{"id":8960,"date":"2005-06-01T00:00:57","date_gmt":"2005-05-31T22:00:57","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/?p=8960"},"modified":"2005-06-01T00:00:57","modified_gmt":"2005-05-31T22:00:57","slug":"mas-sombras-que-luces-en-el-mundo-juvenil-espanol","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/mas-sombras-que-luces-en-el-mundo-juvenil-espanol\/","title":{"rendered":"\u00bfMAS SOMBRAS QUE LUCES EN EL MUNDO JUVENIL ESPA\u00d1OL?"},"content":{"rendered":"
Juan Gonz\u00e1lez Anleo Uno de los aspectos m\u00e1s positivos de los j\u00f3venes espa\u00f1oles hoy es la tolerancia. Ellos mismos se proclaman tolerantes, y los adultos sit\u00faan la tolerancia a la cabeza de las cualidades que se inculcan a los ni\u00f1os en casa, coincidiendo en esta preeminencia con los europeos en general, como ha puesto de manifiesto la Encuesta de Valores Europeos de 1999. Los j\u00f3venes espa\u00f1oles son tolerantes y abiertos al \u201cotro\u201d diferente, en cualquiera de sus versiones. S\u00f3lo rechazan a\u00a0\u00a0 los violentos, y quiz\u00e1s por eso mismo, a los extremistas de la ultraderecha y la ultraizquierda, especialmente a los primeros. La singularidad sexual, \u00e9tnica, religiosa o ideol\u00f3gica no les inquieta. Viven y se relacionan con todos sin ning\u00fan problema. Los datos de \u201cJ\u00f3venes espa\u00f1oles 99\u201d certifican este alto nivel de tolerancia: no llegan al 25% los j\u00f3venes a los que \u201cno les gustar\u00eda tener como vecinos\u201d a homosexuales, gays y lesbianas, enfermos del sida, trabajadores inmigrantes extranjeros y gente de otra raza. El rechazo al otro se ceba especialmente en los violentos- ETA, neonazis…-, y drogadictoss. Familia, amigos y trabajo destacan como \u201csant\u00edsima trinidad\u201d de la juventud espa\u00f1ola de nuestros d\u00edas. No es una mala deidad. El ganar dinero y el tiempo libre y de ocio s\u00f3lo aparecen en cuarto y quinto lugar, aunque hay que tener aqu\u00ed muy presente lo que ya descubri\u00f3 Amando de Miguel en una de sus investigaciones sobre la sociedad espa\u00f1ola: cuando se les pregunta sobre los valores o ideales personales, los espa\u00f1oles siempre citan en primer lugar la familia, sin discusi\u00f3n, seguida de la amistad y del trabajo, pero cuando se les pregunta \u201cmalintencionadamente\u201d sobre los valores de los dem\u00e1s, el dinero desplaza a la familia y salta al primer lugar. Chicos y chicas, adolescentes y j\u00f3venes algo m\u00e1s maduros no se diferencian apenas en su reverencia a los tres valores se\u00f1alados, pero el factor ideol\u00f3gico- pol\u00edtica y religi\u00f3n- marca con fuerza contrastes interesantes en el esquema completo de valores juveniles. Los cat\u00f3licos practicantes \u2013 mucho o poco- valoran bastante m\u00e1s la familia, los estudios y una vida moral y digna; los no creyentes siguen considerando a la familia como el aspecto m\u00e1s importante de su vida, pero con bastante menos convencimiento que los chicos y chicas practicantes, y se distancian notablemente de \u00e9stos por su escasa estima a una vida moral y digna, a la pol\u00edtica y a los estudios. Valoran m\u00e1s, en cambio, el ganar dinero y el tiempo libre. Los nuevos movimientos sociales<\/em>, que han desplazado en el imaginario de adultos y j\u00f3venes a los \u201cviejos movimientos sociales\u201d del XIX y XX \u2013 comunismo, socialismo, anarquismo, liberalismo…- gozan de un gran atractivo en el mundo juvenil. Destacan con m\u00e1s de un 80% de aprobaci\u00f3n (datos de 1999) los movimientos de apoyo a los enfermos de sida, los de defensa de derechos humanos, los ecologistas, los pacifistas, los de lucha contra la segregaci\u00f3n racial y los de apoyo y acogida a los emigrantes. En otras palabras, interesan por encima de todo el Hombre, el Marginado y la Naturaleza. La Iglesia y los educadores deber\u00e1n tener muy en cuenta estas prioridades juveniles, y buscar la forma de remontarse desde ellas al mundo trascendente que da sentido pleno a esas prioridades, y, en muchos casos, ofrece en el Evangelio el camino para hacer frente a los problemas reales que la lucha por aquellos tres objetivos plantea sin cesar al joven creyente y a todos los j\u00f3venes de buena fe. El descr\u00e9dito ante los ojos de los j\u00f3venes de la mayor parte de las instituciones nos invita a considerar un rasgo juvenil algo ambiguo, la proxemia juvenil, as\u00ed denominada por Javier Elzo en su trabajo de \u201cJ\u00f3venes espa\u00f1oles 99\u201d. Proxemia significa una mayor atenci\u00f3n y valoraci\u00f3n de lo pr\u00f3ximo, lo cercano y lo local. Por una parte eso puede explicar que las instituciones que los j\u00f3venes perciben como lejanas sean objeto de la desconfianza y la minusvaloraci\u00f3n juvenil. \u201cPercibir como lejanas\u201d implica una lejan\u00eda de los intereses y preocupaciones de los j\u00f3venes, que, lo han confesado en numerosos estudios, son prioritariamente el paro, la droga, , el sida y la falta de futuro, preocupaci\u00f3n juvenil esta \u00faltima que traduce problemas b\u00e1sico de toda la sociedad espa\u00f1ola como el acceso a la vivienda y los empleos escasos o precarios. Los empleos basura que castigan fundamentalmente al mundo de los j\u00f3venes. Esa lejan\u00eda, real o no, pero percibida y resentida como tal, se traduce habitualmente en una pregunta que de forma m\u00e1s o menos expl\u00edcita se hace la mayor\u00eda de los j\u00f3venes: \u201c\u00bfQu\u00e9 hace por m\u00ed, en qu\u00e9 me ayuda a resolver mis problemas la Constituci\u00f3n, el Gobierno, el Sindicato, la Iglesia…?\u201d No debe olvidarse que una caracter\u00edstica muy acusada de los j\u00f3venes hoy es el pragmatismo, fruto en buena medida del consumismo, que incita a valorar los objetos, las instituciones y las organizaciones, incluso las personas, por sus resultados pr\u00e1cticos, para-m\u00ed-ahora. En el \u00e1mbito pol\u00edtico hay que se\u00f1alar como rasgo positivo la promesa de estabilidad y paz que implica la ubicaci\u00f3n pol\u00edtica de los j\u00f3venes espa\u00f1oles en el centro. La rebeld\u00eda de los j\u00f3venes, rasgo siempre reclamado por ellos en las consultas y las encuestas, y el larvado sentimiento antisistema y antiglobalizaci\u00f3n del que se ha hecho menci\u00f3n, no se traslada al extremismo en la pol\u00edtica. Un 10% de los j\u00f3venes de 1999 se ubican en posiciones moderadas, de centro-izquierda, exactamente en el punto 4,6. se la escala izquierda-derecha (de 1 a 10). A finales de los 70 y en los 80, reci\u00e9n ingresados en la democracia, los j\u00f3venes tend\u00edan a concentrarse en posiciones de izquierda neta, y casi un tercio se adher\u00eda a alternativas de tipo revolucionario. La juventud espa\u00f1ola, junto con la italiana, griega y, algo menos, la francesa, es la m\u00e1s orientada a la izquierda de toda Europa, y aunque puesta a elegir entre la libertad y la igualdad, la primera sale triunfadora- en los comienzos de la d\u00e9cada de los 90 ambas opciones estaban casi igualadas- su opci\u00f3n por la igualdad sigue siendo alta, un 38% la ponen por encima de la libertad. Puede gustar o no gustar, pero en esta \u00e9poca de neoliberalismo salvaje me parece un buen augurio, un rasgo juvenil positivo. Como lo es, sin duda, contra el arrollador neoliberalismo , el que un 58% de los j\u00f3venes prefiera la alternativa \u201cel \u201cEstado debe intervenir y controlar las empresas\u201d frente al \u201cfuncionamiento libre del mercado\u201d, sobre todo si se tiene en cuenta que la opci\u00f3n juvenil por la democracia es terminante, y as\u00ed las tres cuartas partes afirma que es preferible, frente a s\u00f3lo un 23% que dice preferir un gobierno autoritario. El valor de la familia, la importancia que los j\u00f3venes le atribuyen, los beneficios que en ella reconocen, constituyen uno de los rasgos m\u00e1s positivos de la juventud espa\u00f1ola actual\u00a0\u00a0 Esa valoraci\u00f3n aumenta si tenemos en cuenta que los j\u00f3venes espa\u00f1oles viven hoy en un paisaje social sembrado de paradojas y una de ellas, quiz\u00e1s la m\u00e1s llamativa, es el hecho de que su posesi\u00f3n de recursos formativos y culturales es muy superior al de ninguna otra generaci\u00f3n juvenil de la que se tiene memoria hist\u00f3rica. Es adem\u00e1s muy grande su emancipaci\u00f3n normativa, dado el amplio margen de libertades conseguidas y del elevado nivel de permisividad social de que disfrutan, pero su emancipaci\u00f3n \u201cterritorial\u201d es tard\u00eda, dif\u00edcil y costosa, y muchos j\u00f3venes, emancipados psicol\u00f3gica y moralmente, siguen viviendo en el hogar familiar por las razones ya conocidas, dif\u00edcil acceso a la vivienda y contratos basura. Muchos reci\u00e9n descolonizados\u201d,es decir, ya independientes y con recursos propios- econ\u00f3micos, aunque sean inseguros, educativos y culturales- se sienten a gusto compartiendo hogar, pan y convivencia con sus padres \u201cexcolonizadores\u201d. La permisividad, el \u201ctodo vale\u201d, incluso en el campo moral, es una se\u00f1al de tolerancia, pero puede implicar un aut\u00e9ntico desmadre cuando se entiende que el \u201cpermiso social\u201d, la indiferencia, se extiende tambi\u00e9n al terreno de la droga, la prostituci\u00f3n, el fraude en los impuestos, el aborto o el suicidio. Hay que reconocer que en este punto las sombras son m\u00e1s poderosas que las luces. La m\u00e1xima justificaci\u00f3n, un aprobado en t\u00e9rminos escolares, la reciben, por este orden, el divorcio, la homosexualidad, la eutanasia, el aborto y las relaciones sexuales entre menores. El \u00fanico aspecto positivo se encuentra en el rechazo del vandalismo callejero, el soborno y el fraude en los impuestos. Avanza la permisividad en el \u00e1mbito privado, muy especialmente en el terreno de la biopol\u00edtica, en tanto que no se registran avances en la \u00e9tica o moral p\u00fablica. Los estudios y los datos se refuerzan en la misma direcci\u00f3n: el alejamiento religioso de las j\u00f3venes generaciones va en aumento, y parece ser el factor dominante en la descristianizaci\u00f3n progresiva de la sociedad espa\u00f1ola, bastante m\u00e1s que el abandono religioso en las edades maduras o mayores. En el umbral del siglo XXI los j\u00f3venes que se identifican como cat\u00f3licos practicantes se ha reducido a una tercera parte del total de j\u00f3venes, un 35%, frente a un 32% de cat\u00f3licos no practicantes y un 26% de no cat\u00f3licos o no creyentes. \u00bfTres juventudes? As\u00ed rezan los datos, opero hay que recordar que los no creyentes apenas han aumentado en los \u00faltimos 25 a\u00f1os ( un 29% en 1975 y un 26% actualmente); lo que s\u00ed aumenta es el n\u00famero de cat\u00f3licos no practicantes a costa de los practicantes. Se tratar\u00edan de un alejamiento o desenganche eclesial m\u00e1s que religioso. M\u00e1s que de secularizaci\u00f3n habr\u00eda que hablar de des-eclesializaci\u00f3n. El tiempo dir\u00e1 si el alejamiento de la Iglesia lleva m\u00e1s o menos r\u00e1pida e inexorablemente a un alejamiento y olvido de la religi\u00f3n. Yo me temo que s\u00ed, tengo poca fe en la pervivencia de lo religioso al margen de lo eclesial, al menos en la sociedad espa\u00f1ola y para los tiempos actuales. Juan Gonz\u00e1lez-Anleo<\/p>\n
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\nJuan Gonz\u00e1lez Anleo es Catedr\u00e1tico de Sociolog\u00eda en la Universidad Pontificia de Salamanca.
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\nS\u00cdNTESIS DEL ART\u00cdCULO<\/strong>
\nContra la imagen que de los j\u00f3venes proyectan los MCS, optimista o abiertamente pesimista, el autor se detiene en presentar un conjunto de rasgos positivos que, en general, seg\u00fan los estudios sociol\u00f3gicos aparecen configurando la identidad de los j\u00f3venes actuales. Se\u00f1ala, entre ellos: la tolerancia, la apertura a la diversidad, el aprecio a la familia, amigos y trabajo, la atracci\u00f3n hacia los nuevos movimientos sociales, la alta valoraci\u00f3n de la solidaridad, la atenci\u00f3n y valoraci\u00f3n de lo pr\u00f3ximo y cercano.
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\nLa imagen de los j\u00f3venes espa\u00f1oles es de puro desconsuelo, para llorar. Me refiero a la imagen que proyectan los MCM. La paradoja es hiriente. La prensa, en general, es abiertamente pesimista. En cambio, la TV y la publicidad en las revistas y en todo tipo de publicaciones, para adultos o para los mismos j\u00f3venes, m\u00e1s que optimista, se muestra seducida. Seducida y fascinada\u00a0\u00a0 por \u201clo joven\u201d: cuerpos bellos y rebosantes de sexualidad, incansables y din\u00e1micos, rostros alegres y amigables, abiertos a la amistad y la aventura, chicos y chicas dispuestos a todo, capaces de todo, tolerantes con todo…As\u00ed suelen aparecer los j\u00f3venes en los spots publicitarios, las series televisivas, los anuncios de consumo, de ropa, de bebidas y de viajes, las entrevistas, los concursos y las tertulias. La prensa escrita, en duro contraste, se extiende, con o sin fundamento objetivo, en todo tipo de \u201chorrores\u201d de los que los j\u00f3venes son los protagonistas o las v\u00edctimas,: vandalismo y violencia, botell\u00f3n y drogas, sexo desenfrenado, embarazos adolescentes, desprecio de la sociedad y la pol\u00edtica, desenganche eclesial, rechazo del matrimonio, huida cautelosa de todo compromiso serio, o menos serio la lista es interminable y fatigosa.
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\nHace pocos d\u00edas un diario nacional publicaba un desesperado alegato, firmado por Eduardo Verd\u00fa, sobre- \u00bfcontra?- los j\u00f3venes, \u201cEl desprecio adolescente\u201d. Extraigo los puntos m\u00e1s lacerantes:
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\n\u201cEstamos ante la generaci\u00f3n de quincea\u00f1eros m\u00e1s egoc\u00e9ntrica, maleducada escandalosa y autodestructiva. Su actitud desordenadamente rebelde o su abulia ante el mundo provoca preocupaci\u00f3n en sus padres, pero rechazo tambi\u00e9n en gran parte de su entorno. Los adolescentes se han transformado en una especie de tribu urbana totalmente desconectada no s\u00f3lo de la generaci\u00f3n precedente sino de cualquier joven que supere los 25 a\u00f1os (…) Los adolescentes no se identifican con el resto de los ciudadanos ni \u00e9stos con los adolescentes. (…) La falta de informaci\u00f3n o de di\u00e1logo entre padres e hijos es siempre la causa alegada para explicar el desfase de los adolescentes pero \u00e9sta es la prole m\u00e1s aleccionada de la historia en asuntos de estupefacientes o sexo. Se \u201ccolocan\u201d, sin embargo, como nunca antes y a edades cada vez m\u00e1s tempranas (y) la tasa de embarazos entre chicas de catorce a diecisiete a\u00f1os ha venido a duplicarse en la \u00faltima d\u00e9cada. El adolescente no muestra inter\u00e9s por escuchar ni dialogar. Es una actitud esquiva y desde\u00f1osa la que le blinda frente a las advertencias de las campa\u00f1as antidroga (…) Los progenitores est\u00e1n seriamente preocupados porque intuyen que la asicron\u00eda con estos chicos no es una simple consecuencia de la edad del pavo sino de la ascendencia de una nueva \u2018estirpe\u2019 cada vez m\u00e1s encerrada en s\u00ed misma, enrocada contra la autoridad y contra el resto de reglas ajenas a su tribu.\u201d
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\n\u00bfTanta sombra y ni un rayo de luz en los j\u00f3venes que alegran hogares y escuelas, calles, plazas y todo el bullicioso paisaje urbano de nuestros d\u00edas? Vayamos despacio.
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\nDesde la inevitable lejan\u00eda del adulto, todos los j\u00f3venes pueden parecerse: ropa y moda,\u00a0\u00a0 peinados, ruidos y gritos, gestos y argot, m\u00fasica, invasi\u00f3n y ocupaci\u00f3n desafiante de la calle y de la noche, estilo escandaloso y vibrante …Pero las diferencias son m\u00e1s importantes de lo que suele el adulto imaginarse. El estudio de la Fundaci\u00f3n Santa Mar\u00eda \u201cJ\u00f3venes espa\u00f1oles 99\u201d identific\u00f3, mediante un estudio minucioso , cinco tipos de j\u00f3venes, a los que denomin\u00f3 institucionales ilustrados, el grupo m\u00e1s numeroso, algo menos de la tercera aparte de la muestra nacional de 4.000 j\u00f3venes de 15 a 24 a\u00f1os ; en el extremo opuesto, una minor\u00eda de escaso volumen pero muy destacada por su violencia y radicalismo, los antiinstitucionales, un 5%; los\u00a0\u00a0 altruistas comprometidos, un 12%, llaman la atenci\u00f3n por una se\u00f1a de identidad que, en cierta medida, los hace excepcionales: son religiosos, tranquilos, de destacado rigor \u00e9tico y, sobre todo, abiertos a compromisos sociales como los implicados por la pertenencia a las ONG, de las que son pr\u00e1cticamente los \u00fanicos miembros; en un espacio social muy distante se ubican los libredisfrutadores, un 25%, que llaman la atenci\u00f3n por su alta permisividad y tolerancia hacia comportamientos poco \u201crecomendables\u201d o abiertamente asociales, como la droga, el alcohol, el sexo libre, etc, sin olvidar su rechazo de las instituciones y una indiferencia religiosa de gran calibre. El resto de los j\u00f3venes, un 28%, es ap\u00e1tico, poco activo social y culturalmente, encerrado en s\u00ed mismo e intolerante. Tienen tambi\u00e9n su apellido : retra\u00eddos sociales.
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\n\u00bfLuces y sombras, o m\u00e1s sombras que luces? Es evidente que no todo son sombras, nos lo dice la tipolog\u00eda que acabamos de ver. Hay grupos comprometidos, socialmente activos, bien encajados en la sociedad, moralmente serios, abiertos y tolerantes, incluso, aunque en menor cuant\u00eda, de una religiosidad m\u00e1s que aceptable. Pero lo que me propongo en esta reflexi\u00f3n es identificar los rasgos positivos que, con mayor o menor intensidad, caracterizan a los j\u00f3venes en general. Y los estudios sociol\u00f3gicos hoy disponibles permiten esa caracterizaci\u00f3n, sin caer en alabanzas sin fundamento y sin ignorar los aspectos negativos, las sombras.
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\nOtro rasgo positivo de los j\u00f3venes espa\u00f1oles es su s\u00f3lida apertura a la diversidad cultural, a la pluriculturalidad. La identidad juvenil se caracteriza hoy por la flexibilidad, la polivalencia, la adaptabilidad. Por eso mismo, el dilema planteado en nuestros d\u00edas a escala mundial entre la globalizaci\u00f3n y el localismo, que algunos resuelven fundi\u00e9ndolos en un solo concepto, la glocalizaci\u00f3n, ha recibido una clara respuesta y una soluci\u00f3n en la vida y en la praxis cotidiana de los j\u00f3venes, que viven con absoluta naturalidad el mestizaje cultural y social, con la excepci\u00f3n del grupo de antiinstitucionales al que me he referido en un p\u00e1rrafo anterior.
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\nSe lamenta hoy la escasa estima que los j\u00f3venes prestan a las instituciones, en particular a las que implican orden, control y jerarqu\u00eda, como la justicia, las FFAA y la Iglesia, a las de car\u00e1cter pol\u00edtico, y las que \u201cse ensucian las manos\u201d en el borrascoso mundo del dinero: Grandes Empresas y Sindicatos. Hay sin embargo varias instituciones que se salvan de la quema, y en ellas descubrimos un rasgo positivo de los j\u00f3venes espa\u00f1oles. El sistema de ense\u00f1anza recibe un voto de confianza<\/strong> del 63% de \u00e9stos, pero no podemos en justicia concluir ingenuamente que los j\u00f3venes espa\u00f1oles adoran el saber, la ciencia y el conocimiento. Los datos apuntan a que en la escuela, el instituto y la Universidad, lo que los j\u00f3venes valoran por encima de todo es el factor \u201camigos\u201d, muy por encima de los profesores y de la capacitaci\u00f3n para el trabajo y, desde luego, que la organizaci\u00f3n y los m\u00e9todos de ense\u00f1anza. Se puede, pues, sospechar con alg\u00fan fundamento que no es tanto la instituci\u00f3n como los \u201cefectos colaterales\u201d de la misma, el lugar de encuentro con amigos y compa\u00f1eros, lo que atrae a los j\u00f3venes. Muy por encima del sistema de ense\u00f1anza, las instituciones a las que los j\u00f3venes otorgan el m\u00e1ximo de cr\u00e9dito y confianza son las ONG. Por su car\u00e1cter desinteresado y ben\u00e9fico, por su cercan\u00eda al mundo de la pobreza y la marginaci\u00f3n, por su ausencia- o nivel m\u00ednimo-\u00a0\u00a0 de estructura burocr\u00e1tica, y, sobre todo, porque es la realizaci\u00f3n pr\u00e1ctica y socialmente visible de uno de los valores m\u00e1s apreciados por los j\u00f3venes, la solidaridad. La alta valoraci\u00f3n de la solidaridad que hoy se percibe en el mundo juvenil, y las frecuentes muestras pr\u00e1cticas de la misma, honra a los j\u00f3venes, muy en especial a los que de hecho pertenecen a organizaciones de car\u00e1cter solidario, religioso o no: casi un 10% de los j\u00f3venes de 15 a 24 a\u00f1os, lo que viene a significar en n\u00fameros redondos m\u00e1s de medio mill\u00f3n de chicos y chicas.
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\nEmparentado con la solidaridad debo hacer referencia a la red de grupos, grup\u00fasculos y movimientos antisistema y antiglobalizaci\u00f3n<\/strong> que van apareciendo con el universo juvenil espa\u00f1ol. Sus objetivos y, sobre todo, sus m\u00e9todos, son a veces discutibles, pero en el fondo revelan un valor indiscutible: el malestar, la protesta y no pocas veces la lucha contra un mundo que no les gusta. Esta actitud de profundo descontento, a veces poco definida, es un capital flotante de religiosidad, t\u00edpicamente cristiano- no es frecuente en otros universos religiosos- , y pone de manifiesto en el imaginario juvenil la persistencia soterrada de una utop\u00eda de bondad, belleza y armon\u00eda entre los hombres\u00a0\u00a0 que para m\u00ed tiene ra\u00edces evang\u00e9licas. Pablo VI y Juan Pablo II se han referido m\u00e1s de una vez a esa utop\u00eda, a ese preguntarse no tanto \u201cporqu\u00e9 es as\u00ed la sociedad\u201d sino \u201cporqu\u00e9 no es como la so\u00f1amos y la queremos\u201d. En una \u00e9poca de la historia marcada por el declive de las ideolog\u00edas y el enfriamiento de todas las utop\u00edas, la marxista y la humanista, los ojos de los hombres se pueden volver a un Reino de Dios iniciado en la tierra por obra de comunidades cristianas que sean capaces de vivir la radicalidad del Evangelio y la \u201cvalent\u00eda indescriptible de atreverse a ir en contra de todas las experiencias baratas de los hombres (y de) elevarse como un \u00fanico grito por encima de esta historia, diciendo \u00a1Existe Dios, Dios es Amor\u2019\u201d (Rahner).Esa valent\u00eda y ese grito de los que habla el te\u00f3logo est\u00e1n quiz\u00e1s siendo hoy prenunciados , algo grotescamente en ocasiones, por los j\u00f3venes que se atreven a enfrentarse con los poderes de este mundo para proclamar su rechazo de un mundo insoportable.
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\nPero la proxemia en su sentido original- valoraci\u00f3n de lo pr\u00f3ximo y local- es un rasgo positivo y alentador en un mundo dominado por la globalizaci\u00f3n, con su amenaza siempre pendiente sobre la identidad de las peque\u00f1as comunidades y de las culturas particulares. La glocalizaci\u00f3n, a la que antes me he referido como fusi\u00f3n de la globalizaci\u00f3n y del localismo, puede aprovechar la\u00a0\u00a0 proxemia que caracteriza a los j\u00f3venes espa\u00f1oles, y convertirse en un desaf\u00edo que llame a su imaginaci\u00f3n y a su sentido profundo de protesta contra la homogeneizaci\u00f3n y la p\u00e9rdida de identidad\u00a0\u00a0 que trae consigo el imperialismo de la cultura norteamericana McWorld.
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\nLa familia espa\u00f1ola, a pesar de la crisis de sus formas tradicionales y de los embates legales y medi\u00e1ticos a los que est\u00e1 siendo sometida, sigue figurando muy por encima<\/strong> de todas las cosas importantes de la vida de los j\u00f3venes. Una mayor\u00eda indiscutible, cerca de las tres cuartas partes, le atribuyen una \u201cgran importancia\u201d, por encima de la otorgada a los amigos y el trabajo, algo m\u00e1s de la mitad, y del dinero, los estudios y la competencia profesional. La familia aparece como un espacio seguro de estabilidad vital y emocional en el que la educaci\u00f3n y el bienestar de los hijos gozan de una garant\u00eda total. Y no hay pr\u00e1cticamente distinciones seg\u00fan edad, sexo, nivel educativo o clase social.. En 1999 m\u00e1s del 80% de los j\u00f3venes mostraban su acuerdo con estas dos afirmaciones: \u00abLa familia proporciona la estabilidad que no se halla en otros \u00e1mbitos\u00bb y \u00abEl tiempo dedicado a la educaci\u00f3n de los hijos es la labor m\u00e1s importante de los padres aunque ello suponga ganar menos dinero\u00bb. Debo se\u00f1alar, aunque pueda molestar a no pocos, que los hijos que m\u00e1s importancia reconocen a su familia y que mejor se llevan con sus padres son los que se declaran cat\u00f3licos, incluso aunque no practiquen. En general, los datos de los estudios de la juventud espa\u00f1ola han encontrado una correlaci\u00f3n indiscutible entre solidez y calidad de la vida familiar y religiosidad alta o media.
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\nHay otra raz\u00f3n para este indudable \u201cencontrarse a gusto\u201d en la familia: la mayor\u00eda de los j\u00f3venes, un 53%, asegura que\u201d se llevan estupendamente con sus padres\u201d. Los conflictos se suelen limitar a discusiones a prop\u00f3sito de la participaci\u00f3n juvenil en las tareas dom\u00e9sticas, la hora de llegar a casa por la noche y de levantarse por la ma\u00f1ana, y, l\u00f3gicamente, la dedicaci\u00f3n a los estudios y la cuant\u00eda de la \u201cpaga\u201d semanal. Es curioso, entre 1990 y 2000 ha disminuido el porcentaje de hijos que se\u00f1ala alg\u00fan tipo de conflicto paterno-filial por estos motivos: de 283 a 222%. Probablemente porque los padres han ido cediendo, sobre todo en el eterno escollo: las horas de regreso nocturno y de \u201cdiana\u201d matutina.\u00a0\u00a0 Estas cesiones han ido acompa\u00f1adas por una saludable democratizaci\u00f3n de la familia. En \u201cJ\u00f3venes espa\u00f1oles 99\u201d los datos sugieren el predominio del modelo democr\u00e1tico, participativo y de apoyo, seg\u00fan se trasluce de las respuestas afirmativas a dos cuestiones clave: la frecuente consulta a los hijos para las decisiones que afectan a toda la familia, y la explicaci\u00f3n a los mismos de las razones de una orden. Las respuestas que sugieren una familia autoritaria no pasan del 12%, y las que hacen sospechar que predomina el modelo permisivo, de laissez-faire, rozan el 15%.
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\nLa familia vela por la seguridad, estabilidad y bienestar de los hijos, es dato certificado por los mismos j\u00f3venes, pero adem\u00e1s, y en contra de lo que pudiera parecer a juzgar por lo que se contempla en no pocas series de Televisi\u00f3n, orienta a sus hijos. Me imagino que con no pocas dificultades, porque la desorientaci\u00f3n axiol\u00f3gica, la crisis de valores y el relativismo moral ha hecho estragos en la sociedad espa\u00f1ola, gracias en gran parte al \u201cflorido pensil\u201d de intelectuales y \u201cmaestros medi\u00e1ticos\u201d de que disfrutamos, pero, a pesar de todos los pesares, la familia, repito, orienta a los chicos y chicas, y lo hace m\u00e1s que ninguna otra agencia de socializaci\u00f3n. Es triste recordar que, interrogados sobre d\u00f3nde se dicen las cosas importantes para hacerse una idea sobre el mundo y la vida, , la mayor\u00eda cita la familia, casi la mitad los amigos, y s\u00f3lo un 19% se acuerdan de la escuela , el Instituto o la Universidad. La Iglesia pr\u00e1cticamente ha desaparecido. Y de nuevo son los j\u00f3venes cat\u00f3licos practicantes los que con mayor frecuencia citan a la familia.
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\nLa autonom\u00eda, la libertad, la apertura de horizontes, la capacidad para elegir en todos los \u00e1mbito de la vida social, aunque bastante menos en el terreno laboral, es al mismo tiempo una gran ventaja y un gran riesgo de esta juventud espa\u00f1ola que ha entrado en el siglo XXI. Luces y sombras, como es frecuente en la vida real de la gente.
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\nBrillan tambi\u00e9n luces, aspectos positivos. Se va dibujando la presencia de una minor\u00eda juvenil cat\u00f3lica seria y comprometida<\/strong>, cuya religiosidad personal es un factor de fuerte y positiva integraci\u00f3n social de los j\u00f3venes, un factor que influye fuertemente en su conducta moral, en su bajo nivel de permisividad y tolerancia a comportamientos indeseables- aborto, drogas, prostituci\u00f3n, sexo\u00a0\u00a0 en menores de edad…-, en altas tasas de asociacionismo y pertenencia a organizaciones ben\u00e9ficas, de ayuda al Tercer Mundo y Defensa de los Derechos Humanos, y que, en general, se correlaciona positivamente con niveles superiores de satisfacci\u00f3n con la vida, los estudios y la familia. Los soci\u00f3logos hablan del s\u00edndrome de \u201cdeseabilidad social\u201d o conjunto de cualidades personales y actitudes sociales que hacen a una persona deseable y codiciable para cualquier grupo o sociedad que necesita gente integrada,\u00a0\u00a0 comprometida, responsable y activa. La minor\u00eda juvenil cat\u00f3lica refleja en su perfil psicosociol\u00f3gico\u00a0\u00a0 esta deseabilidad.
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\nLos j\u00f3venes son en su mayor\u00eda creyentes. En Dios, en una vida despu\u00e9s de la muerte, en la divinidad de Jesucristo y en la Virgen Mar\u00eda como Madre de Dios. El Dios en el que creen es, para el 60%, el Dios revelado en la persona de Jesucristo. Abundan las dudas, pero en qu\u00e9 grupo o categor\u00eda social no lo hacen. Son creencias que no acaban de traducirse en pertenencia e identificaci\u00f3n real con la Iglesia. Believing without belonging, creer sin pertenecer, como ha definido Grace Davis a la poblaci\u00f3n cat\u00f3lica brit\u00e1nica. No es que esta situaci\u00f3n sea la ideal, pues es muy posible que sin pertenencia activa a una Iglesia las creencias acaben convirti\u00e9ndose en sombras y huellas que no remitan a ninguna parte ni provoquen inquietud espiritual alguna. Hoy por hoy se perciben en el paisaje religioso juvenil espa\u00f1ol inquietudes espirituales de mayor o menor autenticidad. Es muy probable que el catolicismo popular- romer\u00edas, visitas a santuarios, procesiones, peregrinaciones…- en las regiones en las que tiene mayor arraigo y expresi\u00f3n, compense en cierta medida la huida juvenil de las iglesias los domingos. Efectivamente, s\u00f3lo dos\u00a0\u00a0 de cada diez j\u00f3venes confirman su asistencia dominical o mensual, pero la asistencia no se limita a los d\u00edas festivos en los que el frenes\u00ed del fin de semana imposibilita psicol\u00f3gicamente a muchos j\u00f3venes para hacer otra cosa que divertirse o reponerse de la fatiga de tantas horas nocturnas en pura diversi\u00f3n. Casi un 20% de j\u00f3venes (1999) nos dice que van a la Iglesia en Semana Santa, Navidad, en alguna circunstancia especial, o con ocasi\u00f3n de peregrinaciones, procesiones, fiestas populares, etc.
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\nMe parece una buena noticia, finalmente, que los j\u00f3venes espa\u00f1oles empiecen a reconocer la dedicaci\u00f3n y servicio de la Iglesia a los pobres y marginados<\/strong>, a pesar de que todav\u00eda persiste en el imaginario juvenil (y adulto) el prejuicio, sin la menor base real, de que la Iglesia es rica y que el clero vive mejor que la media de los espa\u00f1oles. A pesar de estos prejuicios contra la Iglesia y el clero, a pesar de que son pocos los j\u00f3venes que\u00a0\u00a0 conf\u00edan en la Iglesia, y menos a\u00fan los que\u00a0\u00a0 reciben de sus labios las ideas importantes para formar su visi\u00f3n del mundo y de la vida, m\u00e1s de la mitad de los j\u00f3venes espa\u00f1oles afirman que son miembros de la Iglesia Cat\u00f3lica y piensan seguir si\u00e9ndolo.
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