{"id":20917,"date":"2022-04-30T07:02:45","date_gmt":"2022-04-30T07:02:45","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/blog\/mision-joven-abril-2022-perfil-cristiano-significativo-hoy-2\/"},"modified":"2025-01-07T12:04:04","modified_gmt":"2025-01-07T12:04:04","slug":"mision-joven-mayo-2022-los-jovenes-ante-el-compromiso-social-y-el-voluntariado","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/blog\/mision-joven-mayo-2022-los-jovenes-ante-el-compromiso-social-y-el-voluntariado\/","title":{"rendered":"Misi\u00f3n Joven | Mayo 2022: Los j\u00f3venes ante el compromiso social y el voluntariado"},"content":{"rendered":"

[et_pb_section fb_built=\u00bb1″ _builder_version=\u00bb4.16″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb global_colors_info=\u00bb{}\u00bb][et_pb_row column_structure=\u00bb1_4,1_4,1_2″ _builder_version=\u00bb4.16″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb global_colors_info=\u00bb{}\u00bb][et_pb_column type=\u00bb1_4″ _builder_version=\u00bb4.16″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb global_colors_info=\u00bb{}\u00bb][\/et_pb_column][et_pb_column type=\u00bb1_4″ _builder_version=\u00bb4.16″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb global_colors_info=\u00bb{}\u00bb][\/et_pb_column][et_pb_column type=\u00bb1_2″ _builder_version=\u00bb4.16″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb global_colors_info=\u00bb{}\u00bb][et_pb_text _builder_version=\u00bb4.17.3″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb global_colors_info=\u00bb{}\u00bb]<\/p>\n

\n

Porque tuve hambre y me diste de comer,<\/p>\n

tuve sed y me disteis de beber, fui forastero y me hospedasteis,<\/p>\n

estuve desnudo y me vestisteis, enfermo y me visitasteis,<\/p>\n

en la c\u00e1rcel y vinisteis a verme (Mt 25, 35-36).<\/p>\n<\/blockquote>\n

[\/et_pb_text][\/et_pb_column][\/et_pb_row][et_pb_row _builder_version=\u00bb4.16″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb global_colors_info=\u00bb{}\u00bb][et_pb_column type=\u00bb4_4″ _builder_version=\u00bb4.16″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb global_colors_info=\u00bb{}\u00bb][et_pb_text _builder_version=\u00bb4.17.3″ _module_preset=\u00bbdefault\u00bb header_text_align=\u00bbjustify\u00bb text_orientation=\u00bbjustified\u00bb global_colors_info=\u00bb{}\u00bb]<\/p>\n

Todo el que se ha sentido fascinado por la mirada de Jes\u00fas y subyugado por su palabra se ha\u00a0dejado interpelar por la urgencia del Reino que el Maestro ha anunciado y que reclama, como\u00a0\u00e9l nos ense\u00f1a, pasar por la vida haciendo el bien, sanando y liberando a las personas. No es\u00a0posible seguir a Jes\u00fas sin asumir las consecuencias de un compromiso que me lleva a no dar\u00a0rodeos ante el dolor ajeno, a asumir sin ambages la necesidad del hermano y a jug\u00e1rmela por\u00a0defender la justicia y la dignidad de las personas. Como creyentes que hemos adherido nuestra\u00a0vida al Dios de la Vida cuyo rostro nos ha revelado Jes\u00fas, no podemos permanecer indiferentes\u00a0ante el sufrimiento de los seres humanos, hermanos nuestros, hijos de un mismo Padre.\u00a0<\/p>\n

La identidad cristiana y la espiritualidad evang\u00e9lica nos inspiran para vivir un compromiso\u00a0real y concreto con los m\u00e1s empobrecidos, con los olvidados, con aquellos a los que se les\u00a0ha robado la dignidad o permanecen condenados a comer las migajas que caen de la mesa\u00a0de los poderosos. La palabra de Jes\u00fas nos urge y nos impulsa a tender la mano para sostener\u00a0y alentar; a abrir las puertas del coraz\u00f3n para acoger y proteger; a desvivirnos por los dem\u00e1s\u00a0abriendo prisiones injustas y sanando heridas. El evangelio no admite excusas ni demora. Es\u00a0urgente el amor de Cristo.<\/p>\n

En nuestras sociedades plurales y complejas, a\u00fan en medio de un feroz individualismo y\u00a0del predominio del s\u00e1lvese quien pueda, crece tambi\u00e9n una corriente de solidaridad y de preocupaci\u00f3n\u00a0por el otro que nos hace creer en el coraz\u00f3n humano con la conciencia de que no\u00a0todo est\u00e1 perdido. Con la brisa suave de un humanismo creativo \u2014a pesar de otras tempestades\u00a0que hablan de ego\u00edsmo, b\u00fasqueda de uno mismo y descartes de los inservibles\u2014, se\u00a0abre paso una nueva civilizaci\u00f3n que apela a la solidaridad, al reparto equitativo de los bienes\u00a0o la igualdad de oportunidades. Gestos sociales y pol\u00edticos de millones de ciudadanos an\u00f3nimos\u00a0que dedican tiempo y energ\u00edas a mejorar la realidad nos reconcilian con el ser humano y\u00a0dejan abierta la puerta de la esperanza.<\/p>\n

No cabe duda de que estamos ante un tema relevante para nuestra praxis pastoral con j\u00f3venes\u00a0en un momento social y eclesial en el que, como nos recuerda el papa Francisco, hemos\u00a0de seguir creciendo en \u201cla conciencia de que es toda la comunidad la que los evangeliza y en\u00a0la urgencia de que ellos tengan un protagonismo mayor en las propuestas pastorales\u201d (ChV\u00a0202). Ojal\u00e1 estas p\u00e1ginas ayuden a seguir renovando nuestra pastoral juvenil y a ofrecer respuestas\u00a0significativas desde el evangelio a las urgentes necesidades de las personas.<\/p>\n

El compromiso social y el voluntariado en favor de los dem\u00e1s no son una exclusiva del cristiano, \u00a0pero desde la propia identidad creyente podemos tambi\u00e9n aportar al bien com\u00fan y\u00a0darle la vuelta a este mundo nuestro para que todas las personas puedan vivir en paz y con\u00a0dignidad. Lo que distingue al seguidor de Jes\u00fas es la mirada y el latido del coraz\u00f3n. La mirada\u00a0del Maestro es la del buen pastor, su latido la pasi\u00f3n por el reinado de Dios en las entra\u00f1as\u00a0del mundo. No se trata solo de dar unas horas de mi tiempo o compartir mis capacidades al\u00a0servicio de los dem\u00e1s, y ya es tanto. Es un modo de vivir, una l\u00f3gica alternativa que me hace\u00a0mirar la realidad con otros ojos, sin juzgar ni condenar, haciendo de mi d\u00eda a d\u00eda un elogio de \u00a0la compasi\u00f3n; caminando dos millas con quien me ha pedido acompa\u00f1arlo una; compartiendo\u00a0lo que soy y lo que tengo; dando sin esperar recibir nada a cambio; sanando con el aceite\u00a0de la bondad y con el b\u00e1lsamo de la acogida.<\/p>\n

Compromiso social y voluntariado no son patrimonio de la Iglesia. Pero los cristianos nos\u00a0sentimos absolutamente implicados con nuestro empe\u00f1o cotidiano en que este mundo nuestro\u00a0se parezca cada vez m\u00e1s a lo que Dios ha so\u00f1ado para nosotros desde siempre. Por eso,\u00a0nos concierne el acompa\u00f1amiento y la educaci\u00f3n de los j\u00f3venes creyentes para que nuestra\u00a0opci\u00f3n por Jes\u00fas y su evangelio nos abra a un compromiso personal y comunitario. Lo expresamos\u00a0con un modo sencillo y solidario de vivir compartiendo los bienes, en la cercan\u00eda con\u00a0los m\u00e1s necesitados o en el activismo social y pol\u00edtico para liberar estructuras injustas.\u00a0<\/p>\n

En nuestra revista MISI\u00d3N Joven hemos querido reflexionar sobre las implicaciones del compromiso\u00a0social derivado de nuestro ser creyente. Vinculada a la reflexi\u00f3n sobre el testimonio\u00a0prof\u00e9tico al que dedicamos el n\u00famero de abril, en esta ocasi\u00f3n profundizamos en la necesidad\u00a0de que nuestra pastoral juvenil favorezca experiencias de compromiso social y voluntariado\u00a0para responder a las urgencias de la realidad que nos envuelve y del grito de la tierra que\u00a0clama por un planeta m\u00e1s verde y una sociedad menos desigual y m\u00e1s justa. Proponemos tres\u00a0estudios que nos parecen particularmente cualificados:<\/p>\n