Sé
tú
sin
más.
Vive
en paz y
contagia
paz a los
demás. Ponte
a caminar.
Camina sin
más, camina
conscientemente
mirando y dejándote
mirar por las cosas y por
las personas. Contempla las
estrellas en la noche. Mira una
flor con atención. Pon tu corazón
a punto: sólo allí habla Dios. Si dices
«Feliz Navidad», sonríe. Si regalas algo,
sonríe. Si recibes un regalo, sonríe.
Sonríe siempre. Dile a alguien que
le quieres mucho. Escucha a los demás.
No te quedes viendo la televisión: sal,
salta y juega, a ser posible con los demás.
Di gracias. Devuelve los favores. Y pide
las cosas por favor. Olvida el rencor. Acepta
un cumplido. Perdónate. Y sé capaz de perdonar.
Sueña despierto: piensa en algo que puedes mejorar
y mira qué puedes hacer ya. Haz cumplidos a los otros.
No digas «no puedo»: intenta hacerlo. Respira
conscientemente. Escucha a alguien. Juega
con tu mascota preferida. Saluda a la gente.
Permite que alguien te quiera. Canta solo.
Canta con los demás. Comienza con ilusión
el día cada día. Recuerda por la noche
el amor que has sembrado.
Quiérete siempre
un poco más.
Vive en paz.
Contagia
y expresa
alegría y
felicidad.
Y sé todo
para todos.
Así habrás hecho realidad un año más y cada día la Navidad.
HERMINIO OTERO