{"id":8153,"date":"2007-01-01T00:00:45","date_gmt":"2006-12-31T22:00:45","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/?p=8153"},"modified":"2007-01-01T00:00:45","modified_gmt":"2006-12-31T22:00:45","slug":"uso-pastoral-de-la-biblia-con-jovenes-teoria-y-practica-de-la-lectio-divina","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/uso-pastoral-de-la-biblia-con-jovenes-teoria-y-practica-de-la-lectio-divina\/","title":{"rendered":"Uso pastoral de la Biblia con j\u00f3venes: teor\u00eda y pr\u00e1ctica de la lectio divina"},"content":{"rendered":"
Jordi<\/strong> Latorre i Castillo<\/strong>, es profesor de Sagrada Escritura en el Centro Teol\u00f3gico Salesiano Mart\u00ed-Codolar. Jordi Latorre i Castillo, es profesor de Sagrada Escritura en el Centro Teol\u00f3gico Salesiano Mart\u00ed-Codolar. S\u00cdNTESIS DEL ART\u00cdCULO El art\u00edculo propone la pr\u00e1ctica de la lectio divina en la acci\u00f3n pastoral entre los j\u00f3venes como forma privilegiada para llegar al conocimiento y apropiaci\u00f3n de la Sagrada Escritura. Ofrece una visi\u00f3n sistem\u00e1tica, presentando el dinamismo […]<\/p>\n","protected":false},"author":3,"featured_media":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"","_et_pb_old_content":"","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[1115,1116,94],"tags":[],"class_list":["post-8153","post","type-post","status-publish","format-standard","hentry","category-estudios-360_361","category-jordi-latorre-castillo","category-mision-joven-2"],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/8153"}],"collection":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/users\/3"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=8153"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/8153\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=8153"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=8153"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=8153"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}
\n
\nS\u00cdNTESIS DEL ART\u00cdCULO<\/strong>
\nEl art\u00edculo propone la pr\u00e1ctica de la lectio<\/em> divina<\/em> en la acci\u00f3n pastoral entre los j\u00f3venes como forma privilegiada para llegar al conocimiento y apropiaci\u00f3n de la Sagrada Escritura. Ofrece una visi\u00f3n sistem\u00e1tica, presentando el dinamismo de la lectio<\/em>divina<\/em> desde las primeras comunidades cristianas hasta la \u00e9poca actual. Presenta de manera sint\u00e9tica algunas metodolog\u00edas paradigm\u00e1ticas para la lectio divina, y hace una sugerencia de inter\u00e9s para su programaci\u00f3n en los grupos de j\u00f3venes.
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\nActualmente hay un mayor conocimiento de la Palabra, gracias a la riqueza de los actuales leccionarios de la misa, de los sacramentos y de la Liturgia de las Horas. Paralelamente se da una gran proliferaci\u00f3n de comentarios b\u00edblicos, siguiendo el leccionario o bien siguiendo los libros b\u00edblicos.
\nPero tambi\u00e9n se constata un uso selectivo de la Palabra: usamos exclusivamente el evangelio, olvidando las otras lecturas; y son siempre los mismos textos los que usamos con j\u00f3venes, en las oraciones de grupo, en las catequesis y en las celebraciones ocasionales; bien porque son catequ\u00e9ticamente significativos, bien porque responden a sensibilidades de moda (justicia, no-violencia, ecologismo…), o bien porque son los \u00fanicos de los que \u201cya sabemos\u201d qu\u00e9 tenemos que decir. La lectio<\/em> divina<\/em>, como personalizaci\u00f3n asidua y sistem\u00e1tica de la Escrituraresulta id\u00f3nea para paliar ese desconocimiento, tanto en los animadores de la pastoral de juventud, como en los mismos j\u00f3venes.
\n <\/p>\n\n
\nLa lectura de la Escritura en las primeras comunidades cristianas
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\nEl pueblo de Israel fue haciendo a lo largo de los siglos una lectura creyente de su propia historia, descubriendo en ella la presencia salv\u00edfica de Dios. Igualmente, durante siglos la Iglesia ha ido leyendo la Escritura para profundizar en el misterio de Cristo y para descubrir la voluntad de Dios en cada situaci\u00f3n y en cada persona.
\nCuando los escritos del NT toman en sus manos el AT, tienen como clave \u00faltima de interpretaci\u00f3n la persona de Jes\u00fas. Comprender toda la Escritura, significa leer en ellas a Cristo y la realidad cristiana a partir de la resurrecci\u00f3n.
\nLa relaci\u00f3n entre el AT y Cristo en la reflexi\u00f3n exeg\u00e9tica de la primitiva comunidad cristiana fue hecha con la metodolog\u00eda t\u00e9cnica de los rabinos. As\u00ed, por ejemplo, Pablo (cf. 1Cor 10,6-11; Rom 5,14), y 1Pe 3,21 hablan de tipo<\/em>y de anti<\/em>-tipo<\/em>. Seg\u00fan Heb, las realidades del AT son modelos<\/em>, figuras, s\u00edmbolos, sombra<\/em> de la experiencia cristiana, que constituye la verdadera imagen.
\nLa ex\u00e9gesis de la Iglesia apost\u00f3lica nos ha dejado una herencia hermen\u00e9utica en la que podemos reconocer un elemento teol\u00f3gico permanente, que es la lectura del AT en clave cristol\u00f3gica, y un elemento cultural superado, que es el de los procedimientos exeg\u00e9ticos propios de aquel tiempo.
\nDe aqu\u00ed se desprenden las siguientes claves, que toda lectura cristiana<\/em> de la Escritura debe tener presentes.
\n– La lectura se hace en profundidad, intentando captar su sentido profundo<\/em>, m\u00e1s all\u00e1 de las simples palabras. Por ello la lectura de la Escritura debe ser una lectura respetuosa con el texto; es decir, sit\u00faa el texto en el conjunto de toda la Escritura, sit\u00faa literaria e hist\u00f3ricamente el texto, analiza narrativamente el texto \u2014personajes, acciones, y transformaciones\u2014, se ayuda de las notas a pie de p\u00e1gina y de alg\u00fan comentario, y capta el sentido profundo del texto.
\n– La lectura de la Escritura se hace desde la vida, y para la vida<\/em>. Mira la vida en profundidad; es decir: con un di\u00e1logo continuo entre Escritura y vida. La Escritura interpela la vida cotidiana y se encarna<\/em> en ella, la vida interroga la Escritura para captar su sentido, hay pluralidad de interpretaciones \u2014unicidad de texto pero pluralidad de situaciones vitales\u2014.
\n– La lectura se realiza en el seno de la comunidad<\/em> de disc\u00edpulos. La lectura es comunitaria: el paradigma es la asamblea lit\u00fargica, son diversos carismas interpretativos en la comunidad \u2014los exegetas \u2013 los pastores \u2013 la gente sencilla y los pobres\u2014, la lectura privada prepara y contin\u00faa la lectura comunitaria.
\n– La lectura se hace a la luz de <\/em>la Pascua<\/em> de Cristo: Cristo y, en consecuencia, \u201cel Dios de Jes\u00fas\u201d constituye la clave de lectura de toda la Escritura, toda Escritura \u2014tanto el AT como el NT\u2014 encarna la Palabra de Dios revelada en Cristo, desde Cristo, y para Cristo; y por ello me ayuda a profundizar el misterio cristiano y constituye la mediaci\u00f3n de mi encuentro personal con \u00c9l.
\n– La lectura de la Escritura educa <\/em>a la persona cristiana. La experiencia de fe de los personajes interpela nuestra experiencia de fe actual. La lectura de la Escritura conlleva la pregunta: \u00bfen qu\u00e9 me ayuda el texto le\u00eddo a crecer en mi fe?
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\n. La lectura de la Escritura en la patr\u00edstica y en la Edad Media
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\nDesde la \u00e9poca del Nuevo Testamento hasta nuestros d\u00edas, la lectura de la Escritura ha pasado por distintas etapas. A grandes rasgos, vale la pena contemplar qu\u00e9 acentuaciones ha tenido la lectura de la Escritura en la antig\u00fcedad cristiana y en el medioevo.
\nDurante la edad patr\u00edstica, los Padres tomaron la Escritura como base de su predicaci\u00f3n, y en ella reflexionaron sobre los misterios de la fe y alimentaron la vida cristiana de sus comunidades. La lectura y comentario de la Escritura en el seno de la asamblea lit\u00fargica, dominical o vespertina, fue fuente de la reflexi\u00f3n cristiana \u2014teolog\u00eda<\/em>\u2014, de la vida cristiana \u2014moral\u2014<\/em>, de la celebraci\u00f3n cristiana \u2014liturgia<\/em>\u2014, de la experiencia profunda de Dios \u2014espiritualidad<\/em>\u2014.
\nEn la \u00e9poca patr\u00edstica, la lectio<\/em> divina<\/em> consist\u00eda en una lectura cordial y orante de la Escritura, fuente de vida cristiana, es decir, de espiritualidad y de formaci\u00f3n para el pueblo cristiano bajo la gu\u00eda de sus pastores. Especialmente importante fue considerada para la formaci\u00f3n de los presb\u00edteros, de los eremitas y de los monjes. La lectio<\/em> divina<\/em> era practicada primordialmente en forma lit\u00fargica: en asamblea, bajo la ense\u00f1anza homil\u00e9tica de los pastores, y dirigida a toda la comunidad. El gran m\u00e9rito de los Padres es el de haber sentido y transmitido la necesidad del estudio de la Escritura como fuente de la entera vida cristiana.
\nAl llegar la Edad Media se fue distinguiendo, poco a poco, entre lectio<\/em> divina<\/em>, que le\u00eda la Escritura como alimento para la fe, y la lectio<\/em> scholastica<\/em>, que buscaba comprender mejor el sentido preciso del texto.
\nLa lectio<\/em> scholastica<\/em> desarroll\u00f3 los llamados cuatro<\/em> sentidos<\/em> de la Escritura: el sentido literal y el espiritual; y, dentro de \u00e9ste \u00faltimo, tres sentidos que se refer\u00edan al contenido de la revelaci\u00f3n -sentido aleg\u00f3rico-, a la conducta del cristiano -sentido moral- y a la escatolog\u00eda -sentido anag\u00f3gico-.
\nLa lectio<\/em> divina<\/em> continu\u00f3 siendo practicada en los monasterios, siempre en com\u00fan. Se part\u00eda de las lecturas b\u00edblicas y de las homil\u00edas patr\u00edsticas que se le\u00edan largamente en Maitines en el coro; y se complementaban con la lectura sistem\u00e1tica de la Biblia y de sus comentarios en el claustro, donde se hac\u00eda en com\u00fan la ruminatio<\/em> de la Escritura, predecesora de nuestra meditaci\u00f3n. A lo largo de su vida, el monje aprend\u00eda de memoria, adem\u00e1s del Salterio para el rezo en el coro, amplias secciones de la Escritura, y las asimilaba<\/em>, ensambl\u00e1ndolas tem\u00e1ticamente, penetrando en su sentido, a trav\u00e9s de los comentarios patr\u00edsticos, y los ve\u00eda aplicados en las vidas de los santos.La Escritura era as\u00ed la fuente de la espiritualidad lit\u00fargica y asc\u00e9tica de las comunidades mon\u00e1sticas.
\nLa lectio<\/em> divina<\/em>, m\u00e1s que un m\u00e9todo de lectura, era en esta \u00e9poca un estilo de vida espiritual que llenaba la entera jornada y la entera vida de los monjes. Se fundamentada en unos principios:
\n– En la Escritura Dios<\/em> habla a la persona<\/em>, y \u00e9sta le responde a trav\u00e9s de las palabras de la oraci\u00f3n. Se siente interpelada por la Palabra, que ayuda a interpretar la vida a su luz.
\n– Ayuda a tener una visi\u00f3n global de <\/em>la Palabra<\/em> de Dios<\/em>. Cada pasaje de la Escritura es le\u00eddo e interpretado en el marco del conjunto de toda la Biblia.
\n– La lectio<\/em> divina<\/em> se realiza en el clima de la oraci\u00f3n<\/em>. En el silencio del coraz\u00f3n resuena la voz de Dios, y es all\u00ed donde brota la respuesta de la persona.
\n– La Escritura es una palabra para la vida<\/em>, por ello la escucha y el discernimiento conducen a la acci\u00f3n: \u201cDichosos los que escuchan la Palabra de Dios y la viven cada d\u00eda\u201d.
\nGuigo II (s. XII),[1]<\/a> expuso el itinerario<\/em> de la lectio<\/em> divina<\/em> en el seno de una carta dirigida a sus hermanos. Dicho itinerario ha llegado a ser cl\u00e1sico en toda la lectio<\/em> divina<\/em> posterior, hasta el punto que la mayor\u00eda de m\u00e9todos de lectio<\/em> divina<\/em> actuales contin\u00faan inspir\u00e1ndose en \u00e9l. Su itinerario contempla cuatro momentos o grados: lectio<\/em>(lectura), es decir, la lectura lenta, atenta y comprensiva del texto b\u00edblico; meditatio<\/em> (meditaci\u00f3n) es decir, el rumiar el texto (ruminatio<\/em>) repetidamente hasta aprenderlo de memoria y asimilarlo personalmente; oratio<\/em>(oraci\u00f3n), es decir, el di\u00e1logo orante con Dios a partir del contenido asimilado del texto, d\u00e1ndole gracias, pidi\u00e9ndole perd\u00f3n, suplic\u00e1ndole su ayuda; contemplatio<\/em> (contemplaci\u00f3n), es decir, el paso del contenido de la oraci\u00f3n de la mente al coraz\u00f3n, dejando aflorar los sentimientos y las emociones, a fin de gustar afectivamente de los consuelos aportados por la lectura y la oraci\u00f3n.
\nEn la Edad Media, la lectio<\/em> divina<\/em> pasa a ser una actividad preferentemente claustral; sus destinatarios privilegiados son\u00a0 ahora los monjes. En ella se procede a la lectura com\u00fan de la Escritura, pero a su meditaci\u00f3n privada. La homil\u00eda de los pastores ha sido sustituida por la lectura de los Padres de la Iglesia, especialmente de sus comentarios a los libros b\u00edblicos.
\nEn el claustro, la lectio<\/em> divina<\/em> contin\u00faa siendo un estilo de vida que acompa\u00f1a al monje a lo largo de sus jornadas. Con todo, la progresiva sistematizaci\u00f3n conlleva el convertir la lectio<\/em> en un m\u00e9todo de asimilaci\u00f3n orante a la Escritura, un m\u00e9todo de devoci\u00f3n personal.
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\n1.3. En la \u00e9poca moderna y contempor\u00e1nea
\n
\nAl llegar la devotio<\/em> moderna <\/em>(s. XVI) comienza el declive de la lectio<\/em> divina<\/em>, la \u00e9poca que ha sido llamada \u00abel destierro de la palabra y de la lectio<\/em> divina<\/em>\u00bb. En los monasterios comienza la \u201cmeditaci\u00f3n\u201d en el sentido moderno del t\u00e9rmino, junto con la \u201cdevoci\u00f3n\u201d y las \u201cdevociones\u201d que han perdurado hasta bien entrado el s. XX.
\nA los Institutos Religiosos surgidos despu\u00e9s de Trento se les prescribe un tiempo de meditaci\u00f3n personal y comunitaria. Aunque sus formas sean m\u00faltiples, el m\u00e9todo m\u00e1s difundido es el de Ignacio de Loyola, que adapta lalectio<\/em> tradicional a los postulados de la devotio<\/em> moderna<\/em>. Con todo, algunas \u00f3rdenes, como los Servitas, continuaron con el uso de la lectio<\/em>, si bien con algunas adaptaciones.
\nYa en el s. XX asistimos a una recuperaci\u00f3n de la lectio<\/em> y a un reflorecimiento de la misma. Un fruto de ello, lo encontramos en la Constituci\u00f3n conciliar Dei<\/em> Verbum<\/em>, que insiste en la lectura asidua de la Escritura para los sacerdotes y religiosos, y adem\u00e1s, \u2013y es una novedad respecto a siglos anteriores\u2013 invita tambi\u00e9n a todos los fieles a dicha lectura. Recuperando as\u00ed la antigua tradici\u00f3n eclesial de la lectio<\/em> divina<\/em>, afirma: \u201cEste Santo S\u00ednodo recomienda insistentemente a todos los cristianos la lectura asidua de la Sagrada Escritura, a fin de adquirir el sublime conocimiento de Jesucristo (Flp 3,8), pues desconocer las Escrituras es desconocer a Cristo<\/em> (San Jer\u00f3nimo)\u201d (DV 25).
\nEl contacto que pide el Vaticano II no es una lectura ocasional, fragmentaria o discontinua, sino un acceso sistem\u00e1tico al texto b\u00edblico desde la fe, en un clima de coloquio con Dios, a fin de experimentar personalmente a Cristo, discernir la voluntad de Dios, y descubrir la presencia de Cristo en las personas.
\nLa aparici\u00f3n, adem\u00e1s, de nuevas \u00f3rdenes ecum\u00e9nicas que, a falta de una tradici\u00f3n m\u00e1s inmediata, buscan sus cimientos sobre la antigua tradici\u00f3n eremita y mon\u00e1stica, trae consigo la recuperaci\u00f3n de la antigua lectio<\/em>mon\u00e1stica. Cabe destacar, en esta l\u00ednea, la Comunidad de Taiz\u00e9 (Francia \u2013 fundador Roger Schutz) y la Comunidad Ecum\u00e9nica de Bose (Italia \u2013 fundador Enzo Bianchi).
\nRecapitulando, la lectio<\/em> divina<\/em> en la tradici\u00f3n eclesial ha sido, preferentemente, una escuela de espiritualidad, m\u00e1s que un m\u00e9todo de lectura de la Escritura. Parte del entero contacto con la Escritura \u2014personal y comunitario, lit\u00fargico y privado, directo o indirecto\u2014, sigue con el estudio reflexivo de su contenido, en vistas a su comprensi\u00f3n profunda, se realiza en un contexto orante, desemboca en la conversi\u00f3n: un cambio progresivo del coraz\u00f3n que se expresa en la vida cotidiana. La lectio<\/em> no se reduce a unos momentos concretos de la jornada, o de la vida, aunque sean abundantes; sino que abarca toda la jornada y la vida entera del cristiano.
\n <\/p>\n\n
\nEn la actualidad, la popularidad de la lectio<\/em> divina<\/em> y la falta de tiempo y de preparaci\u00f3n para realizar una lectura sistem\u00e1tica y profunda de la entera Escritura, ha provocado que la lectio<\/em> divina deje de ser un dinamismo de vida para reducirse a un m\u00e9todo de meditaci\u00f3n de la Palabra de Dios, practicado frecuentemente de forma ocasional. Ello contrasta con la tradici\u00f3n cristiana anterior, en\u00a0 la que la lectio<\/em> divina<\/em>, m\u00e1s que un m\u00e9todo de meditaci\u00f3n de una determinada per\u00edcopa b\u00edblica, es un dinamismo de formaci\u00f3n cristiana y de espiritualidad que abarcaba la entera vida. Y es en el seno de ese dinamismo constante de formaci\u00f3n y de espiritualidad que el m\u00e9todo de acercamiento a un texto concreto encuentra su sentido aut\u00e9ntico y su contexto eficaz.
\nLa lectio<\/em> divina<\/em>, entendida como m\u00e9todo<\/em> de acercamiento al texto b\u00edblico, se ha desarrollado, en las \u00faltimas d\u00e9cadas, seg\u00fan una variedad de metodolog\u00edas diversas, seg\u00fan los lugares y las circunstancias. Con todo, cualquier metodolog\u00eda usada, para poder ser considerada aut\u00e9nticamente como lectio<\/em> divina<\/em>, debe combinar estos cuatro componentes esenciales: lectura del texto b\u00edblico, la meditaci\u00f3n (personal y \/ o comunitaria), la oraci\u00f3n contemplativa, la vida (de las personas y\/o del grupo).
\nNo todas las metodolog\u00edas acent\u00faan de la misma manera cada uno de estos componentes, de ah\u00ed su variedad, y su consiguiente adaptabilidad a las diversas circunstancias de los grupos y de las personas.
\nLlegados a este punto, presentamos siete metodolog\u00edas paradigm\u00e1ticas para la lectio<\/em> divina<\/em>, con una referencia a su aplicaci\u00f3n con los j\u00f3venes. Las dos primeros pertenecen a la larga tradici\u00f3n eclesial, las otras cinco son metodolog\u00edas nacidas en las \u00faltimas d\u00e9cadas.[2]<\/a> La mayor\u00eda est\u00e1n pensadas para seguirse en grupos reducidos, aunque alguna de ellas puede usarse tambi\u00e9n en gran grupo, y las otras son de \u00edndole privada.[3]<\/a>
\n
\n2.1 Metodolog\u00eda mon\u00e1stica de la lectio<\/em> divina<\/em>
\n
\nLa metodolog\u00eda mon\u00e1stica hunde sus ra\u00edces en la tradici\u00f3n patr\u00edstica y, sistematizado en la edad media, constituye el origen de los diversos itinerarios popularizados a partir de mediados del s. XX.
\nNo es una metodolog\u00eda ocasional, es decir, para una reuni\u00f3n peri\u00f3dica de grupo, o para un retiro personal o comunitario, ni siquiera para un rato diario de meditaci\u00f3n personal. Es un m\u00e9todo sistem\u00e1tico que abarca toda la jornada y toda la vida del monje.
\nMantiene las dos expresiones complementarias tradicionales: la comunitaria y la privada. La comunitaria, o lit\u00fargica, se realiza en los Maitines diarios, con una lectura casi seguida del AT y NT y de los comentarios patr\u00edsticos, en un ciclo lit\u00fargico anual o bienal. En algunas \u00f3rdenes, adem\u00e1s, en el refectorio de procede a la lectura de un cap\u00edtulo diario de la Escritura siguiendo una lectura completa y seguida, independientemente de los ciclos lit\u00fargicos.
\nLa privada, a la que los monjes dedican un promedio de dos horas diarias. Una por la ma\u00f1ana, entre los Maitines y las Laudes; otra por la tarde, al final de la jornada, antes de las V\u00edsperas. Esta se realiza en privado, ordinariamente en la propia celda o en el jard\u00edn. Tiene cuatro elementos: lectura, comprensi\u00f3n, oraci\u00f3n y conversi\u00f3n. Resulta esencial la comprensi\u00f3n del texto, para ello el monje lee los comentarios exeg\u00e9ticos y espirituales de que dispone la Biblioteca del monasterio; es un aut\u00e9ntico \u201cestudio\u201d de la Palabra. La adecuada comprensi\u00f3n del texto desemboca en la oraci\u00f3n personal, y en la conversi\u00f3n de la propia vida a la Palabra de Dios. Cada persona programa su itinerario de lectio<\/em> divina<\/em>: lectura seguida de todos los libros b\u00edblicos, o bien alternando libros del AT y del NT, o bien por grupos (Evangelios, cartas, profetas, Pentateuco, sapienciales…). Sabiendo que es una tarea que le empe\u00f1ar\u00e1 toda la vida, y en la que siempre deber\u00e1 recomenzar.
\nEsta forma sistem\u00e1tica de leer, estudiando y rezando, la entera Biblia, la podemos aplicar a un plan personal de formaci\u00f3n permanente. Resulta adecuada para j\u00f3venes adultos que ya poseen una formaci\u00f3n b\u00e1sica suficiente.
\n
\n2.2 Lectura contemplativa de la Palabra
\n
\nEste m\u00e9todo est\u00e1 fundamentado en el m\u00e9todo que S. Ignacio sugiere, en sus Ejercicios Espirituales<\/em>, para orar y contemplar personalmente los relatos evang\u00e9licos. Se fundamenta en la experiencia personal de Ignacio, en la escuela de la tradici\u00f3n mon\u00e1stica, y de la devotio<\/em> moderna<\/em> de la \u00e9poca. Resulta apto para la lectio<\/em> personal de los textos evang\u00e9licos, y puede aplicarse tambi\u00e9n a otros textos narrativos del AT y NT. Pone en juego, sobre todo, elafecto<\/em>, es decir, la implicaci\u00f3n personal del orante en aquello que lee y medita.
\n– La persona comienza buscando un lugar id\u00f3neo para la oraci\u00f3n. Una vez hallado, y tras un rato de silencio interior, toma conciencia de la presencia de Dios y le pide la gracia que pretende hallar en la oraci\u00f3n.
\n– Sigue la lectura atenta del texto; acabada \u00e9sta se ponen en juego la memoria (se \u201crecuerda\u201d el relato evang\u00e9lico) y los sentidos internos (se \u201cve\u201d la escena, se \u201cescucha\u201d a los personajes, se \u201ccomparten\u201d sus sentimientos…). La persona se implica en la escena, imagin\u00e1ndose como un personaje de la misma, e interviniendo en la misma; o bien, poni\u00e9ndose en el papel de Jes\u00fas, de sus disc\u00edpulos o interlocutores, de sus opositores… No se trata tanto de comprender el texto, cuanto de revivirlo.
\n– Al sentirse interpelada por la escena, y revivirla interiormente, la persona se siente \u201cafectada\u201d por lo que medita; observa su vida actual y la confronta con lo meditado.
\n– Se pasa a la oraci\u00f3n en di\u00e1logo cordial con el Se\u00f1or, \u201ccomo un amigo habla a otro amigo\u201d. En la oraci\u00f3n presenta ante el Se\u00f1or los afectos suscitados por la contemplaci\u00f3n de la escena evang\u00e9lica (temor, consuelo, dolor, alegr\u00eda, confusi\u00f3n…), le \u201ccuenta\u201d en lo que su vida se ha visto interpelada, y le pide su presencia y su ayuda.
\n– Todo concluye con una breve evaluaci\u00f3n de la lectio<\/em> realizada.
\nLa novedad de la lectio<\/em> ignaciana estriba en integrar la \u201ccontemplatio<\/em>\u201d con la \u201cmeditatio<\/em>\u201d, as\u00ed la reflexi\u00f3n ya no es puramente intelectual, sino que se realiza con los sentidos internos y los afectos, con lo que en la misma reflexi\u00f3n ya se \u201cgusta\u201d lo meditado. Aparentemente falta el aterrizaje en la vida, pero, en la l\u00ednea de tradici\u00f3n medieval, el aspecto \u201cpr\u00e1ctico\u201d de la lectio<\/em> es la \u201cconversi\u00f3n de coraz\u00f3n\u201d que obra la lectio<\/em>, mediante lasistematicidad y la perseverancia, en el ejercitante, y que confluye en la \u201celecci\u00f3n\u201d o programa de vida cristiana que \u00e9ste realiza. Esta metodolog\u00eda se puede aplicar a retiros de j\u00f3venes y adultos y a tandas de EE.
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\n2.3 Estudio de Evangelio
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\nUsado como instrumento de formaci\u00f3n interna y de evangelizaci\u00f3n por los Sacerdotes del Prado<\/em>, fundados en Francia por A. Chevrier. A pesar del nombre, se inspira en el m\u00e9todo de la lectio<\/em>. Este m\u00e9todo puede ser usado de forma personal o grupal, si bien se recomienda alternar ambos usos. Previamente se ha formulado un tema que sea de inter\u00e9s para el grupo, y se ha buscado, en un diccionario b\u00edblico, uno o varios pasajes de la Escritura que reflejen o iluminen dicho tema. A continuaci\u00f3n se procede al \u201cestudio\u201d.
\n– Tras un rato de oraci\u00f3n, se proclaman los textos b\u00edblicos propuestos. Se da tiempo abundante de silencio para que cada uno los profundice. En un primer momento la atenci\u00f3n se centra en los mismos textos: \u00bfqu\u00e9 personajes aparecen?, \u00bfqu\u00e9 hacen?; \u00bfqu\u00e9 transformaciones se dan en los personajes y en las circunstancias a lo largo del texto?; \u00bfcu\u00e1l es el comportamiento de Jes\u00fas\/Dios?, \u00bfqu\u00e9 revela de s\u00ed mismo?. Si es un texto del AT: \u00bfqu\u00e9 proyecci\u00f3n tiene en el NT?, \u00bfc\u00f3mo ilumina Jes\u00fas esta escena b\u00edblica? Se pueden leer otros textos paralelos relacionados con lo le\u00eddo.
\n– En un segundo momento la atenci\u00f3n se dirige hacia la vida de hoy: \u00bfc\u00f3mo se viven situaciones parecidas en nuestro ambiente de vida?; \u00bfc\u00f3mo lo vive hoy la Iglesia?; \u00bfc\u00f3mo lo vivo yo?; \u00bfqu\u00e9 luz nos aporta la Biblia, sobre todo Jes\u00fas, para iluminar nuestra acci\u00f3n futura?
\n– A continuaci\u00f3n se hace la puesta en com\u00fan, evitando discusiones y debates. El animador acaba haciendo una breve s\u00edntesis a partir de las aportaciones personales de todos.
\n– Se concluye con una oraci\u00f3n final algo m\u00e1s larga.
\nEsta metodolog\u00eda se puede aplicar a grupos de j\u00f3venes y adultos que deseen un itinerario s\u00f3lido de formaci\u00f3n cristiana a partir del texto b\u00edblico, o bien en una sesi\u00f3n de formaci\u00f3n comunitaria.
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\n2.4. M\u00e9todo de Kigali
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\nFue creado para favorecer la lectura de la Biblia en grupos de catequistas. Est\u00e1 pensado para la reflexi\u00f3n de textos narrativos del NT -Evangelios y Hechos- y del AT -Pentateuco y libros Hist\u00f3ricos-.
\n– Se comienza con un momento de silencio, una oraci\u00f3n, o un\u00a0 canto que invite a la escucha de la Palabra. Seguidamente se proclama atentamente el texto elegido, sigue un momento de silencio personal, y se proclama por segunda vez el texto, facilitando la retenci\u00f3n de los elementos esenciales. A continuaci\u00f3n cada uno manifiesta sus impresiones (sin sacar conclusiones!).
\n– Se pasa a observar el texto en detalle: localizar los lugares que son nombrados; descubrir los personajes y sus relaciones; agrupar las palabras y expresiones que son de la misma familia sem\u00e1ntica; comparar principio y final del pasaje y ver qu\u00e9 transformaciones se han operado.
\n– Se aprovechan las informaciones sobre el pasaje que aporta la propia Biblia: notas y comentarios, y se cotejan los textos paralelos.
\n– De una manera o de otra se presentan cuatro puntos fundamentales: la vida de Jes\u00fas de Nazaret, el acontecimiento de la vida de Jes\u00fas o de sus disc\u00edpulos, de que habla este pasaje \u00bfc\u00f3mo se inscribe en el conjunto de la vida de Jes\u00fas?; la Resurrecci\u00f3n, \u00bfqu\u00e9 elemento de la fe en la Resurrecci\u00f3n acent\u00faa este texto?, \u00bfqu\u00e9 esperanza suscita?; la vida de la Iglesia, \u00bfa qu\u00e9 necesidades de los cristianos trata de responder este texto?, \u00bfpor qu\u00e9 la comunidad primitiva conserv\u00f3 y comunic\u00f3 este texto?; las Escrituras: las alusiones a otros textos del AT y NT \u00bfc\u00f3mo ayudan a comprender mejor el mensaje del texto?
\n– Despu\u00e9s de todo lo anterior, se pasa a descubrir el testimonio de que para el hoy, que se desprende del texto: \u00bfc\u00f3mo traducir en otras palabras el mensaje del texto?; \u00bfc\u00f3mo ilumina nuestra fe, c\u00f3mo ilumina nuestra situaci\u00f3n, qu\u00e9 exige de nosotros?
\n– Se concluye con una oraci\u00f3n.
\nEste m\u00e9todo resulta interesante para grupos b\u00edblicos principiantes, o con personas de escasa formaci\u00f3n b\u00edblica. Ya que la lectio<\/em> apunta hacia la vida, resulta interesante para grupos de j\u00f3venes comprometidos en alguna acci\u00f3n social o eclesial.
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\n2.5 Ver, escuchar y actuar
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\nEs una variante del m\u00e9todo de Revisi\u00f3n de Vida impulsado, desde B\u00e9lgica, por el sacerdote Joseph Cardijn, y que se ha convertido en la formaci\u00f3n b\u00e1sica de los grupos de los J\u00f3venes Obreros Cat\u00f3licos (JOC). A diferencia de otros m\u00e9todos, no parte de la Escritura para llegar a la vida, sino al rev\u00e9s.
\n– Se comienza con una oraci\u00f3n, o un canto, o unos minutos de silencio.
\n– Cada uno de los miembros del grupo pasa a exponer un hecho de vida que le haya afectado de forma significativa en los \u00faltimos d\u00edas o semanas. Al acabar, se escoge uno de los hechos presentados para examinarlo en un clima de respeto y de escucha mutua, intentando captar los mecanismos de fondo que se hallan tras el hecho concreto.
\n– Sigue un amplio momento de silencio, intentando valorar el hecho analizado con los ojos de Dios, intentado descubrir, a la luz de la Palabra, c\u00f3mo Dios lo juzga. Tras el silencio, se pasa a intercambiar las reflexiones suscitadas durante el silencio, acabando su intervenci\u00f3n cada miembro con la cita de una frase o de un pasaje de la Escritura que, a su juicio, expresa la valoraci\u00f3n divina del hecho. El texto se cita de memoria o se busca en la Biblia personal.
\n– El animador propone al grupo, mediante preguntas concretas (qu\u00e9\u2013 qui\u00e9n\u2013 cu\u00e1ndo), una actuaci\u00f3n com\u00fan futura.
\n– Se concluye con una oraci\u00f3n de intercesi\u00f3n, un salmo o un canto.
\nEste m\u00e9todo, un cl\u00e1sico del s. XX, resulta apropiado para grupos de j\u00f3venes-adultos, sesiones formativas de animadores, sesiones comunitarias de formaci\u00f3n. Acent\u00faa el compromiso de llevar a la pr\u00e1ctica lo le\u00eddo y rezado en com\u00fan en forma de compromiso.
\n
\n2.6. Escuela de la Palabra
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\nA finales de 1980, un grupo de j\u00f3venes pidi\u00f3 al Cardenal Mart\u00edn, entonces Arzobispo de Mil\u00e1n, que les ense\u00f1ara a rezar con la Biblia. La experiencia comenz\u00f3 en el Seminario diocesano con unos pocos j\u00f3venes, pero a los pocos meses ya se tuvo que trasladar a la amplia Catedral de Mil\u00e1n, cada primer jueves de mes. En 1985 fueron ya setenta los grupos distribuidos por las parroquias de la di\u00f3cesis los que segu\u00edan la Escuela de la Palabra, conectados con la Catedral mediante la emisora diocesana. El gran dinamizador de la experiencia ha sido el carisma personal del Cardenal Martini, con sus conocimientos b\u00edblicos, su pr\u00e1ctica de dirigir EE y de acompa\u00f1amiento personal, y sus dotes comunicativas de conectar con el gran grupo.
\nEs un m\u00e9todo eminentemente grupal, con reflexiones b\u00edblicas a modo de retiros. El aspecto que acent\u00faa es el de oraci\u00f3n personal. Adquiere importancia el ambiente en el que se desarrollan los encuentros: iglesias o capillas, debidamente acondicionadas.
\n– Se comienza con un canto, una oraci\u00f3n o un salmo que invite al recogimiento. Se hace un clima de silencio absoluto que predisponga a la escucha y a la oraci\u00f3n. A veces se entroniza la Palabra tras una procesi\u00f3n por la Catedral, o se invita a los j\u00f3venes a ponerse de rodillas, en actitud de adoraci\u00f3n.
\n– Lectio. <\/em>Se proclama solemnemente la Palabra. Sigue una explicaci\u00f3n (20 minutos) hecha en clave de meditaci\u00f3n: no es una homil\u00eda ni una catequesis, sino una aclaraci\u00f3n meditada del texto. La exposici\u00f3n es sencilla ymemorizable en sus puntos fundamentales: \u00bfqu\u00e9 dice el texto?, \u00bfcu\u00e1les son los elementos b\u00edblicamente relevantes?, \u00bfcu\u00e1l es el coraz\u00f3n del pasaje?
\n– Meditatio. <\/em>Siguen otros veinte minutos de silencio absoluto (sin m\u00fasica de fondo ni cantos) en el que los presentes se dejan interpelar por el texto meditado previamente. Para ayudar a la meditaci\u00f3n pueden formularse preguntas breves, directas e incisivas, f\u00e1ciles de retener: \u00bfqu\u00e9 me dice el texto?, \u00bfc\u00f3mo ilumina la situaci\u00f3n que estoy viviendo estos d\u00edas?, \u00bfqu\u00e9 gesto, compromiso, acci\u00f3n me sugiere para los pr\u00f3ximos d\u00edas?
\n– Oratio<\/em>. Se concluye con una oraci\u00f3n o un canto en com\u00fan.
\nEste es quiz\u00e1 uno de los m\u00e9todos m\u00e1s simples y efectivos de lectio<\/em> divina<\/em> y por lo tanto resulta \u00fatil en retiros de j\u00f3venes y adultos, y tambi\u00e9n para tandas de EE con j\u00f3venes. Tambi\u00e9n es el m\u00e1s apropiado para ser usado en la meditaci\u00f3n diaria de la Escritura.
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\n2.7. Lectura creyente de la Biblia
\n
\nEste m\u00e9todo de lectura fue propuesto, a comienzos de las d\u00e9cada de los \u201990, por el equipo animador de La Casade la Biblia (Madrid). Al igual que el m\u00e9todo de Revisi\u00f3n de Vida, parte de la vida para volver a ella; pero, a diferencia de \u00e9l, lo complementa con el estudio objetivo de un texto b\u00edblico.
\n– Comienza tambi\u00e9n este m\u00e9todo con una ambientaci\u00f3n orante o un canto.
\n– Mirar la propia vida. El animador escoge una situaci\u00f3n vital que est\u00e9 relacionada con el texto que se estudiar\u00e1 despu\u00e9s, y la plantea al grupo en forma de pregunta para que todos aporten su experiencia personal del respecto: \u00bfconoc\u00e9is a alguien que…?, \u00bfhab\u00e9is visto alguna vez…?, \u00bfos ha sucedido que…?, \u00bfqu\u00e9 opini\u00f3n os merece?
\n– Lectura de un texto, escogido previamente, o bien lectura continuada de un libro b\u00edblico. Uno lee y los dem\u00e1s siguen en su propia Biblia (mejor tener todos la misma versi\u00f3n, o una fotocopia). A continuaci\u00f3n, si es preciso, el animador hace aclaraciones sobre el texto, o responde a las preguntas de los miembros del grupo sobre puntos o expresiones oscuras. A continuaci\u00f3n, se pasa a analizarlo: \u00bfqu\u00e9 personajes aparecen?, \u00bfqu\u00e9 hacen?, \u00bfqu\u00e9 relaciones mantienen?, \u00bfqu\u00e9 transformaciones se dan en los personajes y en las circunstancias a lo largo del texto?, \u00bfcu\u00e1l es el mensaje del texto?, \u00bfqu\u00e9 relaci\u00f3n tiene el texto con los hechos comentados?
\nEl animador debe haberse preparado previamente el texto, a fin de que su pregunta inicial sea una explicitaci\u00f3ndel n\u00facleo del texto que ahora se analiza entre todos.
\n– Se vuelve sobre la propia vida: \u00bfc\u00f3mo ilumina el texto los hechos comentados al inicio?, \u00bfen qu\u00e9 puntos nos llama a conversi\u00f3n?. Puede surgir alg\u00fan compromiso personal o de grupo.
\n– Se concluye con una oraci\u00f3n: un salmo seleccionado por el animador (de acuerdo con lo meditado) y rezado todos juntos, unas intercesiones, un canto o el padrenuestro final.
\nEste m\u00e9todo se puede aplicar a grupos de j\u00f3venes y adultos, y tambi\u00e9n en catequesis de adultos. Combina el objetivo educativo con la proyecci\u00f3n de vida en forma de compromiso.
\n <\/p>\n\n
\nHabiendo presentado una selecci\u00f3n de metodolog\u00eda de lectio<\/em> divina<\/em> proponemos ahora algunas sugerencias para una programaci\u00f3n general de la lecturas a usar de forma sistem\u00e1tica en las sesiones personales o grupales delectio<\/em>, ya sea por parte de los j\u00f3venes y de sus propios animadores.
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\n3.1. El ritmo del a\u00f1o lit\u00fargico
\n
\nEl a\u00f1o lit\u00fargico es el itinerario b\u00e1sico de formaci\u00f3n cristiana. Tenemos a nuestra disposici\u00f3n dos ciclos diarios: el leccionario de la Misa diaria y dominical, y el leccionario de la Liturgia de las Horas (Oficio de lecturas). Ambos se complementan y se enriquecen.
\n– Ventaja: nos ayudan a sintonizar nuestra escucha de la Palabra con la Historia de la Salvaci\u00f3n y con los Misterios de Cristo, celebrados a lo largo del a\u00f1o.
\n– Inconveniente: no nos permite una lectura suficientemente sistem\u00e1tica de los textos b\u00edblicos, situaci\u00f3n agravada en los tiempos fuertes, en los que se pierde la lectura seguida de los libros b\u00edblicos.
\nEste itinerario resulta \u00fatil en cualquier etapa de la vida cristiana, siempre que se quiera adquirir un conocimiento sistem\u00e1tico de la Escritura. Resulta \u00fatil para la meditaci\u00f3n diaria tomar como base las lecturas de la Eucarist\u00eda del d\u00eda.
\n
\n3.2. Un recorrido general por la Escritura
\n
\nNo se trata de leer la Biblia toda entera, sino de disfrutar de una panor\u00e1mica general, a base de la selecci\u00f3n de algunos de sus textos m\u00e1s significativos. Existen listados con selecciones ya hechas.
\n– Ventaja: proporciona, por una parte, una visi\u00f3n de conjunto \u00fatil a un estudio posterior m\u00e1s pormenorizado, y, por otra, permite afrontar, en poco, tiempo los textos m\u00e1s esenciales del AT y del NT.
\n– Inconveniente: se centra en textos, muchas veces, ya conocidos, y extra\u00eddos de su contexto. Una vez recorrido, exige pasar a otros itinerarios m\u00e1s completos.
\nPuede resultar \u00fatil en grupos que se inician en el conocimiento sistem\u00e1tico de los textos b\u00edblicos -por ejemplo, adolescentes, j\u00f3venes o adultos con poca formaci\u00f3n b\u00edblica previa-. Resulta m\u00e1s \u00fatil si se trabajan los textos en peque\u00f1o grupo.
\n
\n3.3. La lectura seguida de un libro
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\nSe hace una experiencia de lectura sistem\u00e1tica de un libro b\u00edblico, tomando en base a los intereses de la persona o del grupo, o bien del a\u00f1o lit\u00fargico. Para principiantes es mejor comenzar con la obra lucana: evangelio y Hechos, de forma seguida. Se puede seguir con otro evangelio, o bien pasar al G\u00e9nesis y al \u00c9xodo.
\n– Ventaja: ayuda a un conocimiento profundo del libro y de la teolog\u00eda de su autor, al tiempo que permite gustar el texto como obra literaria: con su comienzo, su desarrollo y su conclusi\u00f3n.
\n– Inconveniente: no todos los textos pueden tener el mismo inter\u00e9s, por lo que se requiere constancia, y habilidad en el animador del grupo.
\nSe puede proponer a grupos b\u00edblicos de frecuencia semanal o quincenal. Se puede sugerir a los j\u00f3venes como lectura formativa personal -incluso sin aplicar expl\u00edcitamente el m\u00e9todo de la lectio<\/em>–<\/em>de acercamiento al mensaje evang\u00e9lico. Puede ser \u00fatil tambi\u00e9n, aplicando esta vez el m\u00e9todo de la lectio<\/em>, para la oraci\u00f3n diaria, en cualquier etapa de la vida. Seleccionando algunos pasajes de un determinado libro, se pueden organizar \u201cciclos\u201d de retiros, o de encuentros b\u00edblicos de frecuencia mensual.
\n
\n3.4. Profundizaci\u00f3n de un tema
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\nSe estudia un tema escogido de antemano, ayud\u00e1ndose de un diccionario o un vocabulario b\u00edblico, o tambi\u00e9n del \u00edndice tem\u00e1tico que existe al final de la mayor\u00eda de ediciones de la Biblia. A lo largo de varios d\u00edas o sesiones se van leyendo y meditando los distintos textos b\u00edblicos relativos a al tema elegido.
\n– Ventaja: permite captar las distintas connotaciones que los distintos temas teol\u00f3gicos o espirituales han ido teniendo a lo largo de la tradici\u00f3n b\u00edblica.
\n– Inconveniente: exige una previa visi\u00f3n de conjunto de la Biblia y de sus tradiciones, de lo contrario puede desorientar el enfrentarse a varios textos sacado de su contexto y, a veces, contradictorios entre s\u00ed.
\nEste itinerario resulta \u00fatil para grupos b\u00edblicos de frecuencia mensual, o mayor; tambi\u00e9n para retiros.
\n
\n3.5. Lectura de toda la Biblia
\n
\nLa lectura de toda la Biblia constituye, ciertamente, el culmen de cualquier itinerario de lectio<\/em> divina<\/em>. La lectura meditada de la Biblia, en base a un cap\u00edtulo diario, abarca, evidentemente, varios a\u00f1os.
\nExisten dos formas b\u00e1sicas de realizarla: una lectura seguida y can\u00f3nica, es decir, siguiendo el orden de los libros can\u00f3nicos tal como vienen dispuestos en nuestras Biblias; o bien una lectura cronol\u00f3gica, siguiendo el orden de composici\u00f3n de los distintos libros \u2014leyendo, por ejemplo, el Pentateuco antes que los libros prof\u00e9ticos, leyendo \u00e9stos antes que los sapienciales, leyendo las cartas paulinas antes que los evangelios; pero tambi\u00e9n prestando atenci\u00f3n a los distintos libros: por ejemplo, leyendo Esdras y Nehem\u00edas antes que 1-2 Cr\u00f3nicas, o bien Am\u00f3s yOseas, antes que Isa\u00edas 1\u201339, o Jerem\u00edas antes que Isa\u00edas 40\u201355, o Apocalipsis antes que Judas o 2 Pedro; etc.\u2014. Tanto el cursus<\/em> can\u00f3nico, como el cronol\u00f3gico son v\u00e1lidos, aunque el efecto producido en el lector es distinto.
\n– Ventaja: Proporciona un amplio conocimiento espiritual de toda la Biblia.
\n– Inconveniente: exige un alto grado de constancia, y supone haber tomado gusto<\/em> a la lectura b\u00edblica, a trav\u00e9s de otros itinerarios previos de lectura parcial.
\nResulta sumamente \u00fatil para personas que poseen ya una formaci\u00f3n b\u00edblica b\u00e1sica m\u00e1s o menos sistem\u00e1tica. Proporciona una visi\u00f3n completa de toda la revelaci\u00f3n B\u00edblica.
\n <\/p>\n\n
\nDe todo lo dicho pueden extraerse unos principios orientadores sobre c\u00f3mo educar para la lectio<\/em> divina<\/em> a los j\u00f3venes.
\n
\nEn clave de formaci\u00f3n permanente
\nLa lectio<\/em> divina<\/em> no se circunscribe a un m\u00e9todo para afrontar la meditaci\u00f3n de un texto b\u00edblico, ni tampoco a una manera concreta de hacer la meditaci\u00f3n en com\u00fan cada ma\u00f1ana. La lectio<\/em> divina<\/em> constituye toda una espiritualidad centrada en la palabra de Dios como dinamismo de crecimiento en la fe y de encuentro con Dios: consiste en tomarla Escritura como fundamento de la vida cristiana, ya que parte de la convicci\u00f3n que la Escritura educa al cristiano en su camino hacia Cristo. Abarca toda la vida del cristiano, y sobre todo del religioso, desde el principio hasta el fin; y abarca toda la jornada, de la ma\u00f1ana a la noche.
\nDesde esta perspectiva la lectio<\/em> divina<\/em> es un dinamismo de formaci\u00f3n permanente de la espiritualidad del cristiano.
\n
\nEs un todo con momentos diferenciados
\nTodo aquello que permite el acceso a la palabra de Dios y a su personalizaci\u00f3n forma parte de la lectio<\/em> divina<\/em>. As\u00ed tanto la meditaci\u00f3n diaria, como el estudio de la Escritura, como la reflexi\u00f3n personal o en grupo, como la acci\u00f3n pastoral… son aspectos diversos de un \u00fanico dinamismo. Es m\u00e1s, son aspectos diversos y complementarios, as\u00ed cada uno de ellos aporta algo espec\u00edfico al conjunto.
\nEl estudio ayuda a comprender el sentido de la Escritura. La buena voluntad no basta para acercarse correctamente a la Escritura. Debemos saber captar el sentido aut\u00e9ntico del texto, a fin de poder actualizarlo y personalizarlo en la meditaci\u00f3n, en la oraci\u00f3n\u00a0 y en la acci\u00f3n. En los momentos expl\u00edcitos de formaci\u00f3n el estudio de la Escritura aporta los elementos adecuados para saber captar el sentido del texto b\u00edblico. Pero tambi\u00e9n poseemos un material\u00a0 sencillo y b\u00e1sico que debemos saber usar y saber ense\u00f1ar a usar: los medios auxiliares de las Biblias -introducciones, notas, vocabulario- y las publicaciones populares de divulgaci\u00f3n b\u00edblica.
\n
\nLa interpretaci\u00f3n tipol\u00f3gica es preferible a la aleg\u00f3rica
\nLa alegor\u00eda toma cada uno de los detalles o de las im\u00e1genes que aparecen en el texto y la usa para sacar unaense\u00f1anza<\/em>. Es un m\u00e9todo interpretativo muy usado en la catequesis y en las homil\u00edas, ya que resulta f\u00e1cil de aplicar y no exige un particular esfuerzo comprensivo del conjunto del texto. Con todo, es enga\u00f1oso ya que, con facilidad, permite agarrar \u201cel r\u00e1bano por las hojas\u201d, o bien usar el texto para proyectar nuestras preconcepciones: el texto<\/em> de convierte en pre<\/em>-texto <\/em>para nuestras propias ideas.
\nPara saber usar la alegor\u00eda de forma adecuada, sin forzar el texto, se requiere un cierto grado de formaci\u00f3n b\u00edblica, y no siempre nuestros j\u00f3venes, o, incluso, nosotros mismos estamos capacitados para ello. La tipolog\u00eda, en cambio, busca el sentido global del texto y, una vez hallado, pasa a su actualizaci\u00f3n en el hoy<\/em> de las personas y de las comunidades. No se interpretan tanto los detalles, las im\u00e1genes, o las palabras bonitas y las expresiones felices que encontramos en el texto, sino m\u00e1s bien el sentido nuclear <\/em>del texto. Exige el esfuerzo previo de comprender<\/em>correctamente el texto antes de interpretarlo, es decir, exige el estudio antes de la meditatio<\/em>.
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\nEl an\u00e1lisis del texto b\u00edblico resulta imprescindible para captar su sentido
\nLa ex\u00e9gesis, a lo largo de su historia ha desarrollado dos tipos de an\u00e1lisis del texto b\u00edblico: el diacr\u00f3nico \u2014tambi\u00e9n llamado m\u00e9todo hist\u00f3rico-cr\u00edtico<\/em>\u2014 y el sincr\u00f3nico. De este \u00faltimo existen diversos m\u00e9todos: el narrativo, el ret\u00f3rico y el can\u00f3nico son tres de ellos que pueden ser usados sin demasiadas complicaciones en la lectura personal o grupal de la Escritura. El m\u00e9todo narrativo<\/em> estudia los personajes, sus acciones y sus actitudes, y sus transformaciones a lo largo del texto, y est\u00e1 indicado para textos narrativos del AT y del NT. El ret\u00f3rico<\/em> puede ser \u00fatil para textos no narrativos \u2014por ejemplo las cartas paulinas o los textos prof\u00e9ticos\u2014, estudia la composici\u00f3n o estructura literaria de un texto para ver cu\u00e1l es su afirmaci\u00f3n principal y cu\u00e1les las secundarias; estudia tambi\u00e9n las im\u00e1genes usadas, las citas impl\u00edcitas, etc. El can\u00f3nico<\/em> estudia el lugar y la funci\u00f3n del texto en su contexto: ya sea dentro del libro b\u00edblico, o bien dentro de la secci\u00f3n en la que se halla, o incluso en el conjunto del canon b\u00edblico. Los tres m\u00e9todos, sueltos o combinados, ayudan a captar mejor el sentido del texto.
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\nIncluir los elementos esenciales: lectura- meditaci\u00f3n- oraci\u00f3n\u2013vida
\nToda pr\u00e1ctica de la lectio<\/em> divina<\/em> \u2013ya sea entendida como dinamismo espiritual, o bien como el m\u00e9todo concreto de meditaci\u00f3n de un texto b\u00edblico\u2013 debe incluir los elementos esenciales de lectura, meditaci\u00f3n, oraci\u00f3n y vida; en caso contrario no podemos considerarlo propiamente como lectio<\/em> divina<\/em>.
\nLa lectura <\/em>de la Escritura debe ser sistem\u00e1tica y tender a ser completa. La lectura pausada de grandes secciones b\u00edblicas forma el marco de referencia de la lectio<\/em> de una per\u00edcopa concreta. En este \u00faltimo caso, la lectura pausada, atenta y repetida del texto de la per\u00edcopa debe preceder a todo intento de meditaci\u00f3n de la misma. La lectura tiende a una visi\u00f3n completa de la Escritura. Es respetuosa con el texto y va acompa\u00f1ada del estudio del mismo. La lectura del texto b\u00edblico incluye tambi\u00e9n la lectura de alg\u00fan subsidio que nos ayude a encuadrar el sentido del texto.
\nLa meditaci\u00f3n <\/em>del texto consiste en la personalizaci\u00f3n y actualizaci\u00f3n del sentido del texto b\u00edblico. La meditaci\u00f3n incluye alg\u00fan tipo de an\u00e1lisis sincr\u00f3nico del texto \u2014narrativo, ret\u00f3rico o can\u00f3nico, como ya hemos indicado\u2014. Pero la meditaci\u00f3n no es s\u00f3lo un an\u00e1lisis reflexivo y especulativo del texto, sino, y sobretodo, una apropiaci\u00f3n personal del mismo, hecha desde la simpat\u00eda, el afecto, la cordialidad, s\u00f3lo as\u00ed se llega a la aut\u00e9ntica personalizaci\u00f3n del texto. Incluye tambi\u00e9n la confrontaci\u00f3n<\/em> entre la situaci\u00f3n presentada en el texto, es decir el sentido del mismo, y mi situaci\u00f3n personal o la de mi comunidad.
\nLa oraci\u00f3n <\/em>marca sustancialmente el tipo de lectura b\u00edblica hecha en la lectio<\/em> divina<\/em>, hasta el punto que \u00e9sta tambi\u00e9n ha sido definida como \u201clectura orante de la Escritura\u201d. La oraci\u00f3n es un momento privilegiado de la personalizaci\u00f3n del texto ante Dios, en di\u00e1logo con \u00e9l. Se puede integrar de varias maneras: o bien dirigiendo a Dios nuestra oraci\u00f3n \u2014de alabanza, acci\u00f3n de gracias, perd\u00f3n, o s\u00faplica\u2014 una vez acabada la meditaci\u00f3n del texto; o bien realizando la misma meditaci\u00f3n en forma de di\u00e1logo con Dios. Es igualmente importante que ya antes de la lectura el coraz\u00f3n de prepare con la oraci\u00f3n a acoger la palabra de Dios en la propia vida, de esta manera la oraci\u00f3n encuadra el conjunto de la lectio<\/em>.
\nLa vida <\/em>a la que conduce el texto es la transformaci\u00f3n del coraz\u00f3n. Aunque en ocasiones se puede extraer un compromiso de acci\u00f3n concreta a partir de una per\u00edcopa b\u00edblica le\u00edda, meditada y rezada, no es necesario que siempre ocurra as\u00ed. Lo importante es contemplar la acci\u00f3n de Dios en la historia de salvaci\u00f3n, captar sus dinamismos y hacerlos propios, a fin de convertirse a ellos: que la Escritura eche ra\u00edces en el coraz\u00f3n y genere convicciones y mueva a tomar decisiones que lleven la Palabra a la vida de cada d\u00eda.
\nEl proceso personal realizado mediante el m\u00e9todo de la lectio<\/em> divina<\/em> puede desembocar, si as\u00ed se desea, en un compartir mutuo. El comunicar y compartir en grupo el fruto personal de la lectio<\/em> divina<\/em> (llamado tradicionalmentecollatio<\/em>) puede realizarse a trav\u00e9s de medios muy variados: comunicaci\u00f3n grupal, di\u00e1logo espiritual, testimonio ante otros, homil\u00edas compartidas… Hay que tener siempre en cuenta que este compartir debe realizarse en clima de escucha mutua y de respeto. No se trata de dialogar o discutir con otros, sino de exteriorizar lo que el Esp\u00edritu ha obrado en m\u00ed, a fin de enriquecer con mi propio testimonio la lectio<\/em> de los dem\u00e1s, y enriquecerme yo con la de ellos.
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\nUsando diversos m\u00e9todos e itinerarios, de forma complementaria
\nNing\u00fan m\u00e9todo de lectio<\/em> divina<\/em> agota todas las posibilidades, que conlleva en s\u00ed mismo el dinamismo cristiano de la lectio<\/em> divina<\/em>. Si bien las circunstancias determinan qu\u00e9 m\u00e9todo preferir en cada ocasi\u00f3n, a lo largo de la vida la pr\u00e1ctica de los diversos m\u00e9todos de forma complementaria resulta enriquecedora. Igualmente, los diversos itinerarios de lectura de la Biblia se pueden combinar entre s\u00ed, seg\u00fan las circunstancias o las etapas vitales, a fin de proporcionar un mayor enriquecimiento.
\nComenz\u00e1bamos se\u00f1alando la pobreza en el uso de la Escritura, a pesar de su ampl\u00edsima presencia, entre los cristianos de hoy, y se\u00f1al\u00e1bamos que la lectio<\/em> divina<\/em> puede venir a subsanar dicha pobreza, aportando un conocimiento y una apropiaci\u00f3n personal de la Escritura que dif\u00edcilmente de otra manera podemos adquirir. Hemos visto a lo largo de estas p\u00e1ginas que la lectio<\/em> constituye un dinamismo de formaci\u00f3n cristiana que arranca ya del Nuevo Testamento y que alcanz\u00f3 su m\u00e1ximo esplendor en la \u00e9poca patr\u00edstica y en los primeros siglos de la \u00e9poca medieval. La recuperaci\u00f3n actual del uso de la lectio<\/em> divina<\/em> promete revitalizar la vida de los cristianos y de la Iglesia.
\nLa presentaci\u00f3n de siete m\u00e9todos actuales de realizar la lectio<\/em> y de cinco itinerarios de recorrido del texto b\u00edblico ha pretendido ofrecernos un abanico de posibilidades distintas en vistas a su aplicaci\u00f3n concreta y a su adaptaci\u00f3n al grupo de j\u00f3venes del que somos animadores. Y no s\u00f3lo eso, sino que tambi\u00e9n nosotros podemos beneficiarnos de su uso a fin de que la lectio<\/em> divina<\/em> se convierta tambi\u00e9n en el dinamismo fundamental de crecimiento en nuestra espiritualidad evang\u00e9lica.
\nFinalmente hemos aportados una pautas y criterios a la hora de formar a los j\u00f3venes para la lectio<\/em> divina<\/em>, criterios que podemos aplicar igualmente a nuestras personas y a nuestras comunidades. As\u00ed se cumplir\u00e1 en nosotros las palabras del profeta Jerem\u00edas: \u201cCuando encontraba palabras tuyas laas devoraba; tus palabras eran mi gozo y la alegr\u00eda de mi coraz\u00f3n\u201d (15,16a).
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\nBibliograf\u00eda
\nPontificia Comisi\u00f3n B\u00edblica, La interpretaci\u00f3n de <\/em>la Biblia<\/em> en <\/em>la Iglesia<\/em>. Documentos 5. Madrid: PPC 1994 [especialmente IV C 2].
\nSantiago Guijarro (dir), La Biblia<\/em> en grupo. Doce itinerarios para una lectura creyente<\/em>. Palabra y Vida 2. Estella: Verbo Divino 2<\/sup>1997.
\nCarmelo Granado, \u201cGuigo II, Carta sobre la vida contemplativa (Escala de los Monjes). Introducci\u00f3n, traducci\u00f3n y notas\u201d, Proyecci\u00f3n<\/em> 46 (1999) 291-304.
\nMario Masini, La lectio divina. Teolog\u00eda, espiritualidad y m\u00e9todo<\/em>. Estudios y Ensayos 18. Madrid: BAC 2001.
\nArturo Somoza Ramos (et alii<\/em>), Qu\u00e9 es… la lectio divina<\/em>. Herramientas 7. Madrid: Ed. Paulinas 5<\/sup>2002.
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\n[1]<\/a> Prior de la Cartuja desde 1174-1180. Muri\u00f3 en 1188 dedicado a la contemplaci\u00f3n. Cf. A. WILLMART, Auteurs spirituels et textes d\u00e9vots du Moyen Age latin. \u00c9tudes d\u2019histoire litt\u00e9raire<\/em> (Paris: \u00c9tudes Augustiniennes 1971, r\u00e9impression de l\u2019\u00e9dition parue en 1932) 218-221.
\n[2]<\/a> Cf. Santiago Guijarro (dir.), La Biblia<\/em> en grupo. Doce itinerarios para una lectura creyente<\/em> (Estella: Verbo Divino 2<\/sup>1997).
\n[3]<\/a> Entendemos la lectura \u201cprivada\u201d\u00a0 como complementaria de la \u201ccomunitaria\u201d, sea \u00e9sta \u201clit\u00fargica\u201d o \u201cgrupal\u201d. La lectura \u201cindividual\u201d la entendemos diametralmente opuesta a la \u201ceclesial\u201d. El car\u00e1cter \u201cpersonal\u201d debe afectar a todo tipo de lectura, privada o comunitaria, en cuanto la \u201cpersona\u201d se siente implicada en lo que lee o le es proclamado.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"