{"id":7967,"date":"2008-03-01T00:00:21","date_gmt":"2008-02-29T22:00:21","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/?p=7967"},"modified":"2008-03-01T00:00:21","modified_gmt":"2008-02-29T22:00:21","slug":"ante-el-problema-ecologico","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/ante-el-problema-ecologico\/","title":{"rendered":"Ante el problema ecol\u00f3gico"},"content":{"rendered":"
Textos para la reflexi\u00f3n<\/h1>\n
Luis Antonio Medina
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\nParece innegable que una de las m\u00e1s graves preocupaciones sociales que tiene hoy la humanidad es la \u201ccuesti\u00f3n ecol\u00f3gica\u201d. Tan ingente problema concierne no s\u00f3lo a la econom\u00eda o la pol\u00edtica; tambi\u00e9n a la educaci\u00f3n. Es, pues, importante en la tarea educativa proponer valore y suscitar actitudes que motiven un comportamiento humano de signo muy distinto de los actuales comportamientos lesivos para el medio ambiente. En orden a propiciar un di\u00e1logo abierto sobre algunas cuestiones implicadas en el problema ecol\u00f3gico, sugerimos algunos textos con algunas pistas sencillas de reflexi\u00f3n
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\nMadre Tierra<\/strong>
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\n\u201cCierto d\u00eda, un bracero oriundo de una regi\u00f3n de habla n\u00e1huatl trabajaba en mi huerto. Le dije que echara la tierra arrastrada por una m\u00e1quina plantadora en el recipiente de los desperdicios. Me respondi\u00f3, a la vez con firmeza y con cortes\u00eda: \u201cNo, no se\u00f1ora. No debe tratarse a la tierra como si fuese basura\u201d. En otra ocasi\u00f3n, otra mujer india que me ayudaba en las faenas caseras me oy\u00f3 quejarme del polvo y la suciedad que el aire met\u00eda dentro de la casa. Me reconvino diciendo: \u201cSe\u00f1ora, no deber\u00eda hablar as\u00ed del polvo, porque el polvo es tierra y la tierra es nuestra madre, que nos alimenta\u201d (Sylvia Marcos, Concilium<\/em>(1995) 782).
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\n\u201cLa tierra es una lucha diaria, una lucha sin descanso: roturar la tierra, plantar, desbrozar, regar hasta recoger la cosecha. Pero entonces ves tu campo maduro, tal como se halla ante ti bajo el roc\u00edo de la ma\u00f1ana, y te dices: Yo, fulanito de tal, due\u00f1o del roc\u00edo, y la oscuridad se desliza en tu coraz\u00f3n. Pero la tierra es como una mujer; cuando se la maltrata continuamente, se pone a la defensiva. He visto c\u00f3mo hab\u00e9is talado sus montes. Ahora la tierra est\u00e1 desnuda y sin protecci\u00f3n. Son las ra\u00edces las que entablan amistad con la tierra y la retienen: los mangos, los encinares, los
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\nbosques de caoba, que para su gran sed le dan el agua de la lluvia y la protegen con su sombra del ardor del mediod\u00eda. As\u00ed es, y no de otra manera; de lo contrario, la lluvia arranca la tierra y el sol la abrasa y no queda m\u00e1s que la roca pelada. Os digo la verdad: No es Dios quien ha abandonado al hombre; es el hombre quien ha abandonado a la tierra. Y ahora recibe su castigo: sequ\u00eda, desolaci\u00f3n y desierto\u201d (J. ROUMAIN, Gouverneurs<\/em> de la ros\u00e9e<\/em>, 1944).
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\n\u201cEl hombre blanco trata a su madre la tierra y a su hermano el cielo como cosas que se compran y se venden. Su apetito devorar\u00e1 la tierra y dejar\u00e1 detr\u00e1s de \u00e9l s\u00f3lo un desierto\u2026 Lo que pase con la tierra pasar\u00e1 con los hijos de la tierra. El hombre no puede tener la trama de la vida. \u00c9l es s\u00f3lo una hebra en ese tejido. Lo que haga con el tejido se lo har\u00e1 a s\u00ed mismo\u2026 El aire es precioso para el hombre piel roja porque todas las cosas comparten el mismo soplo, la bestia, el \u00e1rbol, el hombre\u2026 La savia que circula en los \u00e1rboles lleva la memoria del hombre piel roja\u2026 Nuestro Dios es el mismo Dios. Ustedes podr\u00e1n pensar ahora que \u00c9l les pertenece, as\u00ed como quieren poseer nuestra tierra, pero no es posible. \u00c9l es el Dios de todos los hombres y su compasi\u00f3n es igual para el hombre rojo y para el hombre blanco. Esta tierra es preciosa para \u00c9l, y violarla es despreciar a su Creador\u201d (Carta del Jefe Seatle al presidente Flanklin Pearce, 1854).
\n <\/p>\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n- \u00bfQu\u00e9 sentimientos han suscitado estos textos?<\/li>\n
- Comentar en el grupo:<\/li>\n<\/ol>\n
–\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 \u201cNo es Dios quien ha abandonado al hombre; es el hombre quien ha abandonado a la tierra. \n–\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0\u00a0 \u201cLo que pase con la tierra, pasar\u00e1 con los hijos de la tierra\u201d<\/td>\n<\/tr>\n<\/tbody>\n<\/table>\n<\/td>\n<\/tr>\n<\/tbody>\n<\/table>\n \n \nCrisis ecol\u00f3gica<\/strong> \n \n\u201c\u00bfPor qu\u00e9 somos tan reacios, especialmente en Estados Unidos, a ver el enorme peligro al que se enfrenta nuestra civilizaci\u00f3n? \u00bfQu\u00e9 nos impide darnos cuenta de que la fiebre del calentamiento global es real y grav\u00edsima y que puede que ya est\u00e9 m\u00e1s all\u00e1 de nuestra capacidad de control e incluso de la de la Tierra? Creo que rechazamos las pruebas de que nuestro mundo est\u00e1 cambiando porque todav\u00eda somos, como nos record\u00f3 el sabio bi\u00f3logo E. O. Wilson, carn\u00edvoros tribales. Estamos programados por nuestra herencia para considerar las dem\u00e1s cosas vivas b\u00e1sicamente como comida, y para que nuestra tribu nacional sea para nosotros m\u00e1s importante que cualquier otra cosa. Llegamos incluso a dar nuestra vida por ella y estamos dispuestos a matar de forma extremadamente cruel a otros seres humanos por el bien de nuestra tribu. Todav\u00eda nos resulta ajeno el concepto de que nosotros y el resto de la vida, desde las bacterias a las ballenas, formamos parte de una entidad mucho mayor y m\u00e1s diversa: la Tierra viva\u201d (J. LOVELOCK, La venganza de la tierra<\/em>, 20). \n \n\u201cLos hombres de la segunda era industrial no hemos acertado a establecer la relaci\u00f3n T\u00e9cnica-Naturaleza en t\u00e9rminos de concordia, y a la atracci\u00f3n inicial de aqu\u00e9lla, concentrada en las grandes urbes, suceder\u00e1 un movimiento de repliegue en el que el hombre buscar\u00e1 de nuevo su propia personalidad, cuando ya, tal vez, sea tarde, porque la naturaleza como tal habr\u00e1 dejado de existir\u201d (M. DELIBES, Un mundo que agoniza<\/em>, Plaza Jan\u00e9s, Madrid 1990, 157). \n \n\u201cEl problema del deterioro ambiental no es principalmente un problema t\u00e9cnico; si lo fuera, no habr\u00eda surgido de modo tan agudo en las sociedades tecnol\u00f3gicamente m\u00e1s avanzadas. No se origina en la incompetencia cient\u00edfica o t\u00e9cnica, ni en la insuficiencia de la educaci\u00f3n cient\u00edfica, ni en la falta de informaci\u00f3n, ni en la falta de dinero para la investigaci\u00f3n. Se origina en el estilo de vida del mundo moderno, que a su vez surge de las creencias b\u00e1sicas: su metaf\u00edsica o su religi\u00f3n\u2026 Esta situaci\u00f3n es totalmente nueva. En todas las \u00e9pocas, en todas las sociedades, en todo el mundo, los santos y los sabios han advertido respecto al materialismo y abogado por un orden de prioridades m\u00e1s sensato. Con diferentes lenguajes, con s\u00edmbolos variados, pero el mensaje esencial ha sido siempre el mismo: determina correctamente tus prioridades\u2026 Todo indica que lo m\u00e1s necesario es hoy una revisi\u00f3n de los fines hacia los que se encaminan nuestros esfuerzos\u201d (E. F. SCHUMACHER, Integral<\/em> 42 (1983) 6). \n \n\u201cEscribo en el a\u00f1o 2003, durante uno de los veranos m\u00e1s calurosos, si no el m\u00e1s caluroso que se recuerda en Europa. La gente no puede hablar de otra cosa. En el bolet\u00edn de noticias de esta ma\u00f1ana, que anunciaba un nuevo d\u00eda de temperaturas r\u00e9cord, han contado la terrible historia de un ni\u00f1o de nueve a\u00f1os a quien su familia ten\u00eda encadenado a la cama y hab\u00eda matado a golpes. Los padres, un t\u00edo y la abuela hab\u00edan sido detenidos inmediatamente porque eran responsables. Durante la ola de calor, las muertes en Francia han alcanzado proporciones de epidemia: seg\u00fan las estad\u00edsticas, el calor ha matado a diez mil personas m\u00e1s que las que mueren en estas fechas. Los hospitales est\u00e1n saturados, los reactores nucleares corren el riesgo de sobrecalentarse, hay incendios por doquier, las cosechas se abrasan en los campos. Pero nadie es responsable. Uno se pregunta que har\u00e1 falta para obligar a la gente, y especialmente a los gobiernos, a reducir ya las emisiones de gases de invernadero. No necesitamos m\u00e1s pruebas de que son nuestras propias actividades humanas las que han provocado que suban las temperaturas y que suframos con m\u00e1s frecuencia tormentas de una violencia sin precedentes. \u00bfPor qu\u00e9 no aplicamos toda la fuerza de la ley contra los responsables del calentamiento global?\u201d (SUSAN GEORGE, Otro mundo es posible si\u2026<\/em>, 48). \n <\/p>\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n- \u00bfQu\u00e9 es lo que m\u00e1s te ha impresionado y llamado la atenci\u00f3n de estos textos?<\/li>\n
- \u00bfSomos conscientes de los peligros a los que se enfrenta el mundo actual?<\/li>\n
- \u00bfQu\u00e9 impide darse cuenta de ellos?<\/li>\n
- \u00bfCu\u00e1les te parecen las causas m\u00e1s importantes de la actual crisis ecol\u00f3gica?<\/li>\n<\/ol>\n<\/td>\n<\/tr>\n<\/tbody>\n<\/table>\n<\/td>\n<\/tr>\n<\/tbody>\n<\/table>\n
\nDimensi\u00f3n \u00e9tica<\/strong> \n \n\u201cDebe desarrollarse una nueva \u00e9tica para el uso de los recursos naturales que traiga como resultado un estilo de vida compatible con la futura escasez que nos espera. Esto requerir\u00e1 una nueva tecnolog\u00eda de producci\u00f3n basada en el empleo m\u00ednimo de recursos y en la duraci\u00f3n de los productos, en lugar de procesos basados en la m\u00e1xima producci\u00f3n. Deber\u00eda ser orgullo el ahorrar y conservar, y no gastar y desperdiciar\u201d (D. H. MEADOWWS-D. L. MEADOWS, Los l\u00edmites del crecimiento humano<\/em>, FCE, M\u00e9xico 1974, 189). \n \n\u201cEs necesario que el hombre reconsidere el lugar que ocupa en la naturaleza, revise sus actitudes hacia el medio ambiente en general y que desarrolle una nueva \u00e9tica de la tierra<\/em>. Las ra\u00edces de la crisis en las que el hombre se encuentra hoy atrapado est\u00e1n en la visi\u00f3n que el hombre occidental, en particular, ha tenido acerca de la tierra: la tierra como adversario que tiene que ser conquistado y puesto a su servicio a fin de ser explotado para sus propios fines como una posesi\u00f3n de dominio de derecho y, m\u00e1s importante a\u00fan, como una tierra de capacidad ilimitada. Estas consideraciones deben servir de base a una conciencia ecol\u00f3gica, a amar, respetar, admirar y comprender el ecosistema global del cual formamos parte, y a una \u00e9tica que asegure la supervivencia de la especie humana, con calidad, dignidad e integridad. De no ser as\u00ed, su suerte est\u00e1 decidida. Ser\u00e1 la de una colisi\u00f3n y un inexorable holocausto\u201d (E. KORMONDY,Conceptos de Ecolog\u00eda<\/em>, Alianza, Madrid 1975, 238). \n \n\u201cEn la era de la civilizaci\u00f3n t\u00e9cnica, el primer deber del comportamiento humano colectivo es el futuro de los hombres. En \u00e9l est\u00e1 manifiestamente contenido el futuro de la naturaleza como condici\u00f3n sine qua non<\/em>; pero adem\u00e1s, independientemente de ello, el futuro de la naturaleza es de suyo una responsabilidad metaf\u00edsica, una vez que el hombre no s\u00f3lo se ha convertido en un peligro para s\u00ed mismo, sino tambi\u00e9n para toda la biosfera. Incluso si pudi\u00e9ramos disociar ambas cosas \u2013esto es, incluso si fuera posible para nuestros descendientes una vida que pudiera llamarse humana en un mundo devastado y en su mayor parte reemplazado artificialmente-, la rica vida de la Tierra, producida en una larga labor creativa\u00a0 de la naturaleza y ahora encomendada a nosotros, exigir\u00eda nuestra protecci\u00f3n. Dado que de hecho no es posible separarlas y dado que en lo m\u00e1s decisivo el inter\u00e9s del hombre coincide con el resto de lo vivo en cuanto es su morada terrena en el m\u00e1s sublime de los sentidos, podemos contemplar ambos deberes como uno solo bajo la idea del deber para con el hombre, sin por ello caer en un reduccionismoantropocentrista\u201d (H. JONAS, El principio de responsabilidad<\/em>, Herder, Barcelona 1995, 227). \n \n\u201cLa \u00e9tica de la sociedad dominante hoy es utilitarista y antropoc\u00e9ntrica. Considera al conjunto de los seres como algo al servicio del ser humano, que puede disponer de ellos a su antojo, atendiendo a sus deseos y preferencias. Cree que el ser humano es la corona del proceso evolutivo y el centro del universo. Lo \u00e9tico ser\u00eda desarrollar un sentido del l\u00edmite de los deseos humanos por cuanto estos conducen f\u00e1cilmente a procurar la ventaja individual a costa de la explotaci\u00f3n de clases, sometimiento de pueblos y opresi\u00f3n de sexos. El ser humano es tambi\u00e9n, y principalmente, un ser de comunicaci\u00f3n y responsabilidad. Entonces lo \u00e9tico ser\u00eda tambi\u00e9n potenciar la solidaridad generacional en el sentido de respetar el futuro de los que a\u00fan no han nacido. Y finalmente, \u00e9tico ser\u00eda reconocer el car\u00e1cter de autonom\u00eda relativa de los dem\u00e1s seres; ellos tambi\u00e9n tienen derecho a continuar existiendo y a coexistir con nosotros y con otros seres, puesto que han existido antes que nosotros y, durante millones de a\u00f1os, sin nosotros. En una palabra, ellos tienen derecho al presente y al futuro\u201d (L. BOFF, Ecolog\u00eda. Grito de la tierra, grito de los pobres,<\/em> Trotta, Madrid 1997, 20). \n <\/p>\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n- \u00bfQu\u00e9 orientaciones \u00e9ticas proponen estos textos?<\/li>\n
- \u00bfEs posible llevarlas a la pr\u00e1ctica?<\/li>\n
- \u00bfCon cu\u00e1les de ellas estoy m\u00e1s de acuerdo?<\/li>\n
- \u00bfCon cu\u00e1les m\u00e1s en desacuerdo?<\/li>\n
- \u00bfQu\u00e9 puedo hacer en la vida cotidiana?<\/li>\n<\/ol>\n<\/td>\n<\/tr>\n<\/tbody>\n<\/table>\n<\/td>\n<\/tr>\n<\/tbody>\n<\/table>\n
\nEnse\u00f1anza social de la Iglesia<\/strong> \n \n\u201cLa puesta en obra de estas posibilidades t\u00e9cnicas a un ritmo acelerado no se act\u00faa sin repercutir peligrosamente sobre el equilibrio de nuestro medio natural y el deterioro progresivo de lo que se ha venido en llamar el medio ambiente corre el riesgo, bajo el efecto de los tropiezos de la civilizaci\u00f3n industrial, de conducir a una verdadera cat\u00e1strofe ecol\u00f3gica. Ya estamos viendo viciarse el aire que respiramos, degradarse el agua que bebemos, contaminarse los r\u00edos, los lagos y a\u00fan los oc\u00e9anos hasta hacernos temer una verdadera muerte biol\u00f3gica en un futuro cercano si es que no se adoptan valientemente y no se ponen en pr\u00e1ctica con severidad algunas en\u00e9rgicas medidas\u201d (PABLO VI, Discurso\u00a0 a la XII Conferencia de la FAO, 1963). \n \n\u201cMientras el horizonte del hombre se va as\u00ed modificando, partiendo de las im\u00e1genes que para \u00e9l se seleccionan, se hace sentir otra transformaci\u00f3n, consecuencia tan dram\u00e1tica como inesperada de la actividad humana. Bruscamente, el hombre adquiere conciencia de ella: debido a una explotaci\u00f3n inconsiderada de la naturaleza, corre el riesgo de destruirla y de ser a su vez v\u00edctima de esta degradaci\u00f3n. No s\u00f3lo el ambiente f\u00edsico constituye una amenaza permanente: contaminaciones y desechos, nuevas enfermedades, poder destructor absoluto; es el propio consorcio humano el que el hombre no domina ya, creando de esta manera para el ma\u00f1ana un ambiente que podr\u00eda resultarle intolerable. Problema social de envergadura que incumbe a la familia humana toda entera\u201d (PABLO VI, Octogesima<\/em> adveniens<\/em>, 21). \n \n\u201cParece que somos cada vez m\u00e1s conscientes del hecho de que la explotaci\u00f3n de la tierra, del planeta sobre el cual vivimos, exige una planificaci\u00f3n racional y honesta. Al mismo tiempo, tal explotaci\u00f3n para fines no solamente industriales, sino tambi\u00e9n militares, el desarrollo de la t\u00e9cnica no controlado ni encuadrado en un plan de radio universal y aut\u00e9nticamente human\u00edstico, llevan muchas veces consigo la amenaza del ambiente natural del hombre, lo enajenan en sus relaciones con la naturaleza y lo apartan de ella. El hombre parece, a veces, no percibir otros significados de su ambiente natural, sino solamente aquellos que sirven a los fines de un uso inmediato y de consumo. En cambio, era voluntad del Creador que el hombre se pusiera en contacto con la naturaleza como due\u00f1o y custodio inteligente y noble, y no como explotador y destructor sin ning\u00fan reparo\u201d (JUAN PABLO II, Redemptor<\/em> hominis<\/em>, 15). \n \n\u201cLa primera consideraci\u00f3n consiste en la conveniencia de tomar mayor conciencia de que no se pueden utilizar impunemente las diversas categor\u00edas de seres vivos o inanimados \u2013animales, plantas, elementos naturales-, como mejor apetezca, seg\u00fan las propias exigencias econ\u00f3micas. Al contrario, conviene tener en cuenta la naturaleza de cada ser y su mutua conexi\u00f3n en un sistema ordenado, que es el cosmos. La segunda consideraci\u00f3n se funda en cambio, en la convicci\u00f3n, cada vez mayor tambi\u00e9n, de la limitaci\u00f3n de los recursos naturales, algunos de los cuales no son, como suele decirse, renovables. Usarlos como si fueran inagotables, con dominio absoluto, pone muy en peligro su futura disponibilidad, no s\u00f3lo para la generaci\u00f3n presente, sino sobre todo para las futuras. La tercera consideraci\u00f3n se refiere directamente a las consecuencias de un cierto tipo de desarrollo sobre la calidad de la vida en las zonas m\u00e1s industrializadas: Todos sabemos que el resultado directo o indirecto de la industrializaci\u00f3n es, cada vez m\u00e1s, la contaminaci\u00f3n del ambiente, con graves consecuencias para la salud de la poblaci\u00f3n\u201d (JUAN PABLO II, Sollicitudo<\/em> rei sociales,<\/em> 34). \n \n\u201cLa sociedad actual no hallar\u00e1 una soluci\u00f3n al problema ecol\u00f3gico si no revisa seriamente su estilo de vida. En muchas partes del mundo esta misma sociedad se inclina al hedonismo y al consumismo, pero permanece indiferente a los da\u00f1os que estos causan. Como ya he se\u00f1alado, la gravedad de la situaci\u00f3n ecol\u00f3gica demuestra cu\u00e1n profunda es la crisis moral del hombre. Si falta el sentido del valor de la persona, aumenta el desinter\u00e9s por los dem\u00e1s y por la tierra. La austeridad, la templanza, la autodisciplina y el esp\u00edritu de sacrificio deben conformar la vida de cada d\u00eda a fin de que la mayor\u00eda no tenga que sufrir las consecuencias negativas de la negligencia de unos poco. Hay, pues, una urgente necesidad de educar en la responsabilidad ecol\u00f3gica: responsabilidad con nosotros mismos y con los dem\u00e1s, responsabilidad con el ambiente\u201d (JUAN PABLO II, Mensaje de la Jornada Mundial de la Paz<\/em> 1990). \n \n\u201cEl hombre llamado a cultivar y custodiar el jard\u00edn del mundo, tiene una responsabilidad espec\u00edfica sobre el ambiente de vida, o sea, sobre la creaci\u00f3n que Dios puso al servicio de su dignidad personal, de su vida: respecto no s\u00f3lo al presente, sino tambi\u00e9n a las generaciones futuras. Es la cuesti\u00f3n ecol\u00f3gica<\/em>, que encuentra en la Biblia una luminosa y fuerte indicaci\u00f3n \u00e9tica para una soluci\u00f3n respetuosa del gran bien de la vida, de toda vida. En realidad, el dominio confiado al hombre por el Creador no es poder absoluto, ni se puede hablar de libertad de usar y abusar<\/em>, o de disponer de las cosas como mejor parezca. La limitaci\u00f3n impuesta por el mismo Creador desde el principio, y expresada simb\u00f3licamente con la prohibici\u00f3n de comer del fruto del \u00e1rbol<\/em>, muestra claramente que ante la naturaleza visible, estamos sometidos a las leyes no s\u00f3lo biol\u00f3gicas sino tambi\u00e9n morales, cuya transgresi\u00f3n no queda impune\u201d (JUAN PABLO II, Evangelium<\/em> vital<\/em>, 42). \n <\/p>\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n- \u00bfQu\u00e9 orientaciones y valores morales propone la doctrina social de la Iglesia?<\/li>\n
- Subraya las orientaciones que te parezcan m\u00e1s importantes y necesarias.<\/li>\n
- Comentar: \u201cLa sociedad actual no hallar\u00e1 soluci\u00f3n al problema ecol\u00f3gico, si no revisa seriamente su estilo de vida?<\/li>\n<\/ol>\n<\/td>\n<\/tr>\n<\/tbody>\n<\/table>\n<\/td>\n<\/tr>\n<\/tbody>\n<\/table>\n
\nCarta de la Tierra <\/strong>(Principios) \n <\/p>\n\n- Respetar la Tierra y la vida en toda su diversidad<\/li>\n
- Cuidar la comunidad de la vida con entendimiento, compasi\u00f3n y amor.<\/li>\n
- Construir sociedades democr\u00e1ticas que sean justas, participativas, sostenibles y pac\u00edficas<\/li>\n
- Asegurar que los frutos y la belleza de la Tierra se preserven para las generaciones presentes y futuras.<\/li>\n
- Proteger y restaurar la integridad de los sistemas ecol\u00f3gicos de la Tierra, con especial preocupaci\u00f3n por la diversidad biol\u00f3gica y los procesos naturales que sustentan la vida.<\/li>\n
- Evitar da\u00f1ar como el mejor m\u00e9todo de protecci\u00f3n ambiental y cuando el conocimiento sea limitado, proceder con precauci\u00f3n.<\/li>\n
- Adoptar patrones de producci\u00f3n, consumo y reproducci\u00f3n que salvaguarden las capacidades regenerativas de la Tierra, los derechos humanos y el bienestar comunitario.<\/li>\n
- Impulsar el estudio de la sostenibilidad ecol\u00f3gica y promover el intercambio abierto y la extensa aplicaci\u00f3n del conocimiento adquirido<\/li>\n
- Erradicar la pobreza como un imperativo \u00e9tico, social y ambiental<\/li>\n
- Asegurar que las actividades e instituciones econ\u00f3micas, a todo nivel, promuevan el desarrollo humano de forma equitativa y sostenible.<\/li>\n
- Afirmar la igualdad y equidad de g\u00e9nero como prerrequisitos para el desarrollo sostenible y asegurar el acceso universal a la educaci\u00f3n, el cuidado de la salud y la oportunidad econ\u00f3mica.<\/li>\n
- Defender el derecho de todos, sin discriminaci\u00f3n, a un entorno natural y social que apoye la dignidad humana, la salud f\u00edsica y el bienestar espiritual, con especial atenci\u00f3n a los derechos de los pueblos ind\u00edgenas y las minor\u00edas.<\/li>\n
- Fortalecer las instituciones democr\u00e1ticas en todos los niveles y brindar transparencia y rendimiento de cuentas en la gobernabilidad, participaci\u00f3n inclusiva en la toma de decisiones y acceso a la justicia<\/li>\n
- Integrar en la educaci\u00f3n formal y en el aprendizaje a lo largo de la vida, las habilidades, el conocimiento y los valores necesarios para un modo de vida sostenible.<\/li>\n
- Tratar a todos los seres vivientes con respeto y consideraci\u00f3n<\/li>\n
- Promover una cultura de tolerancia, no violencia y paz.<\/li>\n<\/ol>\n
<\/p>\n \n\n\n\n\n\n\n\n\n- Buscar y leer el texto completo del documento.<\/li>\n
- Comentar los principios formulados en el documento \u201cLa carta de la Tierra\u201d y se\u00f1alar los cinco que se juzgan m\u00e1s necesarios.<\/li>\n
- Elaborar en grupo los 10 principios m\u00e1s importantes de la propia Carta de la tierra<\/em><\/li>\n<\/ol>\n<\/td>\n<\/tr>\n<\/tbody>\n<\/table>\n<\/td>\n<\/tr>\n<\/tbody>\n<\/table>\n
\n \nBula \u201cInter sanctos\u201d<\/strong> \nProclamaci\u00f3n de San Francisco de As\u00eds como Patrono de la ecolog\u00eda<\/strong> \n\u00a0<\/strong> \nEntre los santos y los hombres ilustres que han tenido un singular culto por la naturaleza, como magn\u00edfico don hecho por Dios a la humanidad, se incluye justamente a San Francisco de As\u00eds. El, en efecto, tuvo en gran aprecio todas las obras del Creador y, con inspiraci\u00f3n casi sobrenatural, compuso aquel bell\u00edsimo \u00abC\u00e1ntico de las Criaturas\u00bb, a trav\u00e9s de las cuales, especialmente del hermano sol, la hermana luna y las estrellas, rindi\u00f3 al omnipotente y buen Se\u00f1or la debida alabanza, gloria, honor y toda bendici\u00f3n. \nPor eso, con loabil\u00edsima iniciativa, nuestro hermano, el cardenal SilvioOddi, Prefecto de la Sagrada Congregaci\u00f3n para el Clero, en nombre especialmente de los miembros de la Sociedad internacional Planningenvironmental and ecologycal Institute for quality life<\/em>, ha expuesto a esta Sede Apost\u00f3lica el deseo de que San Francisco de As\u00eds sea proclamado celeste Patrono de los cultivadores de la ecolog\u00eda. \nPor tanto Nos, conocido el parecer de la Sagrada Congregaci\u00f3n para los Sacramentos y el Culto Divino, por medio de estas nuestras Letras y a perpetuidad, proclamamos a San Francisco de As\u00eds, celestial Patrono de los cultivadores de la ecolog\u00eda, con todos los honores y privilegios lit\u00fargicos inherentes. No obstante cualquier norma en contrario. As\u00ed lo disponemos, ordenando que las presentes Letras sean religiosamente conservadas y logren, en el presente y en el futuro, su pleno efecto. \nDado en Roma, junto a San Pedro, bajo el anillo del Pescador, el d\u00eda 29 de noviembre del a\u00f1o del Se\u00f1or 1979, II de nuestro pontificado. \n <\/p>\nJOANNES PAULUS PP. II<\/p>\n \n \n \n <\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" Textos para la reflexi\u00f3n Luis Antonio Medina Parece innegable que una de las m\u00e1s graves preocupaciones sociales que tiene hoy la humanidad es la \u201ccuesti\u00f3n ecol\u00f3gica\u201d. Tan ingente problema concierne no s\u00f3lo a la econom\u00eda o la pol\u00edtica; tambi\u00e9n a la educaci\u00f3n. Es, pues, importante en la tarea educativa proponer valore y suscitar actitudes […]<\/p>\n","protected":false},"author":3,"featured_media":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"","_et_pb_old_content":"","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[907,1212,94],"tags":[],"class_list":["post-7967","post","type-post","status-publish","format-standard","hentry","category-luis-antonio-medina","category-materiales-374","category-mision-joven-2"],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/7967"}],"collection":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/users\/3"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=7967"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/7967\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=7967"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=7967"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=7967"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}} | | | | | | | | | |