{"id":12345,"date":"1998-11-01T06:37:59","date_gmt":"1998-11-01T04:37:59","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/?p=12345"},"modified":"1998-11-01T06:37:59","modified_gmt":"1998-11-01T04:37:59","slug":"susurros-enfermos","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/susurros-enfermos\/","title":{"rendered":"SUSURROS ENFERMOS"},"content":{"rendered":"
[vc_row][vc_column][vc_column_text]Un buen amigo me ha pedido algo que s\u00f3lo suelo hacer a oscuras. Susurrar la entra\u00f1a de mi experiencia de enferme dad -he sido operado en varias ocasio\u00adnes de ambos hombros- sobre la blancu\u00adra de una hoja hasta ahora inmaculada, no es f\u00e1cil. Me escondo, eso s\u00ed, tras mi propio lenguaje, reci\u00e9n inventado, \u00e9ste, para contar lo que hasta ahora hab\u00eda per\u00admanecido en secreto. Ah\u00ed quedan, de un tir\u00f3n, mis susurros enfermos). [vc_row][vc_column][vc_column_text]Un buen amigo me ha pedido algo que s\u00f3lo suelo hacer a oscuras. Susurrar la entra\u00f1a de mi experiencia de enferme dad -he sido operado en varias ocasio\u00adnes de ambos hombros- sobre la blancu\u00adra de una hoja hasta ahora inmaculada, no es f\u00e1cil. Me escondo, eso s\u00ed, tras mi propio lenguaje, reci\u00e9n inventado, \u00e9ste, para […]<\/p>\n","protected":false},"author":3,"featured_media":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"","_et_pb_old_content":"","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[126,331,94,332],"tags":[],"class_list":["post-12345","post","type-post","status-publish","format-standard","hentry","category-1998-mision-joven-2","category-jose-miguel-capape","category-mision-joven-2","category-seccion-especial-262"],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/12345","targetHints":{"allow":["GET"]}}],"collection":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/users\/3"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=12345"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/12345\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=12345"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=12345"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=12345"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}
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\nMUCHAS veces lo pienso. Retro\u00adcedo en mi vida y me doy de bruces con un dolor intenso. El paisaje siempre es el mismo: la luz muy blanca, el lecho duro y muy peque\u00f1o, apenas llevo ropa, ten\u00adgo fr\u00edo y tengo miedo, huele… a espa\u00adcios vac\u00edos y limpios, muy limpios. Ape\u00adnas puedo hablar y poco a poco, acom\u00adpa\u00f1ado por seres en quienes deposito toda mi confianza, entro en un sue\u00f1o blanco, me sumerjo en una noche sin sue\u00f1os. Y entro en ella rezando y pen\u00adsando (y todav\u00eda no acierto a saber por qu\u00e9) en el dolor del mundo.
\nMuchas veces lo pienso. Recuerdo un fr\u00edo intenso recorriendo mi cuerpo enfer\u00admo. Vislumbro se\u00f1ales ac\u00fasticas que marcan un ritmo lento, el de mi vida, que poco a poco va tomando cuerpo despu\u00e9s del sue\u00f1o. Estoy en una cama prestada, una testigo muda de muchos dolores mudos, de esos que nunca salen afuera en forma de grito, de esos que se acallan por verg\u00fcenza, de esos que te duelen en la misma alma.
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\nMUCHAS veces lo pienso. Que estoy desnudo en medio de un mar de s\u00e1banas blancas, marcadas, escritas, bien planchadas. Y me siento insignificante. Y me siento solo. Y me siento hueco. Y me da miedo.
\nDesde peque\u00f1o hab\u00eda convivido con el dolor sin apenas darme cuenta. Mi ma\u00addre nos ense\u00f1\u00f3 a vivir en medio de un sufrimiento sostenido, a veces grave, que nos ha llevado a recordar los mejo\u00adres momentos de nuestra ni\u00f1ez (somos cinco hermanos) alrededor de una cama de matrimonio conocedora de nuestras faltas de ortograf\u00eda y nuestros errores matem\u00e1ticos, manchada a veces de colo\u00adres \u00abPlastidecor\u00bb o pinturas \u00abAlpino\u00bb. Pero ten\u00eda que llegar el momento de ver el dolor desde el otro lado.
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\nDESDE una cama de hospital he vi\u00advido los momentos de mi vida m\u00e1s vac\u00ed\u00ados: no ser capaz de pensar, de leer, de mi rar la belleza, de decir el amor… As\u00ed co\u00admo los m\u00e1s plenos. La paradoja de la vi\u00adda cobra una nueva realidad en una ca\u00adma an\u00f3nima, que suele tener un n\u00famero y que suele hablarte al o\u00eddo de tantos otros hombres y mujeres, mayores y ni\u00ad\u00f1os que pasaron primero y que suele adivinar en sue\u00f1os los muchos que ven\u00addr\u00e1n despu\u00e9s.
\nMis estancias en el hospital siempre fueron cortas. All\u00ed sent\u00eda verg\u00fcenza por la insignificancia de mi mal. Mis l\u00e1gri\u00admas retenidas eran por aquellos que de\u00adb\u00edan estar sufriendo solos, por aquellos que no ten\u00edan familia, por aquellos en\u00adfermos cr\u00f3nicos, por aquellos ni\u00f1os, por aquellas madres. Despu\u00e9s del hospital me esperaban meses de vac\u00edo y de sole\u00addad. Meses en los que s\u00f3lo quer\u00eda mirar la calle, la gente, los coches, los ni\u00f1os, las casas, las mujeres, el amor, la vida.
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\nYA s\u00e9 lo que es estar sin hacer nada. Y nada quiere decir nada. Mi cabeza pa\u00adrec\u00eda vac\u00eda, mis recuerdos lejanos, mis deseos mentira. Recuerdo que una vez recib\u00ed una carta de una amiga. Hab\u00edamos ido alguna vez al cine, hab\u00edamos habla\u00addo a solas en algunos caf\u00e9s y en algunas plazas. Sent\u00ed una distancia tan enorme. Porque en momentos en los que el dolor te lleva a pensar hasta en la muerte, el amor te parece un insulto, el consuelo una farsa, la compa\u00f1\u00eda un pasatiempo. En silencio me sent\u00eda culpable, cuando el dolor se me hac\u00eda insoportable, el picor inaguantable, y el cansancio infinito. Me sent\u00eda culpable al saberme un privilegia\u00addo que, adem\u00e1s, ten\u00eda la desdicha de sentirse importante.
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\nEN pocos a\u00f1os he podido vivir esta experiencia unas cuantas veces. En po\u00adcos a\u00f1os me he hecho experto del dolor de otros, de todos aquellos que pasaban a mi lado. Experto de hospitales en esas salas donde unos olvidan una pierna amputada, otros recuperan un brazo hasta ahora in\u00fatil y otros lloran sin con\u00adsuelo, me he sentido culpable de sentir\u00adme importante.
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\nNunca olvidar\u00e9 algunos de los m\u00ednu\u00adtos m\u00e1s largos de mi vida, que sucedie\u00adron en aquella \u00e9poca, ni algunos de los besos m\u00e1s largos, ni algunos de los su\u00adsurros m\u00e1s bellos, ni algunos de los ros\u00adtros m\u00e1s cercanos.
\nMuchas veces lo pienso. Y es entonces cuando entro en mi cuarto de ba\u00f1o para llorar frente al espejo. Muchas veces to\u00addav\u00eda me despierto como de aqu\u00e9l sue\u00f1o blanco, vac\u00edo, denso tratando de sentir\u00adme cerca de mis compa\u00f1eros de duelo. Muchas veces me duermo pensando en aquello.
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\nNO soy experto en dolor, es un t\u00edtu\u00adlo que no existe pues cada dolor es dife\u00adrente, pero hoy doy gracias por haber sufrido, por haber sido capaz de acercar\u00adme de puntillas al territorio m\u00e1s sagrado del ser humano. Y todav\u00eda lloro, aunque no por m\u00ed, lloro por aquellos que no han conocido en momentos como aquellos y a\u00fan peores, el llanto amigo, el beso que\u00adrido y los secretos susurrados al o\u00eddo; la mano materna, el detalle paterno, la son\u00adrisa fraterna; el aliento divino y… la car\u00adta de una amiga de caf\u00e9s solitarios, pla\u00adzas calladas y noches sin d\u00eda.
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\nJos\u00e9\u00a0<\/strong>Miguel\u00a0<\/strong>Capap\u00e9<\/strong>
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