{"id":8962,"date":"2005-06-01T00:00:46","date_gmt":"2005-05-31T22:00:46","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/?p=8962"},"modified":"2005-06-01T00:00:46","modified_gmt":"2005-05-31T22:00:46","slug":"piensa-habla-haz-bien-y-acertaras","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/piensa-habla-haz-bien-y-acertaras\/","title":{"rendered":"Piensa, habla… haz bien y acertar\u00e1s"},"content":{"rendered":"

Angel Miranda Regojo
\n 
\nAngel Miranda es Secretario General de D.Bosco International, organizaci\u00f3n para la comunicaci\u00f3n e interactividad de las presencias salesianas en Europa.
\n 
\nS\u00cdNTESIS DEL ART\u00cdCULO<\/strong>
\nLa sociedad cambia, los j\u00f3venes cambian, los agentes de pastoral tambi\u00e9n\u2026 \u00bflos proyectos pastorales? La situaci\u00f3n plantea nuevos interrogantes a nuestro quehacer pastoral, pero sobre todo a nuestros enfoques y puntos de vista sobre los j\u00f3venes. No es dif\u00edcil encontrar en ambientes pastorales y de Iglesia, comentario o juicios negativos sobre nuestros destinatarios. A partir de una descripci\u00f3n de la situaci\u00f3n y despu\u00e9s de desarrollar algunas reflexiones sobre el influjo que determinados cambios sociales provocan en los mismos j\u00f3venes, el autor intenta se\u00f1alar algunas claves para plantear nuestros proyectos pastorales desde una lectura positiva de la realidad juvenil. Aprovecha, para ello, una lectura sencilla de la experiencia evangelizadora de Jes\u00fas, el Maestro, y algunos de los mensajes del papa Juan Pablo II a los j\u00f3venes.
\n 
\nDesde el principio el convencimiento del acierto de D. Bosco cuando al explicar su sistema educativo-pastoral repet\u00eda \u201cNo basta amar. Es preciso que los j\u00f3venes se den cuenta de que son amados\u201d.
\nSin hacer juicios de valor, podemos partir de una constataci\u00f3n: nuestros proyectos y acciones pastorales se realizan desde la clave del gran amor que tenemos a nuestros j\u00f3venes. Cierto. Otra cosa es si los j\u00f3venes pueden percibir que les amamos en nuestra propuesta, en nuestro hacer y en nuestro evaluar. \u00bfPerciben m\u00e1s el \u201cquien bien te quiere te har\u00e1 llorar\u201d que \u201cel amor se demuestra con las obras\u201d?
\n <\/p>\n

    \n
  1. Una cultura marcada por los medios de comunicaci\u00f3n.<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

    El horizonte de los j\u00f3venes es de ahora en adelante el mundo de las im\u00e1genes y de la informaci\u00f3n. Im\u00e1genes variadas, seductoras, fragmentadas. Al captar su mirada y su atenci\u00f3n, los medios de comunicaci\u00f3n desarrollan en los j\u00f3venes nuevos modos de pensamiento y nuevas v\u00edas de acceso al conocimiento. Esta evoluci\u00f3n pone a mal el discurso religioso tradicional y las pr\u00e1cticas pedag\u00f3gicas usuales, aunque es posible que nos anime a renovar los modos de comunicaci\u00f3n de la fe por v\u00edas no desconocidas para la gran tradici\u00f3n cristiana.
    \n 
    \n1.1. Las noticias que nos llegan habitualmente sobre los j\u00f3venes<\/strong>
    \nNo es dif\u00edcil echar cuentas de la versi\u00f3n que recibimos a diario sobre la vida y actitudes de los j\u00f3venes ni hace falta un gran esfuerzo intelectual para recordar noticias un tipo de noticias donde nunca faltan<\/p>\n

      \n
    • Agresiones: la discoteca, la mirada de la novia, una palabra, el equipo\u2026<\/li>\n
    • El libertinaje sexual: relaciones precoces m\u00e1s o menos noveladas, el preservativo, la p\u00edldora del d\u00eda despu\u00e9s, cierta promiscuidad, etc.<\/li>\n
    • El consumo de alcohol recordado por los mismos que se quejan del descenso del negocio del vino o los mismos que lo venden.<\/li>\n
    • El botell\u00f3n, el ruido, la charla y el grito, los restos de vidrio en la ma\u00f1ana del s\u00e1bado, las quejas de los vecinos que no pueden dormir.<\/li>\n
    • Los accidentes de tr\u00e1fico, mezclados con la presunci\u00f3n de mejores reflejos o de que eso les pasa a otros.<\/li>\n
    • El fracaso escolar como reflejo de la incapacidad para el esfuerzo, la superprotecci\u00f3n, el abandono familiar o la falta de est\u00edmulos en una sociedad donde todas las necesidades parecen cubiertas.<\/li>\n
    • La increencia de una juventud que apenas necesita nada para sentirse a gusto, aunque carece de sentido en tantos aspectos de su vida.<\/li>\n
    • El pasotismo, la indiferencia o la incapacidad para preguntarse sobre la raz\u00f3n de las cosas y el por qu\u00e9 de la vida<\/li>\n
    • El consumismo que satisface la necesidad de \u201ctener\u201d en personas vac\u00edas de contenidos y de propuestas v\u00e1lidas para vivir o morir.<\/li>\n
    • La evasi\u00f3n e irresponsabilidad ante el compromiso pol\u00edtico y social empa\u00f1adas por la participaci\u00f3n en campa\u00f1as, un voluntariado de ra\u00edces m\u00e1s o menos superficiales o un diluirse en una masa que despersonaliza y hace evanescente cualquier compromiso serio.<\/li>\n
    • Y hablamos de los j\u00f3venes apalancados en casa hasta los 30 y m\u00e1s a\u00f1os con todos sus privilegios y muy pocos compromisos.<\/li>\n
    • O del miedo a compromisos definitivos, a un futuro incierto, a una prolongaci\u00f3n artificial de los estudios, etc.<\/li>\n
    • Unos j\u00f3venes adictos al reality show, a lo virtual, a probar y experimentar sistemas de vida sin excesivos compromisos.<\/li>\n
    • Dependientes de los medios de comunicaci\u00f3n, del chat an\u00f3nimo, del MP3, del \u201cm\u00f3vil\u201d, de los SMS de 150 letras, sin vocales<\/li>\n
    • Consumidores de una informaci\u00f3n a golpe de bot\u00f3n.<\/li>\n
    • Nos hablan de unos j\u00f3venes, pesimistas frente al futuro, con un af\u00e1n de seguridad que ninguno de sus antepasados ha tenido.<\/li>\n
    • De una juventud ligth con poco espacio para lo firme, lo decisivo, lo definitivo,\u2026 J\u00f3venes del s\u00ed pero no, del ya veremos o del por ahora\u2026<\/li>\n
    • Y en lo pastoral, de j\u00f3venes lejanos a la Iglesia en f\u00f3rmulas tan acu\u00f1adas como el s\u00ed a Jes\u00fas, pero no a la Iglesia, el s\u00ed al Papa, al eslogan o a la llamada extraordinaria y no al compromiso en la fe, el s\u00ed a una sacramentalizaci\u00f3n m\u00e1s social que personal y comunitaria.<\/li>\n<\/ul>\n

       
      \nEn el fondo, nuestros proyectos, propuestas y comentarios educativo-pastorales parecen jugarse con j\u00f3venes insatisfechos consigo mismos y con los dem\u00e1s, a quienes de ordinario no les basta lo que tienen, pero sumisos al sistema, sin ganas de complicaciones aunque les resulte dif\u00edcil valorar en positivo el momento que est\u00e1n viviendo.
      \n 
      \n1.2. Los j\u00f3venes en nuestros proyectos pastorales<\/strong>
      \nSin caer en el pesimismo, esta imagen juvenil de los medios y de muchos estudios nos complica a la hora de perfilar los modelos de vida que ofrecemos de ordinario a nuestros j\u00f3venes.
      \n 
      \nPocos j\u00f3venes en la Iglesia<\/strong>
      \nLa poblaci\u00f3n de nuestras iglesias y actos de culto envejece.
      \nAunque queda el consuelo de los j\u00f3venes que se re\u00fanen en torno a figuras o situaciones m\u00e1s o menos carism\u00e1ticas, en general, es mucho m\u00e1s f\u00e1cil encontrar en nuestros an\u00e1lisis de la realidad la disminuci\u00f3n de la pr\u00e1ctica religiosa, el desinter\u00e9s de los j\u00f3venes por las grandes preguntas de la persona o por las importantes respuesta de la fe.
      \nNo est\u00e1n, no vienen, se despiden en la confirmaci\u00f3n\u2026 \u00bfNo ser\u00e1 que nuestros proyectos pastorales se han movido y, sobre todo, se mueven, desde la atenci\u00f3n a los que vienen y siguen con nosotros m\u00e1s que en salir al encuentro de los dem\u00e1s?
      \nJugamos con \u201cpuertas abiertas\u201d, pero esperando a que lleguen. Y si no llegan nos centramos m\u00e1s en el cambio de contenidos que en el de nuestra capacidad de encuentro.
      \n 
      \nIncapaces de compromisos estables<\/strong>
      \nPorque el ideal lo ponemos ah\u00ed. El \u201cpara siempre\u201d. Quiz\u00e1s nos falta cierta visi\u00f3n empresarial de la vida que juega con la provisionalidad y con la respuesta a corto plazo, m\u00e1s que con las preguntas eternas.
      \nPero nosotros valoramos m\u00e1s una respuesta eternamente estable, en el contenido y hasta en las formas. Nuestros j\u00f3venes las cambian pero es nuestra seguridad y nuestra fuerza.
      \n 
      \nNecesitan grupos c\u00e1lidos<\/strong>
      \nUna vez m\u00e1s ponen en crisis nuestro tinglado pastoral. Se cansan. Valoran el conocer personas, el sentirse a gusto, las nuevas experiencias, el que se sientan queridos, la seguridad que les ofrecemos.
      \nOtra cosa es cuando empezamos a dar pasos y se dan cuenta de que detr\u00e1s de la propuesta quedan tiempos y motivos para la exigencia, el compromiso, el empe\u00f1o de \u201cvida y hacienda\u201d. Y entonces\u2026
      \n 
      \nUna cultura marcada por el pluralismo.<\/strong>
      \nNuestros j\u00f3venes crecen en contacto con la diversidad: diversidad de or\u00edgenes \u00e9tnicos, de lenguas, de religiones, de comportamientos; en el barrio, en sus familias, en la escuela, en los medios de transporte y en el seno de la comunidad cat\u00f3lica. Ya no hay ni una palabra \u00fanica, ni una lengua \u00fanica, ni una sola opini\u00f3n posible, sobre lo que sea. Hay varias. El pluralismo social, cultural, idiom\u00e1tico, \u00e9tico, moral, religioso\u2026 est\u00e1 ah\u00ed
      \nUn pluralismo que puede conducir a la indiferencia pero, tambi\u00e9n, abrirnos a la tolerancia y a la libertad.
      \nY en esto nuestros j\u00f3venes no son diferentes. Cualquier aeropuerto un fin de semana nos recordar\u00e1 ese pluralismo: las l\u00edneas de bajo coste permiten ir de ac\u00e1 para all\u00e1 en los fines de semana, justo cuando ponemos un sinf\u00edn de actividades encomiables e interesantes desde el punto de vista pastoral.
      \n 
      \nLos j\u00f3venes
      \n<\/strong>
      \nY vienen las lamentaciones<\/p>\n

        \n
      • No tienen sentido de la militancia: ponen f\u00e1cilmente interrogantes a las grandes causas e ideales.<\/li>\n
      • Se puede \u201cser a ratos\u201d: de una manera en el partido de f\u00fatbol, de otra en el grupo de fe o muy diferente en la discoteca, a la hora de buscar dinero o de alcanzar el \u00e9xito.<\/li>\n
      • El mensaje de la utop\u00eda pasa por la necesidad del \u201cpara qu\u00e9 sirve\u201d, por el utilitarismo, por la necesidad de seguridad, por la rentabilidad econ\u00f3mica, emocional, afectiva e incluso, \u00a1por qu\u00e9 no!, religiosa<\/li>\n
      • La norma y los criterios \u00e9ticos dependen de los porcentajes, de las encuestas, de las votaciones de los pol\u00edticos o de lo que \u201cdice la tele\u201d.<\/li>\n
      • Probar, experimentar, conocer otras formas de ser, seguir la moda resulta fundamental en la vida y quehacer de los j\u00f3venes, capaces sentirse originales a pesar de los mismos piercing, los mismos gestos o los mismos vaqueros de la mayor\u00eda.<\/li>\n
      • Lo mismo ocurre en la manera de manifestarnos creyentes, en la vivencia m\u00e1s o menos acr\u00edtica del si y del no creyente a diferentes modelos de vida.<\/li>\n<\/ul>\n

         
        \nNuestros proyectos pastorales<\/strong>
        \nEste pluralismo no ha roto cierta a\u00f1oranza de una unidad cristiana que se ha terminado. Es el lenguaje de las \u201cra\u00edces comunes\u201d, de las \u201cra\u00edces cristianas\u201d aunque no pocas veces nos \u201candamos por las ramas\u201d. Y ah\u00ed ya tenemos problemas:<\/p>\n

          \n
        • Citamos el respeto y el pluralismo pero hacemos ofertas pastorales univocas, hablamos de la atenci\u00f3n a la diversidad, pero se nos olvida cuando llega el tema religioso.<\/li>\n
        • Sabemos que tenemos la soluci\u00f3n, que la soluci\u00f3n est\u00e1 en el Reino, que es lo que anunciamos y que es de buena calidad. Pero nos resistimos a quedarnos en el \u201canuncio\u201d. Nos duele el \u201cte escucharemos otro d\u00eda\u201d de los nuevos are\u00f3pagos, o quisi\u00e9ramos que todos, \u201cpartos, elamitas y los del Ponto\u201d, con distintas lenguas entiendan y acepten lo que decimos.<\/li>\n
        • Y esto en la familia, en la escuela, en los criterios econ\u00f3micos, en las relaciones sociales, en los temas vocacionales, en el compromiso cristiano\u2026<\/li>\n
        • Idealizamos \u201caquel tiempo\u201d del \u201cun solo Se\u00f1or, una s\u00f3la fe\u2026\u201d o del \u201cJuntos como hermanos\u201d\u2026 \u00a1que es verdad!, pero \u00bftambi\u00e9n para estos j\u00f3venes de la fragmentaci\u00f3n, de la espontaneidad, del intimismo religioso, del respeto humano o de tantas militancias?<\/li>\n<\/ul>\n

           <\/p>\n

            \n
          1. Una cultura que valora la autonom\u00eda de las personas.<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

            \u201cSer uno mismo\u201d constituye hoy una reivindicaci\u00f3n primordial. Las personas reivindican el derecho a su opini\u00f3n, a sus convicciones y entre los j\u00f3venes a su propia identidad.
            \nPueden buscar puntos de referencia pero se indignan contra toda tentativa de reclutamiento o adoctrinamiento, venga de la fe, de la tradici\u00f3n, de sus padres o de la Iglesia. Nos niegan la \u00faltima palabra y reivindican el derecho a expresarse y a elegir aunque suponga tanteos y vagabundeos.
            \nEso s\u00ed, es probable que lleguen un d\u00eda a decir \u201cyo creo\u201d.
            \n 
            \nLos j\u00f3venes<\/strong><\/p>\n

              \n
            • Valoran la independencia: mi correo electr\u00f3nico, mi n\u00famero de m\u00f3vil, mi password y mi login en el chat, iguales y diferentes en cada uno de ellos.<\/li>\n
            • Una independencia visible en la vida familiar: cierta comida a la carta, el frigor\u00edfico siempre disponible, el \u201ctomo algo por ah\u00ed\u201d, mi cuarto, mi cuarto de ba\u00f1o, mi champ\u00fa, mi colonia, mi dent\u00edfrico, etc. Incluso como aspiraci\u00f3n de los m\u00e1s pobres que no lo tienen.<\/li>\n
            • La moto, permitida para todos, por motivos comerciales, hasta 125cc., el coche de segunda mano, unos horarios que hasta el viernes, y cada vez m\u00e1s en ambientes universitarios hasta el jueves, respetan el ritmo de la cultura \u201cadulta\u201d reservando el fin de semana para mi y a mi medida.<\/li>\n
            • Una autonom\u00eda, en parte limitada por otras \u201cmilitancias\u201d: la cuadrilla de amigos, el deporte practicado, el equipo favorito, el modo de vestir, de peinarse, de manifestarse, la banda urbana, la pertenencia al barrio, etc. vividas como elemento de autonom\u00eda y libertad.<\/li>\n
            • Es el sentido de autonom\u00eda: poder sobre la propia vida y sobre los propios l\u00edmites. El riesgo, la velocidad, las relaciones… Ser, de alguna manera, \u201cdioses\u201d de si mismos en la perspectiva de un Dios a su medida.<\/li>\n<\/ul>\n

               
              \nNuestros proyectos pastorales<\/strong>
              \nEntre tanto nuestros proyectos siguen hablando de \u201cacompa\u00f1amiento \u2013 direcci\u00f3n\u201d incluso para quienes no sienten tal necesidad. Hablamos de propuestas pastorales que, con frecuencia, quedan para un grupo de selectos capaces de entender y tomarse en serio la verdad de Jes\u00fas y a la vez de depender, abandonarse en las manos de alguien.
              \nNos salen lenguajes de \u201ccolaboradores\u201d dentro de la comunidad, de \u201cdelegar\u201d bajo control, de ritmos, tiempos horarios, celebraciones, normas muy establecidas, de un protagonismo juvenil a nuestra medida.
              \n <\/p>\n

                \n
              1. Una cultura democr\u00e1tica que valora la participaci\u00f3n y el debate.<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

                Los ni\u00f1os desde muy j\u00f3venes plantean las preguntas m\u00e1s radicales. \u00bfQui\u00e9n es Dios? \u00bfCu\u00e1l es tu Dios? La religi\u00f3n \u00bfpara qu\u00e9 sirve?. Quieren discutir, intercambiar debatir. Tienen \u201csu\u201d opini\u00f3n, aunque la pregunta y el debate hagan temblar las certezas. Estamos en una cultura que considera la participaci\u00f3n y el debate como camino obligado para alcanzar la verdad, apropi\u00e1rsela y recuperar la fe.
                \n 
                \nLos j\u00f3venes<\/strong>
                \nY ah\u00ed, nuestros j\u00f3venes se van acostumbrando cada vez m\u00e1s la libre expresi\u00f3n como valor absoluto en lo que se dice, en lo que se hace, en lo que se comunica.<\/p>\n

                  \n
                • La prudencia, el eufemismo, el miedo a abordar determinadas tem\u00e1ticas, se convierten en tab\u00faes. Hablar, juzgar, decir, pensar, de todo y sobre todo, en p\u00fablico y en privado. Todas las ideas son buenas con tal que se respeten por los dem\u00e1s. Lo m\u00e1s una afirmaci\u00f3n muy d\u00e9bilmente cr\u00edtica: \u201cno pienso como t\u00fa, pero lo respeto\u201d.<\/li>\n
                • Y viene la tiran\u00eda de las opiniones mayoritarias, los dogmas de los grupos de presi\u00f3n, la imposici\u00f3n de los derechos sobre los deberes, los derechos de las minor\u00edas siempre que sea mi derecho o el de mi propia minor\u00eda.<\/li>\n
                • Y cuando todo es opinable y cada uno se atribuye la misma autoridad de los dem\u00e1s para decir, defender y, si llega el caso, imponer lo que piensa \u00bfqu\u00e9 significa la verdad?<\/li>\n
                • A lo mejor volvemos a Pilatos.<\/li>\n<\/ul>\n

                   
                  \nNuestros proyectos pastorales<\/strong>
                  \nNosotros entendemos, con raz\u00f3n, que no cabe verdad absoluta fuera de nuestras verdades eternas. Aunque no signifique que sean eternamente admisibles.<\/p>\n

                    \n
                  • Resulta dif\u00edcil ser maestros de \u201cla verdad\u201d en un mundo donde lo pueden ser el deportista, el cantante o el Harry Potter de turno, motivo de inter\u00e9s, de imitaci\u00f3n y de opini\u00f3n.<\/li>\n
                  • Ser\u00e1 dif\u00edcil llevar adelante proyectos pastorales donde la participaci\u00f3n se realiza por delegaci\u00f3n de unos pocos o donde la gran mayor\u00eda de los j\u00f3venes, conforme a las estad\u00edsticas, no han participado ni en su propuesta ni en su realizaci\u00f3n.<\/li>\n
                  • Algunos grupos juveniles pueden producirnos el espejismo de contar con \u201clos\u201d j\u00f3venes, aunque contemos s\u00f3lo con los que vienen a nuestra casa. \u00bfNos preocupan los que no vienen? \u00bflos que no est\u00e1n?<\/li>\n
                  • Poco espacio queda en nuestros proyectos para el debate, para el cuestionamiento. Los cuestionamientos o las preguntas de nuestros j\u00f3venes en el foro o el chat de turno, ya tienen una respuesta prefabricada \u201cpara\u201d los j\u00f3venes. Nos cuesta encontrar respuesta \u201ccon\u201d los j\u00f3venes.<\/li>\n
                  • A\u00f1adamos a ello la falta de preparaci\u00f3n de muchos agentes de pastoral, muchas veces llenos de buena voluntad: unos como afectados por los mismos \u201ctics\u201d de los j\u00f3venes de su generaci\u00f3n, otros como personas formadas en la seguridad de la verdad pose\u00edda.<\/li>\n
                  • Luego vienen los des\u00e1nimos, el ver que la cosa no va, el caer en la cuenta de que el partido se juega en el centro del campo y no en el gol en cada porter\u00eda.<\/li>\n
                  • Porque una cosa es la teolog\u00eda, otra la did\u00e1ctica y otra la pedagog\u00eda. Y solemos asegurar la verdad cuando el di\u00e1logo con las nuevas generaciones exige muchas m\u00e1s dosis de pedagog\u00eda y did\u00e1ctica.<\/li>\n<\/ul>\n

                     <\/p>\n

                      \n
                    1. Una cultura pragm\u00e1tica, cr\u00edtica y marcada por la ciencia y la t\u00e9cnica.<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

                      Uno de los objetivos de cualquier plataforma formativa es ayudar a los j\u00f3venes a desarrollar un enfoque cient\u00edfico de las cosas, un pensamiento cr\u00edtico y la observaci\u00f3n sistem\u00e1tica de la realidad. Todo debe ser observado, demostrado. La verdad se mide por la eficacia.
                      \nSi ese enfoque cient\u00edfico contrasta evidentemente con el enfoque de la fe, ha llegado la ocasi\u00f3n de repasar, con los j\u00f3venes, las v\u00edas de acceso a la verdad y de redescubrir el pragmatismo de una fe que \u201csin obras es una fe muerta\u201d (St 2,17)
                      \n 
                      \nLos j\u00f3venes<\/strong>
                      \nTambi\u00e9n en este terreno nuestros j\u00f3venes se sienten a la vez protagonistas y v\u00edctimas.<\/p>\n

                        \n
                      • La sensaci\u00f3n de vivir en un para\u00edso tecnol\u00f3gico, donde cualquier innovaci\u00f3n pronto se queda vieja, la sensaci\u00f3n de que nos ganan por muchos cuerpos en eso de apretar botones y entender los iconos del \u201ccacharreo\u201d electr\u00f3nico o inform\u00e1tico, les llevan a poner en crisis muchas de nuestras propuestas. Las cosas deben funcionar de manera autom\u00e1tica. Basta un icono inteligible o regular tal bot\u00f3n o temporizador para que las cosas, tambi\u00e9n las de la fe, funcionen, sea en la familia, en los estudios, en la amistad, en la asimilaci\u00f3n de las verdades o en la relaci\u00f3n con Dios.<\/li>\n
                      • Nuestro avance tecnol\u00f3gico hace de la vida algo sempiterno. La muerte est\u00e1 oculta, la limitaci\u00f3n tambi\u00e9n. Existe una especie de inmortalidad inscrita en el cerebro que no proviene de Jes\u00fas resucitado, sino de las cotas de dominio que el hombre y la ciencia van consiguiendo. Porque aunque las dificultades crecen en proporci\u00f3n aritm\u00e9tica, por proceso de suma, los avances tecnol\u00f3gicos crecen por procesos factoriales en proporci\u00f3n geom\u00e9trica.<\/li>\n
                      • No digamos nada en cuanto al sentido del \u201cusar y tirar\u201d, del cambio permanente, del consumo, de la necesidad de renovar el vestuario, el tel\u00e9fono, los amigos, la esposa o el esposo, la religi\u00f3n, la fe o Dios. \u00bfPor qu\u00e9 no? Lo importante es el cambio por el cambio, aunque lleguemos al mismo punto de partida.<\/li>\n
                      • Tecnol\u00f3gicamente, tambien, vemos que muchos de nuestros j\u00f3venes viven una realidad virtual, adecuada a sus posibilidades, a sus deseos, haciendo posible un lenguaje propio, unas expresiones nuevas y eliminando cualquier separaci\u00f3n entre lo real y lo imaginario.<\/li>\n<\/ul>\n

                         
                        \nNuestros proyectos pastorales<\/strong>
                        \nMientras tanto nuestros proyectos, normalmente se preocupan m\u00e1s de los contenidos que de la t\u00e9cnica: la pedagog\u00eda o la metodolog\u00eda. Tambi\u00e9n en cuanto a las nuevas tecnolog\u00edas de comunicaci\u00f3n y de informaci\u00f3n.<\/p>\n

                          \n
                        • La econom\u00eda o el af\u00e1n de considerar que s\u00f3lo educa lo presencial, hacen sospechosos muchos de los recursos y posibilidades que nos ofrece una pastoral en di\u00e1logo con tecnolog\u00edas donde muchos j\u00f3venes se encuentran como pez en el agua.<\/li>\n
                        • Algo parecido ocurre con la iconograf\u00eda de nuestras acciones pastorales: expresiones, gestos, baja calidad musical, escasa variedad iconogr\u00e1fica, monoton\u00eda en los tonos, en los textos. Lenguajes complicado para j\u00f3venes que todos reconocemos pobres en el uso del lenguaje ordinario.<\/li>\n
                        • No digamos si, confundiendo las cosas, ponemos el acento en la escenograf\u00eda sin aportar apenas ning\u00fan otro contenido de inter\u00e9s para la vida y quehacer de nuestros j\u00f3venes.<\/li>\n<\/ul>\n
                            \n
                          1. Buscando pistas<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

                            Este paisaje nuevo e inestable esbozado a grandes rasgos plantea desaf\u00edos considerables: repasar y renovar en profundidad nuestras maneras de concebir y llevar a cabo nuestra animaci\u00f3n pastoral y nuestra educaci\u00f3n de la fe.
                            \nPero los desaf\u00edos no deben desanimarnos. Existen m\u00faltiples experiencias pastorales y educativas que abren camino a nuevas maneras de hacer resonar el Evangelio de Jes\u00fas, como en aquel Pentecost\u00e9s, en una lengua comprensible para j\u00f3venes de tantas procedencias.
                            \nPor eso es importante buscar nuevas referencias para abordar con confianza esta nueva etapa de evangelizaci\u00f3n.
                            \n 
                            \nRecurrir a la experiencia del Evangelio<\/strong>
                            \nAunque pueda resultar contradictorio \u00bfpor qu\u00e9 no recurrir al evangelio? Al fin y al cabo, en \u00e9l nos aparece el \u201cMaestro\u201d y posiblemente desde \u00e9l podamos entender algunas claves para leer a los j\u00f3venes y su entorno desde una perspectiva positiva.<\/p>\n

                              \n
                            • Mar\u00eda, puede abrir nuestra reflexi\u00f3n. Dios se f\u00eda de ella, aunque sabe que lo l\u00f3gico es que plantee problemas. Es Dios quien cree en ella. Porque \u00c9l hace todo: la llama, la bendice, la alaba, le pide\u2026 y viene sobre ella. Para Dios nada es imposible.<\/li>\n
                            • Creer en nuestros j\u00f3venes, no supone que la cosa va a ser f\u00e1cil. Nos repetir\u00e1n una y otra vez el \u201cpero\u2026 \u00bfc\u00f3mo va a ser esto?\u201d Se trata de creer en ellos, d\u00e1ndoles seguridad, consider\u00e1ndoles capaces y muy capaces para la tarea.<\/li>\n
                            • Como el \u00e1ngel del texto somos enviados \u201ca\u201d los j\u00f3venes. Y el enviado elogia a la joven, le dice que Dios la quiere, que es capaz. Y \u201cla joven\u201d dice que s\u00ed.<\/li>\n
                            • Le pod\u00eda haber obligado, le pod\u00eda haber dado una lecci\u00f3n teol\u00f3gica sobre \u00a1tantas cosas! Lenguaje sencillo, \u201cvendr\u00e1 sobre ti,\u201d \u201cte cubrir\u00e1 con su sombra\u201d Te cree capaz.<\/li>\n
                            • Y Mar\u00eda cree en Jes\u00fas. \u201cHaced lo que \u00e9l os diga\u201d. Sin m\u00e1s. Hasta ahora no ha hecho milagros ni cosas extraordinarias. Pero Mar\u00eda cree en Jes\u00fas. Eso aunque a \u00e9l le extra\u00f1e\u2026 \u201cMujer \u00a1Que nos importa todo esto!\u201d Pero es capaz. Lo hace y comienza el anuncio del Reino.<\/li>\n
                            • A lo mejor Jes\u00fas ha aprendido de ella la clave: \u201cSi no os hac\u00e9is como ni\u00f1os\u201d. Es decir, si no somos capaces, como los ni\u00f1os de<\/li>\n
                            • depender, es decir dejar de lado la seguridad, la autosuficiencia, el af\u00e1n de tener respuesta para todo. Depender en nuestros proyectos de los destinatarios, de sus ritmos, de sus intereses, de sus necesidades, de sus dudas, de sus debilidades\u2026<\/li>\n
                            • preguntar los porqu\u00e9s de las cosas, de los acontecimientos, de las personas. Es decir, arrancar en nuestros proyectos pastorales de las preguntas que nos hacemos sobre ellos, m\u00e1s que de las respuestas que tenemos que darles. Preguntar y escuchar sin juzgar las razones de su alejamiento, su fragmentaci\u00f3n, su sentido de la provisionalidad, su consumismo. Aprovechar sus intuiciones, m\u00e1s j\u00f3venes y actuales que las nuestras, para empezar a redactar nuestros proyectos<\/li>\n
                            • contemplar, admirar como ni\u00f1os el dinamismo, la capacidad de experiencia, las posibilidades que ofrecen los j\u00f3venes, convencidos de que todo eso apoya nuestra sabidur\u00eda pastoral.<\/li>\n
                            • llorar cuando nos sentimos d\u00e9biles. Llorar nuestra debilidad, nuestra pobreza en el encuentro, en el di\u00e1logo, en la pedagog\u00eda m\u00e1s que echar las culpas a supuestas o reales razones como la comodidad, el compromiso\u2026<\/li>\n
                            • caernos, darnos golpes hasta aprender a caminar. Aprender y saber aprender, construir comunidades pastorales que aprenden de los j\u00f3venes a arriesgar, a probar, a cambiar, a atreverse. Saber leer sus lecciones de futuro, m\u00e1s que mirr con persistencia al pasado.<\/li>\n
                            • Hacernos como ni\u00f1os, como Jes\u00fas que se pas\u00f3 salvando a la gente muchos a\u00f1os como ni\u00f1o, como adolescente, como joven, hasta llegar su hora. Es decir capacidad de sembrar, de esperar, de aprender a interpretar la hora de cada chaval, de cada joven, respetando su ritmo.<\/li>\n
                            • El ni\u00f1o cree en los otros: sus padres, la gente que le rodea, hasta que la vida le ense\u00f1a a retorcer un poco el colmillo. Creer en los j\u00f3venes, en sus posibilidades, en la seguridad de que el Padre Dios les ama como son a diferencia de c\u00f3mo decimos amarles nosotros.<\/li>\n
                            • Otro elemento de referencia pueden ser las bienaventuranzas<\/li>\n
                            • Creer, nosotros \u201cricos\u201d, que todas esas pobrezas que vemos en ellos los convierte en bienaventurados\u2026<\/li>\n
                            • Creer en \u201csus\u201d mansedumbres, parciales y a ratos,<\/li>\n
                            • Creerles sujetos de la misericordia de un Dios Padre que les quiere.<\/li>\n
                            • Creer que, con limitaciones, buscan verdad, la justicia. Bienaventurados.<\/li>\n
                            • Y podemos continuar.<\/li>\n
                            • Se trata de salir al encuentro de la oveja extraviada, m\u00e1s que de estar tranquilos por ver si crece o no nuestro reba\u00f1o seguro. Y esto porque la \u201cdescarriada\u201d vale la pena.<\/li>\n
                            • Reconocer que para Jes\u00fas, la ad\u00faltera o el paral\u00edtico, necesitaban, ante todo el perd\u00f3n y ning\u00fan discurso. Lo m\u00e1s un buen consejo: \u201c\u00a1vete y no peques m\u00e1s!\u201d<\/li>\n
                            • Creer en los j\u00f3venes como Jes\u00fas cree en Pedro cuando le dice que le ama, como Felipe que reconoce en el eunuco la presencia del Esp\u00edritu o como Pablo que se abre totalmente a los paganos que \u201cni siquiera han o\u00eddo hablar del Esp\u00edritu Santo\u201d- Incluso, hacerlo como Jes\u00fas, que en el momento de la entrega llama de verdad \u201camigo\u201d a Judas.<\/li>\n<\/ul>\n

                               <\/p>\n

                                \n
                              1. \u00bfUna conversi\u00f3n?<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

                                Esto nos obliga a una conversi\u00f3n: pasar de la mentalidad de conquistador, al enfoque del explorador. Se trata, no tanto, de ganar a los j\u00f3venes, de conquistarlos o \u201cllevarlos a la Iglesia\u201d, como se oye decir a veces, sino de explorar con ellos aprovechando sus tiempos, sus culturas, la sabidur\u00eda y los signos de Dios recordando c\u00f3mo, desde el principio, Dios, en el para\u00edso se complace en pasear junto a los hombres. (Gn.3, 8).
                                \nUna conversi\u00f3n que implica abandono, no como gesto de rendici\u00f3n, ni como lanzarse al vac\u00edo o huir hacia delante sino como un acto de fe y de esperanza en quien se ha comprometido en la historia humana hasta el final de los tiempos, de las culturas y de las fronteras (Mt. 28 , 20).
                                \n 
                                \n5.1. Creer en los j\u00f3venes con signos concretos<\/strong>
                                \nAntes de terminar vale la pena comentar algunos signos que permitan a los j\u00f3venes comprender a su manera, desde sus claves y con sus condicionantes que tienen un lugar en nuestra comunidad.
                                \nParafraseando algunas citas de Juan Pablo II presentado como el Papa de los J\u00f3venes, podemos extrapolar algunos de sus mensajes a los j\u00f3venes como mensajes para quienes queremos ser sus evangelizadores, para la Iglesia, instituci\u00f3n, organizaci\u00f3n y comunidad.
                                \nY siempre teniendo en cuenta a \u201clos j\u00f3venes\u201d, no s\u00f3lo a los que vienen o a los que ya est\u00e1n, sino tambi\u00e9n a los que buscan, a quienes pasan de todo o ni siquiera llegan a plantearse lo religioso. \u00a1Tambi\u00e9n son j\u00f3venes, hijos de Dios y, deben ser, preocupaci\u00f3n de nuestra Iglesia!
                                \n <\/p>\n