Giacomo Ruggeri<\/strong> Don Giacomo Ruggeri<\/p>\n EL ESTILO PARA UNA DI\u00d3CESIS, UNA PARROQUIA, UNA FAMILIA HACIA LA JMJ Giacomo Ruggeri P\u00e1rroco, periodista, Director de la oficina de Comunicaci\u00f3n Social, Di\u00f3cesis de Fano JMJ es un anagrama. Jornada Mundial de la Juventud. Pero para una naci\u00f3n es mucho, mucho m\u00e1s. La llegada de tantos j\u00f3venes de todo el mundo a la […]<\/p>\n","protected":false},"author":3,"featured_media":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"","_et_pb_old_content":"","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[1433,1434,94],"tags":[],"class_list":["post-7472","post","type-post","status-publish","format-standard","hentry","category-estudios-406","category-giacomo-ruggeri","category-mision-joven-2"],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/7472","targetHints":{"allow":["GET"]}}],"collection":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/users\/3"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=7472"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/7472\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=7472"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=7472"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=7472"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}
\nP\u00e1rroco, periodista, Director de la oficina de Comunicaci\u00f3n Social, Di\u00f3cesis de Fano<\/strong>
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\nJMJ es un anagrama. Jornada Mundial de la Juventud. Pero para una naci\u00f3n es mucho, mucho m\u00e1s. La llegada de tantos j\u00f3venes de todo el mundo a la propia casa, plantea a la sociedad civil y a la Iglesia un interrogante fundamental: \u00bfsabremos valorar las muchas sugerencias y la abundancia de Gracia que esta experiencia nos dar\u00e1?
\nDesde el comienzo de las convocatorias juveniles mundiales, que quiso e ide\u00f3 Juan Pablo II, la Iglesia en el mundo ha puesto un punto fijo en su programa formativo y prof\u00e9tico: los j\u00f3venes. Desde la primera reuni\u00f3n en Roma en 1984 hasta la \u2019\u00faltima JMJ vivida en Australia en Sidney se ha dado un crescendo de pasi\u00f3n hacia la fe, Cristo, la Iglesia, los j\u00f3venes. Con las palabras que siguen intentamos trazar en esquema un recorrido que d\u00e9 idea de lo que puede significar una JMJ una vez terminada.
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\nJMJ: la dimensi\u00f3n de la popularidad<\/strong>
\n\u00abQueridos j\u00f3venes, dejad que os repita a vosotros un saludo tan significativo como el que el ap\u00f3stol Pablo dirig\u00eda a los cristianos de su tiempo: \u201cGracia y paz a vosotros de parte de Dios nuestro Padre y del Se\u00f1or Jesucristo\u201d (Rm 1, 7). Deseo llegar con este saludo especialmente a los j\u00f3venes y las j\u00f3venes que est\u00e1n con nosotros por primera vez. Ojal\u00e1 se puedan encontrar plenamente a gusto y que su presencia traiga una oleada de frescura nueva, de la que brote mayor alegr\u00eda para todos\u00bb. Son las palabras del Papa en 1987, anuncio del A\u00f1o Internacional de los J\u00f3venes. Est\u00e1 claro desde el principio el deseo de la Iglesia: llegar a los j\u00f3venes y a trav\u00e9s de ellos a los \u00a0coet\u00e1neos que, con la Iglesia, tal vez, sufren.
\nLa dimensi\u00f3n de la popularidad es una de las caracter\u00edsticas de las JMJ. Se da el intento preciso de hablar de coraz\u00f3n a coraz\u00f3n a los j\u00f3venes, sin mediaci\u00f3n alguna, poni\u00e9ndose en un nivel que, a\u00f1o tras a\u00f1o, sea siempre familiar a los j\u00f3venes: sentirse en casa, entendidos, amados, acogidos.
\nLa dimensi\u00f3n de la popularidad ha tomado, a continuaci\u00f3n, el rostro de las familias. La Iglesia ha entendido que un joven nace en una familia y precisamente en ella la hace sentirse en casa durante los d\u00edas de la JMJ. De ah\u00ed la gran implicaci\u00f3n de la Iglesia local para pedir a las familias que sean casa abierta, que acoge, recibe y al mismo tiempo da, se abre a compartir la comida, el lecho y el camino de fe.
\nEl testimonio que sigue, recogido por mi colega Lorenzo Fazzini, expresa el esp\u00edritu con que se han consolidado las JMJ en los j\u00f3venes italianos.
\n\u00abHoy es periodista, profesional, est\u00e1 cualificado, preparad\u00edsimo; pero el ropaje de muchacho de la JMJ no se lo ha quitado nunca. Apenas le hablas de Roma 1984, los ojos se le iluminan y la mirada vuelve a aquellos momentos del comienzo que hoy son historia. Eso. Porque Alberto Savorana, con 40 a\u00f1os o m\u00e1s, es actualmente periodista y dirige la revista mensual Tracce, \u00f3rgano oficial de Comuni\u00f3n y \u00a0liberaci\u00f3n. Pero en el lejano 1983, reci\u00e9n doctorado, se hab\u00eda embarcado en la aventura de la primer\u00edsima Jornada Mundial de la Juventud. Con ocasi\u00f3n del A\u00f1o Santo extraordinario de la Redenci\u00f3n, el Papa decidi\u00f3 convocar una Jornada con los j\u00f3venes: el Domingo de Ramos, en Roma. Y Savorana sigui\u00f3 toda aquella primer\u00edsima y oficiosa JMJ desde dentro, como corresponsal de prensa. Es decir, un testigo c\u00f3mplice de primera fila para comentar este recorrido de \u201csujetos por la JMJ\u201d y para relatar veinte a\u00f1os de encuentros mundiales de los j\u00f3venes.
\n\u00bfC\u00f3mo ca\u00edste por Roma? Pues la verdad es que llegu\u00e9 por casualidad. La v\u00edspera de Navidad de 1983, cinco amigos de la universidad de Bolonia hab\u00edamos ido a Mil\u00e1n para estar con don Giussani en su casa. Mientras com\u00edamos, don Luis dijo en voz alta: \u201c\u00bfSab\u00e9is que en Roma se est\u00e1 preparando el Jubileo de los J\u00f3venes para el domingo de Ramos? Me han preguntado si hab\u00eda alg\u00fan joven dispuesto a ir a Roma durante algunos meses para colaborar, especialmente en las relaciones con la prensa: \u00bfpodr\u00eda ir alguno de vosotros?\u201d. Y la suerte cay\u00f3, no sobre Jon\u00e1s, sino sobre ti\u2026 De los cinco que est\u00e1bamos all\u00ed, el \u00fanico con t\u00edtulo – un mes antes \u2013 era yo, de modo que me toc\u00f3 a m\u00ed. Y fue as\u00ed como vine a Roma. Atribuyo a aquella circunstancia algo fortuito pero tambi\u00e9n providencial: mi vida qued\u00f3 marcada por el destino a algo que no conoc\u00eda. Me encontr\u00e9 metido en un grupo de amigos que se entregaron totalmente, con un gran esp\u00edritu. Aunque no sab\u00eda bien en qu\u00e9 consist\u00eda aquel encuentro con los j\u00f3venes. Era la primera vez que se convocaba esa Jornada. Como comprender\u00e1s, no est\u00e1bamos tan organizados como hoy. \u00bfQu\u00e9 te qued\u00f3 de organizar un encuentro Mundial de j\u00f3venes con el Papa? Que es algo muy grande poner a disposici\u00f3n las propias energ\u00edas para algo tan importante. Yo, un joven un poco novato y pillo, que quer\u00eda seguir al Papa dando testimonio de su llamada, me convert\u00ed en intermediario para que miles de j\u00f3venes pudiesen experimentar lo que nosotros, en aquellos meses, hab\u00edamos experimentado en la JMJ. \u00bfY qu\u00e9 fue? Que la figura de Cristo no es un recuerdo o un fen\u00f3meno del pasado, sino algo presente, que tambi\u00e9n hoy se puede experimentar: el Papa nos hablaba de eso. La vida de cada uno no est\u00e1 condenada inevitablemente a la nada, a la desesperaci\u00f3n. Hay un nombre por el que la muerte ha sido vencida hace 2000 a\u00f1os, hay un camino de salvaci\u00f3n en la cruz: la cruz de cada uno de nosotros lleva a la resurrecci\u00f3n. Y nosotros, en aquel encuentro de Roma, ten\u00edamos la presunci\u00f3n ingenua, pero absolutamente cierta, de que est\u00e1bamos en aquel camino, no porque fu\u00e9semos buenos o capaces, sino porque hab\u00edamos sido elegidos, misteriosamente\u00a0 elegidos.
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\nJMJ: los j\u00f3venes dan indicaciones a la Iglesia, a la Di\u00f3cesis, a la Parroquia que las acogen<\/strong>
\nCon las JMJ nace una nueva pastoral juvenil en la Iglesia Italiana y en las Di\u00f3cesis. Se traslada completamente el eje: a los j\u00f3venes los ponen en el centro Juan Pablo \u00a0II y Benedicto XVI. El Papa actual es consciente de que est\u00e1 en el tim\u00f3n de una barca que ve a los j\u00f3venes como los primeros timoneles y sabe bien que el fruto\u00a0 que recoge es el trabajo de su venerable predecesor. Una de las figuras institucionales de la Pastoral Juvenil en Italia es sin duda Mons. Domenico Sigalini, Obispo de Palestrina y Consiliario General de la Acci\u00f3n Cat\u00f3lica Italiana. Recientemente ha sido nombrado Presidente de la Comisi\u00f3n para los Laicos de la Conferencia episcopal italiana. Su reflexi\u00f3n es importante para entender que los j\u00f3venes han empezado a dar, desde el principio, respuestas claras y valientes a las convocatorias que les hac\u00eda el Papa.
\n\u00abCuando comenzaron nadie se imaginaba que se iban a convertir en las m\u00edticas \u00a0JMJ, WYD, GMG, (Jornadas mundiales de la Juventud). Nacieron bajo el impulso de la gran pasi\u00f3n de Juan Pablo II por los j\u00f3venes que ret\u00f3 tambi\u00e9n a sus m\u00e1s estrechos colaboradores, no del todo entusiastas entonces, a la idea de hacer una gran concentraci\u00f3n mundial. En el surco trazado por el Papa Pablo VI que desde su primera Pascua en San Pedro hab\u00eda pensado en la celebraci\u00f3n de Ramos como una fiesta juvenil, Juan Pablo II la quiso mundial, quiso llamar a convenci\u00f3n a todos los j\u00f3venes para hablarles de su fe en Cristo, para encontrarlo entre amigos, para hacer Iglesia en torno al Evangelio. Como siempre, las cosas nacen en el silencio y se hacen grandes frente al mundo. Las JMJ han sido desde entonces una cita anual en las di\u00f3cesis y bienal o trienal en una asamblea mundial. Se sucedieron entonces: Roma (1985), Buenos Aires (1987), Santiago (1989), Chestochowa (1991), Denver (1993), Manila (1995), Par\u00eds (1997), Roma (2000), Toronto (2002), Colonia (2005), Sidney (2008) y la pr\u00f3xima en Madrid (2011). Recuerdo que, sobre todo despu\u00e9s de la JMJ de Denver tenida en verano, como de ordinario, se anunciaba la de Manila que se anticipaba a enero de dos a\u00f1os m\u00e1s tarde y por tanto a distancia de s\u00f3lo 16 meses; los colaboradores pidieron al Papa que la dejase para un a\u00f1o m\u00e1s tarde. \u00c9l respondi\u00f3 enseguida: Mientras est\u00e9 yo, la celebramos cada dos a\u00f1os.<\/em>Cedi\u00f3 s\u00f3lo el a\u00f1o 2000 para hacer coincidir la fecha con el A\u00f1o Santo. En efecto, la \u00faltima \u00a0que celebr\u00f3 fue dos a\u00f1os despu\u00e9s en Toronto. Es decir, ve\u00eda la gran necesidad de dar al mundo juvenil una referencia en el cambio vertiginoso de los tiempos. En un mundo que trataba a los j\u00f3venes como a gente de desecho, porque ven\u00edan a acechar los puestos ocupados ya por los adultos tanto en el trabajo como en las responsabilidades de la vida, Juan Pablo II tuvo el coraje de ponerlos en el centro. Al principio no quiso que el A\u00f1o de la Juventud establecido por la ONU fuese s\u00f3lo un hecho acad\u00e9mico y moviliz\u00f3 a la primera Jornada con la bell\u00edsima carta Dilecti amici<\/em>, que se convirti\u00f3 en la magna charta<\/em> de las JMJ sucesivas. Se diga lo que se diga, el Papa Juan Pablo logr\u00f3 poner en el centro de la atenci\u00f3n y del cuidado de toda la Iglesia y de buena parte del mundo a los j\u00f3venes en un tiempo, el de agosto, dedicado en gran parte a vacaciones, poniendo junto a los j\u00f3venes, a veces bajo un sol abrasador, a cardenales, obispos, ministros, parlamentarios, presidentes de Estado, periodistas, televisiones, medios de comunicaci\u00f3n y sobre todo a los j\u00f3venes que hoy son padres de familia, que se han escrito con estas jornadas su catecismo, su bagaje de experiencias que ha nutrido y nutre su fe, su compromiso y sus proyectos. Se ha discutido mucho y se sigue haciendo hoy y se habla de kermesse, de concentraciones oce\u00e1nicas in\u00fatiles, de tropas de asalto de Wojtyla. Pobres argumentaciones. Las JMJ han creado una generaci\u00f3n en un tiempo en el que a los j\u00f3venes no se los considera ya como a una generaci\u00f3n, sino s\u00f3lo como a pollos que desplumar y tirar cuando no sirvan ya\u00bb.
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\nJMJ: un modelo y un reto para la pastoral ordinaria y la pastoral juvenil<\/strong>
\nUna de las caracter\u00edsticas de la JMJ es la capacidad de globalizarse en el giro de poco tiempo y poco espacio f\u00edsico. Si pensamos en Madrid, pr\u00f3xima sede en agosto de 2011, esta ciudad se transformar\u00e1 en un pa\u00f1uelo del mundo, en el que las lenguas y las etnias se encuentran y cotejan. Una naci\u00f3n que est\u00e1 madurando lo que ellos llaman \u201cmodelo JMJ\u201d, son los Estados Unidos da Am\u00e9rica. Ofrezco un pasaje del testimonio de Sor Eileen McCann, Coordinadora nacional de la pastoral de los adolescentes y de los j\u00f3venes adultos de Estados Unidos. De sus palabras se deduce la exigencia y la necesidad de mirar m\u00e1s all\u00e1 del hecho, m\u00e1s all\u00e1 de la experiencia de la JMJ. \u00abLos retos que estamos afrontando comprenden la potenciaci\u00f3n de la pastoral juvenil en la parroquia. Afortunadamente tenemos una fuerte organizaci\u00f3n nacional. En estrecha colaboraci\u00f3n con la Conferencia episcopal, la Federaci\u00f3n sirve a las oficinas diocesanas. Cuanto m\u00e1s fuerte es la coordinaci\u00f3n diocesana, m\u00e1s fuerte es la pastoral juvenil en las parroquias. De estudios recientes sabemos que la catequesis de los adolescentes requiere una atenci\u00f3n especial. Para hacerlo hemos creado un programa de catequesis que implica a tres organizaciones nacionales y a la Conferencia episcopal. En nuestros programas y acciones \u00a0pastorales estamos usando cada vez m\u00e1s el modelo JMJ. La Conferencia nacional de la Federaci\u00f3n se centra ahora m\u00e1s expresamente en la catequesis, as\u00ed como en el manual de subsidio. A partir de 2009, el manual tendr\u00e1 el objetivo de presentar modelos de catequesis para el uso del Catecismo de la Iglesia Cat\u00f3lica con nuestros adolescentes. La implicaci\u00f3n de nuestros obispos en la Conferencia nacional sigue creciendo y son cada vez m\u00e1s los que participan en el encuentro. En la Conferencia organizamos una exposici\u00f3n de las vocaciones (vocation expo), dedicamos m\u00e1s tiempo a la liturgia eucar\u00edstica y a la adoraci\u00f3n eucar\u00edstica. En la Conferencia de 2009 usaremos el modelo de adoraci\u00f3n de la JMJ. Mientras nos preparamos para Madrid, tenemos cuatro objetivos: seguir implicando plenamente a nuestros obispos, intensificar la pastoral dedicada a la Juventud hispana y a los j\u00f3venes adultos que son muy numerosos, promover la JMJ como acontecimiento para j\u00f3venes adultos y, por tanto, aumentar la implicaci\u00f3n de esta franja de edad, y utilizar la JMJ como oportunidad para potenciar nuestro compromiso catequ\u00e9tico con los adolescentes\u00bb.
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