{"id":9125,"date":"2004-06-01T18:08:56","date_gmt":"2004-06-01T16:08:56","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/?p=9125"},"modified":"2004-06-01T18:08:56","modified_gmt":"2004-06-01T16:08:56","slug":"cultura-digital-un-reto-para-la-catequesis-y-la-pastoral","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/misionjoven\/cultura-digital-un-reto-para-la-catequesis-y-la-pastoral\/","title":{"rendered":"Cultura digital. Un reto para la catequesis y la pastoral"},"content":{"rendered":"

Fabio Pasqualetti<\/strong><\/p>\n

 
\nFabio Pasqualetti es profesor de Teor\u00eda y t\u00e9cnicas de la radio en la Facultad de Ciencias de la Comunicaci\u00f3n de la Universidad Salesiana de Roma.
\n 
\nS\u00cdNTESIS DEL ART\u00cdCULO<\/strong>
\nDe manera breve y concisa, este primer art\u00edculo explica la naturaleza y caracter\u00edsticas de Internet y de la cultura digital \u2013fruto de transformaciones sociales, culturales, tecnol\u00f3gicas-, para terminar sugiriendo algunas pistas de reflexi\u00f3n en la perspectiva de la acci\u00f3n pastoral. M\u00e1s que una b\u00fasqueda indiscriminada de medios para la misi\u00f3n, sostiene el autor, es importante la comprensi\u00f3n del medio y del tipo de relaci\u00f3n comunicativa que permite establecer
\n 
\nEste breve art\u00edculo quiere ser un intento por entender c\u00f3mo se ubica el fen\u00f3meno de la cultura digital dentro de los r\u00e1pidos cambios socio culturales que han caracterizado el fin del segundo milenio y el inicio del tercero. La tentaci\u00f3n para muchos educadores, catequistas y animadores pastorales es buscar nuevas modalidades tecno-comunicativas para su misi\u00f3n, sin preguntarse en qu\u00e9 medida \u00e9stas tendr\u00e1n una repercusi\u00f3n positiva o negativa en la realizaci\u00f3n de los propios objetivos. Sostengo que sea importante entender qu\u00e9 cosa entra en juego en la relaci\u00f3n comunicativa cuando se vive en una mediatizaci\u00f3n cultural tecnol\u00f3gicamente cada vez m\u00e1s invasiva.
\n <\/p>\n

    \n
  1. Una premisa<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

    <\/strong>
    \nRoger Fidler, en su libro Mediamorphosis<\/em>, define precisamente con esa palabra el proceso por el que se realiza la transformaci\u00f3n de los medios de comunicaci\u00f3n a trav\u00e9s de un juego complejo de necesidades percibidas, competitividad, presi\u00f3n pol\u00edtica e innovaciones sociales y tecnol\u00f3gicas[1]<\/a>. En otras palabras, mirando la comunicaci\u00f3n como un sistema complejo, se puede ver que el nacimiento de una nueva tecnolog\u00eda y de un nuevo sistema de medios nunca se da de manera espont\u00e1nea o independiente, sino que nace siempre de otras tecnolog\u00edas o medios, dentro de contextos socioculturales que, a su vez, pueden acelerar o desacelerar la evoluci\u00f3n. Este concepto ayuda a liberarse de la tentaci\u00f3n de ver las innovaciones tecnol\u00f3gicas como desarrollo esencial e independiente, y poner, en cambio, la atenci\u00f3n en una coexistencia y coparticipaci\u00f3n de varios factores que favorecen la transformaci\u00f3n tecnol\u00f3gica y cultural.
    \n 
    \n\u00bfQu\u00e9 sucede cuando una nueva tecnolog\u00eda se asoma al escenario de la vida cotidiana? David Bolter
    [2]<\/a>, en su libro Turing\u2019s man<\/em>, dice que la tecnolog\u00eda ofrece una atractiva ventana a trav\u00e9s de la cual los pensadores de todas la \u00e9pocas pueden interpretar tanto el mundo f\u00edsico como el metaf\u00edsico. De Kerckhove, hablando de las tecnolog\u00edas de la comunicaci\u00f3n, las define como brainframes<\/em>: \u201cla idea que subyace en esta noci\u00f3n es que las tecnolog\u00edas de elaboraci\u00f3n enmarcan<\/em> nuestro cerebro en una estructura y que cada una de ellas le desaf\u00eda a que ofrezca un modelo distinto, pero igualmente eficaz, de interpretaci\u00f3n\u201d[3]<\/a>. En este sentido, los diferentes medios, desde el lenguaje a la realidad virtual, revelan la comprensi\u00f3n que el hombre tiene de s\u00ed mismo y del mundo. Dejando de lado los aspectos espec\u00edficos de los Mass Media, como peri\u00f3dico, radio y televisi\u00f3n, nos concentramos en este art\u00edculo sobre las caracter\u00edsticas de la red.
    \n <\/p>\n

      \n
    1. Internet y sus caracter\u00edsticas <\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

      <\/strong>
      \nInternet<\/em>, definida como la red de las redes<\/em>, est\u00e1 cambiando de manera radical la comunicaci\u00f3n. A trav\u00e9s de la misma, centenares de millones de usuarios se intercambian<\/em> cada d\u00eda todo g\u00e9nero de mensajes, acceden<\/em> a documentos, participan<\/em> a grupos tem\u00e1ticos, se encuentran<\/em> mediante conferencias electr\u00f3nicas, discuten<\/em> en torno a cualquier tipo de argumento
      [4]<\/a>. Todo esto tiene lugar superando los confines nacionales, raciales, pol\u00edticos, sociales, espaciales y temporales. L\u00e9vy habla de nuevo nomadismo<\/em>, y dice que
      \n 
      \nEl desarrollo de los nuevos instrumentos de comunicaci\u00f3n se inserta en un cambio de gran importancia que el mismo desarrollo acelera, pero que lo sobrepasa. Para decirlo con una palabra: nos hemos vuelto a convertir en n\u00f3madas. […] El nomadismo actual depende principalmente de la transformaci\u00f3n continua y r\u00e1pida de los paisajes, cient\u00edfico, t\u00e9cnico, econ\u00f3mico, profesional, mental… Aunque no cambi\u00e1semos, el mundo cambiar\u00eda entorno a nosotros.
      [5]<\/a>
      \n 
      \nCon Internet<\/em> se ha visualizado<\/em> la virtualizaci\u00f3n<\/em> de las actividades humanas, pero, sobre todo, se ha abierto un proceso de descentralizaci\u00f3n de los centros de poder y control de la comunicaci\u00f3n, como nunca hab\u00eda ocurrido a lo largo de la historia. Desde un punto de vista positivo, Internet <\/em>se puede considerar como la gran ocasi\u00f3n de crecimiento intelectual del g\u00e9nero humano. Si no llegan a prevalecer de forma completa las razones econ\u00f3micas, la red es como un flujo del saber, del cual, a trav\u00e9s de opciones pol\u00edticas y econ\u00f3micas finalizadas, todos podr\u00e1n beneficiarse. Tomando prestado desde Roger Fidler su esquema de an\u00e1lisis sobre el flujo de control, presentaci\u00f3n de formato, recepci\u00f3n y l\u00edmite de un medium, lo aplicamos a la red para hacer emerger las caracter\u00edsticas espec\u00edficas de su modalidad comunicativa.
      \n <\/p>\n\n\n\n\n\n\n
      \n

      La red<\/h4>\n<\/td>\n<\/tr>\n

      Flujo y control<\/td>\nMediado\/no mediado \/interpersonal \/personal
      \nUnidireccional \/ bidireccional \/ multidireccional
      \nProductores \/ usuarios \/colaboradores
      \nProgramado \/ extempor\u00e1neo \/<\/td>\n<\/tr>\n
      Presentaci\u00f3n y formato<\/td>\nMultimedial \/
      \nEstructurado \/ no-estructurado
      \nLineal \/ No lineal
      \nFormato display<\/em><\/td>\n<\/tr>\n
      Recepci\u00f3n y l\u00edmites<\/td>\nInmediata \/
      \nActivo \/ creativo \/
      \nDeterritorializaci\u00f3n \/ global \/ local \/
      \nFija \/ port\u00e1til<\/td>\n<\/tr>\n<\/tbody>\n<\/table>\n

       
      \nEl aspecto que emerge, ante todo, es la co-presencia de categor\u00edas aparentemente antit\u00e9ticas, como lineal vs. no lineal, estructurado vs. no estructurado, unidireccional vs. bidireccional,<\/em> etc. Lo cual pone de manifiesto la particular naturaleza de la red.[6]<\/a>
      \n 
      \nLa red fue pensada originariamente como instrumento de defensa en caso de ataque nuclear. La exigencia fundamental era poner en funcionamiento un sistema que, aunque fuera atacado en un punto cualquiera, pudiese seguir funcionando, y, en un cierto sentido, autogener\u00e1ndose en otros puntos. En la pr\u00e1ctica, no exist\u00eda un preciso centro, sino una infinita posibilidad de centros. En este sentido, se entiende que, aun teniendo centros, en realidad no exista un centro.
      \n 
      \nOtro aspecto que, quiz\u00e1, encierra en s\u00ed la met\u00e1fora m\u00e1s fascinante de Internet<\/em> es la navegaci\u00f3n<\/em>. En el mar de la red todos se sienten algo as\u00ed como Ulises. Se sienten tambi\u00e9n como cazadores a la b\u00fasqueda de tesoros que se esconden detr\u00e1s de mir\u00edadas de recorridos. El sujeto est\u00e1 implicado directa y activamente. La experiencia de chatear<\/em>, si bien reducida a una costumbre de parte de las nuevas generaciones, conserva la fascinaci\u00f3n del encuentro desconocido; desencadena los deseos de la experimentaci\u00f3n sobre su propia identidad, el juego de las sustituciones, pero tambi\u00e9n el sincero intercambio de opiniones, ideas y pensamientos. A nivel acad\u00e9mico, la red es un ben\u00e9fico flujo de participaci\u00f3n del saber que alimenta la comunidad universitaria.
      \n 
      \nUna ulterior caracter\u00edstica es la deterritorializaci\u00f3n<\/em> que se experimenta a trav\u00e9s de la navegaci\u00f3n. Es un prolongarse hasta los confines del mundo, all\u00ed donde un ordenador y un modem<\/em> llegan a ser la ocasi\u00f3n de un encuentro o de un descubrimiento. Seg\u00fan De Kerckhove, \u201clos ordenadores desarrollan una mediaci\u00f3n entre los sistemas nerviosos y cognitivos internos de cada uno de los usuarios y los sistemas de elaboraci\u00f3n externos: act\u00faan como interface entre psicolog\u00eda y tecnolog\u00eda, precisamente igual que los videogames<\/em> ofrecen una interface entre las respuestas neurol\u00f3gicas y electr\u00f3nicas […]. Los ordenadores desarrollan una especie de mediaci\u00f3n social en una \u00fanica y continua extensi\u00f3n de nuestros poderes individuales de imaginaci\u00f3n, concentraci\u00f3n y acci\u00f3n, y funcionan, en gran parte, como una segunda mente<\/em>\u201d
      [7]<\/a>.
      \n 
      \nLa cultura occidental est\u00e1 tratando laboriosamente de armonizar las propiedades l\u00f3gico-racionales desarrolladas en el curso de los siglos, con las de los nuevos media<\/em> electr\u00f3nicos. Lo que se est\u00e1 experimentando es el esfuerzo que toda metamorfosis cultural lleva consigo, con la fatiga de pensarse no s\u00f3lo a nivel individual, sino tambi\u00e9n a nivel colectivo. No es una casualidad que se viva la paradoja de la globalizaci\u00f3n y, al mismo tiempo, de la proliferaci\u00f3n de nacionalismos exasperados. Todos los cambios traen consigo conflictos; la b\u00fasqueda del di\u00e1logo puede atenuarlos y abrirlos a un rec\u00edproco descubrimiento. Por esto es importante adoptar una \u00f3ptica pluralista, en la que se acojan puntos de vista y formas de expresi\u00f3n diversos. Los media<\/em> pueden ayudar a desarrollar una cultura del pluralismo, precisamente porque ellos mismos son un pluralismo de lenguajes.
      \n 
      \nBerendt, citando a Rajneesh, habla de \u201cdemocracia de los sentidos\u201d
      [8]<\/a>, como medio para superar el hipertrofismo occidental altamente orientado a lo visual y lo racional. El arte y los media<\/em> son, quiz\u00e1, los dos ambientes en que se percibe m\u00e1s esta urgencia de armonizar e integrar la complementariedad de los sentidos y, por consiguiente, de los lenguajes.
      \n <\/p>\n

        \n
      1. Transiciones culturales<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

        Quiz\u00e1s la palabra m\u00e1s usada en estos \u00faltimos tiempos sea \u201ccrisis\u201d. Es probable que el origen de esta crisis se encuentre en los cambios profundos de la vida del hombre en relaci\u00f3n consigo mismo y con el mundo. Se est\u00e1 experimentando la dificultad que toda metamorfosis cultural trae consigo, con el esfuerzo de un repensamiento no s\u00f3lo individual sino tambi\u00e9n colectivo. No por nada las tensiones bipolares propias de la comunicaci\u00f3n en red se viven tambi\u00e9n de alguna manera en la vida. Tanto el individuo como la comunidad experimentan por lo tanto tensiones entre fuerzas que conducen hacia una visi\u00f3n global de la vida y fuerzas que provocan particularismos y visiones locales. Se afirma de manera exagerada el concepto de individuo y, al mismo tiempo, nuca como hoy nos sentimos interdependientes en todos los niveles.
        \n 
        \nNo es posible hacer depender el problema cultural solamente de la transformaci\u00f3n tecnol\u00f3gica medi\u00e1tica, sino m\u00e1s bien como resultado de una continua y constante interacci\u00f3n entre cambios tecnol\u00f3gicos, opciones econ\u00f3micas, pol\u00edticas, sociales y religiosas que tienen lugar tanto en el orden personal como colectivo. La sensaci\u00f3n de velocidad procede m\u00e1s de la cantidad de propuestas que se presentan casi al mismo tiempo que de su efectiva novedad. Por lo que a mi se refiere, intentar\u00e9 subrayar las consecuencias del nuevo planteamiento cultural, destacando al mismo tiempo los rasgos peculiares de la dimensi\u00f3n tecnol\u00f3gica. Pero antes de seguir adelante me parece importante enfrentar el problema de fondo suscitado por Meyrowitz cuando afirma:
        \n 
        \nEn una sociedad, la capacidad y la formaci\u00f3n necesarias para codificar y descodificar los mensajes de un medium determinado deciden hasta cierto punto sobre quien puede usar el medium para mandar mensajes y quien puede tener acceso a las informaciones que el medium difunde.
        [9]<\/a>
        \n 
        \nLos medios electr\u00f3nicos influyen por lo tanto, m\u00e1s que en los contenidos, en las estructuras y poderes, en el interior de lo que Meyrowitz llama \u201cla geograf\u00eda situacional\u201d de la vida social. El tema es importante, pues pone en tela de juicio el concepto de autoridad en una sociedad medi\u00e1tica. En un modelo social basado en el papel impreso bastan dos requisitos para tener acceso al foro p\u00fablico y poder adquirir puestos de autoridad: saber leer y escribir. El que no es capaz de esto no puede pensar en participar en el debate p\u00fablico.
        \nUn status elevado se demuestra y se mantiene gracias al control de los conocimientos y la capacidad de experiencias significativas (…) Un status que no dependa del control de los conocimientos es considerado con frecuencia arbitrario y puede ser contrastado. Probablemente es por esto por lo que la Iglesia, temiendo una amenaza de este tipo, lleg\u00f3 a prohibir en el siglo XV las traducciones de la Biblia en lengua vulgar.
        [10]<\/sup><\/a>
        \n 
        \nAhora bien, los medios electr\u00f3nicos pueden facilitar el acceso a mundos informativos tambi\u00e9n a personas de estamentos sociales inferiores y en ese sentido alterar la relaci\u00f3n del control informativo jer\u00e1rquico. Hoy se puede observar, en los distintos niveles (social, pol\u00edtico, religioso), que el que aspira a ser l\u00edder tiene que demostrar \u201ctransparencia\u201d, aunque tambi\u00e9n es verdad que la transparencia disminuye la pretensi\u00f3n de la autoridad de presentarse como absoluta.
        \nLa cultura digital
        [11]<\/a> puede ser definida como el paso de una cultura de masa con controles centralizados a una cultura des-centralizada, des-estructurada, personalizada en cambio permanente. Seg\u00fan De Kerckhove \u201cen el momento en que la radio y la televisi\u00f3n nos traen noticias e informaciones masivas de todo el mundo y las tecnolog\u00edas del control, como el tel\u00e9fono y las redes de ordenadores, nos permiten alcanzar inmediatamente cualquier punto y entrar en interacci\u00f3n,[12]<\/a> tiene lugar una inversi\u00f3n de flujos comunicativos y de control que anuncia la posibilidad de un mayor control y participaci\u00f3n por parte de grupos e individuos. Una cosa es cierta: la cultura digital nos cuestiona y nos provoca en nuestra forma de ser hombres y mujeres y en la manera de ver la vida, como tambi\u00e9n acerca de quien manda y d\u00f3nde residen las nuevas sedes del poder.
        \n 
        \nPara una valoraci\u00f3n m\u00e1s serena tratemos de ver cu\u00e1les son sus caracter\u00edsticas emergentes, qu\u00e9 perspectivas abren al futuro humano y, respecto a nuestro tema, qu\u00e9 est\u00edmulos acarrean a la reflexi\u00f3n catequ\u00e9tica y pastoral. Trataremos de detectar sobre todo las valencias y aspectos positivos, sin ignorar por otra parte los problemas que puedan surgir y que aqu\u00ed no podremos profundizar.
        \n <\/strong><\/p>\n

          \n
        1. \u00bfQu\u00e9 es la cultura digital?<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

          <\/strong>
          \nLa cultura digital (CD) es por lo tanto cultura de las co-presencias antit\u00e9ticas, de la constante tensi\u00f3n entre orden<\/em> y caos<\/em> o, dicho en t\u00e9rminos m\u00e1s cristianos, una cultura del ya y todav\u00eda no.<\/em> Tratemos de ver por qu\u00e9.
          \n 
          \nPor una parte la CD favorece el pluralismo<\/em> gracias a su ductilidad, pero por otra el transvase f\u00e1cil en tiempo real de im\u00e1genes y fantas\u00edas, sonidos y palabras, informaciones e interpretaciones, fomentan naturalmente la exportaci\u00f3n de las culturas m\u00e1s fuertes econ\u00f3micamente, provocando as\u00ed un efecto de globalizaci\u00f3n y por lo tanto de homologaci\u00f3n<\/em>. No obstante, por su misma naturaleza, la CD est\u00e1 des-estructurada<\/em> y des-centrada<\/em>, permitiendo as\u00ed la resistencia ante el dominio cultural imperante y abriendo espacios de resistencia, como por ejemplo en los distintos movimientos ecologistas, anti-G8, minor\u00edas culturales, raciales, alternativas, etc. Pero es una cultura que exige expertise<\/em>, una exposici\u00f3n al mundo tecnol\u00f3gico, sobre todo del ordenador y de la red. Una mentalidad flexible y adaptable a los distintos cambios y una mentalidad de la comunicaci\u00f3n online<\/em>. Parad\u00f3jicamente estos instrumentos que abren espacios de libertad est\u00e1n regulados interiormente por lenguajes super-estructurados<\/em>.
          \n 
          \nPor medio del concepto de des-territorializaci\u00f3n<\/em>, la CD ha superado la idea de frontera regional, nacional, continental. Decir CD es decir acceso, contacto, conexi\u00f3n, prolongaci\u00f3n, en todas las partes del mundo, donde quiera haya un terminal conectado con la red. Potencialmente existe la posibilidad para los m\u00e1s pobres de tener acceso al mismo patrimonio cultural, aunque tambi\u00e9n hay el peligro de un dominio tecnol\u00f3gico y una distancia a\u00fan mayor entre los que poseen y los que no poseen. Lo dicho hasta aqu\u00ed es solamente una breve alusi\u00f3n a la complejidad y riqueza de la nueva situaci\u00f3n cultural, aunque en realidad es f\u00e1cil comprender que la CD constituye al mismo tiempo una soluci\u00f3n<\/em> y un problema<\/em> en la vida humana.
          \n <\/p>\n

            \n
          1. Transiciones a nivel religioso<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

             
            \nA partir de los a\u00f1os 60 se ha podido constatar, en Occidente, un eclipse de las instituciones religiosas, mientras que los medios se han convertido en protagonistas de la cultura, verdadero punto de referencia para la gente. Se le ha echado la culpa de esto tambi\u00e9n al auge del subjetivismo y de la autonom\u00eda presentes en la cultura. A la fragmentaci\u00f3n del mercado en b\u00fasqueda de indecisiones del gusto ha correspondido la b\u00fasqueda del gusto tambi\u00e9n en la esfera religiosa. Se constata que la crisis institucional religiosa no ha suprimido en la gente el anhelo de lo sagrado. El mercado de la oferta religiosa sigue siendo pujante, con gran sorpresa de cuantos pronosticaban el ocaso de Dios y de las religiones.
            \n 
            \nEn realidad, ha sido precisamente la cultura medi\u00e1tica, por medio de la cultura popular, la que ha hecho aflorar lo sagrado de forma incluso espectacular. Internet, de manera especial, ha llegado a ser el aer\u00f3pago de las m\u00e1s variadas propuestas religiosas y pseudoreligiosas,
            [13]<\/a> en una medida jam\u00e1s vista hasta ahora. La novedad reside en la flexibilidad, interactividad y no centralidad de Internet, de tal manera que personas de cualquier credo pueden entrar en contacto con otras de confesiones distintas, confrontarse, dialogar y ponderar las ofertas que otras religiones o cultos ofrecen.
            \n 
            \nSurgen de este modo comunidades virtuales, lugares y espacios de oraci\u00f3n, para el cultivo y la formaci\u00f3n personal, que atraviesan las fronteras de cualquier Iglesia local, di\u00f3cesis o naci\u00f3n. Es un fen\u00f3meno muy interesante, destinado a ampliarse, que no ser\u00e1 f\u00e1cil observar o estudiar, pero que plantea no pocas cuestiones a la concepci\u00f3n de la Iglesia, de la comunidad, de la vida de fe. Los desplazamientos que han marcado este per\u00edodo denotan un paralelismo con el desarrollo cultural y medi\u00e1tico.
            \n5.1. De una religi\u00f3n institucional a una espiritualidad personal<\/strong>
            \n 
            \nTom Beaudoin en su libro Virtual Faith<\/em>, representante de la Generation X<\/em>, denuncia un alejamiento de las religiones e iglesias institucionales en los a\u00f1os 70 y 80. Como causa se\u00f1ala la enorme distancia que su generaci\u00f3n advert\u00eda entre la predicaci\u00f3n de estas iglesias y la realidad de la vida.
            \n\u201cLas iglesias quedaban de hecho rid\u00edculamente fuera de \u00f3rbita, con su extra\u00f1a y quejumbrosa m\u00fasica, con su tecnolog\u00eda antidiluviana, con una ense\u00f1anza social trasnochada y un talante hostil o indiferente a todo lo que sab\u00eda a cultura popular. […] Para muchos de mi generaci\u00f3n resultaba muy f\u00e1cil dar el salto de una religi\u00f3n-como-accesorio a una religi\u00f3n-no-necesaria\u201d.
            [14]<\/sup><\/a>
            \n 
            \nLa decepci\u00f3n de las instituciones religiosas y su incapacidad para dar respuestas a las nuevas generaciones han hecho que \u00e9stas se orienten hacia donde esperan encontrar tales respuestas. Este fen\u00f3meno ha provocado un nomadismo espiritual que desemboca con frecuencia en experiencias religiosas acordes con el cambio cultural m\u00e1s pluralista, posibilista, permisivo y m\u00e1s tolerante, pero con vistas a una religiosidad m\u00e1s personal. No se niega la importancia de la dimensi\u00f3n personal, pero lo que se reivindica es ante todo la personalizaci\u00f3n de la propia opci\u00f3n.
            \n 
            \n5.2. De una pertenencia por tradici\u00f3n a una significativa <\/strong>
            \n <\/strong>
            \nComo consecuencia se pasa de una pertenencia por tradici\u00f3n a una pertenencia significativa. Y son los medios los que han proporcionado los nuevos puntos de referencia. Seg\u00fan Mart\u00edn Barbero los medios han suprimido de alguna manera la distancia entre lo sagrado y lo profano; sobre todo la televisi\u00f3n ha introducido lo sagrado en el reino de lo profano y ha reducido a profano lo que antes era sagrado. Hace notar, por ejemplo, c\u00f3mo la publicidad haya vuelto m\u00e1gica (enchanted<\/em>) incluso la tarea m\u00e1s vulgar y ordinaria, como lavar o limpiar, tareas que quedan sublimadas en narraciones po\u00e9ticas y casi elevadas a una dimensi\u00f3n transcendente. De esta forma una botella de Coca-Cola se convierte en un m\u00e1gico manantial de energ\u00eda, belleza y sabidur\u00eda, fuente de vida y juventud.
            [15]<\/a>
            \n 
            \nLos mitos y ritos de la sociedad medi\u00e1tica sustituyen los de las religiones. Un concierto rock puede aparecer como un momento espiritual de una teofan\u00eda profana que evoca los rasgos de la experiencia de lo sagrado. Los personajes de la cultura popular son considerados \u00eddolos, sin poseer quiz\u00e1s el poder divino de prometer la eternidad, pero s\u00ed el de proporcionar una noche de sue\u00f1os y locuras. Incluso las nuevas generaciones que toman muy en serio la dimensi\u00f3n religiosa y espiritual de la vida no se resignan a una religi\u00f3n prefabricada. El pluralismo de movimientos existente dentro de la Iglesia es s\u00edntoma claro de la necesidad de formas plurales de vivir la fe.
            \n5.3. De una verdad objetiva a una subjetiva<\/strong>
            \n <\/strong>
            \nEl concepto de verdad objetiva trae consigo la idea de algo inmutable y constante que perdura en el tiempo. Pero en el siglo XX apenas terminado se ha visto de todo y lo contrario de todo. El s\u00edmbolo m\u00e1s expresivo del final de algo que parec\u00eda eterno es la ca\u00edda del muro de Berl\u00edn en 1989. Las im\u00e1genes de este hecho, ampliadas y transmitidas contempor\u00e1neamente en todo el mundo, representan en la imaginaci\u00f3n colectiva el ocaso de lo absoluto.
            \n 
            \nLos atentados del 11 de septiembre 2001 en Nueva York, la guerra en Afganist\u00e1n, la guerra en Irak, y los otros treinta y dos conflictos abiertos en el mundo hasta los \u00faltimos atentados del 20 de marzo 2004, manifiestan claramente la crisis de valores considerados universales como democracia, libertad de pensamiento, libertad de acci\u00f3n, libertad de palabra. Al mismo tiempo se intuye mayormente el aumento de la interdependencia entre las personas, los pueblos y las naciones y la crisis de un modelo neocapitalista que crea siempre mayor discriminaci\u00f3n y pobreza.
            \n <\/strong>
            \n5.4. De un lenguaje tecnoteol\u00f3gico a un lenguaje cultural<\/strong>
            \n <\/strong>
            \nTambi\u00e9n la Iglesia cat\u00f3lica se encuentra en un momento delicado de confrontaci\u00f3n con una cultura abierta a las posibilidades, al descentramiento, a la personalizaci\u00f3n, al cambio. Las se\u00f1ales de crisis ya se adivinan en todo el sector ling\u00fc\u00edstico: desde el lenguaje teol\u00f3gico hasta el ritual y sacramental, pasando por la arquitectura de los templos, se nota con frecuencia la dificultad de comunicar y dialogar con la cultura. En un contexto cultural de cu\u00f1o pluralista es normal que la gente busque interlocutores abiertos al di\u00e1logo y a la confrontaci\u00f3n, ignorando a cuantos a toda costa lo evitan o impiden.
            \n 
            \nLa p\u00e9rdida de fieles puede llevar a la misma tentaci\u00f3n de los centros comerciales cuando pierden clientes, es decir, a la tentaci\u00f3n de apostar por la espectacularidad, en vez de afrontar la crisis de la instituci\u00f3n. Como consecuencia, se cae en una religi\u00f3n de consumo, como denuncian Cimino y Lattin en su libro Shopping for Faith<\/em>, indicando el fen\u00f3meno t\u00edpicamente americano (pero no s\u00f3lo americano) de las megachurches<\/em> y de los small groups<\/em> como lugares futuros de los consumidores de espiritualidad.
            [16]<\/a>
            \n 
            \nSer\u00edan necesarias otras dilucidaciones, pero por ahora nos limitamos a estas observaciones, como est\u00edmulo para la eventual discusi\u00f3n. Ciertamente son consideraciones que suscitan no pocos interrogantes y provocaciones en orden a la catequesis y a la pastoral.
            \n <\/p>\n

              \n
            1. Retos a la catequesis y a la pastoral<\/strong><\/li>\n<\/ol>\n

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              \nSin entrar en el tema espec\u00edfico, que no es de mi competencia, quisiera sugerir algunas l\u00edneas de reflexi\u00f3n para nuestro trabajo com\u00fan. Hemos comprobado que la cultura digital no es algo surgido de la nada, sino fruto de transformaciones sociales, culturales y tecnol\u00f3gicas, y algo muy condicionado por los poderes pol\u00edticos y econ\u00f3micos. La cultura digital posee una propiedad muy importante, y es su capacidad de integrar conjuntamente lenguajes diversos, al mismo tiempo que fomenta una continua evoluci\u00f3n y tensi\u00f3n entre orden y caos<\/em> o, si se prefiere, entre el ya<\/em> y el todav\u00eda no<\/em>. De estas caracter\u00edsticas pueden derivarse algunas actitudes y modalidades de acci\u00f3n muy interesantes.<\/p>\n