{"id":5377,"date":"2002-03-01T00:00:00","date_gmt":"2002-02-28T22:00:00","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/index2.php\/?p=5377"},"modified":"2002-03-01T00:00:00","modified_gmt":"2002-02-28T22:00:00","slug":"hijos-del-exito","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/hijos-del-exito\/","title":{"rendered":"Hijos del \u00e9xito"},"content":{"rendered":"<p>HUBO UN TIEMPO en el que el pu\u00f1o levanta\u00addo significaba inconformismo de izquierdas. Aho\u00adra es el s\u00edmbolo de unos chicos que intentan abrir\u00adse paso en el mundo de la industria musical y cu\u00adyo pu\u00f1o no sujeta ning\u00fan meg\u00e1fono reivindicati\u00advo, sino uno que les permite llegar a la cima del \u00e9xito. La generaci\u00f3n de <em>Operaci\u00f3n Triunfo <\/em>no ha vi\u00advido el franquismo ni ha sufrido la \u00e9poca en la que interesarse por la tele supon\u00eda ser hereje.<\/p>\n<ul>\n<li><strong>Revoluci\u00f3n audiovisual<\/strong><\/li>\n<\/ul>\n<p>Si alguna vez la peque\u00f1a pantalla fue el opio del pueblo, ellos han nacido en un mundo <em>yonqui. \u00abTo\u00ad<\/em>dos nos sentir\u00edamos mejor si la televisi\u00f3n empe\u00adorara en lugar de mejorar\u00bb, escribi\u00f3 Neil Postran en 1985. Desde entonces, el medio no ha hecho m\u00e1s que mejorar manteniendo intacto el gran mis\u00adterio de este invento: no saber nunca si un deter\u00adminado formato va a triunfar o no. Pero si se com\u00adbinan diversos elementos con profesionalidad y criterio, por lo menos se habr\u00e1 hecho un producto decente.<br \/>\n\u00c9ste parece ser el caso de OT, que, adem\u00e1s de re\u00adcuperar la m\u00fasica en directo para la televisi\u00f3n de masas, busca una complicidad que conecta no con la copla, sino con los referentes publicitados por programas de radio como <em>Los 40 <\/em><em>Principales o La Jungla, y <\/em>aplica la l\u00f3gica de los grandes entrena\u00addores: si juegas bien, ganas. Resultado: el concurso ha provocado una revoluci\u00f3n audiovisual.<\/p>\n<ul>\n<li><strong>Las claves<\/strong><\/li>\n<\/ul>\n<p>Ning\u00fan programa alcanza semejantes resulta\u00addos sin ser algo m\u00e1s que un concurso. \u00bfLas claves? Buena factura y promoci\u00f3n, contenidos que com\u00adbinan el inter\u00e9s de un <em>making <\/em><em>off <\/em>(c\u00f3mo se hace un famoso) y melod\u00edas pegadizas, enfoque positivo y una idea defendida por profesionales que transmi\u00adten credibilidad. A eso hay que a\u00f1adir que, tras unos a\u00f1os en los que el p\u00e9ndulo del gusto insist\u00eda en formatos de pruebas f\u00edsicas, la propuesta de OT estimula al espectador con un discurso constructi\u00advo. En parte, pues, no se trata tanto de aplaudir lo positivo como lo diferente.<\/p>\n<ul>\n<li>Otras claves<\/li>\n<\/ul>\n<p>OT tambi\u00e9n resuelve viejas contradicciones del teleadicto.<\/p>\n<ul>\n<li>En primer lugar, es un programa para todos los p\u00fablicos, pero cuyos protagonistas son los j\u00f3\u00advenes. Contiene, pues, elementos de cohesi\u00f3n so\u00adcial. La prueba: muchos amigos se re\u00fanen para ver la gala juntos, un hecho que s\u00f3lo se produce con partidos de f\u00fatbol o la entrega de los <em>oscars.<\/em><\/li>\n<li>En segundo lugar, arrastra a los que todav\u00eda son reacios a ver la tele a engancharse a un pro\u00adgrama del que no tendr\u00e1n que avergonzarse en p\u00fa\u00adblico, como ocurre con los embusteros que niegan ver <em>Cr\u00f3nicas marcianas.<\/em><\/li>\n<\/ul>\n<p>Ser adicto a OT est\u00e1 bien visto y te proporciona un tema de conversaci\u00f3n intergeneracional que multiplica su onda expansiva. \u00bfLos valores? Puede que OT sea un canto al esfuerzo y a la ilusi\u00f3n, pe\u00adro lo bueno es que puedes utilizar estos valores co\u00admo coartada para justificar tu adicci\u00f3n sin profun\u00addizar en si se trata de un canto a la competitividad y al privilegio mientras que los m\u00e1s esc\u00e9pticos pueden limitarse a disfrutar del show y conside\u00adrarlos parte de la estrategia de una industria que machacar\u00e1 a los chicos cuando salgan de la acade\u00admia que les ha pulido esos defectos que tanto nos sedujeron al principio.<\/p>\n<ul>\n<li><strong>Virtudes<\/strong><\/li>\n<\/ul>\n<p>Al margen de este entorno, el programa funcio\u00adna gracias a virtudes cl\u00e1sicas: la calidad, la compe\u00adtitividad y el espect\u00e1culo. Del mismo modo que un partido de f\u00fatbol disputado, jugado con <em>fair-play,<\/em>en el que se marcan muchos goles y retransmitido con gran despliegue de realizaci\u00f3n dejar\u00e1 una hue\u00adlla imborrable en la afici\u00f3n, un programa con can\u00adciones bonitas interpretadas por j\u00f3venes que lu\u00adchan sin hacerse putadas siempre gustar\u00e1 (todav\u00eda) m\u00e1s que el encierro de unos ociosos candidatos a tener antecedentes penales.<br \/>\nY, sin embargo, OT es hija de GH. Pero, como ocurre en las mejores familias, el hermano peque\u00ad\u00f1o, m\u00e1s t\u00edmido y menos vociferante, ha podido aprender de los errores de su hermano mayor, rec\u00adtificar y deslumbrar con una actitud en la que, pe\u00adse a la abusiva mercadotecnica adosada, siguen prevaleciendo las virtudes sobre los defectos.<br \/>\nAl final, cuando los chicos se enfrenten al apro\u00advechamiento integral de la gallina de <em>los <\/em>huevos de oro, empezar\u00e1 otra fase bastante menos buc\u00f3lica. Y all\u00ed estar\u00e1 la televisi\u00f3n para alimentarse el triunfo pero, si se produce, tambi\u00e9n del fracaso. Porque en la tele vale todo: incluso devorar a tus propios hijos.<br \/>\nSERGI PAMI\u00c8s,<br \/>\n\u00abEl Dominical-El Pais\u00bb, 10.2.02<br \/>\n&nbsp;<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<p>HUBO UN TIEMPO en el que el pu\u00f1o levanta\u00addo significaba inconformismo de izquierdas. 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