{"id":7707,"date":"2009-07-01T00:00:29","date_gmt":"2009-06-30T22:00:29","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/?p=7707"},"modified":"2009-07-01T00:00:29","modified_gmt":"2009-06-30T22:00:29","slug":"educar-en-competencias","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/educar-en-competencias\/","title":{"rendered":"Educar en competencias"},"content":{"rendered":"

Jos\u00e9 Joaqu\u00edn G\u00f3mez es Delegado de Escuelas en la Provincia Salesiana de Valencia<\/strong>
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\nEducar en competencias es un tema de actualidad. Lo que fuera objeto de investigaci\u00f3n pedag\u00f3gica en universidades de renombre mundial, se ha trasladado al sistema educativo de nuestro pa\u00eds.
\nUna competencia, seg\u00fan definici\u00f3n de la OCDE (Organizaci\u00f3n para la Cooperaci\u00f3n y el Desarrollo Econ\u00f3mico), es: \u00abla capacidad de responder a demandas complejas y llevar a cabo tareas diversas de forma adecuada. Supone una combinaci\u00f3n de habilidades pr\u00e1cticas, conocimientos, motivaci\u00f3n, valores \u00e9ticos, actitudes, emociones y otros componentes sociales y de comportamiento que se movilizan conjuntamente para lograr una acci\u00f3n eficaz\u00bb.
\nAunque nacida en otros foros, la educaci\u00f3n en competencias puede aportar interesantes matices a la acci\u00f3n pastoral en general, y a los itinerarios de educaci\u00f3n en la fe en particular.
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\n1. No confundir competencia con habilidad<\/strong>
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\nUna competencia es definida en el diccionario como \u00abpericia, actitud e idoneidad para hacer algo o intervenir en un asunto determinado\u00bb. Una persona competente es aquella que es \u00abconocedora de una t\u00e9cnica, de una disciplina o de un arte\u00bb
\nEn el lenguaje ordinario hay tendencia a confundir \u00abcompetencia\u00bb con \u00abhabilidad\u00bb, entendiendo \u00e9sta \u00faltima como la capacidad para ser eficiente en una tarea.
\nDurante las \u00faltimas d\u00e9cadas el concepto \u00abcompetencia\u00bb se ha adentrado por el mundo de la psicolog\u00eda y de la pedagog\u00eda, y ha ido a\u00f1adiendo nuevos matices a su bagaje conceptual originario.
\nCuando se habla de \u00abeducaci\u00f3n en competencias\u00bb, no s\u00f3lo se est\u00e1 indicando la importancia de transferir conocimientos y ense\u00f1ar determinadas habilidades o destrezas. Ser competente, seg\u00fan las actuales l\u00edneas pedag\u00f3gicas, es un complejo proceso que busca una educaci\u00f3n integral y procura que el sujeto organice lo aprendido para transferirlo en el futuro a nuevas actividades y situaciones. Una persona ser\u00e1 competente en la medida en que sepa afrontar nuevas tareas m\u00e1s all\u00e1 de lo aprendido.
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\n2. Competencias humanas \u00abde serie\u00bb<\/strong>
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\nLa persona humana nace dotada de un amplio abanico de funciones y capacidades para ejecutar diferentes tareas. Es decir, todos los seres humanos nacen con unos recursos, propios de la especie, que posibilitan, orientan y marcan el desarrollo humano. Por ejemplo: nuestro cerebro est\u00e1 capacitado, desde el nacimiento, para realizar funciones asociativas y simb\u00f3licas. Al mismo tiempo, nuestros \u00f3rganos de fonaci\u00f3n (laringe, cuerdas vocales, hioides, paladar,\u00a0 lengua, dientes, labios, glotis…etc) est\u00e1n preparados para emitir una amplia gama de sonidos modulados. Inteligencia y \u00f3rganos de fonaci\u00f3n conforman una \u00abcompetencia de serie\u00bb con la que nace todo ser humano, y que se concretar\u00e1 en el lenguaje.
\nMuchas de estas competencias son innatas. Siguiendo con el ejemplo del lenguaje: toda persona, de cualquier raza y cultura, dispone de la capacidad de desarrollar un lenguaje mediante el que comunicarse con sus semejantes, aunque no sea persona instruida ni haya participado de ense\u00f1anzas estructuradas.
\nEstas funciones psicol\u00f3gicas naturales son universales y permanentes.
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\n3. La teor\u00eda de la \u00abinteligencia m\u00faltiple\u00bb en el origen<\/strong>
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\nEn el origen y ra\u00edz del concepto educativo de \u00abcompetencia\u00bb est\u00e1 la teor\u00eda de la \u00abinteligencia m\u00faltiple\u00bb elaborada por Howard Gardner. Este psic\u00f3logo estadounidense de la Universidad Harvard, hijo de refugiados jud\u00edos y nacido en 1943, afirma que en el ser humano no existe una inteligencia \u00fanica que pueda medirse con una cantidad, sino varias inteligencias que se desarrollan e interaccionan de forma diversa.
\nCada persona tiene por lo menos ocho inteligencias o capacidades para crecer integralmente. Estas inteligencias trabajan juntas, aunque con una cierta autonom\u00eda. Cada persona desarrolla unas m\u00e1s que otras, dependiendo de la cultura, ambiente social y procesos de socializaci\u00f3n en el que se desenvuelve su vida
\nLas inteligencias enumeradas por Howard Gardner son: Verbal\/Ling\u00fc\u00edstica; L\u00f3gico\/Matem\u00e1tica; Visual\/Espacial; Corporal\/Din\u00e1mica; Musical\/R\u00edtmica; Interpersonal; Intrapersonal; Naturalista; Emocional… Daniel Goleman desarroll\u00f3 en 1995, con gran \u00e9xito, la llamada Inteligencia Emocional.
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\n4. Tres formas de intervenir educativamente sobre las competencias<\/strong>
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\nLa educaci\u00f3n actualiza, desarrolla y ampl\u00eda las funciones naturales del ser humano. Mediante la educaci\u00f3n la persona se hace competente llevando las capacidades m\u00e1s all\u00e1 de sus l\u00edmites originarios. Educar consiste en intervenir sobre las competencias innatas que posee el ser humano como potencialidades a desarrollar. Existen tres posibilidades de intervenci\u00f3n educativa sobre las competencias: desarrollar, ampliar y trascender.
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\nDesarrollar<\/strong>
\nLa educaci\u00f3n contribuye a desarrollar las funciones disponibles en el ser humano. Por ejemplo: una adecuada educaci\u00f3n en el \u00e1rea del lenguaje har\u00e1 operativa la competencia innata de hablar y escribir de la que dispone toda persona.
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\nAmpliar<\/strong>
\nLa educaci\u00f3n contribuye tambi\u00e9n a ampliar una competencia. Es decir, a dotarla de nuevas facultades que la enriquecen. Siguiendo con el ejemplo anterior, una persona, mediante la educaci\u00f3n, no s\u00f3lo puede desarrollar el lenguaje, sino tambi\u00e9n puede ampliar esta facultad con nuevos elementos tales como: aprender a comunicar de distintas formas teniendo en cuenta el interlocutor, adquirir un nuevo idioma, apreciar determinados estilos literarios, valorar un estilo propio de expresi\u00f3n y escritura… etc.
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\nTrascender<\/strong>
\nLa educaci\u00f3n ayuda a que una competencia llegue a nuevas cotas que la trascienden, yendo m\u00e1s all\u00e1 de su materialidad. La educaci\u00f3n puede hacer que el lenguaje trascienda su materialidad: aprendiendo formas de expresi\u00f3n respetuosas con la pluriculturalidad, adquiriendo formas de comunicaci\u00f3n inclusiva, asumiendo compromisos por ser la voz de los sin voz, haciendo de la palabra oral y escrita herramienta para la defensa de la dignidad humana… Religiosamente la palabra del ser humano puede convertirse tambi\u00e9n en oraci\u00f3n; la lectura de la Palabra (con may\u00fasculas) llega a ser fuente de vida, alimento espiritual y sentido de la existencia. Esta tercera intervenci\u00f3n sobre las competencias abre grandes posibilidades al mundo pastoral.
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\n5. Los escenarios de las competencias b\u00e1sicas<\/strong>
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\nEl actual ordenamiento pedag\u00f3gico establece cuatro escenarios de competencias sobre los que intervenir educativamente.
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\nEscenario educativo y cultural<\/strong>
\nEn la sociedad de la informaci\u00f3n ser\u00e1 competente quien busque, seleccione y utilice adecuadamente la informaci\u00f3n. Son competentes aquellas personas que gestionan adecuadamente el conocimiento.
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\nEscenario laboral y profesional<\/strong>
\nNo se tiene certeza de c\u00f3mo ser\u00e1 el mundo laboral en el futuro. Por ello hay que formar en competencias que faciliten un adecuado desempe\u00f1o del trabajo. Ser\u00e1 competente quien sepa trabajar en equipo, conozca las nuevas tecnolog\u00edas y se adapte constantemente\u00a0 a ellas; quien se plantee nuevas metas y consiga la realizaci\u00f3n personal por medio del desempe\u00f1o profesional.
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\nEscenario social<\/strong>
\nPara lograr una persona capaz de saber estar en la nueva sociedad, se deber\u00e1 intervenir en aquellas competencias que logran ciudadanos participativos y solidarios.
\nPara ello las instituciones educativas ayudar\u00e1n a construir personas que sean: capaces de vivir en una sociedad plural; competentes en el di\u00e1logo; respetuosas con las diversas \u00e9ticas; implicadas en la participaci\u00f3n social…
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\nEscenario personal<\/strong>
\nLa ordenaci\u00f3n pedag\u00f3gica actual busca que los educandos lleguen a ser personas felices. Para ello propone que ni\u00f1os y adolescentes se preparen para tres competencias b\u00e1sicas: sepan llevar una vida saludable; gestionen una vida econ\u00f3micamente s\u00f3lida; vivan una vida emocionalmente estable.\u00a0 Para ello deber\u00e1n conocer, dominar y comunicar el lenguaje del afecto, autorregular las emociones, integrar frustraci\u00f3n y sufrimiento, comprender las emociones de los dem\u00e1s…
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\nEstos cuatro grandes escenarios se concretan en ocho competencias b\u00e1sicas que son las que conforman el actual dise\u00f1o curricular: comunicativa y ling\u00fc\u00edstica, matem\u00e1tica y cient\u00edfica, digital e inform\u00e1tica, conocimiento del medio, social y ciudadana, cultural y art\u00edstica, aprender a aprender y autonom\u00eda e iniciativa personal.
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\n6. \u00bfSon suficientes estas competencias para caminar por la vida?<\/strong>
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\n– Educar en competencias como proceso educativo pastoral<\/strong>
\nEl desarrollo educativo de una competencia es un proceso v\u00e1lido para la tarea educativo-pastoral. Con frecuencia los itinerarios de educaci\u00f3n en la fe se han reducido a proponer conocimientos doctrinales y a marcar pautas para el comportamiento cristiano.
\nEl desarrollo de las competencias es aplicable a la pastoral. Los tres pasos citados (desarrollar, ampliar y trascender), preparar a la persona para dar respuestas nuevas ante contextos cambiantes, no limitar la educaci\u00f3n en la ense\u00f1anza de habilidades para responder a situaciones est\u00e1ndar… son ideas fecundas para la educaci\u00f3n en la fe. Seg\u00fan la pedagog\u00eda competencial, la educaci\u00f3n en la fe no puede reducirse a ense\u00f1ar determinados conceptos, habilidades o destrezas. Ser competente consiste en saber organizar lo aprendido para transferirlo a nuevas situaciones.\u00a0 Por ello, un creyente ser\u00e1 \u00abcompetente\u00bb en la medida en que sepa caminar por la vida con una vivencia integrada en la totalidad de su persona; un creyente que d\u00e9 respuestas creativas a las nuevas situaciones. Una pastoral, expresada seg\u00fan el m\u00e9todo competencial, puede contribuir a hacerla m\u00e1s integral, otorgando mayor profundidad, creatividad y renovaci\u00f3n en los m\u00e9todos
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\n– El elenco de competencias<\/strong>
\nA\u00fan siendo importantes las ocho competencias b\u00e1sicas propuestas en la actual Ley de Educaci\u00f3n (LOE), \u00e9stas deben ser ampliadas. Para la pastoral escolar existe un importante trabajo elaborado por Escuelas Cat\u00f3licas de Madrid que establece las bases y el desarrollo de la \u00abnovena competencia\u00bb, o competencia espiritual<\/a>. Este trabajo integra la competencia espiritual en el proyecto educativo de la ense\u00f1anza reglada. De especial inter\u00e9s es el tratamiento de algunos \u00abconceptos equivalentes\u00bb que se han manejado hasta ahora sobre la Competencia Espiritual\u00bb.\u00a0 El citado trabajo Integra las aportaciones de V\u00edctor Frankl, Howard Gardner, Abraham Maslow, Carl Rogers, Roberts Emmons… y ampl\u00eda el horizonte de un humanismo cristiano, atento a las nuevas aportaciones de la pedagog\u00eda y la psicolog\u00eda.
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\n7. Profundizar lo humano para llegar a lo evang\u00e9lico<\/strong>
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\nSi ninguna educaci\u00f3n puede reducirse a transmisi\u00f3n de conocimientos, menos a\u00fan la educaci\u00f3n en la fe. Cualquier itinerario de educaci\u00f3n en la fe debe contener: conocimientos de fe, vivencia en comunidad, compromiso, oraci\u00f3n y celebraci\u00f3n…
\nLa educaci\u00f3n en competencias, desde su vocaci\u00f3n integral, puede enriquecer los procesos pastorales porque ayuda a desarrollar aspectos humanos, trascendi\u00e9ndolos y prepar\u00e1ndolos para su vivencia en nuevas situaciones y contextos. A t\u00edtulo de ejemplo y de modo esquem\u00e1tico, se citan algunas posibilidades concretas.
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\nCompetencia: fortaleza y capacidad de esfuerzo<\/strong>
\nEs la capacidad para hacer frente a dificultades y obst\u00e1culos para la consecuci\u00f3n de un fin que se considera positivo. Proceso para ser competentes en el esfuerzo
\n\u00a0<\/strong>
\nDesarrollar<\/strong><\/p>\n