{"id":7713,"date":"2009-07-01T00:00:27","date_gmt":"2009-06-30T22:00:27","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/?p=7713"},"modified":"2009-07-01T00:00:27","modified_gmt":"2009-06-30T22:00:27","slug":"damos-por-perdidos-a-los-jovenes","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/damos-por-perdidos-a-los-jovenes\/","title":{"rendered":"\u00bfDamos por perdidos a los j\u00f3venes?"},"content":{"rendered":"

Juan Carlos Garc\u00eda es Sacerdote de la Di\u00f3cesis de Cartagena (Espa\u00f1a) y profesor de Teolog\u00eda Pastoral\u00a0 y de Did\u00e1ctica de la Ense\u00f1anza Religiosa Escolar en la Universidad de Murcia.<\/strong>
\n <\/p>\n

Si uno de vosotros tiene cien ovejas y se le pierde una, \u00a0\u00bfno deja las noventa y nueve en el campo y va a buscar la extraviada hasta encontrarla? Al \u00a0encontrarla, se la echa a los hombros contento, va a casa, llama a amigos y vecinos y les dice: Alegraos conmigo pues encontr\u00e9 la oveja perdida<\/em> (Lc 15,4-6)<\/p>\n

 
\nEs un lugar com\u00fan escuchar que la Iglesia hace bastantes a\u00f1os perdi\u00f3 al mundo de la cultura y tambi\u00e9n perdi\u00f3 a los obreros, que hace unas d\u00e9cadas perdi\u00f3 -por \u00faltimo- a las mujeres y tambi\u00e9n a los j\u00f3venes. No s\u00e9 si \u00e9ste es el orden, pero \u00e9sta parece ser la realidad en Occidente. \u00bfQu\u00e9 queremos decir cuando afirmamos que hemos perdido a los j\u00f3venes? Quiz\u00e1 -como Iglesia- estamos expresando que los j\u00f3venes ya no nos hacen caso, que no los tenemos cerca, ni podemos controlarlos. Tambi\u00e9n es posible que pensemos que ellos han errado el golpe y que est\u00e1n desorientados porque no est\u00e1n con nosotros, que han elegido otro rumbo\u2026y que se han perdido, que se han corrompido, o que al menos se est\u00e1n perdiendo lo mejor. En ocasiones, dar por perdidos a los j\u00f3venes es sin\u00f3nimo de haber tirado la toalla, de haber desistido de la transmisi\u00f3n de la fe a las nuevas generaciones.
\nHe comenzado evocando el texto de la oveja perdida y extraviada porque me parece una imagen pastoral adecuada para abordar este asunto. Aunque hay que descubrir algunas diferencias muy notables entre la realidad de hoy y lo que propon\u00eda el mismo Jes\u00fas en la par\u00e1bola de Lucas.
\n <\/p>\n

    \n
  1. Hoy, las noventa y nueve ovejas parecen estar extraviadas<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

    \u00a0<\/strong>
    \nEsta es la primera diferencia. La mayor\u00eda de los j\u00f3venes de este pa\u00eds vive un proceso de distanciamiento progresivo del cristianismo a lo largo de su vida<\/a>. A medida que se acercan a la vida adulta decrece su inter\u00e9s y su participaci\u00f3n en los procesos de educaci\u00f3n de la fe, desaparecen de las celebraciones cristianas y se muestran remisos a ser visibles en la vida de la comunidad cristiana. Conforme avanza la formaci\u00f3n escolar se ausentan de la clase de religi\u00f3n y de los itinerarios pastorales de la escuela cat\u00f3lica.
    \nCasi todos, casi 100 de los 100, fueron bautizados. M\u00e1s del 80 por ciento fueron a la catequesis infantil y recibieron la Eucarist\u00eda. Arriba o abajo, unos 20 o 30 de cada cien frecuent\u00f3 las catequesis de Confirmaci\u00f3n y un 15 por ciento de ellos recibieron el sacramento. En Educaci\u00f3n Infantil y Primaria casi todos fueron inscritos en la ense\u00f1aza escolar de la religi\u00f3n, pero al llegar a Secundaria y Bachillerato la migraci\u00f3n a la alternativa es espectacular. Tres de cada diez j\u00f3venes, como media, frecuentaron una escuela cat\u00f3lica y participaron de sus actividades pastorales (oraci\u00f3n diaria, celebraciones de los sacramentos, grupos de vida cristiana, campamentos…). Un buen grupo pensar\u00e1 en el colegio para matricular a sus hijos el d\u00eda de ma\u00f1ana.
    \nNo faltan datos, como puede suponerse, para probar lo que estamos viviendo: un abandono progresivo de much\u00edsimas j\u00f3venes ovejas. La realidad nos dice que al llegar a la vida adulta la pertenencia eclesial se debilita o casi desaparece, la aceptaci\u00f3n de los postulados b\u00e1sicos de la doctrina se diluye o se cuestiona y los signos que manifiestan una vida cristiana activa y comprometida casi son nulos en buena parte de la poblaci\u00f3n (cristiana) menor de 35 a\u00f1os.
    \nCabe constatar, como contrapunto, su participaci\u00f3n espor\u00e1dica en algunas celebraciones anuales u ocasionales. Por ejemplo, con motivo del matrimonio cristiano de algunos amigos o en alg\u00fan funeral, especialmente cuando el difunto es joven y su muerte es muy impactante. En esos a\u00f1os de desenganche quiz\u00e1 se participe alguna vez en una peregrinaci\u00f3n a Taiz\u00e9, o se salga en una procesi\u00f3n como costalero, o se visite un santuario, o se acuda a una Iglesia a rezar para encontrar trabajo, o pareja, o aprobar la oposici\u00f3n. Quiz\u00e1 un buen grupo asista a un gran evento cat\u00f3lico como las JMJ.\u00a0 Hay que recordar que fueron cientos de miles los j\u00f3venes espa\u00f1oles que estuvieron en Cuatro Vientos con Juan Pablo II en el 2003 y que decenas de miles viajaron a Colonia 2005 o varios miles a Sydney en 2008. No ser\u00e1 dif\u00edcil superar estas cifras millonarias en Madrid 2011.
    \n\u00a0<\/strong><\/p>\n

      \n
    1. Parece que s\u00f3lo quede \u201cuna oveja\u201d en el campo<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

      \u00a0<\/strong>
      \nLo que podemos afirmar es que la vinculaci\u00f3n a un grupo de vida cristiana, semana a semana, o el compromiso con un proyecto solidario sin fuerte carga emocional y de modo estable, o frecuentar la Eucarist\u00eda cada domingo, m\u00e1s a\u00fan algunos d\u00edas de la semana, o confesar habitualmente, o mantener una vida de oraci\u00f3n es hoy una caracter\u00edstica muy poco com\u00fan entre los j\u00f3venes.
      \nParecer\u00eda que s\u00f3lo quedara una oveja en el campo. S\u00f3lo unas poquitas de tantas bautizadas y confirmadas. Esta es la segunda diferencia con la par\u00e1bola de Jes\u00fas. Es lo que aqu\u00ed llamaremos el \u201ctres por ciento\u201d      <\/a>. Son aquellos j\u00f3venes que han permanecido y que quedan en grupos o que se han convertido en habituales de la Eucarist\u00eda o de nuestras ofertas de acompa\u00f1amiento personal o de grupo. Muchos de ellos son catequistas o monitores de ni\u00f1os o de adolescentes. Casi siempre se quedan como animadores de otros j\u00f3venes y tiran del carro contra viento y marea. Les cuesta entender a una Iglesia cada vez m\u00e1s envejecida, pero est\u00e1n ah\u00ed, a veces como h\u00e9roes. De ellos surge alguna vocaci\u00f3n para el matrimonio y tambi\u00e9n, rara vez,\u00a0 para el sacerdocio o la vida religiosa.
      \nJunto a ellos, los que permanecieron en grupos parroquiales o en el grupo de j\u00f3venes del colegio, van a\u00f1adi\u00e9ndose otros que vuelven o que se incorporan de nuevas. Generalmente vienen a participar en movimientos de nueva creaci\u00f3n, que marcan en ellos otros estilos pastorales, otra visi\u00f3n del mundo y de la Iglesia, y otras expresiones lit\u00fargicas, morales y doctrinales. Unos y otros son cristianos, pero con acentos bien diferentes. Entre todos suman poco n\u00famero, pero no acaban de entenderse entre s\u00ed, ni de reconocerse o aceptarse. La verdad es que es cuesti\u00f3n de tiempo y de algo m\u00e1s.
      \nLos primeros, los que nunca se alejaron, mantienen una pertenencia eclesial pac\u00edfica, pero cr\u00edtica y en ocasiones dif\u00edcil, pero sin rupturas. Saben que necesitan una conversi\u00f3n permanente, y sienten a la Iglesia como propia aunque la sue\u00f1an mucho m\u00e1s aut\u00e9ntica. Los nuevos, reci\u00e9n convertidos, mantienen una pertenencia eclesial m\u00e1s agitada, tensa en ocasiones. En su vida hubo una ruptura y al volver quisieran que todos vibraran con lo que a ellos les hizo vibrar y que sus expresiones y sus peque\u00f1os descubrimientos fueran compartidos por todos. Como ya hemos notado, generalmente entre unos j\u00f3venes y otros hay bastante distancia y poco entendimiento. Parece una pena que siendo tan pocos, no haya mucha unidad. Parece que unos deber\u00edan dejarse enriquecer por los valores nuevos, pero los otros deber\u00edan respetar el sabor a\u00f1ejo de la fidelidad y la perseverancia. Cuando casi todos se alejaron, ellos siguieron al pie del ca\u00f1\u00f3n. Probablemente el factor juvenil sea lo que les una y el punto fuerte para lograr una plena comuni\u00f3n. Tienen la misma edad, las mismas vivencias y ser\u00e1 f\u00e1cil abrirse. Han descubierto formas de Iglesia diversas y tendr\u00e1n que valorar la riqueza de lo diferente, sin vivirla como amenaza. Este ser\u00e1 el reto, pero no olvidemos que representan todos juntos una minor\u00eda no significativa socialmente. Casi todos los j\u00f3venes est\u00e1n al otro lado.
      \n <\/p>\n

        \n
      1. Es urgente salir al encuentro de todos los j\u00f3venes<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

        \u00a0<\/strong>
        \nPero no podemos quedarnos en el lamento de que casi todos, antes o despu\u00e9s se marcharon o se marchar\u00e1n. Ni quedarnos contentos con los poquitos que perseveraron en las f\u00f3rmulas de siempre o los pocos que con nuevos itinerarios est\u00e1n ahora \u201cen la Iglesia\u201d como algunos quieren decir una y otra vez. Entre tanto, casi todos los j\u00f3venes siguen en el campo. \u00bfExtraviados? \u00bfPerdidos? \u00bfDesorientados? \u00bfMuy a gusto? \u00bfLejos? \u00bfCon nostalgia? No sabemos c\u00f3mo se sienten, pero s\u00ed sabemos c\u00f3mo nos sentimos nosotros como seguidores de Jes\u00fas.
        \nNos urge el mandato misionero de que a toda la creaci\u00f3n, y a toda criatura alcance el preg\u00f3n del Evangelio. No estamos satisfechos con saber del tres por ciento porque el coraz\u00f3n de pastor arde en deseos de que la persona de Jes\u00fas sea conocida, experimentada, celebrada \u00a0por muchos m\u00e1s y proporcione vida en abundancia a quienes tienen toda la vida por descubrir. Es urgente salir al encuentro de todos los j\u00f3venes. Ir en su busca.
        \nTodav\u00eda hay que superar otro peque\u00f1o escollo. Muchas veces, creemos que es suficiente tener la casa a punto para cuando decidan regresar. A veces nos refugiamos en la imagen del Padre de la Misericordia de otra par\u00e1bola, la de aquel que ten\u00eda dos hijos y uno le pidi\u00f3 la herencia y cuando la tuvo se march\u00f3 lejos. El padre le esperaba d\u00eda a d\u00eda en lo alto de la colina, miraba hasta gastar su mirada. Creemos que con esperar ser\u00eda suficiente en Pastoral de Juventud. Aquel muchacho, en su coraz\u00f3n de hijo sinti\u00f3 la necesidad y el hambre y fue capaz de recapacitar. Este ser\u00eda un camino de regreso para muchos j\u00f3venes, muchas ovejas y nosotros como comunidad estar\u00edamos esperando con el carnero matado diciendo a los hermanos mayores que se alegraran con nuestra alegr\u00eda. Probablemente sea este un camino de vuelta pastoralmemte v\u00e1lido para j\u00f3venes que experimentaron previamente en su primera juventud o en su juventud casi adulta el amor del Padre y la alegr\u00eda de la fraternidad, sabi\u00e9ndose parte de una Iglesia hogar y casa paterna. Si as\u00ed hubiera sido, la nostalgia ser\u00eda una buena receta pastoral. Ser\u00eda buena opci\u00f3n para un joven hecho y derecho que en libertad decide salir y en libertad podr\u00e1 volver.
        \nPero en nuestro caso, para la mayor\u00eda de los j\u00f3venes no ser\u00eda un camino pastoral adecuado. Por eso nos inclinamos al pastor que pierde ovejas y las busca. Muchos j\u00f3venes creen conocer el cristianismo, pero desconocen verdaderamente la experiencia de Cristo. No han dejado la casa paterna, porque nunca la experimentaron como hogar propio. No construyeron identidad cristiana en libertad, y no pueden en libertad abandonar ni hacer camino propio para volver. Culturalmente, se dejaron arrastrar por modas y por corrientes que les superan y se encuentran extraviados o simplemente muy lejos sin haber elegido. Quiz\u00e1 no eligieron salir, ni sepan como elegir regresar. De ah\u00ed que nosotros debamos salir \u2013necesaria y urgentemente- a buscarlos sin cesar, con pasi\u00f3n y con paciencia. Con amor y con creatividad renovados. Sin echarles nada en cara, sin broncas ni recriminaciones.
        \n <\/p>\n

          \n
        1. \u00bfQui\u00e9n est\u00e1 dispuesto a cargar con los j\u00f3venes sobre los hombros?<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

           
          \nNecesitamos por tanto rastreadores que conozcan la monta\u00f1a y el valle, la altura y la profundidad. Necesitamos oteadores con vista de \u00e1guila y con resistencia para alcanzar las cumbres lejanas del campamento base. Necesitamos conocer a Jes\u00fas y darlo a conocer, su mensaje y su persona; conocer nuestro mundo \u2013la sensibilidad y el lenguaje juvenil- y disponerse a la b\u00fasqueda voceando sin cesar el nombre una y otra vez sin dejar de caminar, de d\u00eda y de noche. Es necesario salir a buscar en los ambientes de estudio y formaci\u00f3n, de trabajo y de ocio, en lo s\u00f3rdido y en lo emocional, en la cultura y en la fragmentaci\u00f3n familiar. En la realidad virtual y tomando unas copas.
          \n\u00bfQui\u00e9n estar\u00e1 dispuesto a buscar hasta encontrar? Y cuando encontremos su rastro y escuchen nuestra voz \u00bfQui\u00e9n cargar\u00e1 con ellos sobre los hombros? Para esta empresa no basta un h\u00e9roe. No es cosa de una persona, porque solo una comunidad madura, unida y plural, podr\u00e1 llevar este peso y alcanzar el \u00e9xito. La pastoral de la \u201cjuventud perdida\u201d, si es que estuviera perdida s\u00f3lo es posible para una comunidad, una Iglesia, que est\u00e9 dispuesta a buscar con ah\u00ednco y al encontrar las ovejas no pedirles cuentas, sino descansar en la alegr\u00eda del encuentro. Se necesita un nutrido grupo de animadores j\u00f3venes, de distinta cala\u00f1a y distinto temple. Tambi\u00e9n son precisos unos adultos que dan sost\u00e9n a estos animadores y que vertebren la misi\u00f3n ofreciendo experiencia y dot\u00e1ndoles de recursos adecuados. Entre los adultos no podremos prescindir de sacerdotes y religiosas, de religiosos y de laicos que se dedican a esta tarea con una vocaci\u00f3n y carisma particular.
          \nPara encontrar a los j\u00f3venes, algunos han elegido la formula de la Misi\u00f3n Joven con un primer anuncio expl\u00edcito y una llamada impactante a la conversi\u00f3n y al cambio de vida. Otros, para lograr el encuentro, conviven con sus intereses, \u00a0con paciencia infinita, se infiltran con naturalidad en sus ambientes y esperan el momento oportuno para dar el paso a la proclamaci\u00f3n de la Palabra que salva. Los primeros parecer\u00eda que van demasiado r\u00e1pido y que s\u00f3lo les interesa su salvaci\u00f3n espiritual sin importarles otras cosas de su vida que tambi\u00e9n anhelan la fuerza de Dios: el amor, la orientaci\u00f3n profesional, la gesti\u00f3n del ocio, etc. Para los segundos, parecer\u00eda que nunca llegara el momento oportuno para la educaci\u00f3n en la fe y s\u00f3lo quedar\u00eda como un fruto retardado y escaso. Se conseguir\u00eda educaci\u00f3n en valores muy cercanos al evangelio, pero nunca se entrar\u00eda en el anuncio expl\u00edcito, en la confrontaci\u00f3n sincera con la Palabra, la oraci\u00f3n y los sacramentos. En los primeros, la propuesta es netamente eclesial, moral y espiritual, lit\u00fargica y sacramental; mientras que en los segundos, la propuesta es educativa, integral, social y laboral, pero difusa en los planteamientos creyentes y eclesiales. \u00bfNo habr\u00e1 llegado el momento de mezclar itinerarios o de reconocer insuficiencias? \u00bfNo ser\u00e1 el tiempo de la humildad pastoral de todos?
          \nM\u00e1s a\u00fan no habr\u00eda llegado el momento de escuchar antes de hablar, como recomendaba el recordado Juan Pablo II en Ecclesia in Europa<\/em>: \u201chace falta renovar la pastoral juvenil<\/em>, articulada por edades y atenta a las distintas condiciones de ni\u00f1os, adolescentes y j\u00f3venes. Es necesario adem\u00e1s dotarla de mayor organicidad y coherencia,escuchando pacientemente<\/em> las preguntas de los j\u00f3venes, para hacerlos protagonistas de la evangelizaci\u00f3n y edificaci\u00f3n de la sociedad. En este quehacer hay que promover ocasiones de encuentro entre los j\u00f3venes, para favorecer un clima de escucha rec\u00edproca<\/em> y oraci\u00f3n\u201d (n. 62).
          \n <\/p>\n

            \n
          1. \u00bfQui\u00e9n se alegrar\u00e1 por el encuentro?<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

            \u00a0<\/strong>
            \nToda la comunidad se alegrar\u00e1 y se beneficiar\u00e1 del encuentro, pero especialmente los que m\u00e1s vocearon sus nombres, los que con m\u00e1s ah\u00ednco gastaron su vida en rescatar a muchos. Es tiempo de cambiar la expresi\u00f3n \u201cla juventud est\u00e1 perdida\u201d, por otra que dijera: \u201cla juventud puede encontrar al Se\u00f1or de la Vida, a Jes\u00fas, el Hijo de Dios\u201d. S\u00f3lo una Iglesia que se alegra verdaderamente del re-encuentro de los j\u00f3venes con Cristo puede convocar a toda la comunidad, a los vecinos, a los amigos, a los ancianos y a los ni\u00f1os para celebrar y bendecir a Dios. Estoy pensando ahora en las alegr\u00edas de tantos catequistas y animadores de j\u00f3venes, de tantos profesores de religi\u00f3n, de tantos equipos de pastoral de muchos centros cristianos que se alegran cuando tras el paso de los a\u00f1os se reconocen en adultos que fueron primeramente j\u00f3venes re-encontrados que se encontraron para siempre con \u00c9l. Bien sabe cualquier educador cristiano, que no se perder\u00e1 ni un vaso de agua que demos a un peque\u00f1o en nombre de Jes\u00fas. Que no se perder\u00e1 ning\u00fan esfuerzo por crear condiciones para el encuentro con Cristo. \u00bfDaremos, por tanto, por perdidos a los j\u00f3venes? De ning\u00fan modo. Saldremos de nuevo, al amanecer, a seguir busc\u00e1ndoles.<\/p>\n

            JUAN CARLOS GARC\u00cdA DOMENE<\/p>\n

            jcgd@um.es<\/a><\/p>\n

             
            \n 
            \n            <\/a> Basta asomarse a los datos que ofrecen los Informes de la Fundaci\u00f3n Santa Mar\u00eda (www.fundacion-sm.com<\/a> ) sobre Infancia y Juventud y a los datos de los Informes del Instituto de la Juventud (www.injuve.es<\/a>).
            \n            <\/a> Dec\u00eda el Informe de la FSM que s\u00f3lo un tres por ciento de los j\u00f3venes tiene en cuenta los postulados de la doctrina cat\u00f3lica cuando toma decisiones sobre su vida y su comportamiento.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

            Juan Carlos Garc\u00eda es Sacerdote de la Di\u00f3cesis de Cartagena (Espa\u00f1a) y profesor de Teolog\u00eda Pastoral\u00a0 y de Did\u00e1ctica de la Ense\u00f1anza Religiosa Escolar en la Universidad de Murcia.   Si uno de vosotros tiene cien ovejas y se le pierde una, \u00a0\u00bfno deja las noventa y nueve en el campo y va a buscar […]<\/p>\n","protected":false},"author":3,"featured_media":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"","_et_pb_old_content":"","_et_gb_content_width":"","inline_featured_image":false,"footnotes":""},"categories":[606,1251,94],"tags":[],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/7713"}],"collection":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/users\/3"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=7713"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/7713\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=7713"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=7713"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=7713"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}