{"id":8377,"date":"2005-10-01T00:00:49","date_gmt":"2005-09-30T22:00:49","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/?p=8377"},"modified":"2005-10-01T00:00:49","modified_gmt":"2005-09-30T22:00:49","slug":"el-ahora-en-el-evangelio-de-lucas","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/el-ahora-en-el-evangelio-de-lucas\/","title":{"rendered":"El \u201cahora\u201d en el evangelio de Lucas"},"content":{"rendered":"

Hilario Ib\u00e1\u00f1ez Mart\u00ednez<\/p>\n

Fernando Rivas Rebaque<\/p>\n

\n

\u201cDe vez en cuando es bueno<\/p>\n

ser consciente<\/p>\n

de que hoy<\/p>\n

de que ahora<\/p>\n

estamos fabricando<\/p>\n

las nostalgias<\/p>\n

que descongelar\u00e1n<\/p>\n

alg\u00fan futuro\u201d<\/p>\n

M. Benedetti, Inventario<\/em>.<\/p>\n

 
\nHilario Ib\u00e1\u00f1ez<\/strong>\u00a0 es Vicario Parroquial en \u201cNuestra Se\u00f1ora de la Salud\u201d (Legan\u00e9s) y Profesor de \u00c9tica y Religi\u00f3n. Fernando Rivas<\/strong> es profesor de Historia Antigua y Patrolog\u00eda en la Universidad de Comillas.
\n <\/p>\n

S\u00cdNTESIS DEL ARTICULO<\/strong><\/h5>\n

En el evangelio de Lucas aparece abundantemente la palabra \u201cahora\u201d, desde el inicio hasta el final. Este art\u00edculo se\u00f1ala su importancia e intenta descubrir lo que el evangelista quiso decir. Desde este an\u00e1lisis, necesariamente breve y sint\u00e9tico, se abre la reflexi\u00f3n a la importancia de este ahora para nuestra realidad personal y comunitaria, describiendo primero la concepci\u00f3n del tiempo en nuestra sociedad y en la cultura actual, y perfilando despu\u00e9s sus consecuencias.
\n 
\nSi leemos el evangelio de Lucas buscando la palabra \u201cahora\u201d nos encontramos con muchas y agradables sorpresas: en primer lugar, \u201cahora\u201d es una palabra que aparece muy abundantemente en Lucas -catorce veces, frente a cuatro en Mateo y Marcos, aunque Juan lo supera, con 28 citas-, se\u00f1al de que para Lucas esta palabra tiene una importancia especial, y no es un mero a\u00f1adido. Adem\u00e1s, y en segundo lugar, esta palabra va \u201cpuntuando\u201d el evangelio, desde el inicio hasta el final, es decir, va marcando aquellos momentos que tienen una especial densidad o influencia en la vida de Jes\u00fas. Por eso vamos a entrar en el evangelio de Lucas y descubrir qu\u00e9 es lo que el evangelista quiso decir con esta palabra. Pero no nos vamos a quedar aqu\u00ed, sino que, a continuaci\u00f3n, veremos qu\u00e9 influjo e importancia tiene este ahora para nuestra realidad personal y comunitaria.
\n <\/p>\n

    \n
  1. El hoy de Lucas<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

     
    \n1.1. Del ahora de Mar\u00eda al de los seguidores de Jes\u00fas<\/strong>
    \nEl primer ahora lo encontramos al inicio del evangelio, justo en el cap\u00edtulo primero, donde Mar\u00eda alaba al Se\u00f1or porque \u201cdesde ahora<\/strong> me llamar\u00e1n dichosa todas las generaciones\u201d (Lc 1,48). M\u00e1s adelante, el anciano Sime\u00f3n, en la presentaci\u00f3n de Jes\u00fas en el templo, bendice a Dios por haberle permitido ver el al Ni\u00f1o, y exclama: \u201cAhora,<\/strong> Se\u00f1or, seg\u00fan tu promesa, puedes dejar que tu siervo muera en paz\u201d (Lc 2,29).
    \n 
    \nEn ambos casos el \u201cahora\u201d responde a la tradici\u00f3n m\u00e1s genuina del pueblo de Israel -representado en este caso por una mujer desconocida y un anciano a punto de acabar sus d\u00edas-. Una tradici\u00f3n que ense\u00f1a a poner la confianza en el plan que Dios tiene sobre nuestras vidas y nuestra historia; un plan que se mantiene, a pesar de las dificultades, gracias a estas personas que lo esperan y saben descubrir y contemplar su cumplimiento \u201caqu\u00ed y ahora\u201d en los peque\u00f1os gestos, pues es de esta manera como los seres humanos somos capaces de mantener la aut\u00e9ntica esperanza.
    \n 
    \nSin embargo, el ahora no s\u00f3lo est\u00e1 presente en los comienzos del evangelio de Lucas, sino que tambi\u00e9n tiene un importante papel en la misi\u00f3n, pues afecta tanto a los primeros seguidores -Pedro escucha de Jes\u00fas: \u201cNo temas, desde ahora<\/strong> ser\u00e1s pescador de hombres\u201d (Lc 5,10)-, como a los seguidores que vendr\u00e1n despu\u00e9s: \u201cPorque de ahora<\/strong> en adelante estar\u00e1n divididos los cinco miembros de una familia, tres contra dos, y dos contra tres\u201d (Lc 12,52), sin duda un serio aviso sobre lo que puede llevar consigo la prioridad del Reino.
    \n 
    \nEstamos ante un ahora que viene a resaltar aqu\u00ed la novedad que supone Jes\u00fas, una novedad que no siempre ser\u00e1 agradable ni bien recibida, porque cuestiona muchas de nuestras inercias personales y sociales. Pero un ahora que tiene toda la atracci\u00f3n de lo aut\u00e9nticamente novedoso, pues es algo nunca visto ni o\u00eddo con anterioridad. Un ahora delante del cual nos jugamos lo m\u00e1s importante; de aqu\u00ed la gravedad de su rechazo, porque no somos nosotros los que le hacemos el favor de Dios de creer en \u00c9l y en su Plan sobre nosotros\/as, sino que es el propio Dios, por medio de Jes\u00fas, el que nos ofrece la oportunidad de ser verdaderamente felices y vivir como personas en plenitud.
    \n 
    \nPero adem\u00e1s, el ahora de Lucas no es algo inevitable, sino que tiene, y nunca mejor dicho, los d\u00edas contados, pues en realidad, y a pesar de las apariencias, este ahora pertenece en gran medida al pasado. As\u00ed se explica la genial inclusi\u00f3n del \u201cahora\u201d en las segundas y terceras bienaventuranzas y malaventuranzas (s\u00f3lo aparece en Lucas): \u201cDichosos los que ahora<\/strong> ten\u00e9is hambre, porque Dios os saciar\u00e1. Dichosos los que ahora<\/strong> llor\u00e1is, porque reir\u00e9is\u201d (Lc 6,21). \u201c\u00a1Ay de los que ahora<\/strong> est\u00e1is satisfechos, porque tendr\u00e9is hambre! \u00a1Ay de los que ahora<\/strong> re\u00eds, porque gemir\u00e9is y llorar\u00e9is!\u201d (Lc 6,25).
    \n 
    \nAl poner \u201cahora\u201d en este contexto Lucas resalta que el hambre y los llantos, por un lado, o la satisfacci\u00f3n y la risa, por otro, son algo provisional. Que no podemos aferrarnos a algo tan ef\u00edmero ni para resignarnos ni para consolarlos. Que el ser humano, gracias a Dios, est\u00e1 llamado a superar estas situaciones y que no podemos poner en ellas nuestro coraz\u00f3n y nuestra alma. El evangelio viene as\u00ed arelativizar valores profundamente arraigados en cada uno\/a de nosotros\/as, haci\u00e9ndonos conscientes de que su fuerza es s\u00f3lo ahora, en el presente, y que queda todav\u00eda un largo futuro al que el ahora no puede atar ni dirigir. En el fondo es una llamada a la sensatez contra el ef\u00edmero imperio del presente, algo habitual en toda la tradici\u00f3n sapiencial de la Biblia.
    \n 
    \nY es en esta contraposici\u00f3n entre el (fr\u00e1gil) ahora y el (incierto) futuro donde se inserta una de las par\u00e1bolas m\u00e1s llamativas de Lucas, la del rico epul\u00f3n y el pobre L\u00e1zaro, donde leemos: \u201cAbrah\u00e1n respondi\u00f3: \u2018Recuerda, hijo, que ya recibiste tus bienes durante la vida, y L\u00e1zaro, en cambio, males.Ahora<\/strong> \u00e9l est\u00e1 aqu\u00ed consolado, mientras t\u00fa est\u00e1s atormentado\u201d (Lc 16,25).
    \n 
    \nAsistimos a una de las t\u00edpicas inversiones a las que tan dado es Lucas, donde el ahora se sit\u00faa como encrucijada y punto de inflexi\u00f3n entre un pasado (caduco), donde el rico viv\u00eda espl\u00e9ndidamente y el pobre se mor\u00eda de hambre, y un futuro (cercano) donde el pobre vivir\u00e1 en el seno de Abrah\u00e1n, es decir, junto al Padre en el cielo, y el rico en un abismo que no puede ser atravesado por nadie. Y esto no es s\u00f3lo una llamada de atenci\u00f3n, sino algo m\u00e1s profundo que entra dentro del proyecto de Dios, y que ya hemos podido descubrir en las bienaventuranzas: no hay que fiarse del ahora, con todos sus luces y esplendores, sino que debemos contemplar el presente desde la perspectiva que nos ofrece el futuro.
    \n 
    \nEs desde aqu\u00ed desde donde se entienden mejor las otras dos referencias al ahora, que se encuentran en la escena de la pasi\u00f3n: \u201cJes\u00fas a\u00f1adi\u00f3: \u2018Desde ahora<\/strong>, el que tenga bolsa que la tome, y lo mismo el que tenga alforja; y el que no tenga espada, que venda el manto y se la compre\u2019\u201d (Lc 23,26, justo despu\u00e9s de la \u00faltima cena). Y lo mismo cuando Jes\u00fas, ante el juicio del Sanedr\u00edn, dice: \u201cPero desdeahora<\/strong> el Hijo del hombre estar\u00e1 sentado a la derecha de Dios todopoderoso\u201d (Lc 22,69).
    \nEn ambos casos Jes\u00fas nos muestra un \u201cahora\u201d que no espera, ante el que s\u00f3lo cabe tomar la iniciativa si queremos llegar \u201ca(la)hora\u201d y no quedarnos rezagados. De esta manera descubrimos que hay cosas que tienen su momento, donde no caben repeticiones. As\u00ed el evangelio nos anima a ser decididos, a no andar deshojando continuamente la margarita, porque s\u00f3lo dudamos ante lo que no nos convence, y en cambio somos capaces de mover Roma con Santiago cuando queremos conseguir algo de verdad. En el fondo, viene a recordarnos la importancia del presente para la vida cristiana, que nuestro tiempo no es reversible.
    \n 
    \n1.2. Los ocultos \u201cahoras\u201d<\/strong>
    \nCon estos \u201cahoras\u201d se\u00f1alados pensar\u00edamos haber visto todos los que hay en el evangelio de Lucas, al menos seg\u00fan algunas traducciones castellanas. Y, sin embargo, hay todav\u00eda tres \u201cahoras\u201d ocultos, silenciados a veces por los traductores, porque los consideran \u201cin-significantes\u201d. El primer ahora oculto se encuentra en una cr\u00edtica de Jes\u00fas a los fariseos y maestros de la ley, donde leemos: \u201cPero el Se\u00f1or les dijo: \u2018[Ahora<\/strong>] vosotros, los fariseos, limpi\u00e1is por fuera la copa y el plato, mientras que vuestro interior est\u00e1 lleno de rapi\u00f1a y de maldad\u201d (Lc 11,39).
    \n 
    \nParecer\u00eda que est\u00e9 ahora se podr\u00eda quitar sin que cambiar\u00e1 nada el sentido de la frase. Y sin embargo, es un \u201cahora\u201d que hace real y concreto este comportamiento fariseo, pues es en el \u201cahora\u201d donde hacemos realidad nuestra vida, y no en un presente intemporal, situado entre un pasado que nospre-determina y un futuro que creemos planificar. Es adem\u00e1s un ahora que nos obliga a pensar que lo \u201cvirtual\u201d no es algo puramente imaginario, sino que comienza cuando descubrimos las posibilidades que se esconden en el \u201caqu\u00ed y ahora\u201d. Hay, por tanto, una llamada a la seriedad del presente, que no admite ni componendas ni falsas excusas, con las que habitualmente pretendemos coquetear con nuestro presente, puesto que en el ahora nos jugamos el futuro, la vida.
    \n 
    \nEl segundo ahora oculto est\u00e1 en la entrada de Jes\u00fas en Jerusal\u00e9n, donde leemos: \u201cCuando se fue acercando, al ver la ciudad, llor\u00f3 por ella y dijo: \u2018\u00a1Si en este d\u00eda comprendieras t\u00fa tambi\u00e9n los caminos de paz! Pero [ahora<\/strong>] tus ojos siguen cerrados\u201d (Lc 19,41-42). Frente al destino privilegiado de Jerusal\u00e9n en los tiempos mesi\u00e1nicos, tema tan querido por el segundo Isa\u00edas, la actual \u201cceguera\u201d de la ciudad santa es la que explica el llanto de Jes\u00fas.
    \n 
    \nLucas vuelve a colocar de nuevo un ahora para contraponer dos elementos. Pero, en este caso, no es un pasado a un futuro, como encontramos en las bienaventuranzas o la par\u00e1bola del rico y L\u00e1zaro, sino algo m\u00e1s peculiar: un futuro maravilloso, previsto en el plan de Dios \u2212donde Jerusal\u00e9n se convertir\u00eda en una ciudad acogedora para todas las naciones del mundo\u2212, frente al futuro que la propia ciudad ha planificado para s\u00ed misma: convertirse en el lugar de la muerte del Hijo de Dios. El ahora marca aqu\u00ed la encrucijada entre estos dos futuros.
    \n 
    \nEl tercer y \u00faltimo ahora oculto podemos descubrirlo en la \u00faltima cena, all\u00ed dice Jes\u00fas: \u201cTomad esto y repartidlo entre vosotros, [pues] os digo que ya no beber\u00e9 [desde ahora<\/strong>] del fruto de la vid hasta que llegue el reino de Dios\u201d (Lc 22,18). En esta situaci\u00f3n, el ahora tiene para Jes\u00fas toda la densidad de que es capaz de acoger el presente: no es un tiempo cualquiera el que est\u00e1n viviendo en ese momento, sino que est\u00e1 cargado con una palabra\/juramento que se compromete, que pone su vida como prenda y aval.
    \n 
    \nEste ahora es el ahora de los compromisos, no s\u00f3lo como el que dice \u201cdesde ahora<\/strong> dejo de fumar\u201d, sino m\u00e1s bien: \u201cDesde ahora\/hoy<\/strong> me comprometo a ser tu mujer\/marido\u201d. En este compromiso la palabra y la persona van juntas. De aqu\u00ed la gravedad de cualquier cambio o infidelidad, de cualquier actitud contraria al juramento, pues no s\u00f3lo desacreditamos nuestra palabra, que pierde su valor, sino que adem\u00e1s quitamos importancia a nuestra propia vida.
    \n 
    \n1.3. Recapitulaci\u00f3n y s\u00edntesis<\/strong>
    \n\u00a0<\/strong>
    \nEn s\u00edntesis, el ahora en el evangelio de Lucas<\/strong> nos recuerda que:<\/p>\n

      \n
    • Todos los ahoras, es decir, todos los presentes, si quieren ser aut\u00e9nticos y coherentes, deben estar unidos a un pasado, del que forman parte (aqu\u00ed se encuentra el aut\u00e9ntico sentido de la tradici\u00f3n) y a un futuro, al que est\u00e1n llamados a anticipar, para que as\u00ed se vaya cumpliendo el plan\/proyecto de Dios sobre nuestras vidas. Es en el ahora donde estamos llamados a colaborar en este plan.<\/li>\n
    • Son las personas las que mantienen, mediante su esperanza, en tensi\u00f3n el presente, casi alarg\u00e1ndolo. El tiempo, para que no se convierta en un simple \u201cpasar\u201d las horas\/d\u00edas\/a\u00f1os, debe estar cargado de sentido. Y es desde aqu\u00ed desde donde merece la pena vivir la vida, pues de lo contrario, la rutina o el des\u00e1nimo nos amenazan. El problema no est\u00e1, pues, en llenar la vida de muchas cosas\/gente\/actos, sino en darle calidad y densidad a nuestros ahoras, porque as\u00ed ensanchamos la vida.<\/li>\n
    • El presente es el tiempo del que disponemos: no existen ni repeticiones ni marchas atr\u00e1s, ni adelantos. Esto queda bien para la tele, pero no para nuestra vida ni nuestra historia. Saber adaptarnos a este ritmo exige una disciplina, un estar atentos a las oportunidades que nos van llegando, un saber mirar las entra\u00f1as de nuestros \u201cahoras\u201d, pues es aqu\u00ed donde encontraremos todo lo que necesitamos: ni a\u00f1oranzas de pasados imposibles ni sue\u00f1os de futuros m\u00e1s inciertos e imposibles todav\u00eda. Lo \u00fanico de que disponemos es del presente, y es en el ahora donde tomamos las decisiones de esta encrucijada en la que estamos situados.<\/li>\n
    • El ahora, adem\u00e1s, relativiza tanto nuestras conquistas como nuestros fracasos: ni podemos vivir indefinidamente de las rentas ni dejarnos agobiar por lo que hemos dejado de hacer o hemos hecho mal. En el ahora se nos ofrece la oportunidad de cambiar, de convertirnos. Nuestra vida est\u00e1 puesta por Dios en nuestras propias manos si somos capaces de descubrir las posibilidades que ofrece el presente.<\/li>\n
    • Por \u00faltimo, en el presente (y en el aqu\u00ed) es donde nos encontramos con nosotros mismos, con los dem\u00e1s y con Dios. Y este encuentro se convierte en generador de nuevas realidades, a partir de las cuales podemos realmente hablar de un antes y un despu\u00e9s. Toda aut\u00e9ntica experiencia de encuentro, en este sentido, nos marca; nuestra vida no vuelve a ser ya la misma, porque es desde aqu\u00ed desde donde balbuceamos lo que queremos ser y marcamos nuestras metas. Sin el ahora no hay encuentro posible, pero el ahora, sin encuentro, se convierte en un \u201cayer que pas\u00f3\u201d.<\/li>\n<\/ul>\n

       <\/p>\n

        \n
      1. EL AHORA DE HOY<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

         
        \nDespu\u00e9s de ver en el apartado anterior el ahora, el tiempo presente vivido en el Evangelio de Lucas, en esta parte nos acercaremos a la manera de percibir el ahora en el momento actual, para posteriormente plantear algunas propuestas que permitan situarnos tanto a nivel individual como social en el ahora y el aqu\u00ed.
        \n 
        \nLo primero a destacar es que al hablar del ahora estamos hablando de esa categor\u00eda existencial que es ni m\u00e1s ni menos el tiempo, es decir, el momento en que nos situamos, el momento en el que realizamos nuestra existencia. Al fin y al cabo nos percibimos seres temporales que pueden estar o no; existir o no, sin que afecte poco m\u00e1s all\u00e1 de uno\/a mismo\/a. El ser humano se percibe como ser hist\u00f3rico, que es capaz de narrar la vida con un antes y un despu\u00e9s, y la narra en el presente. No obstante, la percepci\u00f3n del tiempo no es la misma para todos los seres humanos, ni para las distintas etapas de la historia, ni para las distintas culturas. Se percibe el tiempo de un modo peculiar en cada lugar, de la misma manera que se percibe la muerte o la vejez, o la juventud.
        \n 
        \nHablamos, claro est\u00e1, no del tiempo del reloj, en cuanto medida objetiva, como cuando decimos \u201che quedado a las ocho\u201d. Tampoco hablamos del calendario, que nos permite cumplir a\u00f1os y festejar las m\u00faltiples conmemoraciones. Hablamos del tiempo que, vivido y experimentado, nos sit\u00faa en un aqu\u00ed, con los otros, un tiempo que nos produce desaz\u00f3n, angustia, optimismo, esperanza. Es decir un momento en donde nos jugamos la existencia. Esta concepci\u00f3n del tiempo es de tal importancia que nos sit\u00faa ante un ser humano\u00a0 protagonista de la historia o hundido por la propia realidad. Lo mismo ocurre con las sociedades: puede ser una sociedad din\u00e1mica, comprometida, buscando lo mejor para el futuro, solidarias; o ser sociedades acomodadas, orientadas a disfrutar tanto del momento presente que se olviden de que est\u00e1n en la historia.
        \n 
        \nConjugar bien los tiempos (pasado, presente, futuro) se impone como una necesidad imperiosa, porque si no, tanto el ser humano como las sociedades pierden dinamismo, perspectiva, pasi\u00f3n por mejorar. Y perder\u00e1n algo sin lo cual no se puede disfrutar plenamente de la existencia: descubrir en el tiempo presente las huellas del pasado, pero sobre todo descubrir en el presente los indicios del futuro, aquellos rasgos o apuntes que hacen posible descubrir las potencialidades de mejora, de cambio e incluso de b\u00fasqueda de felicidad.
        \n 
        \n2.1. Concepci\u00f3n del tiempo en nuestra sociedad<\/strong>
        \n 
        \nNo es f\u00e1cil poner de manifiesto, cu\u00e1l es la percepci\u00f3n del tiempo en una sociedad o cultura determinada porque, al fin y al cabo, no deja de ser una construcci\u00f3n social, y como tal, influida por m\u00faltiples factores. A\u00fan as\u00ed se puede afirmar que el tiempo propio de la sociedad capitalista actual es el presente. El presente es el tiempo caracter\u00edstico del mercado. Vamos a verlo un poco m\u00e1s detenidamente.
        \n 
        \nLos elementos propios que configuran la sociedad actual se concentran en lo que se ha llamado la globalizaci\u00f3n, que es la nueva etapa del capitalismo y que viene a ser no s\u00f3lo una manera de organizaci\u00f3n econ\u00f3mica, tambi\u00e9n lleva consigo la construcci\u00f3n de identidades, estilos de vida, maneras de pensar a nivel mundial. A lo largo y ancho del mundo se repiten los mismos mensajes, los libros y las teor\u00edas de los personajes influyentes se repiten constantemente, hasta el punto de una uniformizaci\u00f3n del pensamiento, de la manera de vestir, de las pel\u00edculas que se ven, de las marcas que se consumen. \u00bfQui\u00e9n no ha o\u00eddo proclamar, tanto aqu\u00ed como en las ant\u00edpodas, el fin de la historia? \u00bfQui\u00e9n no ha o\u00eddo los mismos mensajes de Coca Cola o Nike,\u00a0 invitando a hacerlo ahora mismo y que la felicidad plena, y por tanto conseguida, est\u00e1 en destapar una botella y beberse el l\u00edquido que contiene?
        \n 
        \nEl tiempo presente, como tiempo donde se juega toda la existencia, responde muy bien a los intereses de la ideolog\u00eda y pr\u00e1ctica del neoliberalismo, que evidentemente huye de cualquier proyecto hist\u00f3rico, es la presencia constante y sonante (sobre todo sonante). Para qu\u00e9 cambiar si hemos llegado a poder satisfacer los deseos m\u00e1s escondidos y complicados. Quien no es feliz es porque le falta informaci\u00f3n o no tiene recursos para salir adelante; no aprovecha las oportunidades que le ofrece el mercado.
        \n 
        \nEn el presente se actualiza absolutamente todo, hasta, y esto es lo m\u00e1s grave, el deseo de felicidad: se identifica el deseo con la realidad y, de ese modo, se elimina de la secuencia temporal el futuro. Todo est\u00e1 al alcance de la mano. Se puede disfrutar ahora. Veamos si no, el producto estrella, el invento extraordinario del capitalismo que es el cr\u00e9dito, que consiste en poder disfrutar de los bienes en el presente sin poseerlos, gracias a disponer del dinero suficiente para comprarlo (que es el summum de la felicidad). Actualmente Espa\u00f1a es una sociedad endeudada m\u00e1s all\u00e1 de sus posibilidades (la deuda representa el 67% del PIB, seg\u00fan datos del Banco de Espa\u00f1a), porque el deseo es ilimitado y el dinero se pretende que tambi\u00e9n lo sea. No es por casualidad que la figura m\u00e1s emblem\u00e1tica del momento presente sea la hipoteca, que es el mecanismo perfecto para arruinar el futuro disfrutando un bien en el presente.
        \n 
        \nOtro tanto pasa con el mito de lo nuevo. En nuestra sociedad existe el criterio de que todo lo bueno es lo m\u00e1s novedoso; todo lo dem\u00e1s est\u00e1 obsoleto, no sirve, porque parece que se avanza en una l\u00ednea ascendente de progreso y bienestar, considerando que lo que se vende como nuevo representa, sin ning\u00fan criterio, lo bueno, lo saludable y lo que nos hace bien. Por eso los mensajes para hacer calar cualquier producto en el mercado, desde un perfume a una bebida, un coche o un vestido, se presentan como \u201cel producto de ahora\u201d; quien no lo consuma, no lo lleve, o simplemente lo ignore caer\u00e1 en un \u201cpecado\u201d contra el progreso y ser\u00e1 desplazado, ridiculizado y declarado como prescindible. La manifestaci\u00f3n clara est\u00e1 en la moda, que no es otra cosa que consumir algo tan vol\u00e1til y perecedero que la identidad s\u00f3lo dura lo que dura la tendencia.
        \n 
        \nHe empleado el t\u00e9rmino \u201cpecado\u201d como fuera de contexto, porque parecer\u00eda que no estamos en una referencia religiosa; y evidentemente, la categor\u00eda pecado no encaja a la hora de hablar de actitudes meramente sociales. Sin embargo, est\u00e1 empleado con toda intenci\u00f3n; oponerse o no participar en el mercado (consumiendo, que es la acci\u00f3n propia del mercado), tiene mucho componente de transgresi\u00f3n: se transgreden los mandatos que se dan para orientarse en la vida, para saber llevarla bien y nada menos que para alcanzar la felicidad; si no se cumplen se est\u00e1 incurriendo en una desobediencia, porque si no eres feliz es porque no quieres, porque te has separado de lo que se dicta como lo normativo.
        \n 
        \nEn este sentido no se tiene m\u00e1s que acudir al lenguaje de la publicidad. Es un lenguaje hecho de gritos e imperativos (\u201chaz, compra, consigue, aprende\u201d ahora\u2026) Se nos ri\u00f1e si no lo hacemos, se nos llama poco menos que tontos; y para mayor abundamiento se nos muestra que todo el esfuerzo se hace a favor nuestro, sin haberles pedido nada en ning\u00fan sentido: \u201cNosotros pensamos por ti, t\u00fa ven a vernos\u201d o \u201cnuestro \u00e9xito es tu \u00e9xito\u201d, que no se sabe d\u00f3nde han encontrado la ficha personal para saber con tanta seguridad d\u00f3nde pone el \u00e9xito cada uno; o \u201cqueremos ser tu energ\u00eda\u201d, que suena a desaire no aceptarlo, o \u201cbienvenido a\u201d, o \u201cgracias por utilizar nuestros servicios\u201d, o \u201cnos satisface tenerle como cliente especial\u201d, que da a las cosas un car\u00e1cter \u00edntimo y familiar, de dedicaci\u00f3n a la propia persona m\u00e1s all\u00e1 de los amigos, y dan ganas de responder \u201ccuanta amabilidad, no se molesten, soy yo el que estoy orgulloso de considerarme usuario de sus zapatillas, su bebida, su coche, su ropa (\u201csu\u201d de ellos, claro).
        \n 
        \nTodo esto nos da una idea de cu\u00e1l es la concepci\u00f3n del tiempo en nuestra sociedad. Quiz\u00e1s se considere exagerado poner tanta fuerza en la publicidad como generadora de estilo de vida y de mentalidad, pero precisamente es eso, y la inconsciencia de nuestra sociedad para no calibrar bien la importancia que tiene la publicidad, lo que hace que penetre en todos los rincones, a todas horas y con apariencia de inocencia: \u201cTotal, si cada anuncio es poco tiempo, no puede generar mayor problema\u201d; no es como una charla de dos horas, que eso s\u00ed que es configurador del pensamiento; aunque los profesores, los padres y dem\u00e1s educadores sabemos que eso no es verdad, que el gran educador son los Medios de Comunicaci\u00f3n Social, compuestos sobre todo de publicidad (la programaci\u00f3n de las televisiones sit\u00faan primero la publicidad y despu\u00e9s acomodan los programas).
        \n 
        \nY la publicidad es el reflejo, la criatura m\u00e1s propia del mercado, porque ella es la que tiene la misi\u00f3n, no de informar, sino de vender, y para eso utiliza lo que es menester utilizar: la conciencia, que ha de responder a preguntas como qui\u00e9n soy, qu\u00e9 quiero, cu\u00e1les son mis deseos, y tambi\u00e9n qu\u00e9 quiero ser, qu\u00e9 sociedad quiero construir, con qui\u00e9nes; es decir preguntas hechas en un presente, hijo de un pasado y consciente del protagonismo en el futuro. La publicidad es presente descarnado: tira lo viejo por inservible, y confunde el futuro con el presente. Algo extraordinariamente tergiversador del tiempo y la conciencia, que necesariamente es hist\u00f3rica.
        \n 
        \nPero si esto sucede en el lado del consumo, lo mismo sucede en el lado de otra dimensi\u00f3nconfiguradora del ser humano como es el trabajo. O dicho de otra manera: el ritmo de trabajo, la actividad productiva, es creadora del ser humano \u00bfC\u00f3mo est\u00e1 dise\u00f1ada? \u00bfQu\u00e9 trabajador y, por extensi\u00f3n, qu\u00e9 persona requiere? Se define como la persona flexible, a la que se exige que est\u00e9 en perfectas condiciones para responder a las demandas que se le pidan, porque de lo contrario no tendr\u00e1 trabajo, se le considerar\u00e1 que no est\u00e1 preparado, y adem\u00e1s se le culpabilizar\u00e1 por no ser capaz de responder, es decir se atacar\u00e1 directamente nuestra autoestima: \u201cNo soy nadie, no valgo, es normal que me desprecien\u201d.
        \n 
        \nY a la vez para qu\u00e9 luchar, si estoy abocado\/a al fracaso. Por eso el que ha fracasado \u2212con la concepci\u00f3n de fracaso que tiene el mercado\u2212, es inservible, excluido, aparcado de la sociedad. Al mismo tiempo se extiende por doquier la frase, que encierra toda una filosof\u00eda de vida: \u201cEl tiempo es oro\u201d, con lo cual se ha convertido una categor\u00eda abstracta, pero configuradora de la persona en una realidad medibley cuantificable.
        \n 
        \nEl presente se sit\u00faa para muchas personas, sobre todo j\u00f3venes, en la precariedad e inestabilidad vital, de tal manera que se perciben a s\u00ed mismos\/as como\u00a0 inestables y ahist\u00f3ricos. Su itinerario vital es fundamentalmente eventual, a fogonazos. Es muy dif\u00edcil que se perciba la vida como un continuum m\u00e1s o menos estable, en donde quepan proyectos de vida m\u00e1s o menos prolongados en el tiempo. La persona que se requiere en este momento del mercado es la persona que se puede denominar como \u201chomozapping\u201d, que aparte de ser un programa de televisi\u00f3n, es un modo de definir c\u00f3mo la vida se plantea enflashes, en situaciones aisladas, que evidentemente no construyen una identidad. Vivir el tiempo como una realidad laminada y desconectada genera una persona con miedo, inseguridad, y entregada absolutamente al presente, casi al instante, que por querer atraparlo, se nos escapa.
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        \n2.2. Algunas consecuencias y propuestas<\/strong>
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        \nLas consecuencias de esta concepci\u00f3n del tiempo suponen una valoraci\u00f3n del presente con una fuerza que oculta los otros tiempos, pero si el presente no tiene ese componente de sue\u00f1o, de idear m\u00e1s all\u00e1 de lo que aparece, de estar enraizado en un pasado y una tradici\u00f3n a la que pertenecemos, se convierte en desesperanza y se agota en s\u00ed mismo. Por eso:
        \n <\/p>\n

          \n
        • Palabras como \u00e9xito y triunfo quedan aparcadas por triunfar y vencer en el presente, identificando esas dos categor\u00edas, que est\u00e1n relacionadas con la felicidad y lo concreto del momento presente: vestir bien, aparentar, conducir un buen coche. Las se\u00f1as de identidad se sit\u00faan en lo externo, que es lo que se aprecia en el presente. Para apreciar la dimensi\u00f3n de futuro de las acciones hay que recurrir al interior, al mundo de los deseos, a las opciones m\u00e1s profundas. Incluso palabras como autoestima, valoraci\u00f3n personal, capacidad para relacionarse con otros, tambi\u00e9n dependen de lo presente.<\/li>\n
        • Desde este punto de vista no tiene mucho sentido comprometerse en un proyecto m\u00e1s a largo plazo, porque en el presente no reporta satisfacciones, a no ser las propias de estar a gusto con uno\/a mismo\/a, verse potenciado en la propia capacidad, aumentar la amistad, o poner en juego las ganas de superaci\u00f3n. Pero para disfrutarlo como un \u00e9xito hay que incorporarlas a un proyecto, que es el tiempo del futuro. Si se carece de esa perspectiva las acciones se medir\u00e1n por lo que reportan inmediatamente y, a ser posible, de forma cuantificable (\u00bfqu\u00e9 sacas con eso?, \u00bfcu\u00e1nto te pagan?). Se busca la satisfacci\u00f3n inmediata, lo cual plantea verdaderos problemas en muchos campos, al sentirnos incapaces de ver la necesidad de un esfuerzo ahora para conseguir algo valioso despu\u00e9s. Incluso el mismo tiempo libre o diversi\u00f3n, el consumo, tiene estas caracter\u00edsticas. Existen demasiados problemas para diferir la satisfacci\u00f3n del deseo: tiene que ser ahora, no puede ser m\u00e1s tarde.<\/li>\n
        • Afirmar tanto el presente supone que aquellas personas que viven marginadas, excluidas, aquellas que no pueden estar en la rueda constante de producir-consumir son los grandes perdedores, sin ninguna esperanza que les haga plantar cara al momento actual que les resulta da\u00f1ino: \u00bfqui\u00e9n les habla de un despu\u00e9s posible y mejor, que valide los esfuerzos, luchas y compromisos del ahora? No es por casualidad que la primera v\u00edctima de la globalizaci\u00f3n haya sido la utop\u00eda: \u201cHemos llegado al reino de la libertad\u201d, \u201cpara qu\u00e9 queremos sue\u00f1os, si los tenemos al alcance de la mano\u201d. Es ah\u00ed justamente donde hay que empezar a ganar la batalla: afirmar una y otra vez que el presente sin el pasado y el futuro carece de sentido.<\/li>\n
        • Otra consecuencia extraordinariamente importante es considerar que, al igual que padecemos de \u201cadanismo\u201d (con nosotros empez\u00f3 la historia), tambi\u00e9n la historia finaliza con nosotros, y as\u00ed el presente es el tiempo de la expoliaci\u00f3n. Nuestra manera de producir, nuestro progreso (el de una parte) est\u00e1n amenazando la supervivencia de la especie humana, tanto por la miseria que genera, como por la destrucci\u00f3n irreversible del aire, el agua, los bosques, que, mirado desde un futuro, no tiene sentido, es irracional, pero orientado s\u00f3lo por el presente es amenaza constante y cada d\u00eda m\u00e1s cercana.<\/li>\n
        • Una tarea que nos incumbe a todos personal, social y eclesialmente es generar lugares de identidad, de reflexi\u00f3n, dotar a nuestras instituciones, grupos, actividades del componente de la contemplaci\u00f3n y la interioridad, que partan del momento presente, pero que se vea el tiempo futuro que lleva dentro. El tiempo de Dios. Y entrar en la din\u00e1mica salvadora que no puede aceptar un presente injusto y excluyente, cargado de v\u00edctimas, sino que ha de descubrir las potencialidades del presente, que s\u00f3lo pueden ser reconocidas desde el pasado de nuestra historia y desde el futuro y la utop\u00eda, en definitiva, desde el Reino de Dios.<\/li>\n<\/ul>\n

          Fernando Rivas<\/p>\n

          Hilario Ib\u00e1\u00f1ez<\/p>\n

          estudios@misionjoven.org<\/p>\n

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          Hilario Ib\u00e1\u00f1ez Mart\u00ednez Fernando Rivas Rebaque \u201cDe vez en cuando es bueno ser consciente de que hoy de que ahora estamos fabricando las nostalgias que descongelar\u00e1n alg\u00fan futuro\u201d M. Benedetti, Inventario.   Hilario Ib\u00e1\u00f1ez\u00a0 es Vicario Parroquial en \u201cNuestra Se\u00f1ora de la Salud\u201d (Legan\u00e9s) y Profesor de \u00c9tica y Religi\u00f3n. Fernando Rivas es profesor de […]<\/p>\n","protected":false},"author":3,"featured_media":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"","_et_pb_old_content":"","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[1006,1008,1009,94],"tags":[],"class_list":["post-8377","post","type-post","status-publish","format-standard","hentry","category-estudios-345","category-fernando-rivas-rebaque","category-hilario-ibanez-martinez","category-mision-joven-2"],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/8377"}],"collection":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/users\/3"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=8377"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/8377\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=8377"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=8377"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=8377"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}