<\/p>\n
La expresi\u00f3n evang\u00e9lica nos ayuda a centrar la cuesti\u00f3n a la queremos dedicar nuestra atenci\u00f3n\u00a0en MISI\u00d3N Joven: la necesidad de una renovaci\u00f3n en la catequesis eclesial. El vino, siempre\u00a0nuevo, de Jesucristo ha de ser ofrecido en los odres nuevos de una propuesta inculturada,\u00a0siempre atenta a la realidad y con la fuerza creativa de quien transmite con pasi\u00f3n la fuerza\u00a0liberadora del Evangelio.<\/p>\n
Pero con frecuencia, el vino se desparrama por los odres cuarteados que lo contienen y no\u00a0llega a ser bebido. Dicen que a los j\u00f3venes no les gusta el vino. Puede ser. Quiz\u00e1s es que no han probado el vino bueno porque les ofrecemos, frecuentemente, el vino aguado en los odres\u00a0ajados de una catequesis caduca, en celebraciones de la fe mortecinas o en propuestas de vida\u00a0donde el evangelio es tamizado por filtros culturales que poco tienen que ver, en ocasiones,\u00a0con la buena noticia del Reino para la vida y la esperanza de las personas.<\/p>\n
Es frecuente en los ambientes eclesiales quejarnos del \u201cqui\u00e9n\u201d: los j\u00f3venes son as\u00ed, de esta\u00a0forma y de otra… hacemos diferentes an\u00e1lisis de la realidad y llegamos a la conclusi\u00f3n de lo dif\u00edcil que es acompa\u00f1ar en la fe a estos j\u00f3venes posmodernos y secularizados. Pero nos cuesta\u00a0trabajo reconocer que de lo que aqu\u00ed se trata, lo que m\u00e1s nos cuesta, es el \u201cqu\u00e9\u201d y el \u201cc\u00f3mo\u201d\u00a0de nuestra acci\u00f3n catequ\u00e9tica.<\/p>\n
Naturalmente, no es indiferente el mensaje. \u00bfQu\u00e9 queremos transmitir? \u00bfQu\u00e9 concepci\u00f3n\u00a0del cristianismo tenemos? \u00bfQu\u00e9 rostro de Dios comunicamos? \u00bfQu\u00e9 buena noticia anunciamos?\u00a0\u00bfQu\u00e9 experiencias de encuentro con Jesucristo proponemos?<\/p>\n
Como tampoco es indiferente la manera de comunicar \u00bfQu\u00e9 lenguaje utilizamos? \u00bfEn qu\u00e9\u00a0universo simb\u00f3lico nos movemos? \u00bfCon qu\u00e9 medios contamos? \u00bfQu\u00e9 recursos utilizamos? Metidos de lleno en nuestros quehaceres y preocupaciones de \u201cbuenos catequistas\u201d, puede\u00a0Nuevo Directorio\u00a0para la catequesis\u00a0que no caigamos en la cuenta de la fractura que se provoca en la comunicaci\u00f3n con los j\u00f3venes\u00a0cuando creemos que los \u201csignos\u201d que utilizamos son entendidos. Puede que a fuerza de\u00a0situarnos en la din\u00e1mica habitual que nos proporciona nuestra experiencia de tantos a\u00f1os no\u00a0caigamos f\u00e1cilmente en la cuenta de que en celebraciones y catequesis proponemos un \u201cuniverso\u00a0simb\u00f3lico\u201d dif\u00edcil de captar por el ni\u00f1o o el joven que no est\u00e1 habituado a gestos y expresiones,\u00a0que vive la cultura de la imagen y consume situaciones por las que pasa a menudo de\u00a0puntillas sin que \u00e9stas le afecten lo m\u00e1s m\u00ednimo.<\/p>\n
Tenemos la impresi\u00f3n (\u00bfO es m\u00e1s que una impresi\u00f3n?) de que hemos acompa\u00f1ado a j\u00f3venes\u00a0en la fe y muchos de ellos, tras un largo recorrido, viven todav\u00eda de \u201cesquemas\u201d: saben\u00a0qu\u00e9 decir, qu\u00e9 hacer e incluso qu\u00e9 pensar porque hay respuestas aprendidas y tienen asumidas\u00a0normas objetivas sobre el bien y el mal. Vivir de esquemas conduce a hacer de lo \u201caprendido\u201d\u00a0una mera ideolog\u00eda, con valores e ideales a los que adherir porque despertaron, en alguna\u00a0ocasi\u00f3n, inter\u00e9s vital aunque no sean confrontados con el proceso de crecimiento personal\u00a0ni de conversi\u00f3n.<\/p>\n
Ante estas dificultades, el reto estar\u00e1 en encontrar los cauces adecuados para acompa\u00f1ar a\u00a0los j\u00f3venes hacia la personalizaci\u00f3n de la fe, esto es, hacia la iluminaci\u00f3n de la propia existencia\u00a0desde el Evangelio y la adhesi\u00f3n \u201ccordial\u201d (en el sentido m\u00e1s literal del t\u00e9rmino) al Dios de la\u00a0vida que se nos ha revelado en Jesucristo. El nuevo Directorio para la Catequesis (2020) es una\u00a0nueva oportunidad para seguir reflexionando sobre nuestro quehacer catequ\u00e9tico de modo\u00a0que el anuncio evang\u00e9lico y el crecimiento en la fe puedan seguir respondiendo a las exigencias\u00a0y desaf\u00edos de nuestro tiempo. Por eso, en el n\u00famero de octubre de nuestra revista MISI\u00d3N Joven\u00a0nos hemos propuesto profundizar en las novedades y posibilidades que nos ofrece este nuevo\u00a0instrumento. Proponemos tres reflexiones:<\/p>\n
En definitiva, sabemos que servir y hacer gustar el vino bueno del Reino requiere de maestros\u00a0y testigos capaces de narrar a Jesucristo y de acompa\u00f1ar experiencias liberadoras que ayuden\u00a0a madurar la fe. He aqu\u00ed los elementos de nuestra propuesta: la primac\u00eda de la Revelaci\u00f3n\u00a0en la evangelizaci\u00f3n, la experiencia (cultura) como punto de partida para la experiencia de fe;\u00a0la urgencia de testigos que propicien el encuentro con el Maestro y la necesidad de caminantes\u00a0apasionados que sepan acompa\u00f1ar a los j\u00f3venes por los senderos de la vida creyente. El\u00a0nuevo Directorio para la catequesis ser\u00e1, sin duda, un buen instrumento.<\/p>\n