{"id":7338,"date":"2011-06-01T00:00:16","date_gmt":"2011-05-31T22:00:16","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/index2.php\/?p=7338"},"modified":"2011-06-01T00:00:16","modified_gmt":"2011-05-31T22:00:16","slug":"los-encuentros-de-jesus-itinerarios-para-una-pastoral-de-acogida","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/los-encuentros-de-jesus-itinerarios-para-una-pastoral-de-acogida\/","title":{"rendered":"LOS ENCUENTROS DE JES\u00daS, ITINERARIOS PARA UNA PASTORAL DE ACOGIDA"},"content":{"rendered":"

 
\nJos\u00e9 Joaqu\u00edn G\u00f3mez Palacios<\/strong>
\nEncargado de Escuelas. Salesianos Valencia<\/strong>
\n\u00a0<\/strong>
\nS\u00cdNTESIS DEL ART\u00cdCULO<\/strong>
\nEn este art\u00edculo, el autor, se acerca a la escritura para recoger algunos encuentros significativos de Jes\u00fas. En estos encuentros se concreta la acci\u00f3n salvadora de Dios en medio de su pueblo. En estos textos, el autor, ve una manera de hacer en Jes\u00fas que orienta nuestra manera de hacer. Por todo ello habla de unos itinerarios para una pastoral de acogida.
\n 
\nUna parte importante de los evangelios narra los encuentros mantenidos por Jes\u00fas con diversas personas y grupos. Las relaciones personales vividas por el Maestro de Nazareth fueron signo de vida para quienes las protagonizaron, pudiendo considerarse como \u00ablugar teol\u00f3gico\u00bb. Mediante aquellos encuentros se concretaba la acci\u00f3n salvadora de Dios en medio de su pueblo. En la escueta descripci\u00f3n de algunos de estos encuentros aparecen actitudes de Jes\u00fas que pueden considerarse como pautas para orientar la misi\u00f3n de los disc\u00edpulos.
\nEl presente art\u00edculo pretende fijar la mirada sobre algunos encuentros de Jes\u00fas acaecidos en dos escenarios geogr\u00e1ficos concretos: Cafarna\u00fan y Jeric\u00f3. \u00bfC\u00f3mo se originaban? \u00bfQu\u00e9 actitudes mostraba Jes\u00fas en la acogida? \u00bfQu\u00e9 pautas de comportamiento segu\u00eda?
\nDel an\u00e1lisis de cada texto se deducen unos \u00abReflejos desde la Palabra\u00bb en un intento de concretar itinerarios para una pastoral del encuentro y la acogida.
\n <\/p>\n

    \n
  1. Cafarna\u00fan, la ciudad de Jes\u00fas<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

     
    \nCafarna\u00fan, la ciudad de Jes\u00fas<\/strong>
    \nEn multitud de ocasiones la ciudad de Cafarna\u00fan es citada como un importante lugar de referencia en la misi\u00f3n de Jes\u00fas. Probablemente contaba con unos 2.000 habitantes en el siglo I. Sus humildes viviendas se extend\u00edan a lo largo de un kil\u00f3metro siguiendo la ribera norte del Mar de Galilea. Sus casas sencillas y bajas, construidas con piedras oscuras de basalto, albergaban a pescadores y agricultores. La pesca era abundante y los campos ofrec\u00edan cosechas de cereal, aceite y vino.
    \nEl edificio m\u00e1s emblem\u00e1tico de la ciudad era su Sinagoga, parte de la cual todav\u00eda se halla en pie. Construida sobre un solar de unos mil metros cuadrados, adquiri\u00f3 nuevo esplendor con su reconstrucci\u00f3n en siglo II. A partir de este momento pas\u00f3 a denominarse \u00abLa Blanca\u00bb por el color claro de las piedras con que fue restaurada.
    \nCafarna\u00fan se hallaba situada en las inmediaciones de la antigua ruta que un\u00eda Siria con Egipto. Su posici\u00f3n estrat\u00e9gica le hac\u00eda albergar un destacamento de soldados mercenarios dependientes de Herodes Antipas, rey de Galilea.
    \n 
    \nLa casa de Jes\u00fas en Cafarna\u00fan<\/strong>
    \nA escasos cien metros de la Sinagoga de Cafarna\u00fan se descubri\u00f3, (en las excavaciones arqueol\u00f3gicas de 1968-1984) una bas\u00edlica bizantina del siglo IV, construida sobre una casa del siglo I con inscripciones que confirman que esta vivienda alberg\u00f3 a una comunidad judeo-cristiana en los a\u00f1os inmediatos que siguieron a la muerte y resurrecci\u00f3n de Jes\u00fas de Nazareth. Una aut\u00e9ntica \u00abdomus-eclesia\u00bb.
    \nLa parte m\u00e1s importante de la ermita bizantina se alza sobre una habitaci\u00f3n de 40 metros cuadrados. Las inscripciones de sus paredes citan con profusi\u00f3n a Pedro; otras confiesan que Jes\u00fas es el Se\u00f1or. El lugar fue objeto de peregrinaci\u00f3n y veneraci\u00f3n ya en el siglo III.
    \nJes\u00fas de Nazareth debi\u00f3 residir, con toda probabilidad, en esta \u00abcasa\u00bb de Cafarna\u00fan. En ella cur\u00f3 a los enfermos, anunci\u00f3 su mensaje, acogi\u00f3 y perdon\u00f3 los pecados a un paral\u00edtico, explic\u00f3 sus ense\u00f1anzas a los disc\u00edpulos, rez\u00f3… Y, cuando, tras la muerte y resurrecci\u00f3n de Jes\u00fas se inicia la persecuci\u00f3n en Jerusal\u00e9n, los cristianos de la primera hora se desplazaron hacia lugares conocidos del norte. Se instalaron nuevamente en Cafarna\u00fan e hicieron de la vivienda de la suegra de Pedro una casa com\u00fan y compartida.
    \nDe la estancia de Jes\u00fas en esta \u00abcasa\u00bb de Cafarna\u00fan se desprenden interesantes indicaciones para el disc\u00edpulo que sigue las huellas de Jes\u00fas.
    \n1.1.\u00a0 Cur\u00f3 a la suegra de Pedro y a muchos enfermos\u00a0 (Mc 1, 29-39)
    \nA juzgar por las acciones que se\u00f1ala el evangelio de Marcos en la \u00abcasa de la suegra de Pedro\u00bb, bien pudiera denominarse: \u00abun hogar para la acogida y la esperanza. Entre las paredes de esta casa Jes\u00fas fortaleci\u00f3 los lazos de su primera comunidad de disc\u00edpulos, la hizo centro de su misi\u00f3n, explic\u00f3 los contenidos de la Buena Noticia proclamada, cur\u00f3 a multitud de enfermos devolvi\u00e9ndoles la salud y la esperanza, fue lugar de interioridad y oraci\u00f3n… En el evangelio de Marcos, Jes\u00fas inicia su actividad evangelizadora en una casa.
    \nLa primera persona en recibir la curaci\u00f3n de Jes\u00fas es la suegra de Pedro; la due\u00f1a de \u00abla casa\u00bb. Est\u00e1 en cama y con fiebre\u2026 Ante el importante acontecimiento de la llegada del Maestro de Nazareth y sus disc\u00edpulos, se ve postrada en el lecho, imposibilitada para acogerles y apartada de su actividad habitual.
    \nLos verbos que describen las acciones de Jes\u00fas son un programa para el agente de pastoral: \u00abJes\u00fas se acerc\u00f3, la tom\u00f3 de la mano y la levant\u00f3. Se le pas\u00f3 la fiebre y se puso a servirles. Al anochecer, cuando se puso el sol, le llevaron todos los enfermos y endemoniados. La poblaci\u00f3n entera se agolpaba a la puerta. Cur\u00f3 a muchos enfermos de diversos males\u2026\u00bb.
    \n 
    \nReflejos desde la Palabra<\/strong><\/p>\n

      \n
    • El agente de pastoral se esfuerza por crear un clima de cercan\u00eda personal.<\/li>\n
    • En una sociedad que sumerge a los individuos en el anonimato fr\u00edo y en el ritmo trepidante de las actividades, se acerca a las personas, busca espacios para el encuentro, les toma de la mano, comprende sus dificultades\u2026<\/li>\n
    • As\u00ed como Jes\u00fas devuelve a quienes cura la capacidad de actuar, integr\u00e1ndoles social y religiosamente, el agente de pastoral facilita el protagonismo y la acci\u00f3n de los destinatarios.<\/li>\n
    • Los agentes de pastoral comprometidos con la catequesis y el mundo de la educaci\u00f3n, son sensibles a los problemas concretos de cada ni\u00f1o y adolescente. Lejos de buscar soluciones globales en par\u00e1metros educativos est\u00e1ndar, personalizan su acci\u00f3n…<\/li>\n<\/ul>\n

       
      \n1.2.\u00a0 La importancia de unos \u00abpersonajes secundarios\u00bb (Mc. 2, 1-12)
      \n 
      \nLlega a \u00abla casa\u00bb un paral\u00edtico. Est\u00e1 a merced de las buenas personas que lo trasladan en camilla. Tal vez son sus familiares o unos buenos amigos. El evangelio no da detalles de estos \u00abpersonajes secundarios\u00bb, tan importantes en el desarrollo de la narraci\u00f3n. Frente a estos protagonistas se perfilan los escribas, aut\u00e9nticos \u00abantagonistas\u00bb del relato.
      \n–\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Antagonistas: Son los escribas. Permanecen todo el rato \u00absentados\u00bb, ocupando un espacio vital. La inmovilidad de estos escribas obstaculiza la difusi\u00f3n del anuncio de la Palabra e impide que el paral\u00edtico pueda encontrarse con Jes\u00fas.
      \n–\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 Protagonistas: Son los personajes secundarios que ayudan al paral\u00edtico. Se mueven, buscan una soluci\u00f3n creativa para que el enfermo pueda acceder a Jes\u00fas; levantan el techo de la casa de la suegra de Pedro…
      \n 
      \nJes\u00fas, viendo la fe de los portadores, perdona los pecados al paral\u00edtico y, ante las cr\u00edticas de los responsables de la instituci\u00f3n religiosa, verifica su poder curando al impedido.
      \nUn primer mensaje es el inter\u00e9s de Jes\u00fas por una salvaci\u00f3n integral, que abarca aspectos espirituales y materiales. Por eso anuncia al paral\u00edtico dos buenas noticias, diversas, pero complementarias: tus pecados son perdonados, y… toma tu camilla, lev\u00e1ntate y anda. Pero en la forma de actuar de \u00ablos personajes secundarios\u00bb que no cejan en su intento hasta conseguir que el impedido se encuentre con Jes\u00fas, descubrimos tambi\u00e9n un proyecto transferible a los agentes de pastoral.
      \n 
      \nReflejos desde la Palabra<\/strong>
      \na) <\/strong>Los \u00abpersonajes secundarios\u00bb que portan la camilla<\/strong><\/p>\n

        \n
      • Evitan el inmovilismo. No se conforman con el sufrimiento del tullido.<\/li>\n
      • Hacen lo posible, y lo imposible, para facilitar el encuentro del enfermo con Jes\u00fas.<\/li>\n
      • Son solidarios. Entregan su tiempo, dedicaci\u00f3n y presencia.<\/li>\n
      • Desarrollan una acci\u00f3n positiva para que el paral\u00edtico no se quede al margen. Se esfuerzan por integrar social y religiosamente a aquel hombre postrado que estaba excluido.<\/li>\n
      • Encuentran dificultades, pero las superan con creatividad e imaginaci\u00f3n. No se resignan ante las dificultades que hallan en su intento de facilitar el encuentro entre el enfermo y Jes\u00fas.<\/li>\n<\/ul>\n

         
        \nb) <\/strong>Lo que hacen los escribas<\/strong><\/p>\n

          \n
        • Los escribas est\u00e1n sentados c\u00f3modamente, ocupando un lugar vital, impidiendo el encuentro, observando lo que ocurre\u2026 pero sin implicarse, sin moverse y sin echar una mano para facilitar el encuentro del paral\u00edtico con Jes\u00fas.<\/li>\n
        • Cuando los \u00abpersonajes secundarios\u00bb consiguen el encuentro del paral\u00edtico con Jes\u00fas, y tiene lugar su transformaci\u00f3n interior y exterior, los escribas: murmuran, acusan, dudan\u2026<\/li>\n<\/ul>\n

           
          \n1.3.\u00a0 La multiplicaci\u00f3n de los panes y los peces (Mc 6, 30-43)
          \nLos cristianos de los primeros siglos construyeron peque\u00f1as ermitas bizantinas en las orillas del Mar de Galilea para conmemorar palabras y gestos de Jes\u00fas.
          \nUna antigua tradici\u00f3n sit\u00faa en Tabgha, lugar ribere\u00f1o vecino a Cafarna\u00fan, la multiplicaci\u00f3n de los panes y los peces. As\u00ed lo sugiere un primitivo culto cristiano. Entre los restos de la ermita bizantina del siglo IV, se conserva un mosaico con s\u00edmbolos eucar\u00edsticos y la imagen de una cesta conteniendo los panes y flanqueada por dos peces.
          \nLa palabra Tabgha es la contracci\u00f3n \u00e1rabe de la expresi\u00f3n griega \u00abHeptapegon\u00bb (Siete manantiales). Varias de aquellas fuentes fluyen todav\u00eda en la actualidad.
          \n 
          \na) <\/strong>Una pedagog\u00eda sostenida sobre los hombros del Buen Pastor<\/strong>
          \nLa multiplicaci\u00f3n de los panes y los peces debi\u00f3 ser un texto muy significativo para las primeras comunidades cristianas, no en vano es narrado por los cuatro evangelios.
          \nEn \u00e9l se inicia un tema que se desarrollar\u00e1 ulteriormente: Jes\u00fas es el Buen Pastor que cuida del pueblo. \u00abSinti\u00f3 l\u00e1stima de ellos porque andaban como ovejas sin pastor\u00bb
          \nLa imagen del Buen Pastor, tan utilizada en el Evangelio, no es original de Jes\u00fas de Nazareth. Est\u00e1 tomada del cap\u00edtulo 34 del libro del profeta Ezequiel y tambi\u00e9n forma parte del acerbo simb\u00f3lico del pueblo de Israel que\u00a0comparaba a Dios con un Buen Pastor.
          \nLas descripciones y recursos literarios que utiliz\u00f3 Ezequiel son tan sugerentes que constituyen un modelo para la actuaci\u00f3n del agente de pastoral: Yahv\u00e9, cansado de ver c\u00f3mo proliferan los malos pastores que se aprovechan del reba\u00f1o, va ser el pastor de su pueblo. \u00c9l cuidar\u00e1 con ternura y misericordia de las ovejas perdidas, las librar\u00e1 de tormentas y tempestades, las conducir\u00e1 hacia dehesas de pastos abundantes, coger\u00e1 en hombros a los corderillos que tienen dificultades, defender\u00e1 al reba\u00f1o de los lobos… Iniciar\u00e1 un tiempo nuevo para su pueblo.
          \nEste conjunto de actitudes pueden transferirse al agente de pastoral que desarrolla su misi\u00f3n en la catequesis y la educaci\u00f3n, y se siente llamado a ser \u00abbuen pastor\u00bb para un pueblo de j\u00f3venes.
          \n 
          \nReflejos desde la Palabra<\/strong><\/p>\n

            \n
          • Cuidar, reunir, apacentar\u2026 a los ni\u00f1os y j\u00f3venes confiados para que ninguno se pierda.<\/li>\n
          • Proporcionar jugosos pastos en f\u00e9rtiles dehesas\u2026 aliment\u00e1ndoles con un ambiente rico en valores para contribuir a su desarrollo integral.<\/li>\n
          • Proporcionar lugar de reposo\u2026facilitando el desarrollo de la interioridad, la reflexi\u00f3n y el silencio.<\/li>\n
          • Buscar a la oveja perdida y descarriada\u2026 no dando a nadie por extraviado definitivamente y ofreciendo nuevas oportunidades a quienes m\u00e1s lo necesitan.<\/li>\n
          • Curar a la oveja herida, confortar a la enferma\u2026 ejerciendo el servicio de la curaci\u00f3n.<\/li>\n
          • Salvar a las ovejas del pillaje, liberarlas de la explotaci\u00f3n y ahuyentar a las bestias feroces\u2026 defendi\u00e9ndolas, desarrollando una visi\u00f3n cr\u00edtica de la realidad y actuando con mentalidad preventiva.<\/li>\n
          • Hacer con ellas una alianza de paz\u2026 creando espacios de encuentro y cercan\u00eda personal para facilitar el acompa\u00f1amiento.<\/li>\n<\/ul>\n

             
            \nb) <\/strong>El milagro de la solidaridad<\/strong>
            \nUna vez que Jes\u00fas ha contemplado la realidad y se ha conmovido de la situaci\u00f3n que observa, entran en escena los disc\u00edpulos con distinta actitud. Frente a la necesidad de la multitud, ellos proponen al Maestro que despida a la gente para que vayan a \u00abcomprar\u00bb el alimento. Llegados a este momento, Jes\u00fas entabla un di\u00e1logo con sus disc\u00edpulos para mostrarles una nueva ense\u00f1anza: el milagro de la solidaridad.
            \nLa realidad no se transforma desde la indiferencia que abandona a la gente a su suerte, ni sugiriendo que se llenen de objetos, ni con soluciones maravillosas. Jes\u00fas propone actitudes comprometidas. Y, cuando los disc\u00edpulos ponen en com\u00fan lo poco que tienen y lo presentan a Jes\u00fas, se produce el \u00abmilagro\u00bb de la solidaridad.
            \nLa segunda parte de este relato muestra varias actitudes que debe desarrollar el disc\u00edpulo.
            \n\u00a0<\/em><\/strong>
            \nReflejos desde la Palabra<\/strong><\/p>\n

              \n
            • Tener ojos de compasi\u00f3n. Contemplar la realidad con actitud de misericordia. Lejos deben quedar las miradas duras que ignoran el sufrimiento o que tan s\u00f3lo se lamentan sin implicarse<\/li>\n
            • Evitar la indiferencia ante los problemas. El agente de pastoral rechaza ese \u201cfalso respeto\u00bb que tan s\u00f3lo es indiferencia encubierta.<\/li>\n
            • Frente a la soluci\u00f3n centrada en \u00abcomprar\u00bb, o en intentar remediar las dificultades con recursos y objetos, Jes\u00fas propone compartir y poner en com\u00fan.<\/li>\n
            • El texto subraya la importancia de unir, formar grupo y crear fraternidad.<\/li>\n
            • Los disc\u00edpulos son encargados de repartir los panes y los peces\u2026 La acci\u00f3n liberadora de Jes\u00fas se canaliza a trav\u00e9s de los disc\u00edpulos. Ellos son llamados a ser veh\u00edculo y canal de la acci\u00f3n salvadora del Maestro.<\/li>\n
            • Las palabras que pronuncia Jes\u00fas sobre el pan tienen resonancia eucar\u00edstica. La celebraci\u00f3n de la fe debe ir unida a la solidaridad. Ambas realidades forman parte del mismo relato.<\/li>\n<\/ul>\n

               
              \n1.4.\u00a0 El centuri\u00f3n de Cafarna\u00fan (Mt 8, 5-11)
              \nLa acci\u00f3n transcurre tambi\u00e9n en la ciudad de Cafarna\u00fan. El evangelio de Mateo sit\u00faa este relato inmediatamente antes de que Jes\u00fas entre en casa de la suegra de Pedro.
              \nEl protagonista es un centuri\u00f3n; especie de sargento que ten\u00eda a su cargo la custodia de ochenta soldados. Parece improbable que perteneciera a las legiones romanas que ten\u00edan su sede en la ciudad de Cesarea Mar\u00edtima. En la provincia de Galilea, donde habitaba Jes\u00fas, no hab\u00eda soldados romanos. Herodes Antipas ten\u00eda su propio ej\u00e9rcito de mercenarios; gentes sin escr\u00fapulos que se enrolaban en los ej\u00e9rcitos que mejor pagaban.
              \nEl texto no est\u00e1 interesado por el \u00abhecho maravilloso\u00bb de la curaci\u00f3n. Quiere subrayar que Jes\u00fas de Nazareth no ha venido a salvar tan s\u00f3lo al pueblo de Israel. Su salvaci\u00f3n es universal. All\u00ed donde exista una persona sufriendo, Dios est\u00e1 dispuesto a darle su abrazo generoso, sin importarle su condici\u00f3n social, raza o religi\u00f3n…
              \nEl pasaje describe sucintamente las actitudes del Maestro de Nazareth: Jes\u00fas escucha atentamente la s\u00faplica del centuri\u00f3n. No es un israelita cumplidor de la Ley de Yahv\u00e9, pero es una persona que necesita ayuda. Jes\u00fas se pone en su lugar y asume su sufrimiento. Y, sin dudar, sin poner excusas, sin pedir nada a cambio, sin importar la condici\u00f3n \u00e9tnica o religiosa de quien suplica\u2026 se implica y decide ir personalmente a curar al criado del centuri\u00f3n.
              \nCuando Jes\u00fas percibe la sencillez y la confianza del centuri\u00f3n, no dudar\u00e1 en alabarlo. Ensalzar\u00e1 la actitud de este extranjero por encima de los creyentes israelitas. Nadie tiene la exclusiva o el monopolio del bien y la bondad.
              \nEl texto, al describir las actitudes de Jes\u00fas, presenta nuevos elementos que pueden orientar los encuentros del agente de pastoral
              \n 
              \nReflejos desde la Palabra<\/strong><\/p>\n

                \n
              • El agente de pastoral procura encuentros con calidad humana y cristiana: abiertos a la universalidad y evitando prejuicios y recelos.<\/li>\n
              • Los encuentros deben integrar las diferencias en lugar de ahondar en ellas.<\/li>\n
              • Los encuentros pueden ser terapia para una cultura individualista y competitiva, contribuyendo a pasar:<\/li>\n<\/ul>\n

                del individualismo al sentido de grupo y comunidad.
                \ndel encuentro elitista a la convocatoria amplia.
                \ndel encuentro para competir, a la colaboraci\u00f3n.
                \ndel los encuentros cerrados en el \u00ablocalismo\u00bb a la mundialidad.
                \ndel los encuentros rutinarios a la novedad creativa.
                \n <\/p>\n

                  \n
                1. Jeric\u00f3, la ciudad de las palmeras<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

                  Sus restos arqueol\u00f3gicos le confieren el honor de ser la ciudad m\u00e1s antigua de la humanidad. La antigua Jeric\u00f3 creci\u00f3 a la sombra de un gran oasis situado en el desierto de Judea. Varios manantiales daban vida a la urbe desde la m\u00e1s remota antig\u00fcedad.
                  \nSu principal riqueza proven\u00eda de su situaci\u00f3n estrat\u00e9gica: se hallaba enclavada en la puerta del desierto. Por ella entraban las largas caravanas que tra\u00edan desde Oriente lujosas y refinadas mercanc\u00edas: las especias, ricas telas, los perfumes, el incienso, la mirra, el b\u00e1lsamo…
                  \nEl camino que une Jerusal\u00e9n y Jeric\u00f3, discurre a trav\u00e9s 28 km. por el desierto de Judea; regi\u00f3n monta\u00f1osa de gran aridez y muy apta para las emboscadas de grupos de bandoleros. En tiempos de Jes\u00fas la ciudad gozaba de gran prestigio pues el rey Herodes hab\u00eda construido en ella su palacio de invierno.
                  \nEsta poblaci\u00f3n, de larga raigambre en el Antiguo Testamento, y denominada tambi\u00e9n como \u00abLa ciudad de las Palmeras\u00bb o \u00abCiudad de la Luna\u00bb, es citada en varios textos del evangelio como escenario de la actuaci\u00f3n de Jes\u00fas.
                  \n 
                  \n2.1.\u00a0 <\/strong>El encuentro con Zaqueo (Lc 19, 1-10)<\/strong>
                  \nZaqueo eran natural de Jeric\u00f3. Como jefe de recaudadores, controlaba los impuestos que pagaban las largas caravanas que llegaban desde Oriente. Deb\u00eda ser persona muy rica y temida. Pero un jefe de recaudadores era profundamente despreciado por sus convecinos: colaboracionista con los romanos, cobraba los impuestos que Roma destinaba a pagar a sus soldados y al fomento de cultos idol\u00e1tricos ajenos a Yahv\u00e9. Los recaudadores ten\u00edan tambi\u00e9n una merecida fama de ladrones, pues pagaban al poder romano por adelantado los impuestos y luego gozaban de amplia libertad para resarcirse del dinero adelantado con sus intereses. Lo habitual era que se enriquecieran il\u00edcitamente cobrando mucho m\u00e1s de lo que estaba tasado.
                  \nDice el evangelio que \u00abentr\u00f3 Jes\u00fas en Jeric\u00f3 y empez\u00f3 a atravesar la ciudad. En esto un hombre, llamado Zaqueo, que era jefe de recaudadores y muy rico, trataba de distinguir qui\u00e9n era Jes\u00fas, pero la gente se lo imped\u00eda, porque era de baja estatura\u00bb.
                  \nZaqueo, por su situaci\u00f3n social y religiosa, no tiene la \u00abtalla\u00bb adecuada para ver a Jes\u00fas. Por eso es Jes\u00fas quien toma la iniciativa, lo llama por su nombre, se encuentra con \u00e9l y se produce el inicio de su conversi\u00f3n.
                  \nJes\u00fas \u00abbusca lo perdido para salvarlo\u00bb. Es m\u00e1s, el hecho de que Zaqueo fuese considerado pecador p\u00fablico, por ladr\u00f3n y colaboracionista, no impidi\u00f3 a Jes\u00fas entrar en su casa a comer con \u00e9l. En el transcurso de aquel encuentro, Zaqueo sinti\u00f3 deseos de cambiar: Se comprometi\u00f3 a dar la mitad de sus bienes a los pobres y a devolver cuatro veces aquello que hab\u00eda defraudado. Zaqueo se comprometi\u00f3 mucho m\u00e1s de lo que las leyes exig\u00edan.
                  \nLas actitudes de Jes\u00fas en este relato son modelo para el agente de pastoral.
                  \n 
                  \nReflejos de la Palabra<\/strong><\/p>\n

                    \n
                  • El gent\u00edo y el bullicio de una ciudad oriental no distraen a Jes\u00fas de lo esencial. El agente de pastoral es capaz de levantar la mirada m\u00e1s all\u00e1 de las cosas que le solicitan para descubrir a quien est\u00e1 en necesidad.<\/li>\n
                  • La mirada profunda de Jes\u00fas va m\u00e1s all\u00e1 de las apariencias. Aquel hombre, vestido ricamente y supuestamente satisfecho, carec\u00eda de la paz interior y precisaba de alguien que le apreciara por s\u00ed mismo y no por su poder y riquezas. El agente de pastoral mira la profundidad de las personas para descubrir sus verdaderas necesidades.<\/li>\n
                  • Jes\u00fas llama a Zaqueo por su nombre. El agente de pastoral personaliza su acci\u00f3n, pasando de la propuesta gen\u00e9rica al encuentro personal.<\/li>\n
                  • \u201cTengo que hospedarme en tu casa\u00bb. La iniciativa parte de Jes\u00fas. Zaqueo, excluido religiosamente y odiado por colaboracionista, no est\u00e1 en condiciones de hacer propuestas. El agente de pastoral toma la iniciativa y ofrece nuevas oportunidades a quienes se hallan alejados o al margen.<\/li>\n<\/ul>\n

                     
                    \n2.2.\u00a0 <\/strong>El ciego de Jeric\u00f3 (Lc 18, 35-43)<\/strong>
                    \nSobre el escenario de la ciudad de Jeric\u00f3, Jes\u00fas va a dar una nueva lecci\u00f3n a los disc\u00edpulos.
                    \nEl relato del ciego de Jeric\u00f3 encierra un profundo simbolismo ya que la ceguera era utilizada, en los c\u00edrculos religiosos del tiempo de Jes\u00fas, no s\u00f3lo para denominar una minusval\u00eda f\u00edsica, sino tambi\u00e9n para expresar cerraz\u00f3n ante la propuesta religiosa.
                    \nEl ciego de Jeric\u00f3 es s\u00edmbolo del disc\u00edpulo que comprende progresivamente que Jes\u00fas no va a ser un Mes\u00edas pol\u00edtico, sino un Mes\u00edas que ha venido a servir desde la sencillez y la humildad.
                    \nEl ciego se halla en las afueras de la ciudad, excluido de la vida social y religiosa. Pero conserva una cierta inquietud, pregunta y quiere saber qu\u00e9 ocurre y qui\u00e9n es el importante personaje que transita por el camino.\u00a0Aunque privado de la vista, mantiene intacta su voz. Grita para llamar la atenci\u00f3n del Maestro que pasa cerca de donde \u00e9l pide limosna habitualmente. Jes\u00fas escucha y atiende su grito desgarrado: \u00a1ten piedad de m\u00ed!
                    \nLa percepci\u00f3n que tiene el ciego de Jes\u00fas es imperfecta: le llama \u00abHijo de David\u00bb; expresi\u00f3n tras la que subyace un concepto de Mes\u00edas poderoso y comprometido pol\u00edtica y militarmente.
                    \nJes\u00fas se acerca f\u00edsicamente al ciego. Dialoga con \u00e9l. Se preocupa por su situaci\u00f3n. Le ofrece ayuda. Finalmente le abre gratuitamente los ojos. No le pide nada a cambio, ni siquiera corrige la idea equivocada que el ciego ha expresado sobre el Mes\u00edas.
                    \n 
                    \nReflejos de la Palabra<\/strong><\/p>\n

                      \n
                    • El agente de pastoral permanece atento para escuchar la voz de quienes buscan y preguntan, aunque sea desde el desconocimiento o desde posturas religiosamente imperfectas.<\/li>\n
                    • No es suficiente con escuchar de lejos. Hay que comprender la situaci\u00f3n de cerca.<\/li>\n
                    • As\u00ed como Jes\u00fas ofrece su ayuda incondicional, el agente de pastoral ofrece su ayuda desinteresada y generosa, sin pedir nada a cambio.<\/li>\n
                    • La salvaci\u00f3n espiritual es una salvaci\u00f3n encarnada. Lo material y lo espiritual van de la mano. El ciego accedi\u00f3 a la fe a trav\u00e9s de la sanaci\u00f3n concreta de sus ojos privados de luz.<\/li>\n
                    • En una sociedad cegada por el brillo de la cosas, \u00ababrir los ojos\u00bb y hacer sensible el alma es tarea del agente de pastoral. Ayudar a \u00abmirar con profundidad\u00bb la vida.<\/li>\n<\/ul>\n

                       
                      \n2.3.\u00a0 <\/strong>El buen samaritano (Lc 10, 25-37)<\/strong>
                      \nLa par\u00e1bola del Buen Samaritano trascurre en el camino que baja desde Jerusal\u00e9n hacia Jeric\u00f3. Aunque esta conocida par\u00e1bola presenta multitud de detalles, nos centramos en la secuencia de verbos de acci\u00f3n que configuran la actuaci\u00f3n del protagonista.
                      \nNo es indiferente que el protagonista sea samaritano. Esta elecci\u00f3n contiene una ense\u00f1anza de hondo calado. Porque, si las relaciones entre jud\u00edos y samaritanos fueron siempre tensas, en tiempos de Jes\u00fas no pod\u00edan ser peores: los samaritanos, hartos de sentirse despreciados, hacia el a\u00f1o 9 del siglo I, hab\u00edan entrado por la noche en el Templo de Jerusal\u00e9n y lo hab\u00edan sembrado de huesos humanos. Esto equival\u00eda a hacer impuro el mism\u00edsimo Templo del Yahv\u00e9; acci\u00f3n sacr\u00edlega y desafiante contra el pueblo jud\u00edo. Los samaritanos eran considerados por los israelitas como seres despreciables, herejes en lo religioso y desnaturalizados en lo social.
                      \nUn samaritano es el elegido para subrayar lo ilimitado del mandamiento del amor; un amor que se hace operativo con elementos tomados de la vida diaria: aceite, vino, vendas, un asno, denarios\u2026
                      \nEl contraste es m\u00e1s fuerte si tenemos en cuenta que los antagonistas son un sacerdote y un levita; personajes relacionados con el templo de Jerusal\u00e9n. Sus acciones son fr\u00edas: ven, dan un rodeo y\u2026 pasan de largo.
                      \nLa secuencia de las acciones del buen samaritano son programa de acci\u00f3n para los disc\u00edpulos: vio; se acerc\u00f3; sinti\u00f3 compasi\u00f3n, cur\u00f3 las heridas con vendas, aceite y vino; lo trasport\u00f3 hacia una posada c\u00f3moda y segura; lo cuid\u00f3; gast\u00f3 su dinero en ayudarle; prometi\u00f3 regresar para continuar la buena acci\u00f3n.
                      \n 
                      \nReflejos desde la Palabra<\/strong><\/p>\n

                        \n
                      • Mirar la vida con profundidad para descubrir personas y necesidades<\/li>\n
                      • Acercarse para ejercer el servicio de la cercan\u00eda y facilitar el encuentro.<\/li>\n
                      • Escuchar los lamentos y sentir compasi\u00f3n: sufrir con el sufrimiento de los dem\u00e1s.<\/li>\n
                      • Poner a disposici\u00f3n las cualidades personales y los medios propios para sanar las heridas de la vida.<\/li>\n
                      • Buscar lugares seguros donde puedan cicatrizar las heridas y donde, quien cay\u00f3 al borde del sendero, pueda reponer las fuerzas para seguir caminando por la vida.<\/li>\n
                      • Cuidar con afecto y dedicaci\u00f3n.<\/li>\n
                      • Emplear tiempo y medios materiales.<\/li>\n
                      • Acompa\u00f1ar.<\/li>\n
                      • Regresar para continuar la obra comenzada.<\/li>\n<\/ul>\n

                         <\/p>\n

                          \n
                        1. Conclusi\u00f3n<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

                          Una pastoral de acogida que promueve el encuentro personal, no es una necesidad surgida en las \u00faltimas d\u00e9cadas a partir del desarrollo de la \u00abinteligencia emocional\u00bb y sus importantes aportaciones. Este tipo de pastoral hunde sus ra\u00edces en las narraciones evang\u00e9licas que describen a Jes\u00fas de Nazareth con una excepcional sensibilidad para el encuentro.
                          \nLos encuentros descritos en los evangelios sin\u00f3pticos (frecuentemente con muy pocas palabras) suelen tener un \u00abantes\u00bb y un \u00abdespu\u00e9s\u00bb.
                          \nEn el inicio de cada uno de ellos, Jes\u00fas mira con profundidad a la realidad y a las personas.
                          \nLa mirada de Jes\u00fas no se queda en el an\u00e1lisis y la observaci\u00f3n, sino que es una mirada de misericordia que irrumpe en su interior, le conmueve y le lleva a hacer opci\u00f3n por quien sufre.
                          \nLos encuentros descritos no son superficiales sino que afectan a las dimensiones m\u00e1s profundas de la persona, al sentido de la vida, a la fe, el sufrimiento, el gozo…
                          \nQuien se encuentra con Jes\u00fas se siente querido por s\u00ed mismo, lleno de nuevas posibilidades y colmado de esperanza. Y, sobre todo, son encuentros que abren la puerta a la relaci\u00f3n con Dios.
                          \nEl agente de pastoral halla en los encuentros del evangelio pautas para profundizar su misi\u00f3n.
                          \n <\/p>\n

                          Jos\u00e9 Joaqu\u00edn G\u00f3mez Palacios<\/p>\n

                           
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                            Jos\u00e9 Joaqu\u00edn G\u00f3mez Palacios Encargado de Escuelas. Salesianos Valencia \u00a0 S\u00cdNTESIS DEL ART\u00cdCULO En este art\u00edculo, el autor, se acerca a la escritura para recoger algunos encuentros significativos de Jes\u00fas. En estos encuentros se concreta la acci\u00f3n salvadora de Dios en medio de su pueblo. En estos textos, el autor, ve una manera de […]<\/p>\n","protected":false},"author":3,"featured_media":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"","_et_pb_old_content":"","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[1494,56,94],"tags":[],"class_list":["post-7338","post","type-post","status-publish","format-standard","hentry","category-estudios-413","category-jose-j-gomez-palacios","category-mision-joven-2"],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/7338","targetHints":{"allow":["GET"]}}],"collection":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/users\/3"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=7338"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/7338\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=7338"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=7338"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=7338"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}