{"id":11954,"date":"2000-05-01T08:37:05","date_gmt":"2000-05-01T06:37:05","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/?p=11954"},"modified":"2000-05-01T08:37:05","modified_gmt":"2000-05-01T06:37:05","slug":"estetica-renovada-y-compartida","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/estetica-renovada-y-compartida\/","title":{"rendered":"Est\u00e9tica renovada y compartida"},"content":{"rendered":"

[vc_row][vc_column][vc_column_text]<\/p>\n\n\n\n
S\u00edntesis del Art\u00edculo<\/strong>
\nLa apuesta del autor por una est\u00e9tica renovada y compartida se resume en el objetivo global de \u00abhacer de este mundo un espacio m\u00e1s habitable\u00bb. Contemplado en el \u00e1mbito del\u00a0Don,<\/em>\u00a0de lo gratuito y libre, el arte nos conduce a los terrenos de la belleza y de lo bello, de lo trascendente. El art\u00edculo se detiene particularmente a considerar actitudes vinculadas tanto al artista creyente como a la educaci\u00f3n y celebraci\u00f3n de la fe. Tras una cr\u00edtica sin contemplaciones a la est\u00e9tica en que vive y por la que apuesta la Iglesia, presenta el horizonte de un nuevo compromiso con un arte m\u00e1s solidario y libre.
\n 
\n\u00c4\u00a0Siro L\u00f3pez<\/strong>\u00a0\u2014pastoralista, pintor y actor\u2014 dirige el Centro Art\u00edstico \u00abSoma\u00bb y forma parte del Consejo de Redacci\u00f3n de \u00abMisi\u00f3n Joven\u00bb.<\/em>
\n <\/td>\n<\/tr>\n<\/tbody>\n<\/table>\n

 
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\nPara emprender toda una labor de restauraci\u00f3n es necesario un afinamiento de nuestro propio concepto est\u00e9tico que nos impulse a un compromiso humanizador\u00a0en el contacto con los j\u00f3venes; expresado de forma sencilla, pero en su esencia:\u00a0hacer de este mundo un espacio m\u00e1s habitable<\/em>.
\nLa preocupaci\u00f3n por la est\u00e9tica no es una cuesti\u00f3n de \u00abadornos bonitos\u00bb en fechas navide\u00f1as o marianas, sino algo mucho m\u00e1s serio y transcendente que afecta a toda nuestra percepci\u00f3n de la vida y de la persona, del mundo y del mismo Dios.
\nUna\u00a0determinada<\/em>\u00a0est\u00e9tica nos llevar\u00e1 a considerar a quienes tienen una piel negra, como seres que no merecen el respeto y la consideraci\u00f3n de su tierra, su cultura e, incluso, su propia vida. Una determinada est\u00e9tica har\u00e1 que, en beneficio de la t\u00e9cnica y un mal entendido desarrollo \u2014eso s\u00ed, con un buen dise\u00f1o y pintado de verde\u2014, se arrasen selvas, cielos, mares y profundidades.
\nUna\u00a0determinada<\/em>\u00a0est\u00e9tica hablar\u00e1 del Dios cristiano como el \u00fanico, verdadero y Todopoderoso, definido y ya sabido. Una determinada est\u00e9tica har\u00e1 que la Iglesia predique un continuo mal en los otros: en la falta de democracia de determinados pa\u00edses, en la marginaci\u00f3n de la mujer, en el consumismo de pa\u00edses industrializados…, pero siempre se ver\u00e1 ella misma bellamente reflejada. Una determinada est\u00e9tica impedir\u00e1 celebrar nuestra experiencia de fe con los lenguajes de la vida y del coraz\u00f3n, haciendo que todo se reduzca a normas lit\u00fargicas envasadas en formol. En definitiva, una est\u00e9tica que se cree a s\u00ed misma, inmaculada, tan blanca y sin tacha que carece de imagen.
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\nPor el contrario, si nos fijamos en Jes\u00fas desde su propia capacidad expresiva, en \u00e9l se dio cumplimiento de forma plena lo que entendemos por una est\u00e9tica humanizadora. Fue un artista de los caminos polvorientos, con un esp\u00edritu independiente y libre, que supo hacer de su mensaje, bellas y seductoras im\u00e1genes. Sus obras tocaban el coraz\u00f3n y escandalizaban la raz\u00f3n. Su vida fue ante todo belleza interpelante, y nos hizo entrar en la po\u00e9tica de la fe como ninguno. Sus par\u00e1bolas y signos fueron la expresi\u00f3n y el anuncio del Reino. Sus comidas y banquetes fueron verdaderas inauguraciones de lo transcendente. Lograba unificar lo sumamente complicado en un s\u00edmbolo e induc\u00eda a so\u00f1ar en lo a\u00fan no germinado.
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\nComo creyentes, no podemos ser indiferentes ante un tema tan esencial como es el de la est\u00e9tica, que lo empapa todo y que determina todas nuestras acciones y pensamientos a trav\u00e9s de la mirada: una mirada limpia, transparente, brillante, conquistadora, emprendedora, respetuosa, sincera, despierta, acogedora, contemplativa… o por el contrario, una mirada ojerosa, triste, inquisidora, manipuladora, falsa, que no perdona, que adultera la realidad y que, en definitiva, divide. Aprender a mirar y ver el mundo fue la genialidad m\u00edstica de San Juan de la Cruz, de Antonio Machado, de Van Gogh, o del actual fot\u00f3grafo Sebasti\u00e1n Salgado. Y es que la Belleza, aquella que permanece incluso en los d\u00edas de desolaci\u00f3n y fr\u00edo, no es otra cosa que la vida vivida en plenitud, hermanada con el amor, la verdad y la justicia.
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\nComo ya bien sabemos, el Reino de Dios no es un territorio neutral donde habitan todos los bienes, sino un nuevo orden de las cosas que no tiene fronteras. Evangelizar y servir a Dios es promover y defender los derechos de hombres y mujeres y en especial de los pobres, esa gran mayor\u00eda ignorada. La belleza no puede ser tal si para enmarcarse en una pared requiere pisotear al hombre mismo que la contempla o a la naturaleza que la inspira. A la larga, ser\u00e1 una mera imagen oscurecida por los barnices de unos pocos (ll\u00e1mense burgueses, t\u00e9cnicos, autoridades, puritanos, eclesi\u00e1sticos o visionarios), afanados en ocultar su verdadero rostro.
\nQuiz\u00e1s cueste entenderlo, pero el verdadero arte anida en el coraz\u00f3n y no en la raz\u00f3n; por eso no puede haber reglas objetivas de gusto para determinar por conceptos lo que ha de ser bello. Todos, al nacer, hemos recibido una capacidad para expresarnos, al igual que todos y todas hemos recibido una misma capacidad para amar.
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\nEl arte pertenece al sistema del\u00a0Don,<\/em>\u00a0gratuito y libre. El arte es el fundamento de toda sacramentalidad. Cuando algo no se puede poseer, se pinta; cuando algo no se puede besar, se hace melod\u00eda; cuando algo no se puede hablar, se danza; cuando algo no se puede resucitar, se hace verso.
\nNuestra capacidad creadora, que nos ha sido regalada, ha de integrarse en todo aquello que nos rodea, en nuestro propio ser y en nuestra praxis pastoral, de forma integradora. La naturaleza y el individuo se acompa\u00f1an en un proceso de b\u00fasqueda y de desnudez, de libertad y de respeto, de sinceridad y de perd\u00f3n. Se constata que la\u00a0Revelaci\u00f3n<\/em>\u00a0o la inspiraci\u00f3n (ambas son hermanas), se da tanto en el insecto como en la gran constelaci\u00f3n, en el catedr\u00e1tico como en la madre, en el pintor como en el jardinero. La belleza lo transciende y lo empapa todo. Su esp\u00edritu acaricia todo atisbo de vida.
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<\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a>1. Est\u00e9tica transcendente<\/h3>\n

 
\nEmpecemos por donde m\u00e1s duele. Dios es bello y la Iglesia lo est\u00e1 ocultando. De ah\u00ed la importancia de despolvorear el concepto de belleza para que nos ayude a una renovada compresi\u00f3n de la fe cristiana: \u201cSin una evaluaci\u00f3n teol\u00f3gica positiva de la belleza no hay motivo para deleitarse en Dios ni raz\u00f3n convincente para amarle\u201d[1]<\/a>. La belleza no puede estar ausente en nuestro mensaje de Buena Noticia, pues dejar\u00eda de serlo.
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\nNo s\u00f3lo es necesario renovar el concepto de belleza sino tambi\u00e9n aquello que entendemos por artista. Esas personas especiales, besadas por las Musas, que al igual que les sucede a los santos, mientras habitan aqu\u00ed abajo se le desprecia o se les endiosa y llegada la muerte, se les coloca en altares inaccesibles. Pensemos que ni santos ni artistas son modelados con otra arcilla. Todos y todas somos creados por las mismas manos del Gran Artista para continuar su labor creadora. Toda persona por el hecho de ser persona est\u00e1 llamada a la interrelaci\u00f3n con el otro, a comunicarse mediante la gran diversidad de lenguajes en todos sus \u00e1mbitos (literario, musical, corporal, pl\u00e1stico, afectivo, l\u00fadico, y un largo etc\u00e9tera) y a esas manifestaciones las llamamos\u00a0\u00abarte\u00bb.<\/em>\u00a0Me atrever\u00eda a definir la expresi\u00f3n art\u00edstica como la plasmaci\u00f3n del sentimiento. \u201cEl arte es el reino del sentimiento y, dentro de la constituci\u00f3n de ese reino, el pensamiento s\u00f3lo puede habitar a lo plebeyo y vulgar, s\u00f3lo puede representar la vulgaridad\u201d[2]<\/a>. \u00bfAcaso se puede dar el caso de una persona que se niegue a s\u00ed misma la capacidad de expresar lo sentido?
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\nSiempre est\u00e1 sobre el tapete la pregunta de si se nace o se hace un artista. Considero \u00e9ste, un planteamiento desajustado, injusto y excluyente. Por de pronto todos nacemos y todos nos hacemos… en ese crecimiento lento y cotidiano de la maduraci\u00f3n de la persona.
\nEn dicho proceso, es l\u00f3gico que destaquen determinadas personas que por su sensibilidad especial o formaci\u00f3n art\u00edstica, nos cautivan en su poder de transcender lo real. A estos seres de coraz\u00f3n abierto, de pupilas dilatadas, de manos creadoras, les solemos llamar \u00abartistas\u00bb; pero me parece importante destacar que en esta labor no queda nadie excluido, nadie queda apartado en este arte de la vida. Ni mujeres, ni homosexuales, ni pobres, ni africanos, ni siberianos… ni tan siquiera los ni\u00f1os o los enfermos ps\u00edquicos[3]<\/a>. \u00a1D\u00f3nde quedan las risas ir\u00f3nicas e insultantes hacia toda manifestaci\u00f3n art\u00edstica que proced\u00eda de otras culturas llamadas \u00abprimitivas\u00bb y que hemos tenido que silenciar con cierto rubor ante el descubrimiento y la influencia masiva en el arte contempor\u00e1neo!
\nDesde una visi\u00f3n mucho m\u00e1s amplia, todos hemos de considerarnos artistas. \u00a1Qu\u00e9 sentido tendr\u00eda mi ser si no fuese capaz de transcender! \u00a1Qu\u00e9 sentido tiene la vela que permanece apagada! Deja de ser vela si no alcanza a estar encendida, dej\u00e1ndose consumir en su tarea de \u00abdar a luz\u00bb. A toda criatura se le ha concedido el mismo don de expresarse en la diversidad de formas, que una vez m\u00e1s nos enriquece. Son artistas tanto el que en un determinado momento plasma una obra art\u00edstica, como el que la contempla en su profundidad. \u00c9se es el gran misterio de la fecundaci\u00f3n art\u00edstica que, en su desvelamiento, requiere de la excitaci\u00f3n de todo el ser. Ambos se necesitan. La obra de arte no se consuma hasta que no es contemplada.
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\nDe ah\u00ed que cuando convertimos el arte en una cuesti\u00f3n de \u00e9lite y de unos pocos elegidos, hacemos de la belleza un arma de alienaci\u00f3n. Repetidas veces Ortega y Gasset alude a ello, afirmando que: \u201cEl arte joven, con s\u00f3lo presentarse, obliga al buen burgu\u00e9s, ente incapaz de sacramentos art\u00edsticos, ciego y sordo a toda belleza pura […]. La masa se siente ofendida en sus derechos del hombre por el arte nuevo, que es un arte de privilegio, de nobleza, de nervios, de aristocracia instintiva. Dondequiera que las j\u00f3venes musas se presentan la masa las cocea\u201d[4]<\/a>.
\nEn esta est\u00e9tica transcendente \u2014aunque a algunos les pueda parecer mentira\u2014, tambi\u00e9n est\u00e1 presente el juego: esa capacidad l\u00fadica de la vida que nos permite transcender la realidad, que encauza nuestra fantas\u00eda y nuestra capacidad de so\u00f1ar. Juego… desde ese Dios revelado como \u00abAbb\u00e1\u00bb que nos interpela como adultos, para nacer de nuevo, para hacernos ni\u00f1os en su disposici\u00f3n creadora. Lo est\u00e9tico como juego educativo para la libertad y lo transcendente. Ya el poeta y dramaturgo Schiller afirmaba que \u201cla belleza, como consumaci\u00f3n de su humanidad, ni puede ser exclusivamente mera vida […], ni puede ser exclusivamente esp\u00edritu […]: es el esp\u00edritu de ambas tendencias, esto es, la tendencia al juego. Este nombre lo justifica plenamente el uso ling\u00fc\u00edstico, que suele designar con la palabra juego todo lo que no es ni subjetivamente ni objetivamente azaroso, y sin embargo no obliga ni exterior ni interiormente\u201d[5]<\/a>.
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\nQuiz\u00e1s por eso, la Iglesia se ha desmarcado de la sensibilidad est\u00e9tica, al perder su esp\u00edritu l\u00fadico, su capacidad de juego, de alegr\u00eda, de sorpresa, de b\u00fasqueda, de sencillez… Se han tomado tan en serio las cosas de Dios que se han momificado, desvirtuado. En demasiadas manos, Dios se ha hecho cad\u00e1ver, discurso ideol\u00f3gico, puro artificio interesado, pieza de engranaje en una descomunal estructura. De este modo, ni procede ni existe lugar para la belleza. Solamente se dejan espacios para el almacenamiento de glorias y recuerdos pasados.
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\nEntramos en algo m\u00e1s concreto, y lo hacemos con enunciados sint\u00e9ticos.
\nNecesitamos impulsar una acci\u00f3n pastoral, especialmente en el mundo juvenil, sirvi\u00e9ndonos de unos lenguajes que nos posibiliten un entendimiento y \u00abun compartir\u00bb desde realidades que nos interpelan. Esta acci\u00f3n, desde una sensibilidad est\u00e9tica y comprometida, no puede ignorar la riqueza hist\u00f3rica de un pueblo creyente que ha logrado expresarse de muy diversas formas a lo largo de veinte siglos. Este largo recorrido nos permite disponer, adem\u00e1s de un ampl\u00edsimo patrimonio, de una gran experiencia… si logramos aprender de ella.
\nTeniendo esto en cuenta, nos tenemos que preguntar: \u00bfsi existe un arte de hoy, por qu\u00e9 hemos de recurrir a hablar con Dios y de nuestra experiencia con \u00c9l a trav\u00e9s del arte de ayer? No tiene sentido, a no ser que vivamos anclados en un puerto deshabitado.
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\nA menudo se ha planteado la cuesti\u00f3n de si hay un lugar para el arte dentro del \u00e1mbito cristiano. La pregunta es: \u00bfnecesitamos el arte? Ya Pablo VI supo dar en el clavo con gran valent\u00eda y claridad en su precioso discurso a los artistas romanos en 1964, repetido \u00faltimamente por Juan Pablo II: \u201c\u00bfTendremos que decir la gran palabra, que por lo dem\u00e1s ya conoc\u00e9is? Tenemos necesidad de vosotros. Nuestro ministerio tiene necesidad de vuestra colaboraci\u00f3n, pues, como sab\u00e9is, nuestro ministerio es el predicar y hacer accesible y comprensible, m\u00e1s a\u00fan, emotivo, el mundo del esp\u00edritu, de lo invisible, de lo inefable, de Dios. Y en esta operaci\u00f3n, que trasvasa el mundo invisible en f\u00f3rmulas accesibles, inteligibles, vosotros sois maestros […]. Vuestro arte consiste precisamente en recoger del cielo del esp\u00edritu sus tesoros y revestirlos de palabras, de colores, de formas, de accesibilidad… Y si nos faltara vuestra ayuda, el ministerio ser\u00eda balbuciente e incierto\u201d[6]<\/a>.
\n 
\nBuscamos al artista que trabaja dentro de la sociedad y que participa de esta manera en la construcci\u00f3n de una vida m\u00e1s llevadera, profunda, apasionante y rica, en un sentido espiritual.
\nEl artista no puede esperar pasivamente a que el mundo se renueve, la crisis se resuelva y sean trazados unos nuevos principios. Tenemos que participar de la vida de nuestro tiempo. De hecho, tal vez el artista se encuentre en la posici\u00f3n m\u00e1s dif\u00edcil, dado que el esp\u00edritu de la deshumanizaci\u00f3n y de la desesperaci\u00f3n, se\u00a0fortalece<\/em>\u00a0en la tradici\u00f3n del arte de vanguardia. Los nuevos artistas j\u00f3venes se hallan en un lugar crucial. Tienen que formar parte de este movimiento, un movimiento que no tiene organizaci\u00f3n, que no tiene nombre y, que en definitiva, se encuentra a la deriva.
\nNo deber\u00edamos pensar que esto sea algo f\u00e1cil y sencillo. Hacer este trabajo es dif\u00edcil, adem\u00e1s de laborioso. Hay que sacrificarse, hacer cosas que otros consideran irrelevantes. Puede significar hallarse en una postura econ\u00f3mica d\u00e9bil o vulnerable. Ya Nietzsche apuntaba sobre el peligro de perderse a s\u00ed mismos como artistas: \u201cLos artistas empiezan a valorar y a sobrevalorar sus obras cuando dejan de tenerse respeto a s\u00ed mismos. Su fren\u00e9tico af\u00e1n de fama vela a menudo un triste secreto. La obra no forma parte de su regla, ellos la sienten como su excepci\u00f3n. Tambi\u00e9n quieren quiz\u00e1 que sus obras intercedan por ellos; quiz\u00e1 que otros se enga\u00f1en sobre ellos. Finalmente: quiz\u00e1 quieren ruido en ellos, para no o\u00edrse m\u00e1s a s\u00ed mismos\u201d[7]<\/a>.
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\nNecesitamos urgentemente una teor\u00eda del arte, con sentido com\u00fan, que sirva de gu\u00eda al artista, sin ser por ello una colecci\u00f3n legalista de reglas, sino que realce su libertad. Pero la ayuda que ofrecen los l\u00edderes o los intelectuales y te\u00f3logos es peque\u00f1a. Cada artista se ve obligado a desarrollarse por s\u00ed mismo como tal, en una soledad no deseada, lo que \u2014con demasiada frecuencia\u2014 provoca en los artistas creyentes deserciones silenciosas o, con el paso del tiempo, una indiferencia interior. En cierto modo, es una forma de protesta sosegada que resuena vigorosamente desde hace tiempo; s\u00f3lo que no es escuchada en las filas eclesiales.
\nDe modo que si queremos que el artista participe en la totalidad de la vida cristiana \u2014no \u00fanicamente para encargos de altar\u2014, si admitimos que sin los artistas y su obra, no es s\u00f3lo improbable sino casi imposible una reforma y una fe expresada y vivida, entonces, tenemos que pensar en ciertos compromisos y responsabilidades.
\n\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0<\/em><\/p>\n

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\nCreo necesario aplicar en esta ocasi\u00f3n las aportaciones de Leonardo Boff[8]<\/a>\u00a0<\/sup>en relaci\u00f3n a los intelectuales, pero que se pueden trasladar perfectamente a la tarea de un cient\u00edfico, artista o sacerdote. Seg\u00fan \u00e9l, tendr\u00edamos los procesos que siguen.
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\nn\u00a0\u00abAcercamiento para un posterior distanciamiento\u00bb<\/strong>
\nEn el caso de los artistas cristianos se requiere un conocimiento y estudio, sin necesidad de llegar a una especializaci\u00f3n, de las nuevas aportaciones teol\u00f3gicas, de la realidad social, de la problem\u00e1tica de la mujer, de la ecolog\u00eda… No se puede vivir fuera de la aldea global. Al igual que se dice de los monjes, el artista no puede cantar o pintar sin tener al lado el peri\u00f3dico y un espacio de silencio; ah\u00ed est\u00e1 su verdadera paleta de colores.
\nEl artista no es hijo \u00fanicamente de su tiempo, sino de todos los tiempos; no considera la realidad exclusivamente desde el juego de intereses del presente, sino en sus ra\u00edces pasadas y en su apertura al futuro. De ah\u00ed la importancia de conocer el pasado hist\u00f3rico-art\u00edstico del legado cristiano.
\nPosteriormente, se ha de dar en el artista un cierto grado de desvinculaci\u00f3n de la realidad en la que vive; se distancia de ella y la contempla desde una visi\u00f3n m\u00e1s alta, para de esa forma tener un mayor conocimiento de ella; supera el aislamiento que le puede provocar su excesiva especificidad y especializaci\u00f3n en el campo art\u00edstico. Esto s\u00f3lo puede realizarse si antes ha estado inmerso de forma consciente en el contexto en el que vive.
\nY, debido a la mencionada distancia, el artista tiene la posibilidad de un pensamiento est\u00e9tico y social no distorsionado. Para pasar a lo que ya bien afirmaba Nietzsche: \u201cEl autor tiene que callar la boca cuando su obra abre la suya\u201d[9]<\/a>.
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\nn\u00a0\u00abCr\u00edtica\u00bb<\/strong>
\nTambi\u00e9n son esenciales al artista la reflexi\u00f3n independiente y la libertad. Necesita de la libertad como el pez que, sin extraviarse, nada por un mar cuyo fondo prescinde de caminos y senderos marcados. La libertad vive hermanada con la creaci\u00f3n. Se necesitan mutuamente. Esto hace que el artista sea esencialmente un cr\u00edtico. Quiz\u00e1s por eso no son bien recibidos en una Iglesia temerosa y a la defensiva de la nueva cultura. Sin la cr\u00edtica, el artista es un pseudoservidor del\u00a0intellectus<\/em>\u00a0en funci\u00f3n de una ideolog\u00eda fara\u00f3nica. El mejor ejemplo de lo dicho es el arte desarrollado al servicio de una Iglesia aliada descaradamente con el poder y gustosa de la suntuosidad, o la est\u00e9tica avasalladora de las dictaduras y reg\u00edmenes totalitarios, de uno u otro tinte.
\nLa cr\u00edtica no es necesariamente destructiva; el momento \u00abacrisolador\u00bb no es m\u00e1s que un momento necesario en el proceso de construcci\u00f3n de una visi\u00f3n m\u00e1s plena que la experimentada por el grupo.
\n 
\nn\u00a0\u00abCompromiso\u00bb<\/strong>
\nEl verdadero artista no vive en las nubes, sino que es un actor social que participa de la composici\u00f3n de fuerzas sociales y posee su lugar social desde el que elabora su visi\u00f3n; es aqu\u00ed donde se sit\u00faa su compromiso hist\u00f3rico.
\nEn una entrevista realizada al joven pintor \u00abmat\u00e9rico\u00bb\u00a0Barcel\u00f3<\/em>\u00a0afirmaba: \u201cSi yo no tuviera un mensaje que comunicar no me tirar\u00eda 14 horas pintando. Un mensaje no es una palabra, sino algo que me parece importante, una especie de afirmaci\u00f3n. Algo que tiene relaci\u00f3n con la vida y con la muerte. Las cosas que me interesan no se pueden decir con palabras. Las cosas interesantes son las que producen ideas no las que son producto de ideas\u201d[10]<\/a>.
\nPregunt\u00e9monos tambi\u00e9n por qu\u00e9 el\u00a0Guernica\u00a0<\/em>de Picasso es una de las obras m\u00e1s representativas del siglo XX. No es precisamente por sus grandes dimensiones (349,3 x 776,6 cm), ni por los tres \u00fanicos colores empleados (blanco, azul y negro), sino ante todo por el\u00a0contenido\u00a0<\/em>en su forma \u00abpicassiana\u00bb. \u201cGuernica<\/em>\u00a0se convirti\u00f3 pronto en un cuadro mito, casi en un eslogan o en una consigna sobre la negada libertad del hombre\u201d[11]<\/a>; en \u201cmanifiesto mundial contra la brutalidad y el dolor organizado\u201d[12]<\/a>.
\nEs una ingenuidad pensar que pueda existir el artista puro, inmerso en una burbuja de cristal, preocupado de una est\u00e9tica desvinculada de la realidad en la que vive y de las fuerzas sociales que le envuelven. El problema no radica en querer estar desvinculado, pues nunca ser\u00e1 verdaderamente posible. Sino que todo artista \u2014lo queramos o no\u2014, con su pr\u00e1ctica simb\u00f3lica refuerza la conservaci\u00f3n o reforma del\u00a0status quo<\/em>\u00a0o bien, desde su plasmaci\u00f3n de la belleza, secunda los movimientos portadores de alternativas sociales.
\n <\/p>\n

<\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a><\/a>5. Arte solidario, arte marginal<\/h3>\n

 
\nComo creyentes, con mayor raz\u00f3n, hemos de tratar de ser coherentes con nuestros planteamientos evang\u00e9licos, para anunciar lo que a\u00fan no ha tenido lugar pero que es posible, para ser factores de anticipaci\u00f3n, para ser ut\u00f3picos en lo real, para apostar por una est\u00e9tica humanizadora, para desvelar una Belleza marginada.
\nEl hombre y la mujer expresan la Belleza cuando se realizan como tales, cuando viven desde lo que son, cuando desde su fragilidad y su riqueza logran la realizaci\u00f3n de sus derechos, cuando en sus creaciones anida el respeto, la sinceridad y la justicia. No hay mejor artista que aquel que potencia la \u00absalida de s\u00ed\u00bb en su relaci\u00f3n con el otro. En realidad, el arte nos reconcilia, reduce nuestros miedos, nos completa, nos comunica. De esta manera, el arte se convierte en una de las herramientas m\u00e1s v\u00e1lidas de intervenci\u00f3n pac\u00edfica en la marcha de la historia. La capacidad para alimentar el respeto, la escucha, el di\u00e1logo, la expresi\u00f3n, la interpelaci\u00f3n… se hace imprescindible en toda persona, en todo colectivo y en toda naci\u00f3n. En realidad estamos hablando de contemplaci\u00f3n y de creaci\u00f3n. A modo de ejemplo, fij\u00e9monos en las obras del pintor\u00a0Guayasam\u00edn\u00a0<\/em>en donde se refleja la humanidad maltratada del indio latinoamericano, el cuerpo dolorido de la mujer, las manos del terror y de la oraci\u00f3n… \u00c9l mismo llegaba a decir que \u201cPintar es rezar. Pintar es gritar\u201d[13]<\/a>.
\n 
\nNo podemos hacer de la belleza algo excluyente y elitista, incluso insultante[14]<\/a>, en la medida que el arte sea de aquellos que poseen los medios econ\u00f3micos para la compra, clasificaci\u00f3n y prostituci\u00f3n del arte. Es entonces cuando el arte se convierte en instrumento camuflado de poder. Hemos de ser rebeldes con la esclavitud de un arte en venta y subastado para unos pocos. La Belleza, si es tal, es precisamente porque no es poder, imposici\u00f3n o exigencia, sino\u00a0gracia<\/em>,\u00a0presencia gratuita<\/em>\u00a0y gratificante<\/em>. Desde y por la gratuidad de la belleza mantiene la bondad su fuerza de atracci\u00f3n y la verdad su fuerza concluyente. En palabras de Hegel: \u201cEl arte no est\u00e1 destinado a una minor\u00eda de sabios o eruditos; se dirige a la naci\u00f3n entera. Sus obras deben hacerse comprender y gustar por s\u00ed mismas, no de manera rebuscada […]. El deber del artista es colocar la idea que constituye el fondo de su obra en armon\u00eda con el esp\u00edritu de su siglo y con el genio propio de su naci\u00f3n\u201d[15]<\/a>. Tambi\u00e9n William Morris lo dir\u00e1 de forma convincente: \u201c…No quiero arte para unos pocos, como tampoco educaci\u00f3n para unos pocos, o libertad para unos pocos\u201d[16]<\/a>.
\n 
\nEl arte que nace de dentro se hace de dif\u00edcil asimilaci\u00f3n para quienes desean silenciar la grandeza de lo humano. Los sistemas autoritarios y las grandes estructuras dominantes intentar\u00e1n servirse de todo tipo de estrategias para doblegar todo atisbo de sensibilidad hacia lo marginal. Siguen molestando aquellas personas, profetas o artistas de la vida, sensibles a la selva amaz\u00f3nica, a las ballenas, a los derechos de una infancia esclavizada y explotada, a la igualdad de las mujeres, al respeto de las conciencias, a la acogida de los enfermos de sida, a la libertad de expresi\u00f3n y b\u00fasqueda de la verdad. Sigue molestando a unos pocos la belleza de unos muchos silenciados y marginados.
\n 
\nPara el ofuscamiento de dicha sensibilidad delatadora, se utiliza de forma consciente un arte pat\u00e9tico y plastificado, acorde a una moda \u2014definida a s\u00ed misma en relaci\u00f3n con todo aquello que pasa de moda\u2014, que proclama gustos generalizados e impuestos en una sociedad de consumo, donde la est\u00e9tica se hace comestible, a base de aditivos verdaderamente vomitables. Es curioso observar en la historia del arte c\u00f3mo la inspiraci\u00f3n art\u00edstica ha estado m\u00e1s incentivada cuanto m\u00e1s grande ha sido la dificultad y, por el contrario, cuanto mayor ha sido el aburguesamiento, m\u00e1s superfluas y banales han sido las manifestaciones art\u00edsticas. Quiz\u00e1s de esta manera, dando posibilidad de imagen a los sin palabra, podamos renovar y dar sentido al arte actual. Es necesario que se d\u00e9 una profunda renovaci\u00f3n \u2014encauzada, si queremos\u2014, aunque de forma libre y sincera, encarnada en la realidad.
\n 
\nDejemos que fluya nueva sabia de toda la gran diversidad de culturas que nos rodean y que nos enriquecen en su diversidad. El mejor ejemplo de todo esto lo podemos observar en el campo de la m\u00fasica, en donde la multiculturalidad ha enriquecido los registros sonoros, los ritmos y la fusi\u00f3n de nuevas m\u00fasicas, en un acercamiento \u00e9tnico y cultural. Es de desear que algo parecido suceda con el resto de los lenguajes art\u00edsticos.
\nLa evangelizaci\u00f3n no puede permanecer pasiva ante tales manifestaciones. Se hace imprescindible una revisi\u00f3n de la pastoral que se adapte a la diversidad y pluralidad culturales de los pueblos. La evangelizaci\u00f3n de la cultura lleva a un proceso de inculturaci\u00f3n del Evangelio. La evangelizaci\u00f3n debe contribuir a fortalecer estas identidades culturales, comprometiendo la voluntad de la Iglesia en apoyar la promoci\u00f3n humana, respetando, valorando y promocionando la expresi\u00f3n cultural y art\u00edstica de todos los pueblos.
\n <\/p>\n

<\/a><\/a><\/a>6. Celebraciones con j\u00f3venes, todo un arte<\/h3>\n

 
\n\u00bfQu\u00e9 es lo que nos permite hablar de la necesidad de una renovaci\u00f3n est\u00e9tica para \u00abandar por casa\u00bb dentro de los habit\u00e1culos pastorales? Como bot\u00f3n de muestra y a vista de p\u00e1jaro, revisemos nuestras \u00faltimas intervenciones art\u00edsticas en templos, capillas, objetos lit\u00fargicos, revistas, portadas de libros, v\u00eddeos, grabaciones musicales, programas televisivos… Quiz\u00e1 nos demos cuenta de la ausencia lamentable de una est\u00e9tica sincera y acorde con nuestro siglo y nos encontremos con el\u00a0Kitsch<\/em>\u00a0est\u00e9tico-religioso de lo monjil y de lo \u00abcuril\u00bb. (Siempre existen, gracias a Dios, las excepciones que nos oxigenan la mente, el cuerpo y el esp\u00edritu).
\n 
\nSi uno se decidiese a pasear por las realizaciones art\u00edsticas de nuestra Iglesia en estos \u00faltimos a\u00f1os, se encontrar\u00eda con templos y capillas que parecen salas de espera de una estaci\u00f3n de ferrocarril o remilgados palacetes con altavoces y micros distorsionados; dif\u00edcilmente se topar\u00eda con espacios acariciados por la luz, el silencio y la oraci\u00f3n. Si dirigiese la mirada a los objetos lit\u00fargicos e im\u00e1genes del templo se encontrar\u00eda con flores y velas de pl\u00e1stico, con c\u00e1lices horteras de alto brillo y precio, con cristos de hormig\u00f3n caducado y en serie, con v\u00edrgenes que rezuman beater\u00eda bobalicona.
\n…Si entre sus manos pasasen las portadas e interiores de revistas y libros publicados por las editoriales religiosas se da\u00f1ar\u00eda la vista, se adentrar\u00eda en una profunda tristeza. Y si, ya abatido, se quisiese sentar a ver alguno de los programas religiosos televisados, definitivamente perder\u00eda la fe. Para colmo, algunos todav\u00eda se extra\u00f1an al constatar que los j\u00f3venes se aburren y, no tardando, se nos van en b\u00fasqueda de otros espacios de celebraci\u00f3n.
\n 
\nSe sigue confundiendo intencionadamente belleza con lujo, fealdad con pobreza. No pongamos la excusa del dinero y de la falta de tiempo. Es posible una est\u00e9tica sencilla y al mismo tiempo noble, sin caer en lo vulgar; pobre y aut\u00e9ntica, interpelante y creativa, actual y permanente. \u00bfNo ser\u00e1 que nuestra capacidad expresiva, nuestra mirada sorpresiva y nuestra creatividad interpelante est\u00e1n totalmente adormecidas? \u00bfNo ser\u00e1 que nuestra fe ha pasado a ser \u00fanicamente ensayo taxid\u00e9rmico?
\n 
\nLa creatividad est\u00e1 re\u00f1ida con el aburrimiento. Ha de renovarse la expresi\u00f3n, incluso el sentido de nuestras celebraciones. Filmemos las celebraciones que se llevan a cabo en las parroquias de una ciudad en un fin de semana y nos encontraremos de forma desbordante con el tedio, la rutina, el aburrimiento y la improvisaci\u00f3n.
\nSi de verdad deseamos que nuestras celebraciones sean tales, si realmente queremos que lo\u00a0pascual<\/em>\u00a0sea festivo, si nuestra liturgia quiere ser expresi\u00f3n de lo vivido, si nuestros espacios quieren ser alternativos, si nuestra praxis pastoral quiere ser anuncio de un nuevo Reino, hagamos de nuestra fe expresi\u00f3n de la Belleza de un Dios encarnado.\u00a0n
\n <\/p>\n

Siro L\u00f3pez<\/h5>\n

estudios@misionjoven.org
\n 
\n 
\n[1]<\/a>\u00a0R. HARRIS,\u00a0El arte y la belleza de Dios,<\/em>\u00a0PPC, Madrid 1995, 15.
\n[2]<\/a>\u00a0J. ORTEGA Y GASSET,\u00a0La deshumanizaci\u00f3n del arte,<\/em>\u00a0Alianza, Madrid\u00a010<\/sup>1996.
\n[3]<\/a>\u00a0AA.VV.,\u00a0Visiones Paralelas. Artistas modernos y arte marginal,<\/em>\u00a0Museo Nacional Centro de Arte \u00abReina Sof\u00eda\u00bb, Madrid 1995.
\n[4]<\/a>\u00a0Ib\u00edd. p.14
\n[5]<\/a>\u00a0J.CH.F. SCHILLER,\u00a0Cartas sobre la educaci\u00f3n est\u00e9tica. Decimoquinta carta<\/em>\u00a0(1795), en: J.M\u00aa\u00a0VALVERDE,\u00a0Breve historia y antolog\u00eda de la est\u00e9tica,<\/em>\u00a0Ariel, Barcelona 1995, 168. Sobre el juego y la experiencia est\u00e9tica, cf.:\u00a0A. L\u00d3PEZ QUINT\u00c1S,\u00a0Para comprender la Experiencia est\u00e9tica y su poder formativo,<\/em>\u00a0Verbo Divino, Navarra 1991.
\n[6]<\/a>\u00a0\u00a0PABLO VI,\u00a0Volvamos, Iglesia y artistas, a la gran amistad,<\/em>\u00a0\u00abEcclesia\u00bb 1193(1964), 7.
\n[7]<\/a>\u00a0F.\u00a0NIETZSCHE,\u00a0Del legado p\u00f3stumo (Oto\u00f1o 1885 hasta 1887),\u00a0<\/em>en:\u00a0\u00a0J.M\u00aa\u00a0VALVERDE, o.c., p. 228.
\n[8]<\/a>\u00a0\u00a0L,\u00a0BOFF,\u00a0\u00a0Y la Iglesia se hizo pueblo. Eclesiog\u00e9nesis: La Iglesia que nace de la fe del pueblo,<\/em>\u00a0Sal Terrae, Santander\u00a02<\/sup>1986, 232-233.
\n[9]<\/a>\u00a0F.\u00a0NIETZSCHE,\u00a0\u00a0Humano, demasiado humano: un libro para esp\u00edritus libres\u00a0<\/em>(1876), en: J.M\u00aa\u00a0VALVERDE, o. c., p. 227.
\n[10]<\/a>\u00a0M. BARCEL\u00d3,\u00a0Barcel\u00f3,<\/em>\u00a0\u00abLa Revista\u00bb, 29 de marzo de 1998, p.41.
\n[11]<\/a>\u00a0V.\u00a0BOZAL,\u00a0La construcci\u00f3n de la vanguardia, 1850-1939,<\/em>\u00a0Cuad. para el Di\u00e1logo, Madrid 1978, 273.
\n[12]<\/a>\u00a0G.\u00a0NU\u00d1O,\u00a0Guernica, Gu\u00eda did\u00e1ctica,<\/em>\u00a0Museo Nacional Centro de Arte \u00abReina Sof\u00eda\u00bb, Madrid 1997, citado en p. 41.
\n[13]<\/a>\u00a0O.\u00a0GUAYASAMIN,\u00a0Exposici\u00f3n,<\/em>\u00a0Ed. Caja Salamanca y Soria, Salamanca 1995, 13.
\n[14]<\/a>\u00a0En muchos casos las obras de arte lit\u00fargico nacieron como producto de la riqueza, f\u00e1cilmente en manos de los explotadores, y hasta del robo o asalto. Hay oro y plata \u00abconquistada\u00bb de Am\u00e9rica que brilla en los templos espa\u00f1oles.
\n[15]<\/a>\u00a0F.\u00a0HEGEL, en: J.M\u00aa\u00a0VALVERDE, o. c., p.115.
\n[16]<\/a>\u00a0W.\u00a0MORRIS,\u00a0Las artes menores<\/em>\u00a0(1877), en: J.M\u00aa\u00a0VALVERDE, o. c., p.206.[\/vc_column_text][\/vc_column][\/vc_row]<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

[vc_row][vc_column][vc_column_text] S\u00edntesis del Art\u00edculo La apuesta del autor por una est\u00e9tica renovada y compartida se resume en el objetivo global de \u00abhacer de este mundo un espacio m\u00e1s habitable\u00bb. Contemplado en el \u00e1mbito del\u00a0Don,\u00a0de lo gratuito y libre, el arte nos conduce a los terrenos de la belleza y de lo bello, de lo trascendente. […]<\/p>\n","protected":false},"author":3,"featured_media":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"","_et_pb_old_content":"","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[122,489,94,67],"tags":[],"class_list":["post-11954","post","type-post","status-publish","format-standard","hentry","category-2000-mision-joven-2","category-estudios-280","category-mision-joven-2","category-siro-lopez"],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/11954","targetHints":{"allow":["GET"]}}],"collection":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/users\/3"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=11954"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/11954\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=11954"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=11954"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=11954"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}