{"id":8050,"date":"2007-09-01T00:00:56","date_gmt":"2007-08-31T22:00:56","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/?p=8050"},"modified":"2007-09-01T00:00:56","modified_gmt":"2007-08-31T22:00:56","slug":"en-el-planeta-joven-retos-y-propuestas-en-la-transmision-de-la-fe","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/en-el-planeta-joven-retos-y-propuestas-en-la-transmision-de-la-fe\/","title":{"rendered":"En el planeta joven: retos y propuestas en la transmisi\u00f3n de la fe"},"content":{"rendered":"

Mons. Ra\u00fal Berzosa
\nObispado Oviedo
\n 
\nS\u00cdNTESIS DEL ART\u00cdCULO<\/strong>
\nEl art\u00edculo parte de la nueva situaci\u00f3n social (sociedad post-cristiana), se\u00f1alando algunos rasgos que, en ella, definen a los j\u00f3venes, e identificando sus valores y actitudes fundamentales, para concentrarse especialmente en la relaci\u00f3n j\u00f3venes-religi\u00f3n. De manera sint\u00e9tica se\u00f1ala los retos que ponen a la iglesia, las dificultades de los evangelizadores, y propone algunos ejes de acci\u00f3n en la perspectiva de una pastoral de evangelizaci\u00f3n y misi\u00f3n.
\n <\/strong> <\/strong><\/p>\n

    \n
  1. \u00bfQu\u00e9 est\u00e1 sucediendo con la transmisi\u00f3n cristiana de la Fe?<\/strong>[1]<\/a><\/li>\n<\/ol>\n

    <\/strong>
    \nSin realizar an\u00e1lisis excesivamente profundos ni extensos, podemos concluir, en un primer momento, que, social y eclesialmente, estamos en una \u00e9poca nueva. No es la Iglesia primitiva, es decir, la novedad primera del anuncio cristiano, salvo en pa\u00edses de primera evangelizaci\u00f3n o misi\u00f3n ad gentes<\/em>; ni estamos en la denominada \u201c\u00e9poca de cristiandad\u201d (si alguna vez existi\u00f3), ni tampoco anclados en una experiencia de nacional-catolicismo, propia de otras d\u00e9cadas recientes. <\/strong>Estamos situados en una sociedad post-cristiana (algunos la llamar\u00e1n \u201cde la increencia\u201d) donde conviven al menos tres tendencias desde el punto de vista religioso:
    \n– Los restos (que no residuos) de n\u00facleos de cristiandad tradicionales, y de familias y de comunidades abiertas a lo cristiano y confesionalmente \u201ccristianas\u201d;
    \n– La indiferencia junto al nuevo renacer de paganismo-neopaganismo;
    \n– y, poco a poco, aparece una tercera modalidad: la de las \u201cnuevas formas de religiosidad\u201d (especialmente las englobadas bajo la gen\u00e9rica denominaci\u00f3n de potencial humano o de New Age<\/em>).
    \nEn los \u00faltimos siglos, los fundamentos o pilares de la transmisi\u00f3n de la fe eran la familia, la escuela y la parroquia. Dichas instancias se complementaban y trataban de ayudarse. Incluso, de forma impl\u00edcita, \u201ccolaboraba\u201d toda la sociedad y su cultura en dicho cometido de transmitir la fe a las nuevas generaciones. \u00bfDe qu\u00e9 manera? – En los usos y costumbres, en las celebraciones sociales y festivas, en los valores aceptados tradicionalmente, en la mentalidad y en el imaginario colectivo. La transmisi\u00f3n de la fe era \u201clo que espec\u00edficamente ten\u00eda que ser\u201d (personalizaci\u00f3n consciente) y, adem\u00e1s y en muchos casos, \u201cla religiosidad oficial imperante\u201d, esa especie de socializaci\u00f3n religiosa natural.
    \nHoy, en nuestra sociedad moderna-postmoderna, postcristiana, abierta, plural y secularizada, existe una disociaci\u00f3n clara entre la comunicaci\u00f3n del cristianismo (o transmisi\u00f3n de la fe) a las nuevas generaciones y el proceso de socializaci\u00f3n (o de inserci\u00f3n social). Las preguntas est\u00e1n en la calle: \u201c\u00bfSe puede ser cristiano y ciudadano moderno (como si enfrentaran dogmatismo contra tolerancia)? \u00bfQu\u00e9 aporta el cristianismo como espec\u00edfico cuando alguien es ya un buen ciudadano?\u201d.
    \nPara responder adecuadamente a estos interrogantes debemos Asomarnos Y reflejar qu\u00e9 rasgos m\u00e1s definidos ofrece este nuevo suelo socio-cultural en el que nos movemos. Sucintamente, en las p\u00e1ginas que siguen, me atrever\u00e1 a subrayar y concretar algunas caracter\u00edsticas sin repetir lo escrito por mi persona en otras obras, y siempre de la mano de diversos autores y publicaciones relativamente recientes. Se reflejan en revistas cient\u00edficas o de divulgaci\u00f3n que suelen ser m\u00e1s flexibles al g\u00e9nero de ensayo. Nos adentramos por lo tanto, sin ser exhaustivos, en algunas pinceladas que definen el llamado planeta joven.
    \n <\/strong><\/p>\n

      \n
    1. Algunos rasgos que definen el planeta joven<\/strong>[2]<\/a><\/li>\n<\/ol>\n

      <\/strong>
      \nSoy consciente de que se han escrito cientos de art\u00edculos y libros sobre el tema de los j\u00f3venes. Pero tambi\u00e9n soy consciente de que nunca se hablar\u00e1 o se escribir\u00e1 lo suficiente sobre ellos. Para la sociedad, y para la Iglesia, son una provocaci\u00f3n y un reto, son el presente y el futuro m\u00e1s valioso. En diversas ocasiones hemos expresado que los j\u00f3venes son como la esponja o el term\u00f3metro de la nueva cultura. Su mundo recoge y adelanta los nuevos fen\u00f3menos sociales, con lo que supone de retos y posibilidades para la evangelizaci\u00f3n.
      \nNos parece muy sugerente la idea de comenzar identificando los tres valores o actitudes fundamentales de la juventud de hoy: be free <\/em>(ser libre), puenting <\/em>(coleccionismo de experiencias); connecting people <\/em>(estar conectado).
      \nRecientemente nos han llegan los datos del estudio \u00abJ\u00f3venes espa\u00f1oles 2005\u00bb, basado en una encuesta a 4.000 j\u00f3venes de 15 a 24 a\u00f1os. Es el sexto estudio general que elabora la Fundaci\u00f3n Santa Mar\u00eda desde 1982 para analizar aspectos como los valores, orientaciones pol\u00edticas, religiosidad y tiempo de ocio de la juventud.
      \nNos creemos en la obligaci\u00f3n de hacer un brev\u00edsimo resumen del mismo, para encuadrar lo que diremos a continuaci\u00f3n. Por primera vez, menos del 50 por ciento de los j\u00f3venes espa\u00f1oles se consideran cat\u00f3licos y la Iglesia es la instituci\u00f3n de la que m\u00e1s desconf\u00edan, seg\u00fan un informe donde la juventud se define como \u00abego\u00edsta\u00bb y \u00abconsumista\u00bb.
      \nEn la presentaci\u00f3n del trabajo, de m\u00e1s de 400 p\u00e1ginas, el autor del cap\u00edtulo dedicado a la religi\u00f3n, Juan Gonz\u00e1lez-Anleo, subraya que el alejamiento de los j\u00f3venes de la Iglesia \u00abse ha acelerado de forma sorprendente\u00bb desde hace diez a\u00f1os, cuando el 77 por ciento se declaraba cat\u00f3lico, mientras que hoy el porcentaje no llega al 50 por ciento, \u00abun descenso de m\u00e1s de 25 puntos\u00bb. En 1994, dos terceras partes de los j\u00f3venes afirmaban que eran miembros de la Iglesia y que pensaban seguir si\u00e9ndolo; en 1999 ya eran s\u00f3lo la mitad y en 2005, un 29 por ciento. Ello obedece a la creciente secularizaci\u00f3n de la sociedad, la \u00abimpopular postura de la Iglesia\u00bb en temas como la ley que regula el matrimonio entre personas homosexuales, el aborto y la sexualidad y a los cambios pol\u00edticos en una \u00abdirecci\u00f3n laicista\u00bb.
      \nTodas estas razones tambi\u00e9n se asocian a que los j\u00f3venes coloquen a la Iglesia como la instituci\u00f3n en la que menos conf\u00edan y a la que critican por su \u00abexcesiva riqueza\u00bb, \u00absu injerencia en pol\u00edtica y su conservadurismo en materia sexual\u00bb. De las instituciones, s\u00f3lo cinco de las 16 propuestas en la encuesta \u00abaprueban\u00bb: las organizaciones de voluntariado (un 69 por ciento conf\u00eda mucho o bastante en ellas), el sistema de ense\u00f1anza (60 por ciento), la Seguridad Social (54), la Polic\u00eda (51) y la UE (50).
      \nSobre valores e identidades, el catedr\u00e1tico de Sociolog\u00eda Javier Elzo lament\u00f3 la imagen negativa que los j\u00f3venes tienen de s\u00ed mismos: se ven consumistas, rebeldes, independientes, ego\u00edstas y con poco sentido del deber. Las razones de esta \u00abautoconcepci\u00f3n\u00bb residen en el \u00abefecto inducido por su propia imagen social, en general negativa (vagos, indolentes…), que de alguna manera han internalizado\u00bb, y, por otro lado, \u00ablos j\u00f3venes, pese a declararse libres y felices, ni son libres ni est\u00e1n felices; en el fondo est\u00e1n muy atados, b\u00e1sicamente a su familia\u00bb, por su dificultad para emanciparse.
      \nA juicio del soci\u00f3logo, esta baja autoestima, que adem\u00e1s es mucho m\u00e1s acentuada que en 1994, es uno de los datos m\u00e1s preocupantes del estudio. Cada vez conceden menos importancia al trabajo, a la competencia profesional y al estudio, mientras que los problemas que m\u00e1s les preocupan son las cuestiones \u00abcotidianas y pr\u00f3ximas\u00bb en detrimento de las relativas al \u00abmundo global\u00bb, agreg\u00f3 Elzo.
      \nLos problemas sociales m\u00e1s importantes para los j\u00f3venes son, en primer lugar, el terrorismo, seguido por la droga, la vivienda y la violencia dom\u00e9stica, y los que menos inquietud les suscitan son la corrupci\u00f3n pol\u00edtica, la contaminaci\u00f3n y el medio ambiente, la pobreza, la marginaci\u00f3n y la seguridad ciudadana.
      \nEl estudio refleja el enorme desinter\u00e9s y desapego hacia los pol\u00edticos: el 75 por ciento cree que s\u00f3lo buscan su propio inter\u00e9s; el 15 opina que trabajan por el inter\u00e9s general. La autora de este cap\u00edtulo, Maite Valls, destaca que el 46 por ciento de los j\u00f3venes no se decantar\u00eda por un partido pol\u00edtico si hoy hubiera elecciones. La mayor\u00eda se sit\u00faan en el centro (28 por ciento), seguido por el centro izquierda (26 por ciento) y la extrema izquierda (13). Uno de cada cuatro j\u00f3venes se siente m\u00e1s identificado con su comunidad aut\u00f3noma que con Espa\u00f1a.
      \nDedican su tiempo libre y de ocio a escuchar m\u00fasica (98), ver la televisi\u00f3n e ir al cine (94), salir a bares, cafeter\u00edas o pubs (93) y escuchar la radio, fundamentalmente programas de deportes o m\u00fasica (93). Descienden respecto a 1999 la lectura de libros, la pr\u00e1ctica de deportes y la asistencia a museos. La mitad de los j\u00f3venes salen todos los fines de semana y la mayor\u00eda regresa a casa pasadas las cuatro de la madrugada. Un tercio opina que beber alcohol o hacer un \u00abbotell\u00f3n\u00bb es una raz\u00f3n importante para salir de marcha.
      \nDespu\u00e9s de la lectura de estos datos, \u00bfes justo calificar a nuestros j\u00f3venes, como se ha hecho en la prensa, de agn\u00f3sticos, consumistas y ego\u00edstas?… \u00bfO m\u00e1s bien, como hemos venido repitiendo en nuestro escrito, ellos son s\u00f3lo el term\u00f3metro, la esponja y el espejo de los valores que la sociedad prima en estos momentos?
      \nDe cualquier forma, para nuestra pastoral de evangelizaci\u00f3n, y para nuestras comunidades cristianas siguen siendo un reto y una esperanza. Hay que apostar por ellos e invertir m\u00e1s medios humanos y personales. Y con una certeza en el coraz\u00f3n: sembrar sin esperar recompensas inmediatas.
      \n <\/em><\/p>\n

        \n
      1. J\u00f3venes y religi\u00f3n<\/strong>[3]<\/a><\/li>\n<\/ol>\n

         
        \n\u00bfEs cierto que en los j\u00f3venes se est\u00e1 dando desafecci\u00f3n hacia lo religioso o, por el contrario, acercamiento? La respuesta es compleja. Hace algunos a\u00f1os, 22 soci\u00f3logos europeos, se reunieron en Ascona (Italia). Sacaron las conclusiones de una muestra realizada entre 24.516 j\u00f3venes de 16 pa\u00edses europeos en edades comprendidas entre los 18 y 29 a\u00f1os. Las principales tipolog\u00edas resultantes son \u00e9stas: 23 % son \u201cno religiosos\u201d, divididos en dos grupos: ateos y agn\u00f3sticos. Predomina el sexo masculino y, en \u00e9tica, adoptan una moral de situaci\u00f3n (el bien y el mal son relativos y dependen de cada circunstancia). Nacionalidades: alemanes del Oeste, franceses, belgas, holandeses.
        \nEn el otro extremo, \u201clos religiosos\u201d. Suman un 11 %. Dos versiones: neocatecumenales y militantes sociales. Practicantes, conf\u00edan bastante en sus iglesias. Predominan las chicas. Pa\u00edses: Irlanda, Italia y Portugal. Otro 23 % son los \u201ctibios o light\u201d, quienes, sin haber roto con lo religioso, tampoco se consideran totalmente coherentes, particularmente en lo referente a pr\u00e1cticas y seguimiento de normas \u00e9ticas. Predominan las mujeres. Los pa\u00edses m\u00e1s representativos: Italia y Portugal.
        \nUn 24 % se califican \u201critualistas\u201d. Lo importante son algunas ceremonias existenciales: nacimiento, matrimonio y muerte. Se mezcla en ello lo social y lo religioso. Predominan los varones y, como nacionalidades, alemanes e Ingleses.
        \nOtro grupo son los \u201ccreyentes heterodoxos\u201d. 10 % de j\u00f3venes con talante pesimista en su vida. Dan mucha importancia al peso del mal en el mundo, al tema del infierno y diablo y a la reencarnaci\u00f3n. Est\u00e1n difuminados por varios pa\u00edses. Tambi\u00e9n otro 10 % suman los llamados \u201chumanistas no religiosos\u201d, defensores de valores sociales y c\u00f3smicos y exigentes para con las Iglesias en cuanto al compromiso social. Predominan los varones y destacan pa\u00edses como Espa\u00f1a, Suiza, Escandinavia e Inglaterra.
        \nSobre este tema de la religiosidad, J. Mart\u00ednez Cort\u00e9s , a la luz del esquema weberiano, se atreve a realizar estas hip\u00f3tesis, en la relaci\u00f3n j\u00f3venes-religi\u00f3n:<\/p>\n

        a) lo religioso, tambi\u00e9n para los j\u00f3venes, aun en sociedades secularizadas, sigue realizando funciones de orientaci\u00f3n moral de la conducta y de las relaciones interpersonales;<\/p>\n

        b) el futuro de las religiones, para los j\u00f3venes, estar\u00eda vinculado a la fuerza prof\u00e9tica con la que se promueva una racionalidad pr\u00e1ctica que humanice la convivencia;<\/p>\n

        c) los intereses de los grupos juveniles no se ven reflejados por la instituci\u00f3n religiosa;<\/p>\n

        d) finalmente, la aparici\u00f3n de una religiosidad \u201csalvaje\u201d en nuestra sociedad, no vinculada a las grandes confesiones y credos o instituciones religiosas.<\/p>\n

        Diversos autores opinan que los j\u00f3venes son incapaces de aceptar la fe como un axioma impuesto por la sociedad (J. Reixach). Los j\u00f3venes se acercan a lo religioso al margen de las iglesias. Han mamado existencialmente que, detr\u00e1s del axioma postmoderno \u201c\u00a1s\u00e1lvese quien pueda!\u201d , hay una imagen de Dios como rival del hombre. Los j\u00f3venes no entienden la propuesta de Dios -que es totalizadora- en una cultura actual de los fragmentos (J. F. Mall\u00e9n). En una cultura que hace apolog\u00eda del retal, que se averg\u00fcenza de pedir ayuda, la propuesta de Dios despierta recelos en todas partes. La mediaci\u00f3n cultural a la que est\u00e1 sometida el joven puede convertirse en un \u201chandicap\u201d para su apertura a Dios (E. Mas). Lo que fue la continuaci\u00f3n del mensaje de alegr\u00eda de Jes\u00fas, se ha convertido en una doctrina para tristes y ancianos. Los j\u00f3venes prefieren vivir a Dios sin intermediarios, m\u00e1xime si \u00e9stos est\u00e1n bajo sospecha como es el caso de la Iglesia (M. A. Carcel\u00e9n). Es cierto que est\u00e1n aumentando las representaciones de \u201cDios\u201d espiritual-afectivas, orientadoras y comprensivas, en las que Dios no es personal ni singular, sino alguien abstracto (A. I. del Valle, Javier Elzo).
        \nAl final de este recorrido concluimos que los j\u00f3venes, en cuanto a lo religioso, reflejan la misma pluralidad cultural que marca nuestra sociedad de hoy. Una vez m\u00e1s, los j\u00f3venes son term\u00f3metro y esponja de lo social.
        \nAdelantamos tres consejos, que no son recetas f\u00e1ciles: Primero, creer e invertir en los j\u00f3venes es posible y lo m\u00e1s necesario. Segundo, sigamos el consejo de Francisco al hermano Le\u00f3n: comencemos por lo m\u00e1s sencillo. Luego, vendr\u00e1n empresas grandes y, finalmente, pidamos lo imposible. Tercero, son necesarios cambios estructurales. Las fuerzas viva sociales que detentan el saber, el poder y el tener est\u00e1n llamadas a reflexionar y actuar. A veces, no hay un cambio si no hay un stop<\/em>. Desde la utop\u00eda y la esperanza. Sobre ello volveremos m\u00e1s tarde.
        \n <\/strong><\/p>\n

          \n
        1. Retos de los j\u00f3venes a la Iglesia, hoy<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

          <\/strong>
          \nAdem\u00e1s de lo se\u00f1alado anteriormente, resumimos algunos de los principales retos (en forma de preguntas) de los j\u00f3venes a nuestras comunidades:
          \n 
          \n– Estad\u00edsticamente (de l5 a 29 a\u00f1os) es el bloque mayor de poblaci\u00f3n, \u00bfqu\u00e9 recursos humanos y materiales gastamos?
          \n– Grave paro juvenil, que los convierte en ni\u00f1os socialmente hablando sin poder emanciparse, \u00bfqu\u00e9 promoci\u00f3n social hacemos?
          \n– Hundimiento de las grandes ideolog\u00edas y sistemas, \u00bfencuentran en nuestras comunidades grupos de referencia y de valores?
          \n– Se busca la eficacia, los resultados r\u00e1pidos, los compromisos a corto plazo, la vivencia del presentismo, \u00bfqu\u00e9 alternativas m\u00e1s s\u00f3lidas y gratificantes les ofrecemos?
          \n– Sensibilizados con el tercer mundo y con nuevos valores como lo ecol\u00f3gico, el pacifismo, 0,7, etc, \u00bfles sabemos acompa\u00f1ar en estos nuevos valores?
          \n– Poca confianza en la Iglesia, a la que ven incluso como impedimento para descubrir y vivir a Jesucristo, \u00bfqu\u00e9 rostro de Iglesia ofrecemos?
          \n– Privatizaci\u00f3n de la fe y divorcio entre fe y vida, \u00bfc\u00f3mo los ayudamos a integrar la fe, en sus dimensiones de contenidos y \u00e9tica, con la vida misma?
          \n– B\u00fasqueda afectiva de comunidades c\u00e1lidas y experiencias gratificantes, \u00bfc\u00f3mo unimos esa necesidad de afectividad con una necesaria madurez en la independencia personal?
          \n– Se crean y frecuenten nuevos lugares de vida y diversi\u00f3n, \u00bfc\u00f3mo estamos presentes y nos hacemos presentes con una pastoral de misi\u00f3n y sectorial?
          \n– Valoran lo genuino y aut\u00e9ntico, \u00bfc\u00f3mo son nuestras celebraciones y nuestra pedagog\u00eda de oraci\u00f3n y gratuidad?
          \nEn las respuestas a \u00e9stos y otros interrogantes y preguntas, desde nuestras personas y comunidades, nos jugamos nuestra credibilidad, relevancia y futuro. Por nuestra parte, para concluir, no quisi\u00e9ramos silenciar que est\u00e1 en juego el hacer posible, en palabras de Juan Pablo II, una pastoral juvenil para la civilizaci\u00f3n y la cultura de la vida y del amor.
          \nY, por si el planeta joven no fuera ya en s\u00ed mismo un reto, en el horizonte, y envueltos por ella, la cibercultura. Estamos en un nuevo ciber-planeta. Cuando me dispongo a escribir estas p\u00e1ginas, tengo delante la pantalla del ordenador personal, estoy escuchando m\u00fasica en un MP3, observo desde mi ventana en la calle a chavales hablando por su m\u00f3vil, chateando o leyendo mensajes en el mismo, y, alzando un poco la mirada, reconozco distintas antenas, en forma de grandes platos, que me indican se\u00f1ales de canales digitales. Todo un s\u00edmbolo del mundo medi\u00e1tico que nos envuelve
          [4]<\/a>.
          \n <\/p>\n

            \n
          1. Resurgir de la conmoci\u00f3n eclesial que nos bloquea<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

            <\/strong>
            \nGran n\u00famero de evangelizadores y agentes de pastoral parecen sentirse bloqueados y paralizados ante la nueva cultura del ciberespacio, porque lo que predomina es el trasfondo, el medio audiovisual; se dan cuenta de que el mensaje no es captado primariamente por el intelecto (por la raz\u00f3n), sino por el efecto producido en los sentidos y en todo el psiquismo.
            \nEs algo b\u00e1sico caer en la cuenta de que el ground<\/em> (el subsuelo cultural) es m\u00e1s importante que la figura misma; el acercamiento a las cosas mediante la intuici\u00f3n global, dice m\u00e1s que la realidad objetiva; el medio ambiente habla m\u00e1s que el punto concreto que enfocan los ojos.
            \nEn otras palabras, el mensaje (dir\u00edamos el contenido) ya no est\u00e1 en las palabras. En TV, por ejemplo, las palabras son el 7% de todo lo comunicado. El 38% es transmitido por la forma de expresi\u00f3n (voz, vocabulario, ritmo habitual en el hablar) y el 55% por las expresiones del rostro y el movimiento del cuerpo (Albert Mehrabian). Ground (ambiente cultural) y modulaci\u00f3n (forma de presentaci\u00f3n) son las dos columnas de la comunicaci\u00f3n electr\u00f3nica audiovisual, y son una llamada para equilibrar texto y contexto, lado derecho e izquierdo del cerebro, lo acad\u00e9mico y lo carism\u00e1tico.
            \nEn relaci\u00f3n a este punto se\u00f1alado por P. Babin hagamos notar que, tradicionalmente, en el tema de la transmisi\u00f3n de la Fe \u00e9ramos conscientes de tres dimensiones en juego: el contenido (traditium<\/em>); el acto mismo de transmitir (tradere<\/em>); y la recepci\u00f3n de lo transmitido. Siempre la iglesia, en su mistagogia, ha sido consciente de la complejidad de los tres momentos se\u00f1alados.
            \n\u00bfQu\u00e9 supone un primer anuncio necesario en la transmisi\u00f3n de la fe y en la acci\u00f3n misionera de la evangelizaci\u00f3n?
            \n– Darse cuenta, en primer lugar, de que el formato es al menos tan importante como el texto mismo (buen papel, bellas im\u00e1genes, forma atractiva…). El ground<\/em> se aprehende por los sentidos en su totalidad. Elground<\/em> trata de captar la atenci\u00f3n no s\u00f3lo del intelecto, sino llegar a todos los sentidos.
            \n– En segundo lugar, llegar a captar que la modulaci\u00f3n, es tan importante como las palabras. Modulaci\u00f3n significa vibraciones que var\u00edan de frecuencia. A diferencia de la escritura con sus dos tipos de signos abstractos (letras y sonidos), las vibraciones son los signos sensoriales de la existencia. El walkman<\/em>, por ejemplo, logra que la m\u00fasica me llegue de forma f\u00edsica, que me convierta yo mismo en m\u00fasica y mis m\u00fasculos se muevan como independientemente de m\u00ed.
            \n– Y, en tercer lugar, entrar en el juego del background<\/em> (subconsciente) para que el mensaje entre en lo m\u00e1s hondo de m\u00ed mismo.
            \nDespu\u00e9s de a\u00f1os de radio, walkman, TV, Internet, la gente no escucha de la misma forma. Hablan m\u00e1s los gestos y la fuerza de las expresiones que el mismo contenido de las palabras; hablan m\u00e1s los climas creados que las palabras. Tal vez no sea superfluo recordar que necesitamos renovar, con esp\u00edritu cristiano, hasta nuestros mismos lugares de culto cuidando mucho \u201cla atm\u00f3sfera que nos envuelve\u201d, las im\u00e1genes, el estilo, y hasta la palabra misma.
            \nEl evangelizador debe llegar a ser creativo y espiritual, profesional y hombre de fe profunda. Sin olvidar que, en los mass media<\/em>, la se\u00f1al pertenece al que la transmite, pero el mensaje al que lo recibe. La audiencia decide la oportunidad, la importancia y el significado del mensaje. Por eso el evangelizador debe tener siempre presente que:
            \n– El mensaje est\u00e1 condicionado por las circunstancias personales y ambientales de quien lo recibe.
            \n– Quien recibe el mensaje maneja un arma letal: el mando a distancia, su libertad y autoconciencia.
            \n– Debemos aprender a evangelizar en una pluralidad de contextos e interpretaciones, consciente de que una de las modernas leyes de comunicaci\u00f3n medi\u00e1tica es tener en cuenta a la par y siempre los contenidos y la audiencia, los contenidos y la forma elegida de transmisi\u00f3n.
            \nLa Iglesia debe estar en Internet (Intranet) y en las autopistas de la comunicaci\u00f3n tanto para uso interno de ella misma como para evangelizar. No estamos de acuerdo, sin embargo, con la opini\u00f3n de algunos autores, seg\u00fan la cual \u201cInternet no es tan s\u00f3lo un instrumento para la salvaci\u00f3n, sino la forma que la salvaci\u00f3n misma adopta\u201d. Esto nos llevar\u00eda a confundir \u201csignos de los tiempos con fuentes de revelaci\u00f3n\u201d. Evidentemente Internet no es fuente de revelaci\u00f3n. Aunque una segunda tesis s\u00ed puede ser compartida: el hecho de que m\u00e1s que tratar cuestiones, hay que plantear c\u00f3mo mediar entre el mundo real y virtual y una \u00e9tica de inclusi\u00f3n de todos en el mundo del World Wide Web<\/em>. En este sentido, es necesaria una encarnaci\u00f3n o inculturaci\u00f3n en la red, es decir, hay que realizar una lectura \u00e9tica del nuevo signo de los tiempos para acogerlo.
            \n <\/p>\n

              \n
            1. \u00bfHacia otro modelo de comunicaci\u00f3n evangelizadora?<\/strong>[5]<\/a><\/li>\n<\/ol>\n

              <\/strong>
              \nDe nuevo P. Babin nos advierte, aunque podamos y debamos realizar ciertas matizaciones, que el punto crucial de la evangelizaci\u00f3n del S. XXI depender\u00e1 menos de la proclamaci\u00f3n de nuestras verdades que de nuestra capacidad para llamar la atenci\u00f3n de los dem\u00e1s desde esas mismas verdades. Por eso, ante los nuevos medios y t\u00e9cnicas de comunicaci\u00f3n, se pueden sugerir cuatro ejes de acci\u00f3n para todo evangelizador:
              \n– Tenerlos en cuenta, como algo asumido con normalidad.
              \n– Purificarlos (limpiarlos) de todo aquello que signifique manipulaci\u00f3n, simple negocio o servidumbre.
              \n– Bendecirlos en el sentido de la ley de de la encarnaci\u00f3n: asumir para redimir.
              \n– Socializarlos , ponerlos al servicio de la comuni\u00f3n eclesial y colaborar en la construcci\u00f3n de la aldea global o fraternidad universal. En este sentido, sigue siendo v\u00e1lida la f\u00f3rmula empleada por Jesucristo en el Camino de Ema\u00fas: tomar-bendencir-partir y repartir.
              \nPara lograr lo anterior tal vez se puedan se\u00f1alar cuatro mandamientos o actitudes para el comunicador:
              \n– Ser una persona, no una ideolog\u00eda; vivir con coherencia y siendo testigos de la fe. El mensaje est\u00e1 m\u00e1s en lo que somos que en lo que decimos.
              \n– Aprender a ser una especie de estrella medi\u00e1tica, es decir, a impactar con el evangelio hecho vida.
              \n– Prometer esperanza, no un programa; regalar a Jesucristo y su Evangelio y no palabras nuestras o ajenas.
              \n– Convertirnos en lo que somos y dejarnos transformar, porque en la era de los mass<\/em> media<\/em> el transmisor debe estar inmerso en las nuevas tecnolog\u00edas, y el mensaje se hace a trav\u00e9s de la propia persona, de \u201csu cuerpo\u201d. Siendo plenamente conscientes de que los receptores son los conectados a la red, y el tipo de estructura social es el mercado abierto y plural.
              \nA partir de las premisas anteriores, gradualmente, la transmisi\u00f3n de la fe y la evangelizaci\u00f3n ir\u00e1n alcanzando necesariamente diversos niveles: primero, una respuesta a los intereses de la gente, expresados con amenidad y belleza; segundo, la profundizaci\u00f3n personal en el encuentro con Jesucristo y su evangelio; tercero, el descubrimiento del mensaje b\u00edblico y de la importancia de la comunidad; y cuarto, la necesidad de profundizar y sistematizar el mensaje teol\u00f3gico y espiritual al tiempo que se realiza la integraci\u00f3n en la comunidad cristiana. En otras palabras es el proceso de una verdadera iniciaci\u00f3n cristiana.
              \nInsistamos en dos realidades: una, que la cultura audiovisual no excluye el mundo oral y escrito sino que lo integra. Y, segundo, que, hoy, construir la Iglesia significa construir una comuni\u00f3n en forma de red, para estar presente como cuerpo en este mundo.
              \nEs preciso \u201creactivar una Iglesia extra-muros\u201d y misionera (como hizo San Pablo), porque la Iglesia, del presente y del futuro, ya no ser\u00e1 un gran edificio que domina la ciudad, sino un simple pabell\u00f3n en el gran campo de la Feria Internacional del Comercio Mundial. La mentalidad de cristiandad ha terminado. La Iglesia se presenta como un canal de influencia m\u00e1s, junto a otros. Nos han resituado en la di\u00e1spora (en la dispersi\u00f3n) y nos urgen a reforzar nuestra realidad misionera. La tecnolog\u00eda ha hecho a la Iglesia \u201cviajera\u201d. Nos obliga a salir a la calle, a formar parte de la caravana humana, que no est\u00e1 anclada en las tradiciones de un pueblo o de un clan.
              \nLas crisis, con las que las nuevas tecnolog\u00edas han retado a la Iglesia, suponen una oportunidad providencial para ella: abrir sus cerrados y viejos muros. Las parroquias, en la era de la comunicaci\u00f3n, siguen teniendo un gran futuro si son capaces de utilizar las nuevas tecnolog\u00edas, y si desarrollan comunidades de relaci\u00f3n aut\u00e9ntica y de espiritualidad verdadera.
              \nNo hay que tener miedo a verter el vino nuevo en odres nuevos. Los j\u00f3venes abandonan la parroquia y la vida de la Iglesia no tanto por el contenido del mensaje sino por c\u00f3mo viene \u201cempaquetado\u201d dicho mensaje.
              \nY, aunque sea cierto todo lo anterior, desde Evangelii Nuntiandi <\/em>y el Nuevo Directorio de Catequesis,<\/em> se insiste en la necesidad de tomarnos en serio la inculturaci\u00f3n, y ser conscientes de que la conversi\u00f3n no es un evento que suceda de una vez por todas; es progresiva y adquiere la forma de proceso. En otras palabras, en la evangelizaci\u00f3n de la cultura se ha de tener claro que:
              \n– La evangelizaci\u00f3n de las culturas pertenece a la misi\u00f3n de la Iglesia.
              \n– El cristianismo es supracultural, pero siempre ha de estar inculturado y encarnado en un contexto.
              \n– El cristianismo no est\u00e1 exclusivamente ligado a ninguna cultura.
              \n– Debemos utilizar, sin miedo, la nueva cultura de hoy (on line<\/em>) para presentar la riqueza del mensaje con un \u201cempaquetado\u201d atractivo.
              \n– La evangelizaci\u00f3n eficaz en el nuevo panorama cultural requiere un enfoque de marketing con al menos las siguientes caracter\u00edsticas: como centro focal, la audiencia a la que nos dirigimos; estar dispuestos a dialogar y preguntar, saliendo a la plaza p\u00fablica; y saber con claridad lo que queremos anunciar y c\u00f3mo anunciarlo.
              \nLa sociedad tiene una gran necesidad de agentes creativos del Evangelio, de agentes capaces de aportar nuevos modelos y usar nuevas t\u00e9cnicas y tecnolog\u00edas como instrumentos evangelizadores para captar la imaginaci\u00f3n religiosa de la cultura. El nuevo paisaje medi\u00e1tico se llama ciberespacio. La Iglesia, lejos de sucumbir ante el v\u00e9rtigo de no poder controlar experiencias y contenidos, ha de considerarse como un artista creativo de la fe en la esfera medi\u00e1tica.
              \nInsistimos en que en tema de la transmisi\u00f3n de la Fe no existen, no pueden existir, recetas m\u00e1gicas. Es un largo proceso de acompa\u00f1amiento personal y de inserci\u00f3n comunitaria en el que est\u00e1 en juego siempre \u2013 y no podemos olvidarlo- la libertad humana.
              \n <\/p>\n

                \n
              1. Hacia una pastoral de evangelizaci\u00f3n y misi\u00f3n para el nuevo siglo<\/strong>[6]<\/a><\/li>\n<\/ol>\n

                 
                \nLa llamada de los Papas Juan Pablo II y Benedicto XVI a saber evangelizar la cultura de hoy, en este nuevo siglo, ha tenido eco. Lo podemos resumir en las siguientes claves:<\/p>\n

                  \n
                1. Renovaci\u00f3n y consolidaci\u00f3n de la verdadera fe: cristocentrismo: Fe en sentido b\u00edblico como aceptaci\u00f3n personal y libre de la presencia de Jesucristo en mi vida. Y encarnacionismo: una fe encarnada en la cultura de nuestro tiempo:<\/li>\n
                2. Desprivatizaci\u00f3n de la fe y presencia p\u00fablica en los nuevos are\u00f3pagos (mass media<\/em>), mundo socio-pol\u00edtico y cultural, mundo laboral, opci\u00f3n por los m\u00e1s pobres y marginados. Cristianos de presencia y de mediaci\u00f3n<\/li>\n
                3. Nuevo m\u00e9todo: de persona a persona; uniendo palabra y testimonio vital. Con cuatro puntos cardinales: Fe en Cristo, cambio de vida, eclesialidad y pastoral de misi\u00f3n (. Comunidades c\u00e1lidas y misioneras.<\/li>\n
                4. Redescubrimiento vivencial de la Iglesia particular: Jesucristo, por el Esp\u00edritu que convoca; evangelio proclamado; Mesa eucar\u00edstica compartida; compromiso coherente fe-vida; corresponsabilidad de ministerios-vocaciones-carismas y funciones; obispo al servicio de la verdad, comuni\u00f3n y caridad.<\/li>\n
                5. Potenciar, por lo tanto, todas las dimensiones de la Iglesia particular: Comuni\u00f3n, evangelizaci\u00f3n, celebraci\u00f3n, diakon\u00eda.<\/li>\n
                6. Renovaci\u00f3n pastoral:<\/strong> ni s\u00f3lo mantenimiento-conservaci\u00f3n (nostalgia-seguridades); ni s\u00f3lo intimista-espiritualista (escapismo fideista); ni s\u00f3lo popular-horizontalista; ni s\u00f3lo de cirug\u00eda est\u00e9tica (marketing). S\u00ed org\u00e1nico-global, de conjunto y articulada, de comuni\u00f3n y corresponsabilidad, de misi\u00f3n y evangelizaci\u00f3n, sinodal y contextuada. Integraci\u00f3n de contrarios.<\/li>\n
                7. Algunos principios ya se\u00f1alados: a) Ley de encarnaci\u00f3n: lo que no se asume no se redime. b) Di\u00e1logo sincero: buscando, con discernimiento, las semillas de verdad (semina verbi<\/em>) y leyendo los signos de los tiempos. c) Uniendo creatividad y fidelidad. d) Catolicidad como norma de verdad. e) Ser mixtagogos: Se cree m\u00e1s a los testigos que a los maestros. f) Opci\u00f3n preferencial por los m\u00e1s pobres, releyendo la historia desde el reverso. g) Sin ansiedad por la programaci\u00f3n ni por recoger resultados.<\/li>\n
                8. Redescubrir el cristianismo y la vivencia eclesial en clave catecumenal.<\/li>\n<\/ol>\n

                  Estas son algunas de las respuestas, necesariamente incompletas, a la nueva cultura emergente y a sus retos que se pueden y deben potenciar desde lo cristiano. El debate sigue abierto y, lo que es m\u00e1s decisivo, la forma de vivir el misterio cristiano con coherencia y plenitud en lo cotidiano, en este tiempo, en nuestras Iglesias, entre nuestras gentes, y en estas tierras nuestras llamadas de vieja cristiandad y, en muchos casos, postcristianas.
                  \nPerm\u00edtaseme recordar un dec\u00e1logo en el que se subrayan los rasgos de la verdadera Fe que estamos invitados a vivir. Esa fe que muchos j\u00f3venes de hoy buscan y desean hacer realidad con coherencia y radicalidad:<\/p>\n

                    \n
                  1. Fe, no es creer en algo, sino en alguien<\/em>: Jesucristo, el Hijo de Dios encarnado, el Se\u00f1or de la Historia, el \u00fanico salvador y mediador.<\/li>\n
                  2. Fe, no es imitar a Jes\u00fas, el Se\u00f1or, desde fuera, sino desde dentro, personalizando progresivamente, y seg\u00fan las edades existenciales, el misterio de Dios Uno y Trino.<\/li>\n
                  3. Fe,es tener los ojos, las manos, y el coraz\u00f3n del mismo Jes\u00fas, para ser otros Cristo y poder llegar a decir con San Pablo, por el Esp\u00edritu: \u201cNo soy yo quien vivo, sino es Cristo quien vive en m\u00ed\u201d.<\/li>\n
                  4. Fe, es vivir y hacer realidad cotidiana y coherente el mensaje existencial de las Bieneventuranzas.<\/li>\n
                  5. Fe, es dejar que el Esp\u00edritu Santo me penetre y fecunde para divinizarme, para hacerme, como Mar\u00eda, esposo, madre, y hermano.<\/li>\n
                  6. Fe, es vivir con coherencia,todas las dimensiones de mi vida en todos los \u00e1mbitos y momentos del d\u00eda.<\/li>\n
                  7. Fe, no es algo sentimental o fide\u00edsta, ya que sabe dar razones y esperanza de lo que cree.<\/li>\n
                  8. Una Fe en di\u00e1logo con creyentes y no creyentes.<\/li>\n
                  9. Una Fe siempre en b\u00fasqueda, alimentada por dudas y certezas, y tratando de unir lo \u00e9tico y lo m\u00edstico hasta descansar en Dios.<\/li>\n<\/ol>\n

                    l0.Una Fe hecha vida en comunidad eclesial como forma ineludible de unir identidad cristiana y misi\u00f3n.
                    \n 
                    \n8<\/strong>. Transmisi\u00f3n de la fe y socializaci\u00f3n de las nuevas generaciones<\/strong>
                    \n <\/strong>
                    \nHay que subrayar que el mismo problema de la transmisi\u00f3n de la fe del cristianismo lo tiene la sociedad a otro nivel, en cuanto los agentes socializadores se preguntan: \u00bfc\u00f3mo transmitir los procesos de socializaci\u00f3n \u2013de identidad- en una sociedad plural, abierta, multicultural y multirreligiosa? Muchas veces las \u00fanicas se\u00f1as de identidad son los mensajes de los mass media<\/em> y los \u201cgal\u00e1cticos medi\u00e1ticos\u201d.
                    \nLo que estamos apuntando es un hecho: la crisis de transmisi\u00f3n de la fe se inscribe en el marco de una crisis m\u00e1s amplia y profunda: el de la transmisi\u00f3n de valores y comportamientos sociales en una cultura y sociedad que cambia y muta usos y costumbres casi de forma neur\u00f3tica. Es curioso, y ya en relaci\u00f3n a las personas mayores, c\u00f3mo a veces se les tacha de excluidos y, otras, se les reclama como la fuerza m\u00e1s poderosa a la hora de configurar fuerzas y tendencias pol\u00edticas y sociales. Se ha llegado a hablar de la \u201ccivilizaci\u00f3n de los jubilados\u201d en cuanto ser\u00e1 el colectivo determinante a la hora de influir en las tendencias pol\u00edticas europeas. Sin menospreciar el papel y protagonismo que los abuelos tienen hoy, en Espa\u00f1a sin ir m\u00e1s lejos, en el tema de la transmisi\u00f3n y educaci\u00f3n de la fe de las nuevas generaciones.
                    \nEn cualquier caso, todo esto nos hace a la Iglesia m\u00e1s conscientes de un reto: el cristianismo no se transmite de \u201cforma autom\u00e1tica\u201d, sin intervenci\u00f3n activa de los destinatarios. No se \u201cnace cristiano\u201d; \u201cnos hacemos\u201d cristianos. Y, l\u00f3gicamente, es m\u00e1s f\u00e1cil (y hasta eficaz) la transmisi\u00f3n de la fe en una cultura con identidad definida que en una cultura en crisis o b\u00fasqueda de su propia identidad. Porque, para evangelizar, las categor\u00edas \u201cpuente\u201d culturales suelen facilitar las cosas.
                    \nEsta crisis \u201cde socializaci\u00f3n-inserci\u00f3n cristiana\u201d obliga a las Iglesias y comunidades a buscar nuevos esquemas evangelizadores, con nuevo ardor, nuevos m\u00e9todos, y nuevos lenguajes.
                    \nAlguna otra vez hemos recordado el salmo 136, donde se nos habla de diversas posturas, que reflejan las actitudes evangelizadoras:
                    \n– llorar con nostalgia de Si\u00f3n (la a\u00f1oranza, y el sentirnos aislados como ghetto);
                    \n– colgar las c\u00edtaras (el desencanto y el mantenimiento sin arriesgar en las formas de evangelizaci\u00f3n);
                    \n– divertir cantando canciones de Si\u00f3n (el vedettismo<\/em>, la domesticaci\u00f3n del Evangelio, el hablar s\u00f3lo de lo pol\u00edticamente correcto o de lo que puede tener \u00e9xito);
                    \n– despe\u00f1ar ni\u00f1os (el fundamentalismo rabioso y agresivo);
                    \n– o, finalmente, ser l\u00facidamente sabios, que equivale a ser maestros de oraci\u00f3n, profetas de esperanza, v\u00ednculos de comuni\u00f3n, agentes de la nueva evangelizaci\u00f3n.
                    \nLa evocaci\u00f3n del Salmo no se entienda como un recurso f\u00e1cil literario ante la gravedad de los problemas que estamos apuntando. Lo que tratamos de subrayar es que la transmisi\u00f3n de la fe, en la nueva situaci\u00f3n socio-cultural, debe realizarse con una triple conciencia:
                    \n– existe un claro divorcio (o quiebra o ruptura) entre transmisi\u00f3n de la fe y procesos de socializaci\u00f3n;
                    \n– se cuestiona radicalmente la tradici\u00f3n (incluida la religiosa) y su autoridad;
                    \n– se cuestionan las instituciones que tradicionalmente garantizaban los procesos de socializaci\u00f3n y de transmisi\u00f3n de la misma fe.
                    \nEn otras palabras estamos hablando de una triple crisis: del sujeto mismo (algunos, desde la postmodernidad, hablar\u00e1n de p\u00e9rdida del sujeto \u00e9tico y responsable); crisis de la credibilidad de las tradiciones y grandes relatos del pasado (algunos afirman que desde el neoliberalismo se vive valorando m\u00e1s el presente y lo que \u00e9ste abra hacia el futuro); y crisis de instituciones tan arraigadas como la familia (a nivel social) o la parroquia (a nivel eclesial).
                    \nLlegados a este momento, no descubrimos nada nuevo si se\u00f1alamos, llegados a este punto, que para una evangelizaci\u00f3n global se imponen tres acciones complementarias:
                    \n– la acci\u00f3n misionera<\/em> o de primer anuncio para alejados y no creyentes; es la \u201cpastoral de la zapatilla y de la gratuidad\u201d;
                    \n– la acci\u00f3n catecumenal <\/em>o iniciaci\u00f3n propiamente dicha, que integra conocimientos-celebraci\u00f3n-conversi\u00f3n moral-e integraci\u00f3n en la comunidad;
                    \n– y la acci\u00f3n pastoral<\/em> o consolidaci\u00f3n comunitaria para vivir la comuni\u00f3n y la misi\u00f3n.
                    \nSi llegados a este punto se me pide volver a recordar cu\u00e1les considero que son las claves principales que est\u00e1n en juego en el tema de la transmisi\u00f3n de la fe en este nuevo siglo, vuelvo a repetir las tres m\u00e1s b\u00e1sicas y transversales:
                    \n– Comunidades vivas de referencia<\/em>, de donde nacer\u00e1n testigos del Dios vivo y se fomentar\u00e1n redes de cultura cristiana;
                    \n– Procesos nuevos y serios de iniciaci\u00f3n<\/em>, que favorezca la dimensi\u00f3n experiencial de Dios en clave mistag\u00f3gica o de proceso integral y continuado.
                    \n– Redes sociales de cristianismo<\/em> en todos lo \u00e1mbitos, donde se visualicen la presencia p\u00fablica de dicho cristianismo.
                    \nLa pregunta puede ser ahora d\u00f3nde y c\u00f3mo pueden hacerse palpables y una realidad los puntos anteriores. Para el d\u00f3nde<\/em>, la respuesta no puede ser otra: familia, parroquia, movimientos y, con sus caracter\u00edsticas propias, los centros de Ense\u00f1anza Religiosa Escolar. Para el c\u00f3mo<\/em>, con creatividad y fidelidad, habr\u00eda que unir los tres elementos que se vienen barajando y que est\u00e1n en juego: que la transmisi\u00f3n de la fe toque el coraz\u00f3n y la vida de las personas concretas; que se vuelva a redescubrir la Tradici\u00f3n viva como fuente originaria y fresca; y que las instituciones m\u00e1s tradicionales de la Iglesia, que han servido para el cometido antes aludido, sepan transformar aquello que impida la transparencia de lo que desean ofrecer: el misterio de Jesucristo y su Buena Nueva.<\/p>\n

                    Mons. Ra\u00fal Berzosa<\/p>\n

                     
                    \n
                    [1]<\/a> Para lo tratado remitimos a: AA. VV., La transmisi\u00f3n de la Fe hoy<\/em>: \u201cRevista Cr\u00edtica\u201d 921 (Enero 2005); IGLESIA EN CASTILLA, Educar en la Fe hoy, en este pueblo y en esta tierra, <\/em>Salamanca 2004; AA. VV., La misi\u00f3n compartida, <\/em>Publicaciones Claretianas, Madrid 2002; J. M. VELASCO, La transmisi\u00f3n de la Fe en la sociedad contempor\u00e1nea,<\/em>Sal Terrae, Santander 200; L. GONZALEZ-CARVAJAL SANTABARBARA, Los cristianos del s. XXI. Interrogantes y retos pastorales ante el tercer milenio, <\/em> Sal Terrae, Santander 2000; CONFERENCIA EPISCOPAL FRANCESA, Proponer la fe en la sociedad actual:<\/em>\u201dEcclesia\u201d 2835-2836 (1997); AA. VV., La transmisi\u00f3n de la Fe en la adolescencia:<\/em> \u201cActualidad Catequ\u00e9tica\u201d (Abril-Junio 2005) 146-264; AA. VV., Pasar el testigo de la Fe:<\/em> \u201cSal Terrae\u201d 1093 (Septiembre 2005) 699-780; 2.- G. SARTORI, La sociedad multi\u00e9tnica<\/em>, Taurus, Madrid 2001.
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                    [2]<\/a> En el trasfondo de todo lo que diremos, se encuentran las siguientes obras: R. BERZOSA, Trasmitir la fe en un nuevo siglo. Retos y posibilidades<\/em>, DDB, Bilbao 2006; ID<\/em>., \u00bfQu\u00e9 es eso de la tribus urbanas? J\u00f3venes y religi\u00f3n,<\/em> DDB Bilbao 2002; ID., 10 Desaf\u00edos al cristianismo desde la nueva cultura emergente, <\/em>Verbo Divino, Estella 2005; ID., Nueva Era y cristianismo. Entre el di\u00e1logo y la ruptura,<\/em> BAC, Madrid 19982<\/sup>; ID., Evangelizar en una nueva cultura<\/em>, San Pablo, Madrid 1998.
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                    [3]<\/a> Sobre el ambiguo retorno de lo religioso en nuestros d\u00edas, remitimos tambi\u00e9n a: L. OVIEDO TORRO, Un sigiloso retorno de lo sagrado<\/em>: \u201cRaz\u00f3n y fe\u201d 1.280 (Junio 2005) 497-510; AA. VV., La religi\u00f3n y Dios en nuestros d\u00edas, <\/em> \u201cVida Religiosa\u201d 90 (Mayo 2001) 164-237; P. RODRIGUEZ PANIZO, S\u00f3lo la sed nos alumbra. Tres cuestiones abiertas para la teolog\u00eda en un tiempo de eclipse de Dios: <\/em> \u201cMiscel\u00e1nea Comillas\u201d 58 (2000) 3-26; A. PARRA, Hacia la legitimaci\u00f3n del creer: <\/em> \u201cTheologica Xaveriana\u201d 150 (2004) 281-298; A. GARC\u00cdA RUBIO, Evangelizadores en medio de Babilonia: \u201cSal Terrae\u201d 1.055 (2002) 297-309; <\/em> J. A. GUERRERO ALVES; Encontrar a Dios en una sociedad individualista: \u201cSal Terrae\u201d 1.066 (2003) 283-295;-<\/em> P. J. G\u00d3MEZ SERRANO, Encontrar a Dios en una sociedad consumista: \u201cSal Terrae\u201d 1.066 (2003) 297-310.<\/em>
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                    [4]<\/a> Para este punto, Cf. P. BABIN-A. A. ZUKOWSKI, El Evangelio en el ciberespacio,<\/em> PPC, Madrid 2005. Sobre este tema remitimos tambi\u00e9n a: M\u00aa. D. DE MIGUEL POYARD, Con el Se\u00f1or en la cibercultura<\/em>, BAC, Madrid 2001; ID., Cibercultura,<\/em> en R. CALVO, Diccionario del animador de pastoral, <\/em> Monte Carmelo, Burgos 2005, 193-202; R. BERZOSA, Cibern\u00e9tica y nuevas tecnolog\u00edas,<\/em> en \u201cDiccionario de pastoral y Evangelizaci\u00f3n\u201d, Monte Carmelo, Burgos 2000, 208-210. G. SARTORI; Homo videns. La sociedad teledirigida, <\/em>Taurus, Madrid 1998.
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                    [5]<\/a> Cf. JUAN PABLO II, Mensaje para la XXIV Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales<\/em>: \u201cL\u00b4Osservatore Romano\u201d (25-1-1990) 6. En este mismo sentido apuntado por el Papa Juan Pablo II, y en documentos recientes, remitimos a: JUAN PABLO II, Internet: un nuevo foro para la proclamaci\u00f3n del Evangelio<\/em>, en \u201cMensaje para la XXXVI Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales \u201c (12-5-2002); PONTIFICIO CONSEJO PARA LAS COMUNICACIONES SOCIALES, La Iglesia e Internet<\/em> (22-2-1002); AA. VV., Iglesia e Internet:<\/em> \u201cBolet\u00edn de la Comisi\u00f3n Episcopal de Medios de Comunicaci\u00f3n Social\u201d 196-197 (Abril-Septiembre 1999) 51 p\u00e1gs. Desde el punto de vista cr\u00edtico, en relaci\u00f3n a las autopistas de la comunicaci\u00f3n, se\u00f1alamos: N. ALMIRON, Los amos de la globalizaci\u00f3n. Internet y poder en la era de la informaci\u00f3n, <\/em>Plaza y Jan\u00e9s, Barcelona 2002; J. VIDAL BENEYTO, La ventana global,<\/em> Taurus, Madrid 2002.; AA. VV., Ciberespacio, cibern\u00e9tica y ciberteolog\u00eda: <\/em> \u201cConcilium\u201d 309 (Febrero 2005) 7-139.
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                    [6]<\/a> Cf. Voces \u201cacci\u00f3n misionera, acci\u00f3n catecumenal, acci\u00f3n pastoral<\/em>\u201d, en: V. M. PEDROSA-J. SASTRE-R. BERZOSA, Diccionario de pastoral y evangelizaci\u00f3n<\/em>, Monte Carmelo, Burgos 2000; AA. VV., La Iglesia en Espa\u00f1a (1950-2000), <\/em>PPC, Madrid 1999.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

                    Mons. Ra\u00fal Berzosa Obispado Oviedo   S\u00cdNTESIS DEL ART\u00cdCULO El art\u00edculo parte de la nueva situaci\u00f3n social (sociedad post-cristiana), se\u00f1alando algunos rasgos que, en ella, definen a los j\u00f3venes, e identificando sus valores y actitudes fundamentales, para concentrarse especialmente en la relaci\u00f3n j\u00f3venes-religi\u00f3n. De manera sint\u00e9tica se\u00f1ala los retos que ponen a la iglesia, las […]<\/p>\n","protected":false},"author":3,"featured_media":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"","_et_pb_old_content":"","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[1174,94,250],"tags":[],"class_list":["post-8050","post","type-post","status-publish","format-standard","hentry","category-estudios-368","category-mision-joven-2","category-raul-berzosa"],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/8050","targetHints":{"allow":["GET"]}}],"collection":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/users\/3"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=8050"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/8050\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=8050"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=8050"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=8050"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}