{"id":3937,"date":"2007-04-01T17:08:51","date_gmt":"2007-04-01T15:08:51","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/index2.php\/?p=3937"},"modified":"2007-04-01T17:08:51","modified_gmt":"2007-04-01T15:08:51","slug":"una-sociedad-de-mirones","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/blog\/una-sociedad-de-mirones\/","title":{"rendered":"Una sociedad de mirones"},"content":{"rendered":"

El espect\u00e1culo de medios de comunicaci\u00f3n abalanz\u00e1ndose sobre el cad\u00e1ver de una joven, hermana de la princesa de Asturias, en busca de combustible para el sensacionalismo, es algo m\u00e1s que un calent\u00f3n pasajero. Es la met\u00e1fora de nuestro tiempo y dice m\u00e1s sobre el momento presente que una tesis doctoral. Dec\u00eda el fil\u00f3sofo Kant<\/strong> que la reacci\u00f3n de los espectadores es el \u00edndice de la salud moral de una sociedad. El entusiasmo con el que saludaron, por ejemplo, la llegada de la Revoluci\u00f3n Francesa era la mejor prueba del alto valor moral de ese acontecimiento. Se supone que el espectador, al no estar implicado en el hecho, puede captar mejor la grandeza o la miseria de lo que est\u00e1 viendo. De ah\u00ed la importancia que daban al entusiasmo del pueblo.
\n\u00bfC\u00d3MO valorar entonces la curiosidad exacerbada con la que vecinos, paparazis, blogs, webs, programas televisivos o radiof\u00f3nicos est\u00e1n siguiendo los rastros de este cad\u00e1ver? Es verdad que el sufrimiento no suele dejar indiferente (si exceptuamos el sufrimiento causado por el terrorismo: ah\u00ed la indiferencia, el no meterse en l\u00edos, es la forma cobarde de protegerse). Pero hay dos formas de reaccionar ante la desgracia ajena que son diametralmente opuestas.<\/p>\n