{"id":5646,"date":"2001-03-01T00:00:17","date_gmt":"2001-02-28T22:00:17","guid":{"rendered":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/index2.php\/?p=5646"},"modified":"2001-03-01T00:00:17","modified_gmt":"2001-02-28T22:00:17","slug":"quiniela-de-arboles","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/pastoraljuvenil.es\/blog\/quiniela-de-arboles\/","title":{"rendered":"Quiniela de \u00e1rboles"},"content":{"rendered":"

Todos tenemos un nombre y nos gusta que nos llamen por \u00e9l. En nuestro entorno observamos multitud de seres distintos que forman parte de nuestro ecosistema, a unos sabemos como nombrarlos y a otros no. No obstante, con frecuencia, para referirnos a la gran mayor\u00eda, utilizamos nombres gen\u00e9ricos como p\u00e1jaro, \u00e1rbol, bicho, hierba… Esto, adem\u00e1s de ser poco preciso, pone en evidencia el desconocimiento o el poco inter\u00e9s por lo que nos rodea. El contacto con la naturaleza nos ayuda a descubrir las diferencias que existen entre los distintos seres. El saber distinguirlos es empezar a conocerlos. Cuando realmente los conozcamos por su nombre los querremos m\u00e1s y al interesarnos por ellos veremos cuantos beneficios, a veces insospechados, nos aportan.<\/p>\n

Para despertar el inter\u00e9s y la curiosidad por el conocimiento y respeto de la Naturaleza conviene olvidarse de lecciones magistrales. En este cometido, nos puede ayudar el preparar una actividad que, a modo de juego, sirva para lograr el objetivo que nos proponemos. Aqu\u00ed sugerimos una que, por centrarla en el conocimiento de los \u00e1rboles, bien pudi\u00e9ramos llamar \u00abquiniela arb\u00f3rea\u00bb. Para llevarla a cabo tendr\u00edamos en cuenta los siguientes pasos:<\/p>\n

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