdistinci\u00f3n radical\u00bb \u2013propio de la teolog\u00eda dial\u00e9ctica\u2013 que separa claramente el mundo (puesto en el maligno)<\/em> y la religi\u00f3n (surgida de la carne) del Evangelio y la fe (productos<\/em> del esp\u00edritu); 2\/ El modelo de la \u00abcomplementariedad secuencial\u00bb que, sin embargo, distingue y pone en la base el mundo, lo humano, la cultura, como recost\u00e1ndose sobre todo ello para, s\u00f3lo despu\u00e9s, completarlo con la fe y el hecho cristiano, 3\/ El modelo de la \u00absecularizaci\u00f3n radical\u00bb, el cual estima que el Evangelio y la fe se disuelven en la plenitud humana, en la cultura y compromiso social.
      \n 
      \n <\/p>\n

        \n
      1. Entre implicaci\u00f3n, encarnaci\u00f3n, cr\u00edtica y profec\u00eda<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

         
        \nFrente a todos esos modelos, hemos de preguntarnos si tales planteamientos obedecen no s\u00f3lo a motivos sociol\u00f3gicos o a una mentalidad y sentimientos psicol\u00f3gicos nuevos, sino tambi\u00e9n al hecho de haber realizado \u00abuna predicaci\u00f3n de Dios sin referencia al mundo\u00bb (Kasper).
        \nLa urgente invitaci\u00f3n del Papa a \u00abremar mar adentro\u00bb, en los albores del nuevo milenio, intentando ser personas de esperanza para el mundo contempor\u00e1neo (cf. NMI, 1), nos empuja a pensar otros modos de relaci\u00f3n Iglesia-mundo, fe y cultura, educaci\u00f3n y fe: en la perspectiva de un modelo de \u00abmutua implicaci\u00f3n\u00bb y reciprocidad, basado en el paradigma de la encarnaci\u00f3n,<\/em> por una parte, y situado, por otra, en el horizonte trascendente de la \u00abVerdad de Dios\u00bb, del Reino y su Justicia (cf. Mt 6,33), de la plenitud de humanidad que nos manifiesta el Cristo Resucitado (cf. Ef 4.13).
        \n 
        \nq Discernimiento y b\u00fasqueda de sentido<\/strong>
        \n 
        \nGaudium et Spes<\/em> \u2013particularmente en el n. 11\u2013 exhorta a moverse en una l\u00ednea que, m\u00e1s que soportar, vive la mutaci\u00f3n e inserci\u00f3n en los procesos hist\u00f3ricos, que asume la complejidad tratando de comprender, a trav\u00e9s del discernimiento, las \u00abrazones profundas\u00bb (GS, 11: \u201cEl pueblo de Dios, movido por la fe, que le impulsa a creer que quien lo conduce es el Esp\u00edritu del Se\u00f1or, que llena el universo, procura discernir en los acontecimientos, exigencias y deseos, de los cuales participa juntamente con sus contempor\u00e1neos, los signos verdaderos de la presencia o de los planes de Dios…\u201d). A su vez, la Fides et Ratio<\/em> contempla a la fe y la raz\u00f3n como las dos alas con las que el esp\u00edritu humano es capaz de elevarse a la contemplaci\u00f3n de la verdad de s\u00ed mismo y del sentido tanto de las cosas como de su propia existencia (Introd. y n. 1). La experiencia del Concilio nos ha hecho conscientes de la leg\u00edtima autonom\u00eda de las realidades temporales (cf. GS, 36…), as\u00ed como de las m\u00faltiples mediaciones culturales con las que se expresa y est\u00e1 \u00abcodificada\u00bb la fe cristiana.
        \n 
        \nAl mismo tiempo, la multiplicidad y el pluralismo de modos de ser y vivir la vida cristiana, dentro del complejo tejido social al que se pertenece, han puesto contra las cuerdas una cierta concepci\u00f3n un\u00edvoca y absolutizada de la misma. Resulta clara y consideramos como necesaria y provechosa la exigencia de una continua \u00abpuesta al d\u00eda\u00bb, de un constante trabajo de contextualizaci\u00f3n y recomprensi\u00f3n hermen\u00e9utica.
        \nEl pluralismo constituye ya un punto sin retorno tambi\u00e9n para la vida eclesial. Mas y a\u00fan asumiendo responsablemente e integrando las aportaciones hist\u00f3rico-culturales, tampoco podemos poner entre par\u00e9ntesis la funci\u00f3n cr\u00edtico-prof\u00e9tica del cristianismo respecto a cualquiera de las verdades o valores culturalmente adquiridos y \u00abcodificados\u00bb como tales (cf. la l\u00f3gica tomista<\/em> de la \u00abaffirmatio, negatio e super-eminentia\u00bb de toda afirmaci\u00f3n conformada como \u00absabidur\u00eda cristiana\u00bb, que ha de moverse entre condivisi\u00f3n, cr\u00edtica y trascendencia).
        \n 
        \nq La encarnaci\u00f3n como paradigma b\u00e1sico<\/strong>
        \n 
        \nAsumidas la especificidad y diferencia tanto de la cultura como de la fe \u2013situadas dentro de la l\u00f3gica de la autonom\u00eda y su expresi\u00f3n escolar-civil\u2013, el modelo de la \u00abmutua implicaci\u00f3n\u00bb recibe su fundamentaci\u00f3n teol\u00f3gica del \u00abparadigma encarnaci\u00f3n\u00bb. Dios no s\u00f3lo se hace hombre y asume lo humano, sino que nos muestra \u2013en la humanidad y vida de Jes\u00fas\u2013 c\u00f3mo es en lo humano y a partir de lo humano donde resulta posible alcanzar y vivir \u00aben\u00bb Dios. Llegar a Dios, en efecto, no supone la salida de lo humano, sino que consiste en procurar m\u00e1s profundamente la plenitud y realizaci\u00f3n de la propia y com\u00fan humanidad (el \u00e1mbito<\/em> de la trascendencia es visto no s\u00f3lo como \u00absuperioridad\u00bb, sino tambi\u00e9n como \u00abprofundidad\u00bb).
        \nEl encuentro con Dios acontece \u00aben la carne\u00bb humana, en la historia humana, en el tiempo y espacio humanos \u2013reconciliados con lo eterno\u2013, en la l\u00f3gica de la libertad humana y los modos existenciales humanos \u2013ser libre, con otros, abierto a la trascendencia\u2013, realiz\u00e1ndose definitivamente en la plena humanizaci\u00f3n \u2013cuya base se encuentra en el \u00abdon\u00bb de Dios\u2013. En este sentido, sigue siendo verdad la afirmaci\u00f3n de san Ireneo de que la gloria de Dios consiste en que el hombre viva, as\u00ed como cuanto afirma la GS <\/em>en el n\u00famero 22: \u00abEn realidad, el misterio del hombre s\u00f3lo se esclarece en el misterio del Verbo encarnado\u00bb.
        \n 
        \nq Cualidad educativa de la pastoral<\/strong>
        \n 
        \nPara cuidar de este proceso de humanizaci\u00f3n y personalizaci\u00f3n del mundo, de la humanidad, de la cultura, en el horizonte de la humanidad del Cristo resucitado, entonces, la pastoral asume intr\u00ednsecamente<\/em> la caracterizaci\u00f3n educativa; no s\u00f3lo \u00abaccidentalmente\u00bb, como si solamente se tratase de \u00abaplicar\u00bb o superponer la visi\u00f3n cristiana del mundo y de la vida para arropar a las generaciones en crecimiento, como ni\u00f1os, adolescentes, j\u00f3venes, etc. La pastoral es educativa en el sentido fuerte del t\u00e9rmino: por sostener, ayudar y estimular el crecimiento en plenitud evang\u00e9lica de la humanidad para todos y conforme la medida \u2013y el don de Dios\u2013 de cada uno.
        \n 
        \n <\/p>\n

          \n
        1. \u00bfQu\u00e9 pastoral en la escuela?<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

           
          \nPor lo tanto, \u00bfpuede ser la escuela el lugar para una pastoral compartida y \u00abde encarnaci\u00f3n\u00bb como, desde el punto de vista civil y pedag\u00f3gico, lo es el crecer y aprender a vivir?
          \n 
          \nq M\u00e1s all\u00e1 de modelos reductivos<\/strong>
          \n 
          \nA la luz que lo expuesto hasta aqu\u00ed, antes de nada, hemos de retirar los escombros de aquellos puntos de vista incorrectos. Inicialmente, quiz\u00e1 debamos \u00abeducar\u00bb \u2013esto es, ayudar a crecer y madurar\u2013 o dar forma correcta a la llamada \u00abmirada pastoral\u00bb sobre la escuela. No resultar\u00eda \u00abeducado\u00bb ese modo de pensar y hacer pastoral en la escuela que la considerase como \u00abantiguo\u00bb territorio colonial, es decir y por ejemplo, una pastoral que utilizase la escuela como medio o instrumento de catequesis, sin respetar su autonom\u00eda y su naturaleza fundamental, la socio-cultural.
          \nIgualmente pobre ser\u00eda aquella acci\u00f3n pastoral limitada a ciertas intervenciones pastorales complementarias del resto de acciones escol\u00e1sticas, las cuales permanecer\u00edan en el \u00abantes de\u00bb la acci\u00f3n pastoral; un poco como ocurre con cierta pr\u00e1ctica cristiana y esa forma de cristianismo de circunstancias al que ya nos hemos referido (como sucede, por ejemplo, con las pr\u00e1cticas religiosas propuestas en algunas ocasiones del a\u00f1o escolar o con actividades complementarias extracurriculares de car\u00e1cter religioso-formativo \u2013quiz\u00e1 fuera del horario escolar\u2013 o intervenciones formativas en \u00abcircunstancias fuertes\u00bb de la vida escolar, l\u00e9ase muertes o acontecimientos extraordinarios, tipo jubileo, etc.).
          \nPor lo dem\u00e1s, ser\u00eda igualmente criticable, por la parte opuesta y en nombre de la laicidad de la escuela, proponer una escuela \u00abneutra\u00bb que no necesita \u2013y hasta ha de evitar\u2013 la presencia de la pastoral: cual si la educaci\u00f3n no formase parte del \u00abbien com\u00fan\u00bb ni tuviera que ver con el cuerpo social en cuanto tal o con cada uno de sus miembros.
          \n 
          \nq Rasgos generales<\/strong>
          \n 
          \nLa pastoral, a\u00fan reconoci\u00e9ndola y respet\u00e1ndola en su especificidad, deber\u00e1 confrontarse con la realidad de la escuela en su totalidad, a la par que esta \u00faltima habr\u00e1 de ser pastoral en todos sus aspectos. Por lo tanto y al mismo tiempo, tendr\u00e1 que ser pastoral de la \u00abescuela-instituci\u00f3n\u00bb, pastoral de la \u00abformaci\u00f3n cultural\u00bb escolar y pastoral de la \u00abvida escolar\u00bb. Pastoral, pues, de la comunidad eclesial \u2013y no s\u00f3lo de los responsables jer\u00e1rquicos\u2013, esto es, en actitud de di\u00e1logo-debate con la sociedad civil, con la econom\u00eda y la pol\u00edtica, puesto que se trata de debatir acerca de educaci\u00f3n y de escuela.
          \nEn primer lugar, sin embargo, tiene que ser \u00abpastoral en<\/em> la escuela\u00bb, contemplada en todas sus facetas, presencias y procesos, en todas las din\u00e1micas relacionales y de aprendizaje. La escuela \u2013en el conjunto, en lo espec\u00edfico y en sus componentes comunitarios\u2013 constituye un \u00ablugar pastoral\u00bb. Por tanto, deber\u00e1 ser pastoral para \u2013y de\u2013 los estudiantes, tambi\u00e9n para \u2013y de\u2013 los ense\u00f1antes, para el \u2013y del\u2013 personal directivo y no docente, para \u2013y de\u2013 los padres y familias. Adem\u00e1s y dado el car\u00e1cter de inserci\u00f3n en la zona, as\u00ed como la creciente relevancia de la escuela dentro de ella, tambi\u00e9n la pastoral escolar habr\u00e1 de desarrollarse como \u00abpastoral de conjunto\u00bb como una modalidad espec\u00edfica de la \u00abpastoral de ambiente\u00bb \u2013diversa, por ejemplo, de la parroquial o de la llevada a cabo por las distintas asociaciones\u2013.
          \n 
          \nDesde otra perspectiva y debido a la naturaleza transversal de la educaci\u00f3n escolar \u2013entrelazada fuertemente con el conjunto de los mundos vitales personales y comunitarios (vida familiar, tiempo libre, deporte, trabajo, comunicaci\u00f3n social, etc.), dentro de un complejo entrecruzamiento de educaci\u00f3n formal, informal o no-formal\u2013 la pastoral escolar se ve obligada a conectarse con la pastoral juvenil, la familiar, con la pastoral del deporte y del tiempo libre, la pastoral del trabajo y de la comunicaci\u00f3n social… \u00a1Una pastoral, pues, acorde con la \u00edndole transversal de la educaci\u00f3n!
          \n 
          \nq Especificidad educativa<\/strong>
          \n 
          \nHablar de educabilidad como car\u00e1cter intr\u00ednseco y peculiar de la pastoral en general y de la escolar en particular, obliga tambi\u00e9n a pensar y actuar la educaci\u00f3n no s\u00f3lo en el sentido de \u00abobjeto material\u00bb \u2013m\u00e1s o menos como tema<\/em>…\u2013 de la pastoral, sino tambi\u00e9n y primeramente como un \u00abmodo de ser\u00bb, como una forma<\/em> de la pastoral. As\u00ed contemplada, esta pastoral ha de caracterizarse esencialmente cual \u00abayuda personal\u00bb en el aprendizaje y crecimiento, ya sea como mediaci\u00f3n ya como est\u00edmulo o, en ciertos casos, como provocaci\u00f3n e invitaci\u00f3n a la \u00abtransgresi\u00f3n\u00bb o a la contenci\u00f3n, a la moderaci\u00f3n o a la paciencia. En el proceder concreto, antes de nada, habr\u00e1 que acoger, escuchar, respetar la vida y libertad personales; pero tambi\u00e9n abrir \u00abm\u00e1s all\u00e1\u00bb, con sentido de gradualidad y perspectiva de \u00abgrandes miras\u00bb.
          \n 
          \nA la hora de buscar conexiones y relaciones, no debemos perder de vista la peculiaridad de la educaci\u00f3n en la escuela, esencialmente enfocada desde los procesos de aprendizaje y formaci\u00f3n cultural; por lo que la pastoral ha de ser pastoral del hacer o \u00abtener escuela\u00bb. De ah\u00ed que repensar las materias, saberes y competencias a la luz de la \u00abpaideia de Cristo\u00bb (Ef 6,4) y apoyar su interiorizaci\u00f3n, impulsando las capacidades interiores de una vida personal humanamente digna, ser\u00e1 uno de los modos concretos de hacer pastoral \u00abdesde dentro\u00bb: un proceso del que son protagonistas los propios estudiantes que han de responsabilizarse de su plena formaci\u00f3n, cultura, visiones del mundo y de la vida, de su cuadro de valores, de la formaci\u00f3n c\u00edvica y profesional… no aislada sino cooperativamente, en conjunci\u00f3n con los dem\u00e1s y dentro de la comunidad educativa. Obligada ser\u00eda la cita de Freire: \u201cNinguno libera a ninguno, ninguno puede ser liberado por ninguno, nos liberamos juntos; nadie educa a nadie, nadie puede ser educado por nadie, nos educamos juntos, unos a otros\u201d.
          \nEn t\u00e9rminos generales, particularmente en las escuelas cat\u00f3licas, esta ayuda en los procesos de aprendizaje ha de configurar en concreto una provechosa interacci\u00f3n entre raz\u00f3n y fe \u2013sugerida por la Fides et Ratio\u2013 <\/em>para impulsar la b\u00fasqueda de sentido y de una cultura inspirada y orientada cristianamente.
          \n 
          \nq Peculiaridades tradicionales y carism\u00e1ticas<\/strong>
          \n 
          \nTodas las escuelas cuentan con su historia y tradiciones m\u00e1s o menos consolidadas y positivas. Las escuelas cat\u00f3licas, a\u00fan all\u00ed donde es muy reducida la presencia de miembros de las comunidades religiosas \u2013originalmente no s\u00f3lo gestoras sino nervio del equipo docente\u2013, tienen el deber de continuar, actualizar y hacer compartir el carisma educativo \u00aboriginario\u00bb de las mismas. Se trata de un recurso pastoral espec\u00edfico de cada escuela. En las escuelas salesianas, por ejemplo, la \u00abtradici\u00f3n preventiva\u00bb empujar\u00e1 la pastoral a: 1\/ Impulsar principalmente los recursos de la experiencia y las potencialidades de los sujetos en formaci\u00f3n, as\u00ed como de todos los miembros de la comunidad educativa; 2\/ Actuar \u00abcon anticipaci\u00f3n\u00bb o preventivamente, preparando y proyectando operativamente intervenciones positivas, adecuadas, pertinentes, eficaces y significativas; 3\/ Situarse en el horizonte de una raz\u00f3n, religi\u00f3n y \u00abamor educativo\u00bb a la altura del XXI, conforme a estilos de presencia y cercan\u00eda cual \u00abpadres, maestros y amigos\u00bb; 4\/ Convocar a todos los miembros de la comunidad educativa, incluidas las familias y las fuerzas civiles y eclesi\u00e1sticas de la zona, para promover personas capaces de ser \u00abbuenos cristianos y honrados ciudadanos\u00bb.
          \n 
          \nq De parte de los pobres<\/strong>
          \n 
          \nDe modo semejante, esa reconocida y especial atenci\u00f3n de la tradici\u00f3n educativa cristiana a los j\u00f3venes abandonados,<\/em> \u00aben peligro y peligrosos\u00bb<\/em> \u2013en muchos casos, con \u00ablos \u00faltimos\u00bb\u2013 orientar\u00e1 la pastoral escolar y a los cristianos que trabajan en el escuela a conceder toda su importancia a las tareas educativas de base, es decir: al tiempo y esfuerzo de una pastoral difusa<\/em> con la que ganarse la confianza de aquellos con los que entramos en relaci\u00f3n; al empe\u00f1o educativo para construir \u00abplataformas de comunicaci\u00f3n\u00bb y pasarelas<\/em> de convergencia en torno a intereses no s\u00f3lo consumistas; al duro trabajo para hacer tomar conciencia y permitir que cada uno descubra la voz sin palabras de su propia interioridad. Por semejantes caminos, se ir\u00e1 comprendiendo mejor, por un lado, el sentido de la cercan\u00eda humana, del apoyo, del testimonio y de la solidaridad con quienes padecen un cierto malestar peculiar de su edad y, por otro, la opci\u00f3n por la escuela para responder a situaciones de desventaja personal y social o acoger a inmigrantes y marginados.
          \n 
          \nq Con el \u00abestilo\u00bb de la animaci\u00f3n<\/strong>
          \n 
          \nLa animaci\u00f3n como \u00abestilo de educaci\u00f3n\u00bb, que siempre ha caracterizado la presencia cristiana en \u00e1mbitos seculares \u2013ya desde los tiempos de Diogneto\u2013 mueve a proponerla como modelo din\u00e1mico para hacer pastoral en la escuela. Aqu\u00ed es donde cobran toda su importancia el testimonio, sostenido por la competencia profesional, de los profesores cristianos, ya personalmente ya formando grupos espont\u00e1neos o en asociaciones laicales cristianas.
          \nEn este sentido, hay que favorecer estrategias de grupo, de cooperaci\u00f3n interna y externa, estrategias que susciten y aprovechen las energ\u00edas y potencialidades de la participaci\u00f3n corresponsable de todos en la escuela; lo que implica promover una formaci\u00f3n cultural humanamente digna y amplia, a la altura de la humanidad del Resucitado.
          \n 
          \n <\/p>\n

            \n
          1. Corolarios formativos<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

             
            \nPara llevar a buen termino estas perspectivas pastorales, se exige a todos una cierta \u00abconversi\u00f3n de mentalidad\u00bb, transformaci\u00f3n o \u2013cuanto menos\u2013 una actualizaci\u00f3n tanto de las convicciones y conocimientos pedag\u00f3gicos como teol\u00f3gicos. El cuidado de la formaci\u00f3n inicial y continua \u2013cultural, did\u00e1ctica, relacional, pedag\u00f3gica, espiritual\u2013 de los profesores \u2013y, en cierto sentido, de todos los miembros de la comunidad educativa escolar\u2013 es la condici\u00f3n b\u00e1sica para cualquier tarea de transformaci\u00f3n e innovaci\u00f3n educativas y, por lo mismo, pastorales.
            \n 
            \nA todos los agentes de pastoral se ha de recomendar el aprendizaje adecuado de una pedagog\u00eda escolar actualizada, lo mismo que una pertinente relectura del concilio Vaticano II a partir del hoy, particularmente en cuanto toca al laicado, la laicidad, la teolog\u00eda de las realidades temporales, el compromiso social y cultural o la relaci\u00f3n fe-cultura. Algo semejante cabr\u00eda decir sobre la profundizaci\u00f3n en temas relativos a la \u00e9tica y deontolog\u00eda profesional del educador o la educadora, sus motivaciones jur\u00eddicas, te\u00f3ricas y teol\u00f3gicas profundas. Con todo ello y a la luz del \u00abparadigma encarnaci\u00f3n\u00bb, habr\u00eda que repensar las categor\u00edas de vocaci\u00f3n, misi\u00f3n… de cara a una integraci\u00f3n y unidad entre vida, cultura, fe, acci\u00f3n, persona-rol, sujetos individuales y grupales, disciplinas e interdisciplinaridad, ciencia y sabidur\u00eda, eficacia y operatividad…
            \n 
            \nTambi\u00e9n se han de asegurar o, por lo menos, indicar lugares, tiempos, modos, ocasiones, personal de apoyo \u2013psicol\u00f3gico, cultural, espiritual…\u2013, as\u00ed como ofrecer servicios y estructuras que permitan un soporte adecuado y faciliten la acci\u00f3n y el empe\u00f1o educativo-pastoral. En la pastoral, al igual que en la educaci\u00f3n, la claridad de fines debe acompa\u00f1ar la b\u00fasqueda y propuesta de medios; entra dentro del esp\u00edritu contempor\u00e1neo de eficacia, pero tambi\u00e9n en la l\u00f3gica de la encarnaci\u00f3n cristiana. n
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            [vc_row][vc_column][vc_column_text]Carlo Nanni   Pie Autor Carlo Nanni es profesor de la Universidad Pontificia Salesiana de Roma.   S\u00edntesis del Art\u00edculo Las transformaciones en curso exigen \u00abnuevos modos de escuela\u00bb. En este contexto y de cara no s\u00f3lo al hoy sino tambi\u00e9n al ma\u00f1ana: \u00bfest\u00e1 la escuela para \u00abhacer pastoral\u00bb? El autor responde afirmativamente, pero siempre […]<\/p>\n","protected":false},"author":3,"featured_media":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"","_et_pb_old_content":"","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[683,684,94],"tags":[],"class_list":["post-10741","post","type-post","status-publish","format-standard","hentry","category-carlo-nanni","category-estudios-304","category-mision-joven-2"],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/10741"}],"collection":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/users\/3"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=10741"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/10741\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=10741"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=10741"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=10741"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}