Nosotros protagonistas, no ellos

1 marzo 2009

Los principales dioses hindúes aparecen con varios brazos como símbolo de su poder a la hora de actuar: diosa Khali, cuatro u ocho; los dioses Visnú, Zanca y Ganesa, seis; Durga, diez… Ese se el modelo que el dibujante Alfil ha tomado para esta imagen, que ilustraba un reportaje en el suplemento  EP3 de El País, el 12/12/2008, cuyo extracto hemos reproducido en la página 3 de este mismo Cuaderno Joven.

Con esta imagen podremos centrarnos en las series de televisión para descubrir la influencia que tienen e intentar que seamos nosotros quienes llevemos la iniciativa en nuestras vidas y no los modelos que en ellas aparecen. También podremos proponer alternativas para acentuar nuestra visión de la realidad y ser capaces obrar en consecuencia.

Las series de TV

Antes de nada, podemos centrarnos en las series de televisión en general.

  • Comenzamos comentando cuáles son las series que más nos gustan, las que recordamos de otros tiempos, las que seguimos con detalle, las que no somos capaces de prescindir de ellas… ¿Por qué las vemos? ¿Qué nos llama la atención de ellas?
  • Podemos también centrarnos en los personajes: ¿Con cuál nos identificamos más? ¿Cuál nos llama la atención? ¿A quién rechazamos…?
  • ¿De qué serie nos gustaría ser protagonista? ¿Por qué? ¿Y ser personaje secundario? ¿Cuál? ¿Por qué?

Y seguimos centrándonos en las series, pero ahora no nos fijamos en los personajes sino en los guionistas.

  • ¿Con qué serie me identifico más? ¿Cuál refleja lo que a mí me pasa? ¿Por qué?
  • ¿Qué nos llama la atención de lo que sucede en alguna serie de esas?
  • ¿De cual de ellas me gustaría ser guionista? ¿Qué cambiaría en ellas?

La imagen

Después de hablar de todo ello, podemos ver la imagen y trabajar a partir de ella.

  • ¿De qué va? ¿Qué nos recuerda? ¿Qué nos sugiere?
  • ¿Qué refleja? ¿Con qué la relacionamos?

Podemos decir que la imagen ilustraba un reportaje sobre los guionistas de series de televisión, y verla desde ahí.

  • ¿Qué claves nos da entonces?
  • ¿Qué sabemos de todo ese mundo? ¿Cómo nos afecta a nosotros?

Nos centramos en cada uno de los aspectos de ese personaje.

  • ¿Quién es? ¿Por qué está como está?
  • Está escindido: tiene dos cabezas, una de ellas como lapicero afilado. ¿Por qué? ¿O una de ellas pertenece a una mujer? ¿O al lado femenino del guionista? (Abundan más los hombres…)
  • Tiene ocho manos… ¿Cómo da vida a los personajes desde los guiones? ¿O son los personajes los que toman vida propia? ¿Qué nos aparecen esos personajes? ¿Cuáles sobran? ¿Cuáles faltan?
  • Tiene tres piernas, una de ellas dedicada también a escribir (¿O es una mano?) ¿Qué supondría escribir con los pies?
  • Las dos piernas salen de la misma pernera, pero una va con sandalias y otra con deportivos… (no zapatos formales o botas contundentes). ¿Por qué?
  • En el bolsillo de la camisa lleva tres bolígrafos, aunque escribo con otro…

El personaje tiene como pedestal un televisor: Trabaja para la tele y se sirve de ella…

  • ¿Cómo es ese trabajo? ¿De quién depende? ¿A qué esclavitudes está sometido o a qué compromisos ha de atender?
  • Y las hojas (los guiones) van entrando en el televisor para después salir convertidas en imágenes y sonido. ¿Qué entra y por qué? ¿Qué sale?

Si no se ha hecho antes, se pueden ahora formular la pregunta que sugerimos al principio  para descubrir cómo las series también nos influyen…

En ese sentido, seguimos proponiendo ideas. ¿Qué personajes faltan que podrían traducir el evangelio o una iglesia viva (no tan nefasta como la profesora de Religión de Los Serrano, por ejemplo? Escribimos  las ideas para el guión… y lo hacemos público (cartas al director, blogs, envío a las productora de la serie…).

Herminio Otero

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