Las drogas y el canto de las Sirenas

1 octubre 1997

Ante el apetito humano por las drogas pienso que el papel protector de la sociedad adquiere especial importancia. Nadie cuestiona la necesidad de una autoridad benévola durante la in­fancia o la enajenación mental. Pero, ¿no existen situaciones extremas bajo las cuales acepta­mos nuestra debilidad para resistir un impulso autodestructivo y exigimos que la sociedad nos proteja de llevar a cabo nuestros propios deseos? Casi todos los humanos nos hemos arre­pentido de alguna acción impulsiva y, en retrospectiva, deseamos que alguien nos hubiese im­pedido llevarla a cabo, incluso por la fuerza.

Hornero ilustra este dilema en La Odisea. En un punto de su arriesgada travesía, Ulises sabe que va a escuchar el canto de las sirenas, pero teme que si lo hace libremente será seducido por ellas y morirá ahogado. Para evitar ser víctima de esta tentación irresistible, Ulises sella con tapones de cera los oídos de sus marineros para que no oigan la música hechicera, man­da seguidamente que le aten fuertemente al mástil del barco y les ordena de antemano que ig­noren sus súplicas para que le suelten.

“¡Ven aquí, Ulises tan elogiado, honor y gloria de los aqueos! Detén tu nave y acércate a es­cuchar nuestras voces. Jamás un navío dobló nuestro cabo sin oír las dulces melodías que sa­len de nuestros labios. Después de deleitarse con ellas, quienes las escucharon se van alegres conociendo muchas cosas que ignoraban». Así cantaban las sirenas y sus cautivadoras voces llenaban el corazón de Ulises del deseo de escucharlas. Frunciendo las cejas, Ulises hizo una seña para que los marineros le desataran, pero ellos, ejerciendo la autoridad protectora que él mismo les había otorgado, le apretaron más los nudos que le sujetaban.

 

Luis Rojas Marcos

«El País Semanal», 14.4.96

 

FALSOS TOPICOS SOBRE LAS DORGAS DE DISEÑO

 

  1. Son sustancias nuevas
  1. No son peligrosas
  2. Son afrodisíacas
  3. Se fabrican higiénicamente
  4. Se pueden controlar
  5. Sus consumidores son sanos
  6. No están prohibidas por la ley
  7. No producen trastornos

 

  1. Se conocen desde 1910
  1. Te pueden matar
  1. Pueden crear impotencia
  1. Llevan mucha basura
  2. Crean adicción y tolerancia
  3. Suelen consumir otras drogas
  4. Están penalizadas legalmente
  5. Alteran el cuerpo y la mente

 

 

PARA HACER

 

  1. ¿Estamos de acuerdo con el planteamiento de Rojas Marcos ante el problema de las drogas?
  2.  ¿Qué tendrían que hacer los jóvenes para actuar como Ulises?
  3.  Comentar los tópicos sobre las drogas de diseño (entresacados de un folleto de información elaborado por un Centro Juvenil de Guadalajara). Buscar otros. Representar después diversas situaciones en las que se denuncian esos tópicos y se dice que no a las drogas.

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