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Es archiconocida la frase de Don Bosco, buenos cristianos y honrados ciudadanos<\/em>. Esta frase se la dec\u00eda a sus j\u00f3venes a la vez que procuraba que en sus obras hubiera espacios para el juego, lugares para la celebraci\u00f3n y la confesi\u00f3n y talleres para la formaci\u00f3n como buenos obreros. Los salesianos hemos continuado esta labor en todo el mundo y somos conocidos por tener en algunos pa\u00edses las mejores escuelas de Formaci\u00f3n Profesional.<\/p>\n Escuelas a las que hemos dotado de la mejor tecnolog\u00eda y herramientas para la formaci\u00f3n en vanguardia de los j\u00f3venes. El frenes\u00ed de nuestro tiempo, la mejora de las comunicaciones y la tecnificaci\u00f3n de nuestras aulas han hecho que se pierda, en algunos casos, uno de los componentes esenciales que ten\u00edan los talleres de don Bosco, el encuentro personal. Son muchos antiguos alumnos, ancianos en su mayor\u00eda, los que me han comentado c\u00f3mo era una delicia ver los talleres de las antiguas escuelas llenos de salesianos coadjutores que no s\u00f3lo ense\u00f1aban la t\u00e9cnica precisa, sino que a la vez eran confidentes y amigos y les ayudaban a crecer como personas. Hoy los tiempos han cambiado, por eso planteamos este n\u00famero de Misi\u00f3n Joven<\/em>, porque vemos la necesidad de reflexionar sobre las herramientas, pastorales enti\u00e9ndase, con las que debemos dotar nuestros talleres para que estos no pierdan su esencia, para que sean capaces de formar excelentes profesionales, pero tambi\u00e9n excelentes personas en todas las dimensiones de su vida.<\/p>\n De esta reflexi\u00f3n surge la imagen que presento en la cubierta de este mes. Un d\u00edptico en el que se mezcla la imaginer\u00eda habitual de un aula \u2013un crucificado-, con unas herramientas. En la parte frontal el martillo sirve de cruz en la que se apoya el Cristo. La misma herramienta que sirvi\u00f3 para clavar a Jes\u00fas en la cruz es en la que \u00e9ste se apoya; es una manera de expresar que en el trabajo, y su aprendizaje, hay algo de Dios. En la realidad del chico del taller est\u00e1 tambi\u00e9n Jes\u00fas y sale a su encuentro.<\/p>\n En la trasera presento el cartel de INRI con unas brocas y unos cables. Una reflexi\u00f3n abierta sobre cu\u00e1l deben ser las mejores herramientas que hemos de presentar. La especificad de la Formaci\u00f3n Profesional nos ha de llevar a hacer una pastoral espec\u00edfica para sus necesidades. En algunos casos se adapta el plan de pastoral hecho para secundaria, en otros lleva tiempo sin actualizarse. Tanto la broca como el cable bien podr\u00edan servir para colgar ese cartel, pero todos sabemos que lo realmente necesario es un martillo y un clavo. Si pusi\u00e9ramos las mismas fuerzas y el mismo empe\u00f1o que tenemos en equipar a los talleres con los mejores adelantos como en dar a la pastoral su sentido, la frase de don Bosco que pon\u00edamos al principio, tendr\u00eda hoy realmente su sentido. Es cuesti\u00f3n de buscar.<\/p>\n <\/p>\n @jotallorente<\/p>\n