{"id":7112,"date":"2012-05-01T00:00:42","date_gmt":"2012-04-30T22:00:42","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/index2.php\/?p=7112"},"modified":"2012-05-01T00:00:42","modified_gmt":"2012-04-30T22:00:42","slug":"en-que-punto-estamos","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/en-que-punto-estamos\/","title":{"rendered":"EN QU\u00c9 PUNTO ESTAMOS"},"content":{"rendered":"

LOS SALESIANOS REVISAN SU PASTORAL JUVENIL<\/h1>\n

Entrevista a Fabio Attard, sdb.<\/strong>
\nConsejero General para la Pastoral Juvenil<\/strong>
\n 
\nContexto<\/strong>
\n\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0<\/em>
\nEn Junio de 2011 Misi\u00f3n Joven recog\u00eda una entrevista de NPG al Consejero general de los Salesianos para la pastoral juvenil sobre el plan de revisi\u00f3n de la PJ para verificar su adecuaci\u00f3n en una condici\u00f3n de paradigmas culturales cambiantes y para reavivar el fecundo contacto con sus fuentes inspiradoras en la praxis (y reflexi\u00f3n) de don Bosco.<\/em>
\n\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Es un proceso que \u2013 pedido por el Cap\u00edtulo General 26 \u2013 implica no s\u00f3lo a los v\u00e9rtices de la Congregaci\u00f3n (el Rector Mayor y el Dicasterio de la PJ), o a los m\u00e1s directamente interesados (los diversos centros de estudio o los delegados de PJ) sino a todas las inspector\u00edas (provincias) y las obras, con vistas a una reescritura del marco org\u00e1nico de referencia: pr\u00e1cticamente el re-pensamiento hoy del sistema preventivo de don Bosco.<\/em>
\n\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 En efecto, despu\u00e9s de un primer momento por obra, sobre todo, de los centros de PJ y expertos que han presentado, por decirlo as\u00ed, un marco de la situaci\u00f3n, las tramas y los retos principales, ahora es el momento de las comunidades, a las que se ha dado un librito (pocas p\u00e1ginas) como instrumento para la reflexi\u00f3n y para la revisi\u00f3n de su praxis.<\/em>
\n\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Por ser la pastoral juvenil lo que define la identidad de la misi\u00f3n de la Congregaci\u00f3n Salesiana, pensamos que su experiencia, los retos afrontados, los enlaces (y los desenlaces) descubiertos pueden ser de una cierta utilidad tambi\u00e9n\u00a0 a las pastorales juveniles vividas en las\u00a0 di\u00f3cesis y por otras realidades eclesiales, cuando la intenci\u00f3n que las anima es la\u00a0 evangelizaci\u00f3n de los j\u00f3venes a trav\u00e9s de la mediaci\u00f3n de la educaci\u00f3n.<\/em>
\n\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Aprovechamos la amabilidad del Consejero general D. Fabio Attard para continuar el di\u00e1logo.<\/em>
\n <\/p>\n

    \n
  1. El camino recorrido, los retos<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

     
    \nPregunta. <\/strong>Ante todo un \u00abresumen\u00bb de la entrega anterior. \u00bfPuede reafirmar el sentido y la finalidad de esa reflexi\u00f3n sobre la PJ salesiana que ocupar\u00e1 tres a\u00f1os hasta el pr\u00f3ximo Cap\u00edtulo General? Y en especial, \u00bfcu\u00e1les han sido los retos descubiertos, las fragilidades y debilidades (o insuficiencias, en\u00a0 palabras del Rector Mayor) del \u00absistema educativo salesiano\u00bb, los nuevos temas que saltan al escenario? Porque desde luego sorprende la palabra \u00abre-pensamiento de la PJ\u00bb precisamente al referirse a la que, a los ojos de todos, aparece como una sabidur\u00eda lograda, una peculiaridad espec\u00edfica del mundo salesiano.<\/em>
    \n 
    \nRespuesta.<\/strong> Ante todo quiero dar un sincero \u2018gracias\u2019 por esta segunda oportunidad de compartir el camino que estamos recorriendo en la Congregaci\u00f3n salesiana. Si fuese una pel\u00edcula, dir\u00edamos que esta entrevista es una serie.
    \nLa primera pregunta es una especie di macro-pregunta, que contiene otras tres.
    \nHablo en primer lugar del resumen del camino hecho hasta ahora. Hemos comenzado con\u00a0 un grupo de te\u00f3logos y algunos expertos en pastoral a escoger mejor los t\u00e9rminos del problema y proyectar las varias fases del re-pensamiento. Ha resultado ser una opci\u00f3n acertada. Aunque no hemos llegado todav\u00eda al final, nos damos cuenta de que el punto de partida teol\u00f3gico nos ha ayudado a interpretar todo el camino con el fondo del horizonte del misterio de Dios, que se encarna en la persona de Cristo y sigue actuando por medio de la fuerza del Esp\u00edritu.
    \nDentro de esta comprensi\u00f3n de fe, las diversas dimensiones \u2013 como la cultural, sociol\u00f3gica, filos\u00f3fica, pol\u00edtica \u2013 se incluyen sin hacer perder la br\u00fajula que nos ofrece la palabra de Dios, la reflexi\u00f3n del magisterio de la Iglesia y el patrimonio carism\u00e1tico. A medida que avanzamos, se siente la necesidad no s\u00f3lo de reforzar lo divino, sino tambi\u00e9n de no dejarnos alienar por todo eso que, a su vez, tiene el poder de ayudarnos a ser plenamente humanos, llegando as\u00ed a la meta de ser plenamente divinos.
    \nAs\u00ed pues nos damos cuenta de que el proceso empezaba por una reflexi\u00f3n en la esfera teol\u00f3gica que nos ha ofrecido indicadores muy \u00fatiles para la segunda fase: la de interpelar a cada comunidad de la congregaci\u00f3n, a cada inspector\u00eda (provincia) sobre su\u00a0modo de vivir y de proponer caminos de pastoral juvenil.
    \nEs interesante que el paso de la primera a la segunda reforzaba una actitud de escucha y de respeto, por una parte a la lectura teol\u00f3gica, y por otra al ritmo y a los retos que vive cada comunidad, con sus dificultades, pero tambi\u00e9n con sus oportunidades. Se han reforzado indicadores como la urgencia de reavivar la comprensi\u00f3n teol\u00f3gica de nuestra misi\u00f3n, la llamada a sintonizarnos con la cultura de los j\u00f3venes como el locus theologicus<\/em>de nuestra consagraci\u00f3n y misi\u00f3n.
    \nComo s\u00edntesis del trabajo de la primera fase, hemos ofrecido en esta segunda un peque\u00f1o instrumento que facilite el \u2018di\u00e1logo\u2019 con y en la comunidad. Es un documento que pide a la comunidad que relate su historia, los momentos bonitos, pero tambi\u00e9n los dif\u00edciles.
    \nHemos pedido a cada comunidad que responda a tres preguntas:
    \n–\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 la primera sobre la cultura juvenil: es decir, qu\u00e9 atenci\u00f3n prestamos al encuentro con la cultura y el mundo de los j\u00f3venes de hoy. Nos preguntamos si somossensibles a las diversas formas con que los j\u00f3venes viven la fe en sus diferentescontextos educativos y sociales: no creyentes, indiferentes, alejados, con fe tradicional o en un camino de fe comprometida. Tratando de entrar en la historia de los j\u00f3venes, nos preguntamos si los estamos mirando y contemplando con los ojos de Jes\u00fas, si nos comprometemos a ser pastores con una comprensi\u00f3n inteligente del tiempo presente: una comprensi\u00f3n que sepa afrontar los retos del enorme cambio cultural;
    \n–\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 <\/i><\/b>la segunda pregunta trata el tema de la evangelizaci\u00f3n por medio de la educaci\u00f3n en la cultura de nuestro tiempo. Nos preguntamos si nuestra pastoral juvenil <\/i>salesiana acompa\u00f1a al joven hacia la plenitud de vida que est\u00e1 en Jes\u00fas; si acompa\u00f1a al joven a vivir coherentemente su decisi\u00f3n de seguir a Jes\u00fas, apoy\u00e1ndose en una espiritualidad de la que recibe un estilo de vida y una implicaci\u00f3n en el servicio de los dem\u00e1s que lo haga feliz. Nos pregunt\u00e1bamos si nosotros mismos somos garantes de una espiritualidad juvenil salesiana orientada hacia la experiencia de fe, hacia la educaci\u00f3n y el trabajo.<\/i><\/b>
    \nEsto obliga a verificar si <\/i><\/b>acompa\u00f1amos a los j\u00f3venes en pasos graduales de maduraci\u00f3n en la fe, asegurando una verdadera iniciaci\u00f3n en la experiencia religiosa cristiana, donde la palabra clave es la iniciaci\u00f3n, la mistagog\u00eda;
    \n–\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 por \u00faltimo, la tercera pregunta trata sobre el tema de una pastoral juvenil integral y coordinada. En un contexto en el que los j\u00f3venes se sienten n\u00f3madas, y no s\u00f3lo ellos. Nos preguntamos qu\u00e9 quiere decir que tienen derecho a encontrar propuestas formativas integrales en nuestro modelo educativo-pastoral. Por otra parte, al ofrecer una pastoral org\u00e1nica, todos nos sentimos obligados a verificar lapreparaci\u00f3n humana, cristiana y pedag\u00f3gica adquirida, que nos ayude a realizar esamisi\u00f3n con la mayor plenitud posible.
    \n\u00a0<\/strong>
    \nPaso a la segunda parte de la pregunta, sobre los retos. Durante este proceso creo que ha habido muchos retos, de naturaleza fundamental y conexos entre s\u00ed.
    \nUno es el de la urgencia de comprender la pastoral partiendo de una visi\u00f3n evang\u00e9lica y sacramental de nuestra misma entrega. Parece algo poco importarte, hasta obvio, pero me convenzo cada d\u00eda m\u00e1s de que un contexto post-moderno y post-secularizado, donde faltan los puntos de referencia tanto religiosos como culturales, que antes serv\u00edan de base y punto de partida, los j\u00f3venes y los adolescentes no llegan a que les impresione algo o alguien. S\u00f3lo las personas con una vida aut\u00e9ntica<\/em>, pastores audaces y gu\u00edas honrados, captan inmediatamente su imaginaci\u00f3n, personal y colectiva.
    \nLas grandes instituciones (escuela, familia, comunidad religiosa, Iglesia institucional) no tienen ya garra sobre ellos, no logran respeto s\u00f3lo por el hecho de que representen \u2018algo\u2019. En cambio quien vive lo que dice, y se da de una manera aut\u00e9ntica y sistem\u00e1tica, entonces demuestra que tiene algo que decir. Estas son las personas que por medio de su transparencia y autenticidad entran en seguida en sinton\u00eda con lo que los j\u00f3venes buscan hoy: adultos significativos que presentan valores vivos, que satisfacen la sed y el hambre de lo divino de manera sencilla, verdadera, directa.
    \nUn segundo reto (mejor ser\u00eda llamarlo fragilidad) es la implicaci\u00f3n nula por parte de los pastores y educadores de mantenerse al d\u00eda en los diversos frentes de la misi\u00f3n<\/em>. Sabemos muy bien que la evangelizaci\u00f3n y la educaci\u00f3n no se realizan en un espacio extra-terrestre, en una burbuja de aire. La evangelizaci\u00f3n y la educaci\u00f3n se dan dentro de par\u00e1metros culturales y religiosos muy precisos, con fuertes componentes filos\u00f3ficos\u00a0 de referencia.
    \nEl que de nosotros recibi\u00f3 su formaci\u00f3n hace treinta o veinte a\u00f1os, conoci\u00f3 par\u00e1metros culturales y religiosos que hoy ya no existen. De ah\u00ed entonces la urgencia de una continua puesta al d\u00eda o actualizaci\u00f3n, conocimiento y estudio, ante todo de la reflexi\u00f3n de la Iglesia que en este campo es muy rica. En mis encuentros con los delegados de pastoral juvenil a nivel regional, varias veces pregunto si les son familiares documentos como Evangelii nuntiandi<\/em>, Catequesi Tradendae<\/em>, Directorio General para la Catequesis<\/em>. \u00a1Debo decir que las respuestas no son muy estimulantes! La misma necesidad se presenta para una actualizaci\u00f3n de tipo sociol\u00f3gico y filos\u00f3fico, cultural y human\u00edstico.
    \nCon esa fallida actualizaci\u00f3n, corremos el riesgo sencillamente de dar respuestas viejas a preguntas que no existen ya. Seremos nosotros mismos los que estaremos herm\u00e9ticamente cerrados en un mundo paralelo, con el peligro de formular s\u00f3lo juicios sobre los j\u00f3venes, pero dif\u00edcilmente sabremos transmitir testimonios,\u00a0 entregar una visi\u00f3n ilusionante de la vida.
    \nEn torno a estos dos grandes retos, por no llamarlos debilidades, se da tambi\u00e9n la urgencia de una vida personal y comunitaria aut\u00e9nticamente fundada y enriquecida en una experiencia espiritual. Aqu\u00ed no se trata de gestos mec\u00e1nicos que la comunidad est\u00e1 llamada a ejecutar, sino m\u00e1s bien de gestos de libertad que se expresan por medio de momentos de oraci\u00f3n comunitaria, de escucha comunitaria, de cotejo fraterno sereno y gozoso. Tal vez nos conviene detenernos un momento y descubrir lo mucho que hay de valor en la reflexi\u00f3n de la comunidad, de la vida fraterna, en un ambiente social donde muchos de nuestros adolescentes y j\u00f3venes viven en ambientes fragmentados y an\u00f3nimos. Y entonces el reto es que nuestras comunidades se conviertan realmente en espacios de acogida, de escucha y de propuesta.
    \nEn la tercera parte de la pregunta se alude al re-pensamiento como si se tratase de una negaci\u00f3n o alejamiento de lo que se ha llamado \u2018sabidur\u00eda adquirida. En alguna reuni\u00f3n ha flotado precisamente esa pregunta, como si ahora quisi\u00e9semos echar por la borda todo lo que hemos heredado para volver a empezar desde cero. Si fuese as\u00ed, \u00a1ser\u00eda una locura total! Quien crea que el tiempo comienza \u2018hoy\u2019 ha perdido el sentido de la historia: \u00a1sin pasado no hay futuro!
    \nNuestra historia es una historia de salvaci\u00f3n en la que cada momento y en cada fase todos buscamos qu\u00e9 quiere el Esp\u00edritu de nosotros. La belleza de la Iglesia est\u00e1 en su capacidad de \u00abtraspasar\u00bb\u00a0 su \u2018decir\u2019 y su \u2018vivir\u2019 de una generaci\u00f3n a otra \u2013 la tra-ditio<\/em> es precisamente eso. Lo que pasa a nivel eclesial, pasa, de modo microc\u00f3smico, en nuestra Congregaci\u00f3n. Nosotros somos herederos de un sistema educativo, el Sistema Preventivo, que tiene en su ADN la propensi\u00f3n al di\u00e1logo. Don Bosco, que educ\u00f3 en su tiempo, sigue educando hoy en nuestro tiempo. El mismo Esp\u00edritu salesiano que hemos heredado de \u00e9l, sigue tambi\u00e9n hoy animando una historia que contin\u00faa.
    \nLa gran reflexi\u00f3n de la Congregaci\u00f3n en estos \u00faltimos cuarenta a\u00f1os no es re-comenzar desde el principio, sino seguir viviendo con alegr\u00eda y optimismo el di\u00e1logo continuo con los j\u00f3venes que encuentra su paradigma en Valdocco, mientras que lleva la imagen, cada vez m\u00e1s viva y actual, del rostro de Don Bosco, icono permanente de Padre y Maestro de la juventud.
    \nRe-pensar quiere decir precisamente eso: pensamos en c\u00f3mo nosotros hoy somos fieles al paradigma evangelizador y al icono de nuestro Padre y Maestro. Si este reto de re-pensar, contemplar el hoy de la historia, no lo aceptamos, entonces en ese punto abandonar\u00edamos el paradigma como un relato est\u00e1tico, una secci\u00f3n de museo, y de la imagen de nuestro Padre y Maestro har\u00edamos s\u00f3lo una pintura plana, superada, caducada.
    \nRe-pensar es el modo de reforzar los lazos vitales que desde el principio hicieron de Don Bosco y de su sistema educativo una realidad que dialoga, acoge, interact\u00faa, propone y proyecta hacia el futuro de j\u00f3venes protagonistas. El Sistema Preventivo, desde este punto de vista, en la post-modernidad, se convierte en un don \u00fanico que recupera la visi\u00f3n amplia y grande de la raz\u00f3n <\/em>que no tiene miedo de llegar a los umbrales del misterio divino<\/em>en un ambiente de gran caridad apost\u00f3lica, y de cari\u00f1o.
    \nExplicado as\u00ed, el re-pensamiento se convierte en una oportunidad que no podemos perder, porque s\u00f3lo as\u00ed la \u2018sabidur\u00eda adquirida\u2019 sigue siendo lo que siempre est\u00e1 llamada a ser \u2013 sal de la tierra y luz del mundo.
    \n\u00a0<\/strong>
    \n\u00a0<\/strong><\/p>\n

      \n
    1. Brotes de novedad<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

       
      \nD.\u00a0<\/strong>Se han identificado ciertamente tambi\u00e9n en el estudio \u00abbrotes\u00bb de novedad en las praxis de la PJ, intuiciones que merecen ser indicadas y re-propuestas, modalidades en las que se nos pone ante los j\u00f3venes de forma creativa, recorridos de evangelizaci\u00f3n con buenos resultados y prometedores. \u00bfPuede indicar algunos?<\/em>
      \n 
      \nR.\u00a0<\/strong>En efecto, fruto de procesos como estos, aparecen elementos que deben sostenerse y reforzarse, pero tambi\u00e9n otros han resultados secundarios o hasta han desaparecidos.
      \nLa palabra \u201cbrotes\u201d me ha hecho recordar la imagen de un \u00e1rbol en oto\u00f1o que sufre la fuerza del viento que sopla. Las hojas s\u00f3lidas resisten porque est\u00e1n bien arraigadas en las ramas; en cambio, las d\u00e9biles y descoloridas caen. La estaci\u00f3n del oto\u00f1o hace morir lo viejo, pero tambi\u00e9n nacer lo nuevo.
      \nEntre las realidades que necesitan una cuidada atenci\u00f3n est\u00e1 la del conocimiento de la identidad de los j\u00f3venes hoy<\/em>. El fuerte cambio cultural no es cosa de poco. Estamos viviendo pasos trascendentes que no pueden dejarnos indiferentes. Si miramos el desarrollo tecnol\u00f3gico, as\u00ed como los\u00a0 grandes cambios pol\u00edticos, si prestamos atenci\u00f3n a los fuertes cambios de paradigma a nivel filos\u00f3fico y a los cambios sociales, debemos preguntarnos qu\u00e9 est\u00e1 realizando todo esto en nuestros j\u00f3venes, en nuestros muchachos.
      \nConocer la identidad del joven de hoy no es ya un lujo de pocos intelectuales, sino una urgencia de todos los que desean con sinceridad encarnarse en el mundo educativo de los j\u00f3venes. Nos estamos dando cuenta cada d\u00eda m\u00e1s de que si no se tiene ese cocimiento, como evangelizadores y educadores, pensamos en una propuesta que no converge con el mundo de los j\u00f3venes. En nuestro caso, mirando a Don Bosco, percibimos enseguida que su inter\u00e9s pastoral estaba \u00edntimamente ligado al conocimiento y a ensimismarse en el mundo de los j\u00f3venes de Tur\u00edn, que era totalmente diverso del mundo juvenil que \u00e9l, en su tiempo, hab\u00eda conocido.
      \nUn segundo aspecto relacionado es repasar el significado de \u00abnecesidad del grupo\u00bb en la post-modernidad<\/em>.
      \nDesde hace\u00a0 a\u00f1os se insiste en los caminos de los grupos y todos comparten esta convicci\u00f3n de orden metodol\u00f3gico. Pero nos damos cuenta de que para los j\u00f3venes la pertenencia a un grupo no ofrece s\u00f3lo espacio y seguridad, sino sobre todo identidad. El grupo no es s\u00f3lo refugio, sino visi\u00f3n, lugar en el que los j\u00f3venes fijan una identidad.<\/em>
      \nEn este sentido, para que la propuesta pastoral sea v\u00e1lida por s\u00ed misma, adem\u00e1s de necesitar un espacio humano y personas aut\u00e9nticas, es importante que sea tambi\u00e9n una propuesta con procesos de personalizaci\u00f3n, propuesta que ofrece caminos que refuerzan la identidad. Podemos decir que en una sociedad que no ofrece ya puntos de referencia fijos y convincentes, el grupo ofrece identidad por medio de la pertenencia.
      \nUn segundo racimo de brotes prometedores est\u00e1 entre los evangelizadores y educadores. Ya he afirmado que \u2013 a falta de una reflexi\u00f3n objetiva en torno a los valores o visi\u00f3n de la vida – se llega al coraz\u00f3n del joven no desde arriba, de forma vertical, sino por medio de la fuerza del testimonio, el signo de la profec\u00eda<\/em>.
      \nO\u00edmos decir en muchos lugares que sin una comunidad cre\u00edble (es decir, que testimonia con los hechos lo que predica y proclama con las palabras) toda propuesta pastoral resulta hueca, hasta banal. En un mundo lleno de artificiosidad, en un contexto donde el poder pol\u00edtico y econ\u00f3mico ha perdido toda traza de \u00e9tica, encontrar adultos que digan algo es una empresa muy dif\u00edcil. Una generaci\u00f3n juvenil a la que se le ha quitado no s\u00f3lo el futuro, sino tambi\u00e9n\u00a0 la capacidad de so\u00f1ar en el presente, de los adultos no espera nada.
      \nY nosotros como evangelizadores y educadores estamos en esa situaci\u00f3n. \u00bfTambi\u00e9n\u00a0nosotros, gente banal y artificiosa, estamos sin nada que decir? La autenticidad<\/em> que se espera de nosotros es la del profeta que habla en nombre de Dio porque lo ha conocido, se ha encontrado con \u00c9l, se ha\u00a0 entretenido con \u00c9l. Estamos llamados a ser evangelizadores porque en lo profundo de nuestro coraz\u00f3n mantenemos viva la alegre noticia \u2013 evangelion<\/em>.
      \nCreo que en estos dos ramilletes de brotes podemos leer una invitaci\u00f3n urgente: estamos llamados a estar, al mismo tiempo, fuertemente enraizados en la historia y s\u00f3lidamente anclados en el Evangelio. Me viene a la mente el libro de don Pedro Broccardo sobre Don Bosco \u2013 \u00a1profundamente hombre, profundamente santo!<\/em>
      \nHay un tercer grupo de reto\u00f1os que nos pide mayor atenci\u00f3n a que construyamos y ofrezcamos una clara propuesta espiritual<\/em>. Al no poder dar por descontada la formaci\u00f3n religiosa de nuestros muchachos y de nuestros j\u00f3venes, debemos pensar en nuestra pastoral como en un camino de descubrimiento. Un camino dentro de la comunidad creyente que se siente interpelada a respetar los ritmos de las personas, sin descuidar la integridad del anuncio. Un punto este \u00faltimo que hemos subrayado tambi\u00e9n\u00a0 en nuestro \u00faltimo Cap\u00edtulo General 26: la evangelizaci\u00f3n requiere\u00a0 salvaguardar juntas la integridad del anuncio y la gradualidad de la propuesta. Don Bosco asumi\u00f3 esta doble atenci\u00f3n para poder proponer a todos los j\u00f3venes una profunda experiencia de Dios, teniendo en cuenta su situaci\u00f3n concreta<\/em> (n.25).
      \nEn este contexto debemos tener la perspicacia de espaciar el amplio espectro del territorio pastoral: a los alejados y a los principiantes ofrecerles el\u00a0 gusto de la plenitud que encuentra el \u00e1pice en la persona de Jes\u00fas, hasta tener la valent\u00eda de explorar, con los que est\u00e1n dispuestos a ir m\u00e1s adelante, caminos mistag\u00f3gicos<\/em> que les acompa\u00f1en hacia una fuerte experiencia de fe, un aut\u00e9ntico encuentro con Cristo.
      \nDon Braido en su obra fundamental Don Bosco sacerdote de los j\u00f3venes en el siglo de las libertades,<\/em> comenta la actitud de Don Bosco ante una variopinta muchedumbre de\u00a0j\u00f3venes que acud\u00edan a Valdocco: \u201cDon Bosco no era un maximalista, no malgastaba la nomenclatura religiosa: radicalidad, perfecci\u00f3n, santidad. Como realista ap\u00f3stol de los j\u00f3venes en peligro y peligrosos, sab\u00eda planear fines y recorridos educativos a las distintas disponibilidades para mejorar… En la media de los casos, en cambio, se habr\u00edan podido intentar escaladas m\u00e1s osadas: hacia una moralidad m\u00e1s\u00a0 afinada y un sentido religioso esencial, con la constante implicaci\u00f3n\u00a0 de vivir en estado de gracia, diligentemente conservada o prontamente recuperada, osando tambi\u00e9n\u00a0 ascesis valientes hacia el monte de las bienaventuranzas en sus diferentes cotas, incluida la cima\u201d (vol. 1, Cap XI: Un sacerdote y un laico nuevos para tiempos y problemas nuevos [1853-1862] p. <\/em>341).
      \nCreo que dentro de una clara propuesta espiritual, tiene que reforzarse la convicci\u00f3n de que a los j\u00f3venes se les ofrezca tambi\u00e9n una clara propuesta de caridad apost\u00f3lica<\/em>.
      \nEste protagonismo acompa\u00f1ado es una consecuencia necesaria de un camino que, partiendo de una lectura de la propia historia, se abre a Dios para abrazar a la historia y a los hermanos. En nuestra tradici\u00f3n salesiana, as\u00ed como tambi\u00e9n en las varias propuestas actuales en la Iglesia, los j\u00f3venes que encuentran a Cristo de un modo personal y aut\u00e9ntico pasan casi espont\u00e1neamente de una experiencia de discipulado a una experiencia de apostolado. Algunas veces somos nosotros, los evangelizadores y educadores, los que debemos estar atentos a no sofocar la capacidad de la que son portadores los j\u00f3venes.
      \nPor \u00faltimo, una dimensi\u00f3n que debe reforzarse cada vez m\u00e1s es la de una pastoral juvenil en equipo<\/em>.
      \nLa dimensi\u00f3n comunitaria, en el sentido amplio del t\u00e9rmino, no es s\u00f3lo funcional para las necesidades de los j\u00f3venes que encuentran en el grupo pertenencia e identidad. Trabajar en equipo es un \u2018signo\u2019 que debe convertirse en \u2018escuela\u2019. El testimonio de un grupo de personas que, mientras hacen la propuesta pastoral, ya la viven, lleva consigo un gran valor prof\u00e9tico. En la misma din\u00e1mica del equipo se encuentra de modo muy claro lo que se quiere comunicar.
      \nUna verdadera comunidad que propone caminos juveniles ya \u2018proclama\u2019 antes de \u2018proponer\u2019, al ser ella misma un signo que favorece caminos y ofrece espacios de crecimiento por medio de su testimonio prof\u00e9tico. Para ser m\u00e1s preciso, me refiero de nuevo a la experiencia de Valdocco para nosotros los Salesianos: Valdocco es el paradigma carism\u00e1tico de una comunidad evangelizadora y educadora que supo generar un clima de familia, ofrecer una propuesta pastoral integral, y sostener un sano protagonismo juvenil que hizo nacer no s\u00f3lo a la Congregaci\u00f3n Salesiana sino a toda la Familia Salesiana.
      \nCreo que en este proceso crece la convicci\u00f3n de que estos varios brotes pueden asegurar un s\u00f3lido futuro de la pastoral juvenil.
      \n <\/p>\n

        \n
      1. Activar procesos en las realidades locales<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

         
        \nD.\u00a0<\/strong>La indicaci\u00f3n dada es activar procesos (para el re-pensamiento de la PJ), m\u00e1s que volver a proponer f\u00f3rmulas tradicionales. \u00bfQu\u00e9 piensa que se debe hacer en las realidades locales ante esta invitaci\u00f3n?<\/em>
        \n 
        \nR.\u00a0<\/strong>Ese es el coraz\u00f3n del trabajo pastoral. Si por una parte se ve que los agentes pastorales\u2013uno a uno pero tambi\u00e9n en grupo \u2013 est\u00e1n realmente interesados en hacerlo bien y a ofrecer buenas propuestas, eso solo no basta para que esas propuestas entren en sinton\u00eda con el mundo juvenil, y a\u00fan menos para \u00abentregar \u00bb la buena noticia de modo que \u00e9sta pueda entrar en sinton\u00eda con ellos. Aqu\u00ed no se trata de apelar a la buena voluntad de cada uno y del grupo, sino de algo muy distinto.
        \nCuando hoy hablamos de un cambio de paradigma, estamos diciendo una cosa sencilla y dif\u00edcil al mismo tiempo. Es f\u00e1cil entender que muchas cosas que se hac\u00edan antes no se puede seguir haci\u00e9ndolas ya. Pero resulta dif\u00edcil descubrir el camino necesario para el cambio. Algunos se sienten incapaces de adoptar nuevas metodolog\u00edas (\u00abNo tenemos ya ductilidad mental\u2026\u00bb), otros encuentran dificultad en hacer las cosas de un modo diferente al que han usado (\u00abhemos hecho siempre as\u00ed y siempre ha funcionado\u2026\u00bb) y as\u00ed sucesivamente.
        \nEs interesante que nuestro recordado Rector Mayor D. Egidio Vigan\u00f2, precisamente en su \u00faltima carta de 1995, C\u00f3mo releer hoy el carisma del Fundador<\/em>, presentaba ese reto como central. Cito su reflexi\u00f3n, aunque es un poco larga, porque creo que sigue valiendo todav\u00eda\u00a0 para nosotros hoy:
        \n 
        \n\u201cLa concreci\u00f3n metodol\u00f3gica con vistas a una acci\u00f3n apost\u00f3lica actualizada y m\u00e1s incisiva ha hecho salir al primer plano lo indispensable de una implicaci\u00f3n\u00a0 de formaci\u00f3n permanente para todos los hermanos: asumir con claridad la relectura fundacional y estimular a cada comunidad a una capacidad de proyectar en concreto la nueva evangelizaci\u00f3n\u2026 el secreto de ese ejercicio es la\u00a0 competencia en la animaci\u00f3n\u2026 No es un trabajo sencillo ni a corto plazo, pero es absolutamente indispensable; sin \u00e9l la relectura fundacional acaba en la biblioteca. As\u00ed se ha constatado que en una hora de profundos cambios el concepto de \u00abformaci\u00f3n\u00bb tiene su significado fundamental y prioritario (\u00abprinceps analogatum\u00bb) en la formaci\u00f3n permanente<\/em>, que cada casa religiosa aut\u00e9ntica se convierte en centro de formaci\u00f3n y que la formaci\u00f3n inicial va orientada hacia la permanente para preparar a los formandos a ser sujetos capaces y comprometidos en afrontar los diversos y urgentes retos de la transformaci\u00f3n cultural y eclesial\u2026 Junto a la fidelidad en el Esp\u00edritu se estimula la creatividad en la misi\u00f3n con sensibilidad hacia la pluriformidad de las situaciones e impulsando al gobierno a estructurarse y a moverse con vistas a un \u00abpluralismo en la unidad\u00bb y de una \u00abunidad en el pluralismo\u00bb\u201d.
        \n 
        \nTenemos ah\u00ed la respuesta a la pregunta.
        \nHace falta que nuestras Comunidades Educativas Pastorales (CEP) locales sigan siendo comunidades con una actitud de gran apertura y acogida, que tengan un coraz\u00f3n que sepa amar y hacerse amar, que sean comunidades inteligentes<\/em>, es decir, capaces de hacer una lectura en profundidad, atenta a la propia realidad y al anhelo oculto en el coraz\u00f3n de los j\u00f3venes a los que est\u00e1n llamadas a servir.
        \nQue en esta actitud de formaci\u00f3n permanente funcionen comunidades que sepanvivir el \u00absentire cum Ecclesia\u00bb<\/em>, nutri\u00e9ndose rec\u00edprocamente de y nutriendo la vida de la Iglesia. En este sentido creo que una pobre \u00a0lectura o la ausencia del estudio del magisterio de la Iglesia es una laguna en la que hay que trabajar mucho y a la largo plazo.
        \nEn concreto veo muchas realidades locales que se ponen en sinton\u00eda con esta necesidad, proponiendo, de modo sistem\u00e1tico, cursos de formaci\u00f3n, jornadas de estudio y grupos de trabajo: es este un campo en el que hace falta acompa\u00f1ar y animar esos procesos y propuestas.
        \n 
        \n\u00a0<\/strong>
        \nD.\u00a0<\/strong>En la carta de acompa\u00f1amiento del Rector Mayor se presentan las coordenadas para el trabajo (y para enmarcar el sentido de la PJ): conciencia de un contexto que ha cambiado, memoria de las fuentes carism\u00e1ticas (el \u00abDa mihi almas\u00bb), el objetivo (una implicaci\u00f3n m\u00e1s expl\u00edcita para la evangelizaci\u00f3n), el m\u00e9todo y el estilo (una correcta relaci\u00f3n entre evangelizaci\u00f3n y educaci\u00f3n). \u00bfQuiere comentarlo?<\/em>
        \n 
        \nR.\u00a0<\/strong>La carta presenta los rasgos que \u2013 en su conjunto \u2013 aseguran una acci\u00f3n pastoral integral y coordinada.
        \nQuerr\u00eda aclararlo refiri\u00e9ndome a los planteamientos metodol\u00f3gicos de documentos como Evangelii nuntiandi<\/em>, Catechesi tradendae<\/em> y, especialmente, los \u00faltimos Lineamenta<\/em>para la XII Asamblea General Ordinaria del S\u00ednodo de los Obispos, La nueva evangelizaci\u00f3n para la transmisi\u00f3n de la fe cristiana<\/em>.
        \nExiste una metodolog\u00eda que por una parte insiste en prestar atenci\u00f3n a las cambiadas condiciones sociales y culturales, que nunca deben subestimarse, y, por otra enfatiza tres puntos focales: el contenido de la fe, los medios aptos y las personas que asumen esta tarea de modo prof\u00e9tico.
        \nEl re-pensamiento de la pastoral juvenil salesiana se presenta en plena sinton\u00eda con el camino de la Iglesia, tanto por el m\u00e9todo como, en grado superior, por el contenido.
        \nUna atenci\u00f3n muy especial a la relaci\u00f3n entre evangelizaci\u00f3n y educaci\u00f3n se impone para nosotros, como Salesianos, de manera especialmente urgente. Tambi\u00e9n\u00a0 nosotros corremos el riesgo, o tal vez en algunos casos lo hemos corrido ya, de crear escisi\u00f3n, ruptura entre evangelizaci\u00f3n y educaci\u00f3n. Lo que para Pablo VI era el riesgo de una ruptura entre Evangelio y cultura, nosotros lo encontramos del mismo modo y con las mismas consecuencias tr\u00e1gicas\u00a0 en la dial\u00e9ctica entre evangelizaci\u00f3n y educaci\u00f3n.
        \nLas palabras de Pablo VI sobre este riesgo se nos aplican tambi\u00e9n\u00a0 a nosotros: \u201cla ruptura entre el Evangelio y la cultura es sin duda el drama de nuestra \u00e9poca, como lo fue tambi\u00e9n de otras. Por tanto se deben hacer todos los esfuerzos con vistas a una generosa evangelizaci\u00f3n de la cultura, m\u00e1s exactamente de las culturas. Deben regenerarse mediante el encuentro con la Buena Nueva. Pero este encuentro no se producir\u00e1, si la Buena Noticia no se proclama\u201d (EN<\/em> 20).
        \n <\/p>\n

          \n
        1. Frente a las resistencias<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

           
          \nD<\/strong>. Si el objetivo es la evangelizaci\u00f3n de los j\u00f3venes, \u00bfno piensa que podr\u00eda haber \u00abresistencias\u00bb o incomprensiones en ambientes como las escuelas y los centros de formaci\u00f3n profesional, o en contextos interculturales e inter-religiosos \u2013 o de gran pobreza de demanda religiosa expl\u00edcita \u2013 donde tal vez la evangelizaci\u00f3n (el anuncio, el camino de fe, la pertenencia eclesial, el testimonio de vida\u2026) no puede ser tan expl\u00edcita y declarada?<\/em>
          \n 
          \nR.\u00a0<\/strong>Debemos situar estas preocupaciones de un modo correcto, es decir, en el conjunto del mandato misionero de Jes\u00fas.
          \nHay dos niveles distintos pero no separados. Por una parte el mandato misionero nos pertenece como comunidad. Toda persona que sigue a Jes\u00fas se siente llamada <\/em>(\u03ba\u03bb\u03b7\u03c4\u03cc\u03c2 – kl\u0113tos) a anunciar la Buena noticia que ha recibido. Del mismo verbo \u201cllamar\u201d (\u03ba\u03b1\u03bb\u03ad\u03c9 – kale\u014d) deriva la palabra \u1f10\u03ba\u03ba\u03bb\u03b7\u03c3\u03af\u03b1 (ekkl\u0113sia), Iglesia, la asamblea convocada, la asamblea de los llamados y de los elegidos. En ese contexto evang\u00e9lico y eclesiol\u00f3gico, la llamada a proclamar la Buena noticia nos pertenece profundamente. Es un elemento que no podemos tratar como opcional<\/em>. El grito de Pablo en la 1 Cor 9, 16 \u2013 ay de m\u00ed si no predicase el Evangelio<\/em> \u2013 no es un elemento marginal.
          \nConvencidos de esta llamada fundamental, sostenidos por esta s\u00f3lida convicci\u00f3n, pasamos al segundo nivel: miremos a nuestro alrededor y escuchemos la sed de los j\u00f3venes. El modo con que respondamos a su sed, los modos graduales con los que logremos confiarles la Buena noticia, no pueden debilitar esa fe fundamental en Jes\u00fas que nos env\u00eda como ap\u00f3stoles.
          \nPor lo que en la cotidianidad de las diversas situaciones pastorales, nos enfrentamos con las opciones prudenciales que indiquen c\u00f3mo queremos llegar a vivir nuestra llamada de evangelizadores y educadores con nuestros j\u00f3venes.
          \nOtra cosa ser\u00e1, obviamente, el modelo del que trabaja en ambientes musulmanes, donde el testimonio silencioso, alegre y convencido, transmite en el silencio mucho m\u00e1s de lo que puedan transmitir las palabras. Igualmente diferente ser\u00e1 la metodolog\u00eda pastoral de los que trabajan en ambientes multi-religiosos, donde la elecci\u00f3n de los procesos tiene en cuenta a todos los que est\u00e1n presentes en nuestras obras. Ah\u00ed la variada atenci\u00f3n nos hace proponer caminos trazados sobre una sana visi\u00f3n antropol\u00f3gica que sigue siempre abierta a lo trascendente. Como diversa ser\u00e1 la propuesta pastoral a los est\u00e1n dispuestos a hacer un camino m\u00e1s comprometido, un camino mistag\u00f3gico.
          \nEn todas estas situaciones la propuesta pastoral est\u00e1 siempre atenta a la historia de las personas, a la gradualidad de los procesos, iluminada siempre por el mandato misionero de Jes\u00fas.<\/p>\n

            \n
          1. Egidio Vigan\u00f2, a prop\u00f3sito de este delicado reto, en la carta citada propone dos elementos todav\u00eda actuales.<\/li>\n<\/ol>\n

            El primero es que la tarea que nos espera no es f\u00e1cil, y no podemos tratarla con superficialidad: \u201cEst\u00e1bamos convencidos de la urgencia de saber encarnar, con d\u00factil metodolog\u00eda, la identidad com\u00fan en las diferencias de las culturas locales. Es \u00e9sta una tarea ardua: requiere claridad de identidad en la formaci\u00f3n y una verdadera sensibilidad e inteligencia de discernimiento por las diferencias culturales.\u201d
            \nSegundo: no basta s\u00f3lo la Buena voluntad. Si no estamos atentos, la Buena voluntad sola corre el riesgo de traducirse en un paternalismo pastoral, sin\u00a0 contenido y, por consiguiente, sin futuro.
            \nPor tanto es indispensable la urgencia de asegurar \u201csiempre una seria reflexi\u00f3n teol\u00f3gica, porque es precisamente en el \u00e1mbito de un cierto entusiasmo apodado ‘pastoral’ donde se corre tambi\u00e9n el peligro de desembocar en caminos equivocados, apart\u00e1ndonos poco a poco de la autenticidad del carisma.\u201d
            \nAclarados estos elementos, podemos afrontar las dificultades de las diversas situaciones buscando proponer siempre lo que la historia de nuestros j\u00f3venes nos permite, lo que su coraz\u00f3n est\u00e1 dispuesto a absorber.
            \nCito una experiencia que tuve visitando algunas obras salesianas en Sudam\u00e9rica. En especial en una de ellas los Salesianos est\u00e1n haciendo un trabajo extraordinario con j\u00f3venes que han vivido una dram\u00e1tica experiencia de guerrilla. Han conocido el odio, la violencia, el conflicto armado y qui\u00e9n sabe qu\u00e9 m\u00e1s. A estos j\u00f3venes los Salesianos les est\u00e1n ofreciendo la Buena noticia d\u00e1ndoles una casa marcada por el amor y el respeto de adultos aut\u00e9nticos; una oportunidad de un futuro marcado por valores evang\u00e9licos como la caridad, la compasi\u00f3n, y un camino educativo integral. Yo mismo escuch\u00e9 sus historias, y se advierte que tienen sed de paz, de solidaridad, de un amor adulto que no los use y no les traicione. En un contexto de procesos graduales, llegar al encuentro con Jes\u00fas constituye una meta a la que ellos tienen derecho. Nuestro cometido es favorecer ese encuentro, gozoso y feliz, superando muchos miedos hasta de prejuicios ideol\u00f3gicos.
            \nEn esta situaci\u00f3n, con estos j\u00f3venes, esta es la verdadera gran profec\u00eda. Pero sin una atenta lectura de sus heridas, sin la inteligente disponibilidad de un educador que es portador de la Buena noticia, no se recorre un verdadero camino integral, humano y espiritual.
            \nPor \u00faltimo, creo que las dificultades que a veces surgen, para entorpecer o disminuir la necesidad de un expl\u00edcito anuncio del Evangelio, pueden ser una pantalla que esconde una nula preparaci\u00f3n teol\u00f3gica y carism\u00e1tica y una lectura superficial y t\u00edmida de la realidad de la vida de nuestros j\u00f3venes.
            \nUna expresi\u00f3n de Pablo VI me parece que mueve los hilos de nuestra reflexi\u00f3n: es un reto que toca el coraz\u00f3n de nuestra interioridad y despierta la urgencia de nuestra autenticidad:
            \n\u201cSe repite con frecuencia hoy que nuestro siglo tiene sed de autenticidad. Sobre todo a prop\u00f3sito de los j\u00f3venes, se afirma que tienen horror a lo ficticio, a lo falso, y que buscan por encima de todo la verdad y la transparencia. Estos \u00absignos de los tiempos\u00bb deber\u00edan encontrarnos alerta. T\u00e1citamente o con gritos altos, pero siempre con fuerza, nos preguntan: \u00bfCre\u00e9is de verdad lo que anunci\u00e1is? \u00bfViv\u00eds lo que cre\u00e9is? \u00bfPredic\u00e1is de verdad lo que viv\u00eds? El testimonio de la vida ha llegado a ser m\u00e1s que nunca una condici\u00f3n esencial para la eficacia profunda de la predicaci\u00f3n. Por este motivo estamos aqu\u00ed, hasta cierto punto responsables del \u00e9xito del Evangelio que proclamamos\u201d (EN<\/em> 76).<\/p>\n

            Fabio Attard, sdb<\/p>\n

             
            \n 
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            LOS SALESIANOS REVISAN SU PASTORAL JUVENIL Entrevista a Fabio Attard, sdb. Consejero General para la Pastoral Juvenil   Contexto \u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 En Junio de 2011 Misi\u00f3n Joven recog\u00eda una entrevista de NPG al Consejero general de los Salesianos para la pastoral juvenil sobre el plan de revisi\u00f3n de la PJ para verificar su adecuaci\u00f3n en una […]<\/p>\n","protected":false},"author":3,"featured_media":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"","_et_pb_old_content":"","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[1315,94],"tags":[],"class_list":["post-7112","post","type-post","status-publish","format-standard","hentry","category-fabio-attard","category-mision-joven-2"],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/7112","targetHints":{"allow":["GET"]}}],"collection":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/users\/3"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=7112"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/7112\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=7112"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=7112"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=7112"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}